A un niño

¿Por qué miras mis ojos como un astro risueño

que me alumbra en el alma porque viene de Dios?

No te asomes al borde de mi vida, pequeño,

que yo tengo los ojos ya cansados de sueño

y tú vives mejor.

No me pidas un verso con ternura indiscreta.

Si es mejor el poema de tu risa feliz.

Cuando yo tuve el alma como tú blanca y quieta

no mordía mis carnes la ansiedad del poeta

y sabía reír.

Pbro. Luis Jeannot Sueyro

"Los versos del Cura Gaucho"

El Cura Gaucho