El Cuaderno Nº 180 de Gualepedia aborda dos temas principales: el controvertido personaje del Gaucho Antonio Rivero y un aspecto de la Época Colonial relacionado con los pueblos de indios.

Su enlace es: Cuadernos de Gualeguaychú Nº 180

La sección principal, escrita por Nati Sarrot, se centra en Antonio Rivero, explorando su figura en el contexto de las Islas Malvinas. Se detalla su papel como peón de Luis Vernet hasta 1834, su posible origen en Entre Ríos (1805/1806), y su llegada a Malvinas alrededor de 1826 o 1827 como agricultor. El texto describe eventos clave como la confirmación de la soberanía nacional argentina sobre Malvinas en 1820 por David Jewet, el nombramiento de Luis Vernet como Comandante Civil y Militar en 1829, el arribo de colonos de diversas nacionalidades, y la bajada de la bandera argentina y enarbolamiento de la inglesa el 2 de enero de 1833. 

El cuaderno profundiza en el levantamiento de Antonio Rivero y sus compañeros el 26 de agosto de 1833, un hecho que lo posiciona como un "héroe o como un bandido". Este levantamiento resultó en la muerte de varios individuos, y Rivero junto a otros fueron apresados y enviados a Londres para ser juzgados, aunque finalmente fueron devueltos a América sin condena ni absolución en 1835. La Academia Nacional de la Historia se pronunció en 1966, señalando la necesidad de pruebas de un propósito noble para su homenaje.

Además, el cuaderno incluye una sección de Silvia Razzetto de Broggi titulada "Época Colonial. Pueblos de Indios II". Esta parte narra la historia de Juan de Barros, un niño español que llegó al Río de la Plata en 1536 con la expedición de Pedro de Mendoza y fue capturado por los chanás-beguaes. Juan de Barros creció entre los indígenas, aprendió su idioma y costumbres, y formó una familia mestiza. Posteriormente, actuó como mediador entre los españoles de la recién fundada población de Zaratina de San Salvador (establecida en 1574 por Juan Ortiz de Zárate) y la nación chaná, logrando acuerdos amistosos. La vida en Zaratina de San Salvador fue difícil debido a la hostilidad charrúa, y la población finalmente abandonó el asentamiento en 1577, el cual fue destruido por los charrúas.