E-716 Igueste - Lomo Bermejo

• Excursión 716. 19 Octubre de 2017. Jueves. (Anaga 114ª)

Igueste. Lomo Bermejo.

Municipio: Santa Cruz de Tenerife

ENP: Parque Rural de Anaga

De 12.09 a 16.50h. De 40 a 383 a 40m.

Distancia: 4,5km. Duración: 4h 41m

Subida suave desde Igueste a Lomo Bermejo (quince minutos). Después búsqueda larga de un sendero por la ladera y, tras encontrarlo, subida a la cresta, a la loma que separa el barranco de Zapata y el barranco de Igueste

Estoy un poco mohíno. Todavía me estoy recuperando de la rotura del dedo gordo (excursión 714, hace dos semanas) y hoy quiero intentar algo suave sin mucho esfuerzo para el pie. Por otro lado, casi un año después del accidente (17-11-16) vuelvo a la venta que está cerca de la gasolinera (La Palmesa) en el Sauzal. El accidente que ocurrió justao al lado de esa venta. En ese accidenmte un coche que circulaba en la misma dirección me destrozó la puerta al abrirla yo. Por fin lo supero. Aparco con todo el cuidado del mundo, muy bien arrimado a la acera, y miro varias veces por el retrovisor antes de salir del coche. Me rellenan el pan, que he comprado en la gasolinera, con jamón y queso y además más me compro dos polvorones hechos en El Sauzal (2.60€).

En coche hasta Santa Cruz, y lo dejo en el parking del intercambiador. Nublado y lluvia fina en Santa Cruz cuando salgo para Igueste (11.30h). Me bajo en Igueste (La Cruz, 12.09h, 45m), al lado del puente que cruza el barranco. Está nublado, no hace calor (29º), corre algo de brisa. Sin problemas en el pie llego hasta Lomo Bermejo (12.30h, 112m), tras 1,3km desde el principio. Hoy trato de identificar qué es lo que le da un toque de sitio tirado y salvaje al primer tramo de subida. Son varias cosas, primero es el hecho de que el sendero va entre piteras y tuneras de hojas arrugadas, que han sido repetidamente recortadas para crear un pasillo, con alguna tabaiba, alguna esparraguera de ramas de enredadera, el tasaigo pegajoso algo seco y los verodes ajados. También el firme del sendero es pedregoso, de trazado irregular con varios pasajes hacia casas, algunas sólo ruinas, otro en estado de abandono. La torreta de electricidad, algo anticuada, que ya no está en uso también le da un aire de desolación al recorrido. Las hojas de tuneras escachadas en el suelo y los tunos explotados. Sólo una casa está habitada en esta subida. Y no parece que tengan electricidad.

Más arriba las piteras invaden un tramo de escalones en la toba y tengo que ir con sumo cuidado. Después una huerta ocupa totalmente el sendero y tengo que ir por encima de un murito como a unos cuatro o cinco metros sobre la huerta. Hoy ya tengo muy claro el recorrido y sobrepaso los almácigos –el grande con las hojas amarilleando- en el cauce tan pedregoso que parece un río de piedras. Paso el sitio más alto que alcancé la otra vez (12.58h, 265m), unos metros más arriba paso otro bonito almácigo. Sigo por el cauce con mayores dificultades cada vez, voy muy despacio, esto es una torrentera de piedras y todavía tengo muy presente la piedra que se me cayó en el pie y me rompió el dedo gordo. No lo veo nada claro lo del sendero, pero sigo. Intento a la izquierda, lo intento a la derecha, se puede seguir, pero no hay ningún sendero claro. Me doy cuenta de que no voy bien. Mirando y mirando hacia todos los lados me fijo en que hay un terreno despejado al lado del risco que puede ser el sendero. Bajo hasta el almácigo (el último) y compruebo que es por aquí por dónde va el sendero. Está un poco antes del almácigo grandecito (280m). Pero en este busca y rebusca se me ha pasado una hora. Una hora al sol. Muy entretenido sí, pero cada vez más desmoralizado. Durante esa hora he tenido que ir aceptando que no iba a encontrar el sendero y con mi pie tan delicado me muevo torpemente torpe, y me tengo que arrastrar en muchos sitios por no saltar lo más mínimo. En un momento tengo incluso que dar una patada a las piedras que forman una cascada. Pero encontrarlo por fin me alivia el desánimo.

Sigo (14h), es una subida por la parte derecha del barranquillo, una subida por terreno de piedras sueltas, es el derrubio de un dique, que va a dar a una pared vertical y larga. Es por aquí, al menos el siguiente tramo está claro, va a la sombra de esta pared. Va por un dique, y la roca del dique es tan dura que es muy difícil que crezca nada. Después de superar el dique, lleno de lascas sueltas, sigo hacia la derecha por un sendero, más o menos claro, que va subiendo poco a poco hasta que llego a una zona de tosca dura sin plantas, y llena de oquedades. ¿Dónde está el sendero?  Bueno, simplemente subo por dónde venía y según avanzo lo voy descubriendo en forma de escalones y que va serpenteando por la roca dura. Y llego a la cresta (14.30h, 380m). Estupendas vistas hacia la otra vertiente, el barranco de Zapata, y también he tenido muy buenas vistas del barranco de Igueste durante toda la subida. Parece que el sendero sigue hacia abajo (hacia la derecha). En realidad hoy mi objetivo era no solo subir a la cresta sino seguir por ella hacia Las Casillas e incluso llegar al Lomo de las Bodegas. Vago por la cresta. Descubro la cascara de un huevo, también una botella grande de plástico, sin etiqueta. Esto me agrada porque significa que esto es un sendero. Pero por una cresta rocosa encontrar un sendero es muy difícil y ya me he quedado sin ánimos de explorar más, tengo que venir con más tiempo, he empleado una hora de tiempo en una vía errónea.

Por otro lado, me está molestando el dedo del pie, varias veces lo he golpeado contra piedras y el zapato me aprieta un poco. Regreso un poco inseguro por saber si encontraré bien el sendero de vuelta, pero lo hago sin problemas hasta el dique (14.50h, 300m). Busco un sitio dónde comer y lo encuentro bajo un pequeño almácigo que me da la suficiente sombra para estar cómodo. El almácigo está al lado de un cardón y una tabaiba, ambos grandes. Un buen trío para acompañarme. Me cuesta encontrar la piedra perfecta y me voy reponiendo a medida que voy comiendo mirando el paisaje arrebatado de sol y piedras. Enfrente tengo la montaña de la Hoya de los Juncos, debajo el caserío del mismo nombre, por debajo de mí baja encajonado el barranco dónde estoy y las casas de Lomo Bermejo, y hacia la derecha y hacia arriba toda la enormidad del barranco de Igueste y toda la enorme cuenca fluvial que forma. Hoy me lo tomo todo con mucha calma, nunca había estado empleado tanto tiempo para comer, cuarenta minutos.

Repuesto sigo bajando (15.30h) por el dique con mucho respeto, todo se mueve bajo mis pies. Más sol que sombra en la bajada, pero soportable. Joder, qué despacio voy. No puedo ir más deprisa. Tengo que asustar a dos perros cazadores que están vagando por Lomo Bermejo. Huyen. A pesar de todo me encanta este sendero, esta desolación al sol, a la sombra creo que no me gustaría tanto. No se mueve nada, no oigo nada. Consigo llegar a la pista (16.20h). El dedo del pie me molesta un poco más. Bajo por la carretera hasta Igueste (16.50h). Tardé 20 minutos en subir desde Igueste a Lomo Bermejo, ahora tardo 30 en bajar. Espero en la curva y me monto en la guagua para Santa Cruz (17.15h). Viene la conductora que huele a Old Spice, un puntazo.

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Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla

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