• Excursión 345. 7 Octubre de 2015. Miércoles.
El Guincho. Garachico.
Municipio: Garachico. Icod de los Vinos
De 17.10 a 19.30h. De 80 a 20 a 80m.
Distancia: 3,6km. Duración: 2h 20m
Recorrido por fincas de plataneras en plena producción hasta el borde del mar donde hay una extensa zona de escorias volcánicas con entrantes donde bate el mar con mucha fuerza
Resumen de la excursión: salgo con muy pocas ganas y pensando que esto de las excursiones cada vez más es una conducta compulsiva, bla, bla, bla… Vuelvo eufórico, absolutamente exultante y muy contento cantando en el coche y poniendo voces, todo tipo de voces, casi parece que con otro amigo que me acompaña haciendo el oso como yo.
En un día nublado y a las cuatro y media salgo de casa. Llego al Guincho a las cinco y diez. Aparco al lado de un restaurante (Cofradía del mar El Guincho). Echo a caminar hacia Garachico y en un minuto tuerzo a la derecha por una calle (Camino La Coronela) que baja. (No me doy cuenta de que paso al lado de una puerta verde de que me habló un hombre la última vez que estuve aquí, por ella se puede entrar en la finca de plataneras. Está al lado de un portón grande para coches, la entrada a una casa rural y a un pequeño hotel. Para entrar ahí tienes que llamar a un número de teléfono.) Paso un grupo de casas que están rehabilitando, las están pintando en azul claro, me encanta este conjunto de casas que forman una curva. Después y antes de llegar a otro pequeño grupo de casas, pegadas también a la carretera, (unos 500 metros desde el comienzo del Camino La Coronela) veo a tres pescadores que vienen por un camino ancho entre las plataneras. Inmediatamente me doy cuenta de que he tenido suerte porque si ellos vienen por ahí puedo ir yo también. Es justamente debajo de un puente pequeño (que está debajo de otro puente más grande por arriba). Les pierdo de vista por un momento, pero enseguida les vuelvo a ver. Les pregunto y me dicen que sí que se puede pasar por ahí y llegar al mar, y que también puedo usar la puerta verde (más tarde cuando vuelva comprobaré que la famosa puerta verde está trancada). El acceso a la finca de plataneras no la hubiese descubierto de no salir ellos en ese momento. Hay que atravesar un murito de piedra por una abertura y caminar, a la izquierda, por una tubería de cemento medio rota y pegada a la pared unos tres metros hasta llegar a una escalera de piedra y, finalmente, bajar por ella. Les doy las gracias por la información.
Accedo al camino amplio y ya me sumerjo en la plantación de plátanos. A unos 300 metros llego a una casona antigua típica canaria y pegados están algunos edificios, modernos, un hotel rural. Al llegar a la casona encuentro una trifurcación. Elijo a la derecha. Las plantaciones están abiertas, y se pueden ver muy bien las plataneras, que son unas plantas altas y tienen sus grandes hojas un poco raídas, son tan decorativas. Y colgando tiene enormes racimos, llamados piñas, de plátanos, los hay pequeños, medianos, grandes y algunos tienen todavía el gran bulbo granate violeta en el extremo de la piña, algunas tienen, al lado, un pequeño tronco cortado, en el suelo se mezclan restos de vegetación en todos los tonos de marrón y además, como plantas reptantes, una red de tuberías negras finas y otras anchas con tiras verdes. El olor de las plataneras me gusta, es suave y con un ligero matiz de plantas en descomposición. Y por otro lado está el tamaño global de la plantación. Son filas y filas de plantas, organizadas en una retícula de manzanas y grandes planicies, una cantidad inconmensurable, no se distingue donde terminan las calles.
En unos dos minutos llego a unos edificios, pueden ser casas de guardeses, o para almacenar herramientas. Tuerzo a la izquierda, sigo entre plataneras recto y en un minuto elijo a la izquierda en otra bifurcación. Avanzo otros cien metros y tuerzo a la derecha y ya sigo recto hasta llegar cerca del mar y salgo de la plantación por un portón grande que está abierto. En esta travesía he saltado un par de cadenas. En el borde y cerca del mar el cambio es radical, estoy en un terreno de escorias volcánicas, negras, rugosas y llena de aristas cortantes.
La escoria es muy oscura, muy negra, muy irregular, áspera y abrasiva. Voy con mucho cuidado. Veo un sendero que va hacia la izquierda pegada a la finca. Yo ligeramente a la izquierda, también, por otro sendero, me dirijo hacia el mar también. En este caos de lavas es muy difícil distinguir dónde puede estar lo interesante. Cuando me acerco al mar veo hacia la izquierda, algo alejada de mí, una piscina artificial, es un charco grande con una pared de cemento por el lado más cercano al mar, así retiene el agua que salta aquí cuando el mar bate fuerte. Está al lado de una entrada del mar profunda y alta. Yo sigo recto hacia el mar y cuando llego al borde me doy cuenta de que es un apostadero de pescadores, hay latas herrumbrientas, plástico, colillas. Este lugar es un buen mirador para ver cómo bate el mar en el otro extremo de esta lengua de lava y también hacia Garachico. Me empiezo a desplazar por este mar de lava hacia la izquierda, voy subiendo y bajando por las crestas de la escoria negra, a veces por senderos, a veces campo a través, hasta que llego a la boca del entrante que bordea la piscina. Me doy cuenta de que cada cierto número de olas viene una muy grande y después de vaciarse el entrante se vuelve a llenar subiendo quince metros el nivel del agua del mar de repente y con un chorro espumeante que rellena la piscina y que golpea con tanta fuerza que la siento como una vibración intensa a través de las rocas donde estoy apoyado, que es un sitio totalmente seguro, pero la fuerza y la velocidad con la que viene, golpea y se desploma el agua me asusta y me excita al mismo tiempo. Después de un golpe las olas van volviendo y poco a poco van subiendo de nivel hasta que de nuevo golpean fuerte y después de ver este espectáculo tres o cuatro veces me tengo que ir porque el miedo es más fuerte que la excitación. Cuando el agua se retira se desploma la columna verde de agua totalmente y se puede ver la base rosada de las rocas que normalmente está oculta bajo el agua. Mientras contemplo este espectáculo estoy escuchando la música de Szymanowski, que tiene coros y mucho violín. Desde luego que realza y potencia el espectáculo esta música.
Después sigo recorriendo, hacia la izquierda, hacia Garachico, las escorias por un sendero que encuentro, el sendero forma un canal entre las escorias. Empieza a llover y no llevo paraguas, no me importa. También me gusta como las gotas, ahora, con la lluvia, se marcan en las crestas de la escoria y realzan sus relieves más todavía, y… empieza a oler a tierra mojada y con más intensidad a yodo y a algas. Se levanta un viento fuertecito y entonces extiendo los brazos y me pongo a recitar una frase sin sentido del tipo “ohm va la da mi” y más de ese estilo mientras miro el cielo con los brazos extendidos. Así me quedo un rato en trance. Estoy en efervescencia.
Avanzo después hasta el borde de las crestas que dan hacia Garachico. El día está gris y las olas baten fuerte sobre todos estos salientes. Regreso hacia las plataneras por otro recorrido, más cerca de la finca. Vuelvo a entrar por el portón grande, el mismo por dónde salí. Las recorro un buen rato, son interminables y no se ven los finales de las “calles”, es un gran laberinto, es fascinante. Algunas casonas están situadas dentro de las plantaciones, pero no las veo, sólo los muros altos que las rodean. Las he podido ver desde arriba en otra excursión, en una en que bajé desde Genovés (excursión 339). (En el track de la excursión la vuelta es por donde vine, en la realidad deambulo más entre las plataneras).
En todo este recorrido sólo veo a una pareja de turistas, a un corredor, y a dos paseantes. Ah, también dos clientes del hotel rural, y a un pescador que entra cuando yo salgo. Tengo que volver otro día para llegar hasta el extremo. Ha sido un éxito inesperado de excursión.
---------
Pulsar en el siguiente enlace para descargar el track de la excursión
Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla
drive.google.com/file/d/10g3snrJCTx2YvZUHNU8nGYOohPULFbdZ/view?usp=sharing
El Guincho