Dolorosa

Virgen de los ojos tristes

y la mirada morena,

Señora de los que sufren

y Madre de los que esperan.

Una espada de dolor

tu corazón atraviesa

y todo el sufrir del hombre

cabe en tus manos abiertas

para brindar tu consuelo

y recibir nuestras penas.

¡Qué blanca luz de Esperanza

irradian tus vestes negras!

¡“Hijo, ahí tienes a tu Madre”!

El Redentor nos espera

desde el puente de la Cruz

que une al Cielo con la tierra.

Ya no diremos con Beckert

“tus muertos, qué solos quedan”.

Duermen el sueño de Paz,

la Madre por ellos vela

y van a resucitar

con Cristo a la Vida Eterna.

¡Cuánta vida en nuestros muertos

cuánto Cielo en nuestra tierra!

Virgen de los ojos tristes

y la mirada morena,

Señora de los que sufren

y Madre de los que esperan.

Pbro. Luis Jeannot Sueyro

"Los versos del Cura Gaucho"

El Cura Gaucho