Calle Santiago Díaz

La personalidad del doctor Santiago C. Díaz (1862-1911) merece sin duda ser destacada un capítulo en aparte, no sólo por las condiciones personales que lo adornaron, sino también por la gravitación que ha tenido en el progreso de la ciudad de Gualeguaychú durante su vida activa, ocupando el cargo de intendente municipal durante dos periodos. El recuerdo de noble y progresista acción en su vida pública y privada se mantiene vívido aún y la comuna especialmente lo ha perpetuado dando su nombre a una de las calles céntricas de la ciudad, que corre de norte a sur.

Un poco de Historia

El doctor Santiago C. Diaz fué hijo del destacado ciudadano don Santiago Díaz, que como ya dijimos integró las filas que derrotaron a la tiranía en Caseros al mando del General Justo José de Urquiza, y de doña Juana León. Nació el 22 de Noviembre de 1852. En su juventud, después del ciclo escolar, cursó sus estudios en el histórico Colegio de Concepción del Uruguay, que fundara el general Urquiza. Finalizado ese curso lectivo, el flamante bachiller se dirigió a la Capital Federal, donde prosiguió su carrera: la medicina fué la escogida, que ejerció con amor. Como médico recuérdese al doctor Santiago C. Díaz como un destacado filántropo, habiendo prestado sus servicios profesionales en varias sociedades.

Díaz, Intendente

La actuación del doctor Santiago C. Díaz en la vida pública no fué menos meritoria y brillante que como profesional, si bien en cierto período, hasta el de su muerte el edil se vió más atareado que el médico.

En el año 1898 resultó electo intendente municipal de Gualeguaychú por primera vez. El jefe del departamento Ejecutivo de la Municipalidad tuvo de Secretario en dicho período al señor Martin Bergara. En dicho período puso de manifiesto sus nota bles condiciones de conductor de los bienes comunales, siendo propulsor de numerosas obras de progreso para la localidad; probablemente su acción más importante y progresista de aquélla época ha sido la de haber traído para Gualeguaychú la luz eléctrica, desterrando para siempre de la ciudad los clásicos faroles colo niales y dándole un aspecto más moderno y más útil también.

Intendente por segunda vez

Dos períodos más tarde -en 1907- es nuevamente electo. En Gualeguaychú los intendentes no pueden ser reelectos, ya que de lo contrario no hubiera sido de extrañar que permaneciera como presidente de la Municipalidad el doctor Díaz muchos años consecutivos.

En este segundo período ejerció hasta el año 1908, teniendo por secretario a don Ricardo Nieto. No obstante el corto tiempo de su acción, una obra de gran trascendencia lo consagra come edil: la construcción del edificio para la Municipalidad, que es el que todavía subsiste en la ciudad.

Fenece una gran vida

El 11 de Abril de 1911, es circunstancias que ejercía el cargo de presidente del Consejo Deliberante, el doctor Santiago C Díaz dejó de existir, cuando todavía podía esperarse mucho de su acción bienhechora.

El ex-intendente de Gualeguaychú fué casado con doña Orfilia Nieto, y de su matrimonio no dejó descendencia. De espíritu profundamente cristiano, acrisolado en el recto y probo ejemplo de su familia, el doctor Santiago C. Díaz habíase ganado el aprecio y la consideración generales en Gualeguaychú y campaña. Tanto su acción privada como pública, le colocaron y le mantienen aún en un sitio privilegiado en el recuerdo de las generaciones que se vienen sucediendo, contándoselo siempre entre los hijos más dilectos de la ciudad cabecera del departamento por el bien que repartió y el progreso que trajo desinteresadamente.

Sintetizando

Las autobiografías, cuando se refieren a una vida rica en actos de provecho y trascendencia públicos, como ha sido la actuación de don Santiago Cecilio Diaz, personalidad eminente en todos los conceptos, son necesarias para el conocimiento íntimo y espiritual de los lectores que gustan conocer los hombres que han vivido para servir al país en forma honesta y patriótica.

Calle Santiago Díaz

Cartografía de Proyecto Mapear

Fuente: Libro de Entre Ríos - Tomo III y Cartografía de Proyecto Mapear.