E-1588 Barranco Icor

• Excursión 1588. 10 Junio de 2024. Lunes

Barranco Icor. Salto Abote.

Municipio: Arico

De 14.40 a 17.40h. De 40 a 15 a 155 a 15 a 40m.

Distancia: 7,1k. Duración: 3h.

Plácido recorrido desde cerca del mar del barranco Icor hasta un gran salto (Abote), la única dificultad es rodear un pequeño salto por una ladera algo expuesta, un barranco espectacular ancho y de paredes verticales

Esta vez para aprovechar más el tiempo disponible voy en coche hasta Las Eras y lo dejo en un pequeño barrio (Las Ceras) situado cerca de un pequeño complejo industrial con varias naves. Camino por la carretera paralela a la autopista, una larga recta, hasta el final de la recta en un grupito (Eras Altas) y tuerzo a la izquierda y enseguida voy por una pista de tierra y llego a un puente. El puente cruza el cauce del barranco de Icor. Desciendo por la izquierda del puente y por los cimientos de cemento del puente llego al cauce y empiezo a subirlo. El cauce es cómodo de caminar, muy arenoso y con una pendiente muy suave. Las paredes son de basaltos oscuros, basaltos viejos, muy redondeados y fracturados en vertical. El barranco va ganando en altura a medida que asciendo. Tras unos quince minutos (700 metros) el barranco hace una curva brusca a la izquierda (50m) y hay que ir por debajo de una hermosa pared con la base de piroclastos muy erosionados. Es realmente un barranco muy cómodo de caminar y espectacular todo el rato. Por aquí veo a la izquierda un lugar donde se podría subir (o bajar) por la ladera. En lo alto giran las aspas de los aerogeneradores. En poco más de cien metros el barranco gira a la derecha en un ángulo de 90 grados. Sigo subiendo en ligero ascenso sobre arena que hace un poco más cansado el caminar que si fuese sobre firme duro, pero muchísimo mejor que ir por terreno pedregoso. Las paredes son más altas (entre 50 y 70 metros) y se va cerrando con varios meandros en sucesión. A partir de uno de estos meandros donde hay un pequeño salto de basalto pulido cambia el carácter del terreno, se hace un poco más complicado, ya no es arenoso. Sigue siendo muy cerrado e imposible de subir o bajar por sus paredes.

En los 120m aprox. llego al salto que vi desde el borde de arriba la semana anterior. El salto apenas tiene tres metros de altura, debajo es cóncavo y tiene a la izquierda y antes del salto una cueva grande. Es un lugar con fuerza. El salto está en una parte muy estrecha del barranco. No me cuesta mucho dar con la manera de superarlo, es por la derecha del cauce. Retrocedo unos metros y por una zona de basaltos redondeados que parece formar una escalera natural puedo ir subiendo. No hay marcas, ni hitos, pero una banda más trillada denota el “camino”. Este “camino” va a medida que asciende echándose hacia la derecha y después hay que torcer hacia la izquierda hasta la base de un risco donde hay un derrumbe de grandes piedras y por ahí llaneo y paso por la ladera muy por encima del salto. Después hay que destrepar por la ladera hasta alcanzar el cauce. Bien. Muy bien. Ahora puedo seguir por una zona más ancha y con más vegetación por la que se puede ir por muchos lados. Cuando he avanzado un poco más hacia el gran salto de Abote veo a la derecha dos agujeros en la pared, deben ser de una vieja galería inactiva (Galería de Abote), una galería de socavón. No me atrevo a entrar, el risco por encima es demasiado vertical y de material muy suelto. Compruebo desde abajo que todas las paredes del barranco terminan en secciones verticales y que por lo tanto no se puede ni bajar ni subir. Sigo un poco más y me topo con un pequeño salto que logro superar, y ya veré después cómo lo bajo y un poco más adelante llego a la base del salto, que paradójicamente me cuesta reconocer y que no me impresiona tanto como cuando la vi desde arriba.

Ni el otro día ni hoy he tenido suerte con la luz, en ambos casos los cielos han estado nublados y le ha restado, le resta fuerza a estos riscos. Y ya regreso. Y cuando llego al pequeño salto no me cuesta casi nada bajarlo, y me queda la sensación de que a veces soy demasiado precavido. El retorno es muy plácido. Es un barranco que parece frecuentado. En la cueva antes del salto que tuve que rodear había un cartel que decía “No arrojar basura” y he visto muchas marcas de pisadas en la arena. Y no me extraña que sea frecuentado porque se puede caminar cómodamente y es todo el rato espectacular. Después del salto hay una esquina, justamente debajo de la valla en el borde que me impidió la semana pasada continuar por el borde, por donde se podría subir hasta arriba. No lo pruebo. Simplemente sigo hacia abajo y es que esto es mucho más interesante que las laderas suaves de la parte de arriba, por encima del salto. Este barranco es de paredes basálticas con muchos lugares especiales, y varios tramos de piroclastos muy gastados. La vegetación es sobre todo de rabo de gato.

Hoy me sale una excursión muy redonda y algo corta, pero ya no me da tiempo para intentar recorrer el siguiente barranco que voy a hacer, el de Las Vigas (Las Ceras) y que termina atravesando y saliendo al mar por el centro de Las Eras. Eso lo dejo para la semana que viene. 

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Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla

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