E-399 Las Breñas - El Cercado

• Excursión 399. 10 Febrero de 2016. Miércoles.

Camino Las Breñas. El Cercado. Roque El Clavo. Callao Los Parrales.

Municipio: El Sauzal.

ENP: Paisaje Protegido Costa Acentejo

De 16.15 a 19h. De 200 a 10 a 200m.

Distancia: 3,1km. Duración: 2h 45m

Recorrido por un sendero algo vertiginoso hasta una punta, lugar de pescadores, con muy buenas vistas a un acantilado alto y una bahía. Después hago pequeños recorridos por terrenos con mucha vegetación de la zona

Estoy un poco vago para conducir así que pienso en un sitio cercano del que todavía me quede un poco por ver y recuerdo la conversación con Fernando en la excursión 374 y del camino alternativo que hay para bajar por Las Breñas hacia el Puertito en El Sauzal. Al llegar al mirador de Las Breñas (calle Castaño, urbanización Primavera) el tiempo está soleado y mejor que en casa. Una pareja con perrito está en el mirador. Yo, decidido, bajo por el empedrado e inclinado camino. Sé que debo encontrar, más o menos a una corta distancia del comieno, un sendero a la derecha. pero en mi primer intento no llego a nada, el terreno es un poco ralo de vegetación y da la apariencia de que hay senderos, pero no llegan a nada. Más abajo y creo recordar que al lado de un cartel informativo (totalmente borrado) está la entrada al sendero que es mucho más agreste y salvaje, no está empedrado en absoluto, y baja más vertical por terreno más resbaladizo y con más desnivel. Este camino baja rectito hacia un saliente picudo (Roque el Clavo) que está a la derecha del de El Puertito. Y encierra un gran callao (Los Parrales). La vegetación es muy aromática. Las vistas del saliente del Puertito muy fotogénicas, ese saliente tiene algunos caminos bien perfilados y poniendo algunas plantas en primer plano quedan estupendas las fotos.

Estando en la bajada de repente un perro me empezó a olisquear y al lado una mujer joven constantemente le dice al perro que me deje en paz. Hablo un momento con ella pero no sabe de caminos que bajen al risco (no los hay, ya me doy cuenta más tarde). Se va porque el perro juguetón y no le hace ningún caso. Según bajo me desvío cada hacia la derecha a ver si descubro algún camino para ir hacia el risco que está debajo de la urbanización de Los Ángeles y que llega hasta la punta donde empieza el Risco de la Garañona. Este risco hace un bonito arco, tiene 150 metros de alto y es muy vertical, en la base hay callaos y teóricamente se podría ir por él hasta la punta (Punta El Sauzal). dónde empieza la playa de Garañona. Encaramadas en la parte superior del acantilado se ven algunas casas y bastantes palmeras salvajes. En el risco se nota la salida de un barranco (Hoya de Las Limeras) y quedan algunas fincas (que algún día tendré que explorar) en la ligera hendidura. Mis desvíos no tienen éxito porque siempre hay demasiada vegetación, muy densa, que me impide progresar. Pero el sendero de bajada es precioso y con el tiempo soleado es muy agradable e interesante. Este sendero lo mantienen abierto los pescadores que van al roque El Clavo.

A los 70m de altitud hay una bifurcación que tomo a la derecha para seguir hacia el Roque y no hacia el Puertito. De lejos veo un cartel, cuando me acerco veo que dice que es un sitio peligroso porque hay frecuentes desprendimientos, al menos no dice: prohibido el paso. Así que sigo. Voy encontrando el sendero según bajo y ya en el roque bajo hasta ver a un pescador con su caña y dos hombres más jóvenes que estaban afanados trabajando sobre un cubo de plástico. Los saludo para no mosquearlos. Sigo hasta un espacio amplio circular en forma de corona con el suelo arenoso y muchas señales de presencia humana: colillas, bolsas de plástico, latas de bebida y de conserva. Parece otro sitio desde donde pescar. Está a unos diez metros del nivel del agua. Un poco desastrado pero acogedor. Es un balcón natural. Al regresar subo por un sendero empinado, pero claro. Después en la parte de arriba rodeo el roque que se está literalmente cayend. El paso es por debajo de concavidad y se ven muchas piedras en el suelo que se deben haber caído de la parte de arriba. Paso deprisa por este tramo. Después hay un bonito mirador. En el regreso me encuentro con un pescador y le digo que ya hay gente pescando, parece fastidiarle y cuando sigo subiendo veo que evita el lugar donde están los otros y se va hacia la punta del roque.

La subida me resulta muy agradable por el camino salvaje con el aroma fuerte de las plantas crasas que crecen cerca del mar. Regreso al coche y allí le pregunto a un policía municipal que habla con una conductora por si hay otros sitios para bajar por el risco y me explica uno. Sigo por la calle El Castaño hasta donde hay (a la izquierda) una lengua de asfalto y una enorme cantidad de copas de oro, que es una planta trepadora que tiene flores amarillas en forma de copa. Continúo por un sendero cuando acaba el asfalto. Hay muchas peladuras de pipas y alguna que otra botella de plástico. Parece un sitio frecuentado por jóvenes aburridos. El camino es muy resbaladizo y de hecho me lio los pies con una planta y me caigo al suelo a cámara lenta. El camino baja y baja pero no lo continúo hasta el final, donde vep una especie de chamizo que ya vi antes en la bajada al Roque del Clavo. Regreso a la calle Castaño y me echo a la izquierda. Al final de la calle hay un descampado llano con inciensos, pencas y tabaibas. Tomo por un sendero que sale del final de la calle y que pronto cruza el cauce, lleno de plantas, del barranquillo (Hoya de Las Limeras) y llego hasta la parte superior de una finca vallada y abandonada y que tiene grandes palmeras. Vuelvo al final de la calle Castaño y ahora sigo un sendero, cerca de los muros de los chalets que parece subir hasta la carretera, cerca de la gran curva. No lo completo y regreso a donde dejé el coche.

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Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla

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