• Excursión 1498. 20 Julio de 2023. Jueves.
El Sombrero. Roque El Almendro. ZR Las Lajas
Municipios: Vilaflor. La Orotava
ENP: Parque Nacional del Teide. Parque Natural Corona Forestal
De 9.43 a 15.47h. De 2030 a 2500 a 2470 a 2550 a 2120m
Distancia: 8,9k. Duración: 6h 4m.
Ascenso esforzado y con una gran pendiente desde Boca Tauce al roque El Sombrero y el roque El Almendro. Vistas maravillosas hacia el Teide y el gran atrio del circo de Las Cañadas. Descenso campo a través hasta miradores por delante del Sombrero de Chasna y regreso por sendero señalizado hasta la ZR Las Lajas
Hoy quiero completar un recorrido por el filo superior del circo de las cañadas del Teide, uno que empieza por la degollada de Ucanca, va por el filo hasta el roque del Almendro, después el Sombrero y termina en Boca Tauce. He hecho dos intentos, en el primero (excursión 1323) llegué hasta un saliente-mirador (pasado el sendero al Sombrero de Chasna) y no supe como seguir. En el segundo (excursión 1425) logré superar el saliente-mirador, pero no logré subir al roque del Almendro. Recientemente he encontrado en Wikiloc una excursión larga que tiene la parte que me falta. Es de un usuario llamado AndresAE, que hace excursiones largas y a buen ritmo (a juzgar por sus tiempos) y del que ya he hecho otros recorridos también muy interesantes. Este del que voy a hacer una parte hoy se llama: “Boca Tauce - El Sombrero - Roque los Almendros - Las Lajas -...”. Yo necesito dos o tres excursiones para recorrer lo que él hace en una.
Voy a empezar por Boca Tauce, desde la degollada de Ucanca es un preámbulo demasiado largo. A lo mejor lo completo con otro recorrido de AndresAE por un canal por el andén del Gato (“Canal del Riachuelo - Andén del Gato”). Ya veremos.
Dejo el coche en el aparcamiento de La Orotava y tomo un taxi que me lleva hasta Boca Tauce (67€). La conductora es más bien callada, apenas hablamos, yo, un poco cansado antes de empezar, tampoco tengo ganas de charlar. No me deja de asombrar, y de maravillar, que existan los taxis y que yo pueda pagarlos. Sólo tienes que sentarte en uno y decir a dónde quieres ir y te llevan. Así de fácil. Mi sueldo de jubilado de ex funcionario del Estado me da para esto.
Antes de las diez de la mañana me estoy bajando del taxi en el mirador de Boca Tauce. La verdad es que estoy un poco impresionado por la excursión de hoy, por la orografía del terreno parece de lo más alpina, con un desnivel considerable y donde parece que hay que trepar y escalar, es solo una especulación. Estoy cansado, bastante cansado, no tengo claro que lo vaya a conseguir. Echo a caminar por la carretera hacia el Parador y en unos 400 metros al llegar al punto kilométrico 53 (2035m) me salgo por la derecha y comienzo, campo a través, a buscar la referencia del cauce de un barranquillo para empezar a ascender. El terreno es muy llano con mucha retama, codeso, yerba pajonera y rosalito, el cuarteto usual. También el terreno es pedregoso con grandes rocas. En menos de dos minutos localizo el cauce del barranquillo y sigo a su lado hacia arriba. No hay sendero. Al menos yo no lo veo. Avanzo con dificultad entre las plantas. Me gusta mucho esta mezcla de rocas y plantas. El día está radiante y estupendo. No hace viento. Mi cansancio va disminuyendo, sé que los primeros minutos son así, duros, poco a poco me iré acostumbrando.
Estoy en la parte baja de un barranquillo y hacia arriba son todo grandes picos, sé más o menos que me tengo que ir echando a la derecha, pero no sé todavía por dónde. Después de casi cinco minutos por terreno complicado me desvío del cauce para empezar a subir, a la derecha, por una lengua de terreno, una especie de escalera natural. Por aquí empiezo a encontrar hitos. Bien. Me tranquiliza. El desnivel es considerable (40%, lo calculo al escribir la crónica). El sendero es claro, trabajoso, pero claro. Las rocas son preciosas, redondeadas, de color beis. Después de haber subido bastante llego a una zona abrupta, rocosa, por donde me trabo. Trepo, hacia la derecha, por grietas, fisuras, rajas y después de subir bastante me doy cuenta que no llego a nada. Regreso a la base de esta zona abrupta y con mucho cuidado destrepo por la izquierda, por rocas, hacia una zona más llana. Logro superar este obstáculo, este saliente extenso y puedo seguir ascendiendo por un terreno erosionado, de arena suelta hasta que logro llegar a una degollada (Peguero, 2250m). (Pegueros eran los que se dedicaban a convertir la madera en brea, no sé si existirá hoy en día este oficio). En la degollada hay un pequeño pinar, de pinos no muy grandes. Hacia arriba, tengo por la parte derecha, dos elevaciones con un pasillo muy ancho (una canal) entre ellas.
El sendero en OSM va por la parte izquierda de ambas. Yo prefiero seguir la ruta de AndresAE, entre las dos elevaciones. Me echo a la derecha y llaneo unos cien metros hasta enfilar el principio de la canal. Tras una corta subida llego al principio de la canal (2275m). A la derecha tengo vistas a la carretera que va hacia Vilaflor. Abajo pasan ruidosas las motos quads, arman un estruendo ensordecedor. La canal está muy cubierta de retamas y el ascenso es complicado, lo hago en zigzag, no hay sendero, se trata de subir por donde se pueda. El día está arrebatado de luz. Es fantástico estar aquí. Ya he superado mis temores. Creo que la cosa va a ir bien. Superada la canal entre las dos elevaciones sigo subiendo con igual pendiente y paso a la derecha de un risco pequeño (2350m). Ahora tengo por encima y hacia la izquierda otro roque, pensando que no es el del Sombrero (lo es, no lo sé todavía), que debe estar más arriba me echo a la derecha para rodearlo por su parte con menos pendiente. Es una subida muy esforzada y lenta que me lleva a la base del roque (2450m). (Mi altímetro no ha marcado bien desde el principio y no me puedo fiar de sus medidas, las que escribo ahora en esta crónica son las correctas). Llaneo por la base del roque hasta una zona ancha de arena suelta que atravieso con mucho cuidado, no quiero resbalarme y formar una escorrentía. Cuando logro cruzar al otro lado el terreno muy cubierto de retamas me lo pone complicado. Llaneo como única referencia fiable. Tras rodear como la mitad de la circunferencia de la base del roque veo hitos (2475m). Los sigo. Bajan. Me guían. Son importantes porque la pendiente a la derecha es fuerte y muy rocosa. Me llevan hacia una degollada ancha y amplia, un terreno llano. Logro llegar abajo (2400m).
En esta zona llana hay unas vistas impresionantes hacia el atrio del Teide y hacia la gran mole que forman el Pico Viejo y el Teide, es una vista que parece que se extiende al infinito, hasta el extremo contrario del circo de las Cañadas, hasta el Portillo. Pero no me da para disfrutarlo. Estoy confuso. No sé exactamente dónde estoy. Estoy desubicado. Hacia adelante, siguiendo la línea de los roques del filo se supone que el siguiente es el (roque del) Sombrero y después debe seguir el del Almendro. Esto es un mundo. Me falta un mundo. Y cuando he terminado de atravesar la llanura y encaro las primeras partes rocosas miro hacia atrás y, por fin, salgo de mi error. El roque que he superado por la derecha es El Sombrero, lo tenía que haber rodeado por su cara izquierda, la que da al atrio, al Teide. Por un momento dudo si regresar para ir por ahí, afortunadamente lo descarto, es una locura. Y si se trata de vistas las tengo todo el rato. No merece la pena. A regañadientes asumo mi error y encaro el roque del Almendro, ahora sí estoy ubicado.
Me topo con un muro de roca que no me atrevo a trepar y, buscando una subida más fácil, lo voy rodeando por la derecha, donde me encuentro una sorprendente vieja construcción, una vieja caseta con grueso muro de piedra, y por donde la vegetación es muy densa y entre grandes piedras, enormes piedras medio ocultas, sigo rodeando el muro de roca hasta que por fin encuentro un sitio sencillo por donde subir al roque del Almendro. Este roque no es puntiagudo, sino plano, de unos 300 metros de largo su cima, con vistas fantásticas continuas hacia el Teide y el gran circo. Es casi anticlimático, muy sencillo de recorrer. Se eleva un poco hasta su punto más alto (2520m). Ahora, según AndresAE, viene la parte emocionante, un destrepe por una pared rocosa de unos 40 metros de altura. Pero yo no encuentro la manera de bajar, en cambio empiezo a encontrar hitos que me llevan un poco por encima del borde hacia la derecha, los sigo, a algún lado irán. Los sigo hasta un lugar en que ya me aburro de ellos e inicio el descenso, hacia la izquierda, por la ladera, que ya tiene menos altura. No es fácil, pero no imposible, hay que bajar, destrepar por entre las grandes rocas, cubiertas con vegetación, hacia aquí, hacia allá, y desciendo a una ladera de pendiente más suave (2475m). Cuando estoy abajo me doy cuenta de que ha sido una manera razonable de bajar del roque del Almendro. Vale.
Ahora viene una parte tediosa y complicada. Ya la conozco de otra excursión por donde pasé en dirección contraria (buscando como subir al roque, excursión 1425). Tengo que ir hacia la izquierda, hacia el borde del circo, recorriendo la base del roque y en ligero descenso por donde a veces sí hay sendero, otras veces es confuso, por terreno con vegetación densa y muchas piedras y rocas y tras unos 250 metros llego a una degollada ancha (2425m) con vistas al interior del circo. Desciendo un poco de la degollada y siguiendo algunos hitos dispersos entre un pinar de pinos pequeños voy desplazándome hacia la derecha por debajo de un risco espectacular, de muchas puntas, el risco no es muy alto, pero sí muy largo y no tengo una idea, ninguna idea precisa de por dónde abordarlo. Lo que sé es que por el otro lado el risco es afilado en un tramo grande y que a partir de un cierto punto ya no lo es. El tránsito por aquí es muy difícil, hay que ir por terreno arenoso, rocoso, a veces veo algún hito, y por enormes rocas por las que tengo que ir trepando y destrepando. El risco no es muy alto, unos cinco metros o así, pero me lleva mucho tiempo decidirme a treparlo del todo. Cuando por fin lo hago (unos 400 metros tras la degollada) casi estoy en su final. Podría haber subido antes. Y todavía bajarlo es complicado. Más destrepe. Por fin llego a una zona llana y fácil por donde hay un sendero.
Sigo hacia la derecha pasando buenísimos miradores hacia el interior del circo. El sendero va sobre diversos terrenos, arenosos, rocosos, muy variados. He tardado mucho tiempo en llegar aquí, unas tres horas y media, así que descarto la idea de bajar al andén del Gato y elijo una retirada alternativa, hacia la ZR de Las Lajas en la carretera de Vilaflor. Este sendero por el borde superior del circo es muy entretenido. Unos 500 metros después de haber accedido al sendero tomo una desviación clara y señalizada a la derecha (2430m) que baja por una lomita de arena fina. Es un sendero del parque nacional, el PN31. A la izquierda destaca la montaña plana del Sombrero de Chasna, un punto de referencia muy importante desde Vilaflor. Pronto estoy por el pinar sin apenas sombra y desciendo hasta llegar a una bifurcación (2285m) donde tomo el sendero a la derecha. Por aquí empiezo a comer sin pararme, cuesta abajo o llaneando y a ritmo más lento puedo comer sin problemas. Es un doble premio: comer y caminar más despacio. El camino llanea o baja por dentro del pinar, es muy agradable y sencillo de seguir. Tras unos diez minutos (600 metros) rodeo la cuenca de un barranco y entro a otro que también rodeo llaneando. Este segundo (Barranco El Rey) tiene en el cauce una galería y una bifurcación (2225m), yo sigo a la derecha para pasar el cauce, después el camino sí desciende pronunciadamente por el otro lado de la cuenca del barranco del Rey hasta salir de él por otra esquina (2175m).
Tras unos 200 metros llego a una bifurcación (2165m) y, en contra de lo que me gustaría, no elijo a la izquierda para bajar, sino a la derecha para subir por otro camino (después de haber bajado mucho no me gusta nada subir), lo acepto porque sé que tiene que subir para rodear una nervadura y que después va a bajar. Así es. Que fe hay que tener en algunas ocasiones. La bajada es pronunciada y tras un giro de 90 grados (a la izquierda) ya me lleva muy recto hacia la carretera donde un poco antes de llegar termino de tomarme el sándwich, se me ha hecho eterno. Cruzo la carretera y entro en la ZR de Las Lajas, un par de coches están aparcados, entro hasta el final y me lavo los dientes en los servicios, recién limpiado, están relucientes. En un llano cercano hay una caseta con gente dentro. Ya está todo el pescado vendido para mí.
Ahora simplemente subo hasta la carretera y me quedo a esperar la guagua que baja a Los Cristianos. Llega a su hora (16.18h) y me monto en la segunda hilera detrás de un grupo de suizos de piel clara, una pareja y dos muchachos. Y ahora ya empiezo a amortizar toda la excursión escuchando música y mirando el paisaje, el grandioso paisaje y el largo recorrido (Vilaflor, La Escalona, Arona) hasta Los Cristianos donde tengo la suerte de tomar enseguida la 112 que va directa a Santa Cruz (una buena novedad de Titsa). Y aquí puedo seguir escuchando música. En Santa Cruz tomo la 108. Siempre me da cosa cuando paso delante de Tacoronte, donde vivo, y no me puedo bajar. En el Ramal, cerca de La Orotava, me bajo y tomo otra guagua para que me suba hasta la estación. Esta vuelta es siempre muy rocambolesca. Unas tres horas y media de tiempo.
---------
Pulsar en el siguiente enlace para descargar el track de la excursión
Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla
drive.google.com/file/d/1_R1SGsanvGLb_sa5rg3Sn3wqzKMPgA25/view?usp=sharing
Boca Tauce. El Sombrero. Roque Almendros. ZR Las Lajas