• Excursión 1328. 12 Octubre de 2021. Martes.
Las Eras. Montaña de Magua. Barranco de Magua. Icor.
Municipio: Arico
De 15.02 a 19.37h. De 60 a 15 a 80 a 30 a 260 a 120 a 420 a 20 a 60m.
Distancia: 21,4km. Duración: 4h 35m
Larga excursión visitando primero una era en el pueblo de Las Eras, después sobre un barranco árido de piroclastos y por viejos senderos hasta localizar una era. Continuación por pistas abandonadas hasta Icor y bajada al lado del hermoso barranco de Icor con altas columnas basálticas y paso emocionante por dentro de un recinto de aerogeneradores
Una tarde calurosa cuando me bajo de la 111 en Las Eras. Hoy he aprovechado bien el tiempo para estar aquí temprano en este día festivo. Sigo por la carretera que va a Icor en paralelo a la autopista. Es una larga tirada, paso el cartel de km 1 de esta carretera. Cuando ya la carretera empieza a subir me desvío, a la izquierda, por una pista de tierra por debajo de las últimas casas. Las rodeo y enseguida estoy subiendo. Una construcción de cemento con una pintada le da todavía más aire desolado y abandonado al sitio. Un extraño cartel de “Punto de Encuentro” al lado de una barrera en la entrada a un parque eólico (Vera de Abote) no parece un sitio donde la gente quede para verse. Aunque al bajar (hacia la izquierda) para rodear una colina veo cuatro coches aparcados en un llano, ¿qué harán aquí? Ninguno tiene parasol. Vuelvo a subir otro buen tramo por la pista ancha y terrosa que tiene de vez en cuando unos pequeños postes pequeños de cemento a los lados de la pista. Estoy ya enfrente de una montaña (Magua) y en una bifurcación tomo a la izquierda para empezar a bajar hacia una planicie hacia el mar que es mi primer objetivo del día. Y ahí está bien clara: una gran era de suelo más claro que el terreno circundante. Por fin una era en Las Eras. Emocionado me salgo de la pista pedregosa y bajo campo a través por sobre rocas y tabaibas hasta la era. Enorme, de unos 18 metros de diámetro, de suelo de piroclasto liso con un murito bajo. Parece que la mantienen libre de piedras y que puede ser un lugar donde la gente viene. Está sobre una elevación con vista hacia Las Eras y el mar, un lugar en el borde de un acantilado, un lugar aventado. Perfecto. Esto es empezar bien.
Sigo un rato por una pista antigua por la mesa hasta que empiezo a subir, hacia la derecha, por una pista completamente destrozada por las lluvias que me encanta recorrer. Arriba en una bifurcación sigo subiendo por una pista que va por la ladera de la montaña Magua. Un todo terreno está aparcando y los perros se agitan cuando me huelen al pasar, el hombre me saluda discreto, un cazador vestido de cazador. Cuando ya casi he rodeado la montaña me animo y me subo hasta lo alto (160m) con vistas amplias en este día perfecto sin viento apenas. Vale. Regreso a la pista y sigo hacia el interior. Los aerogeneradores están en movimiento a pesar del viento flojo. Son construcciones impactantes, enormes, y me gusta pasar por debajo de sus aspas e imaginar que se sueltan y me clavan al suelo. Una buena muerte para un excursionista. Rodeo por arriba un barranco (Magua) que empieza bajo la pista. El barranco es un espectáculo fantástico, con sus formaciones de piroclastos caprichosas, hay belleza incluso en estos páramos. Enseguida después del barranco me salgo por la derecha por sendero de motos hacia abajo, hacia el cauce de otro barranco (Tamadaya). Me gustan estos barrancos secos, áridos, perdidos. Arriba veo invernaderos. Aquí abajo el cauce es pedregoso y arenoso y me cuesta desplazarme. El cauce es como una pista no muy ancha de cayados. Me muevo lentamente. Por un pequeño meandro me salgo del cauce, pero vuelvo adentro enseguida. Las paredes son de lo más variado: hay basaltos negros, basaltos grises, piroclastos con piedras negras embutidas, paredes moldeadas de piroclastos, también. La vegetación es básicamente de balos y vinagreras.
Localizo la bifurcación para salir del barranco (hacia la derecha) pero entonces me acuerdo de la era que no supe ver en la bajada desde Arico el Nuevo en una excursión reciente (la 1320) y decido ir a visitarla y también por ver si es interesante el camino que sale del barranco (hacia la izquierda) y sube hasta la carretera. Sigo subiendo por el cauce de cayados y localizo la arista por dónde subir. Pero no hay ningún sendero es simplemente que la pendiente permite subir. Sólo en lo alto me parece reconocer un sendero al lado de un canal seco tallado en el suelo. En lo alto, en la carretera aparezco cerca del km 3, la era está en el km 2. Sin dudarlo mucho me lanzo. Con algo de tráfico y por el asfalto con vistas a las laderas redondeadas subo hasta la curva y me salgo a su altura. Un sendero me lleva a lo alto de una pequeña elevación y sobre un gran agujero en el suelo (un posible depósito que se quedó a media) descubro el murito de la era. Subo hasta lo alto. Aquí está, es una era grande, tanto como la otra (18m Ø), de suelo de piroclasto, pero esta tiene muchos agujeros como para jugar al guá. El lugar es bueno: elevado y despejado. Misión cumplida.
Regreso por la carretera y vuelvo a bajar al cauce del barranco de Tamadaya. Llego hasta la bifurcación y empiezo a subir por una pista estrecha. En la siguiente bifurcación tuerzo a la izquierda para ir cerca de la arista de una loma. Es una pista erosionada, de piroclasto, y en la ladera hay muchos restos de viejos muros de sustentación de terrazas. Antes se cultivaba por todos lados. Hay bonitas zonas de piroclastos con remates de espuma y también paredes lisas de piroclastos beis y más claros. Me gusta mucho este paisaje seco. Es un buen contraste con respecto a la excursión de ayer por La Guancha. En constante ascenso y por la pista erosionada llega un momento en que estoy ya en lo alto de la arista de la loma. Voy en busca de otra era que está en los 320m de altitud. Pero cuando llego al sitio veo que en una extracción de áridos se la han mamado totalmente. Han excavado un gran canal en la loma y con las tierras se han llevado todo lo de arriba y de la era no queda nada de nada. Vale. (Cerca está la casa de La Yesca -excursión 1308- con sus dos eras.) Si fuese más sensato regresaría por donde he venido, pero no, me apetece ver si es posible bajar desde Icor por una pista donde han puesto aerogeneradores. Sigo subiendo hasta la carretera general (por Las Casitas) y me echo a la derecha por la carretera. A toda velocidad hago los tres km hasta Icor. Una mujer a la que le pregunto ¿será la que una vez vi pelando papas? no sabe si es posible o no, lo que me dice es que hay una finca privada y una cadena. Dos hombres que están con ellas me miran sin decir nada. Ella es muy amable y me ofrece agua y me sugiere que baje por la carretera de Icor y me mantenga siempre a la derecha. No le hago caso.
Bajo por la calle donde están las bonitas casas de Icor. Efectivamente, no mucho después de pasar las casas de Icor me encuentro con una cadena y un claro cartel de “finca privada y prohibido el paso”. Subo un poco y me meto por la derecha (según subo) por unas viejas zonas de cultivo abandonadas. Bajo entre el barranco (Icor) y la finca privada. Ahora se torna completamente emocionante la cosa, me ha dado una prisa enorme por terminar la excursión, pero al mismo tiempo sé que me falta un montón. A toda leche bajo por las viejas terrazas saltando y pasando una gran finca en ruinas. Aquí tengo una vista fantástica de una pared vertical de columnas basálticas en el barranco de Icor. Una vista única. Nunca había visto algo así, de ese tamaño. Y este es el único sitio posible para verlo. Estupendo. A pesar de lo deprisa que voy me da tiempo a ver lo esencial. Más abajo la zona entre la pista privada y el barranco se va estrechando y me va llevando hacia la pista. Y enseguida llego a la pista al lado de un generador en movimiento. La pista es de cemento y estupenda. Me relajo. Voy bajando deprisa con más seguridad ahora. Con vistas al barranco, aunque no tan espectacular. Y entonces me topo con una puerta y alambre de espino encima. Impasable. Cuando ya estoy pensando que tengo que subir a Icor veo a la izquierda otra pista y que hay paso franco. Salto un foso y vuelvo a estar en una pista de cemento y ya sigo bajando por ella. Salvado. Es extraño lo de las vallas. Según sigo bajando y pasando aerogeneradores voy viendo grandes tramos de vallas con alambre de espino pero que dejan el paso libre por la pista que a tramos tiene asfalto. Esto es jauja. Claramente estoy en un sitio prohibido. Pero hoy es fiesta, quien va a venir por aquí en un festivo sino alguien como yo. Y bajo, y bajo y bajo hasta que llego a otra puerta alta, un vallado alto, y que milagrosamente puedo pasar porque en el lateral de la pista hay un gran surco (para canalizar las aguas de lluvia) y arrastrándome puedo pasar bajo la valla. Qué más se puede pedir. Llego a la barrera del punto de encuentro. Y ya de ahí hasta la parada de guaguas en la autopista voy como un tiro, algo dolorido de un pie por el salto del foso. “Sólo” tengo que esperar 20 minutos por la 111. Ha sido una vuelta frenética pero aquí estoy de vuelta a casa después de otro día en la “oficina”.
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Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla
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Las Eras - Montaña y Barranco de Magua - Icor