La prestigiosa periodista Dionisia Fontán comienza su nota en LA NACIÓN del 20 de marzo de 1993, afirmando enfáticamente “… dice que su generación es hija de la radio y que su estilo es parecerse a sí mismo: un hombre del interior, sencillo, sensible, muy apegado a la familia”.
Casi ya sobre los dos años de aquella nota y de su programa “Naturalmente” por Del Plata (1.030 en el dial), de 13 a 17, lunes a viernes, LUIS GARIBOTTI sigue honrando a los entrerrianos como profesional intachable, como expresión del hombre con mucha caridad humana, en medio de la Babel porteña donde es todo un excelente cónsul de su patria chica desde hace 28 años.
Cuando la nota estaba por editarse, su papá murió. “Siempre me gustó parecerme a él y en estos días, en la sala de espera, he descubierto que algunos de mis gestos ya son iguales a los de papá. Me tiene mal ese tironeo de vivir acá y tener la cabeza allá, en Gualeguay, mi pueblo (su mirada se humedece). Pero no hay caso, cómo arranco a mis padres de sus plantas, sus flores, sus pájaros, su gente."
Entrerriano, hijo único, casado con María Isabel (Chabela), dos hijos, Ana Isabel, hoy 20 años y Luis Enrique, 10, Garibotti dejó su Gualeguay a los 21 años. La nota de Fontán continúa: “Su oportunidad de trascender se presentó con “Charlando las noticias” en 1973, por Continental. Era cronista parlamentario y de pronto, lo llamaron para reemplazar a Julio Lagos… Dos décadas del debut, con muchas horas de micrófono y varios premios (entre ellos, dos Martín Fierro y el Ondas, que se otorga en España), admite que su estilo coloquial y sereno fue modelándose a imagen y semejanza de su manera de ser. Se considera sencillo, sensible, amante de la naturaleza y con un profundo arraigo familiar”.
Marco Aurelio ‘95