• Excursión 535. 18 Octubre de 2016. Martes.
Vento. Roque el Conde.
Municipios: Arona. Adeje.
ENP: Reserva Natural Especial Barranco del Infierno
De 16.10 a 19.10h. De 610 a 1005 a 610m.
Distancia: 5,8km Duración: 3h
Ascenso desde Arona al roque del Conde, una gran meseta inclinada donde antiguamente se cultivaba y con vistas fantásticas hacia todos lados. El ascenso tiene una parte complicada, tras una degollada, por terreno inestable
Llego a Arona desde mi casa (Tacoronte) en 1 hora y 5 minutos. Me resulta casi milagroso no confundirme e ir recto como una flecha desde la salida en la autopista (Parque de la Reina) hasta Arona, recorriendo en sentido contrario y en parte el trayecto que hice a pie desde Arona hasta San Lorenzo. Cuando vi allá arriba los ventanales entre las dos casas sentí una gran alegría y alivio. A la vuelta no lo logré.
Aparco en el centro de Arona y voy caminando hasta Vento (diez minutos) con un sol fuerte. Está bien señalizado por las calles de Arona cómo ir hacia el Roque del Conde (esta parte hasta Vento no figura en el track de la excursión). En Vento también un buen cartel me indica por dónde empezar y la distancia (2,4km al Roque), es un callejón entre los números 76 y 78 de la calle Vento. Enseguida el sendero empedrado atraviesa dos barranquillos (La Arena, Ancona) y después el gran barranco del Rey en el que un sendero se adentra y baja hasta 50 metros de desnivel (585m) para después volverlos a subir. Estaba pensando que me esperaba una buena subida y además ahora he tenido que salvar este angosto barranco. Precioso barranco que sólo podré apreciar a la vuelta. Y cuyo cauce es el límite entre los municipios entre Arona y Adeje; pero no me pude emocionar, sólo lo supe más tarde.
Una vez salvado el barranco empiezo a subir sin darme cuenta tampoco de las dos hermosas eras, una enorme con piedras pequeñas. Las veré más tarde en la vuelta (Era Nueva del Roque y Era Vieja del Roque). Voy completamente focalizado en la fuerte subida y tramando relatos para escribir más adelante como una manera de concentrarme en la subida. Voy creando en mi mente un relato que repaso y refuerzo mientras voy subiendo. La subida por la ladera (Tableros del Roque) tiene empedrado y grandes rectas empinadas. De vez en cuando me paro y miro hacia abajo, puedo ver como Arona va cobrando forma y también empieza a destacar el roque de Imoque, tan piramidal. Distingo también los roques del campo de volcanes y el roque de Jama con su perfil característico. Cuando llego a una degollada (La Degollada, 760m), en un pliegue de la ladera, el sendero llanea al otro lado y empiezan las vistas hacia Costa Adeje. Se distingue el saliente al lado del hotel del Duque. También me llama la atención un gran valle totalmente plantado de plataneras (Monumento natural Caldera del Rey.)
El día esta maravillosamente claro y se distingue todo con precisión. Después de llanear un rato empieza (800m) una parte antipática, sé por dónde hay que ir porque está despejado de plantas por un terreno pedregoso, arenoso y resbaladizo. Pero no hay un sendero estrecho y bien delimitado, por eso debe decir W que si hay poca visibilidad hay peligro de perder el camino (W es Wolfsperger, estoy siguiendo una ruta de su libro). Ya he tenido ocasión en bastantes excursiones de ver el roque y en muchas ocasiones tenía una boina de nubes cubriendo la parte superior. El sol me atiza con fuerza y tengo que ir despacio protegido por el paraguas. Logro no caerme. Coincido con un grupo de cuatro senderistas que se sientan cansados, me miran con prevención, debe ser por mi paraguas abierto.
Llego a la planicie del roque (5.25h, 950m) y la empiezo a recorrer hacia la izquierda. Voy nervioso y excitado, ansioso por comprobar qué se ve desde el borde. El terreno es irregular pero transitable, muy llano. Cuando llego al borde la vista que tengo es maravillosa y siento que estoy completando algo que he estado anticipando y esperando mucho tiempo. Con el mapa en la mano voy identificando lugares: Adeje, Torviscas, Corona Forestal. Hacia Teno se ve bien El Pico Verde y la Cruz de Gala, Guama, La Fortaleza en el borde del barranco de Masca. Cerca veo Tejina, pero sólo la parte de arriba. No se ve Vera de Erques. Subo rodeando la meseta hasta llegar al punto geodésico (1005m) y aquí hay buenísimas vistas hacia los picos de arriba empezando por Imoque y muchos otros que todavía no conozco, hay un par de ellos que yo les llamo Los Pechos de Casildo, creo que se llaman, en realidad, Abinque y El Negro (son Los Brezos). Hay un ligero degradado en la distancia. Estoy tan nervioso. Empiezo a descender por el borde que da hacia Arona para completar una vuelta completa de la gran mesa. Me gustan las fotos que hago con cardones en primer plano. También las vistas son impresionantes hacia Granadilla. Destaca La Montaña Gorda (doble cono) por debajo de la Charca del Pino que también tiene pegado un doble cono, pero más pequeño (Chiñama). No doy abasto de tanto qué ver e identificar (ninguna flecha en el cielo me indica los nombres de los sitios). También distingo Vilaflor hacia arriba.
Empiezo a bajar a las 18h. La luz cálida de la tarde me va acompañando en la bajada y ahora sí puedo ir disfrutando de las vistas según bajo y del propio camino que tengo que hacer con mucho cuidado sobre todo hasta la degollada del Centinela (18.27h). Y después veo las eras y un rebaño de cabras que ramonean entre las higueras en un rellano bajo las eras. En el camino entre Vento y Arona hay una gran extensión de terrazas abandonadas formando un semi círculo. A las 19.10h llego al coche. Cerca del coche hay un parque recreativo donde juegan los niños y hay un ambiente muy relajado con televisión a mucho volumen incluido. En el coche me emociono escuchando “Corazón Partío” de Alejandro Sanz, la escucho varias veces seguidas sacándome hasta el último gramo de emoción.
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Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla
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