• Excursión 366. 5 Diciembre 2015. Sábado.
Barranco de Araca. Barranco de Joncho. Igueste.
Municipio: Candelaria.
ENP: Parque Natural Corona Forestal
De 14.45 a 17.45h. De 600 a 500 a 720 a 500 a 600m.
Distancia: 3,3km. Duración: 3h.
Descenso al barranco de Araca por sendero, después recorrido por el cauce hasta encontrar un sendero que sube por la otra ladera con vistas fantásticas sobre el ancho y profundo barranco. En lo alto de la otra ladera sigo un canal hasta que me topo con un túnel cerrado. Regreso por donde he ido
Una de las veces que estuve en Igueste hablé con un canalero (Santiago) y me indicó un camino que subía desde el cauce del barranco de Araca a la otra ladera. Hoy voy a intentar seguirlo.
Empiezo mi recorrido donde otras veces, en el camino Los Márgenes en una curva amplia (620m, Las Lajitas) es un sitio bueno para varios coches, ya hay dos. El tiempo está bueno. Nubes altas. Hago la excursión en camiseta. Bajo por el sendero que empieza en el lateral de la curva amplia. Bajo hacia el cauce del barranco de Araca. Bajando compruebo que el sendero que estaba muy despejado en julio está ahora muy invadido de plantas. Cerca del cauce (600m) tomo a la izquierda en una bifurcación. Sigo bajando por sendero y no sé cómo, de repente aparezco en una huerta donde hay un hombre cavando. Resulta ser muy amistoso. No solo me explica que el sendero va por debajo de la huerta y que tengo que meterme entre las plantas hasta un árbol, rodearlo y seguir bajando hasta el cauce, sino que me ofrece cilantro y hojas de col para un potaje, bueno con bubangos añade, yo lo acepto todo y lo guardo en mi mochila que conservará un olor muy agradable al cilantro. Me dice que él ha arreglado estas huertas (forman dos o tres terrazas) y que ha reconstruido los muros y que planta millo, ciruelas, coles, cilantro y más cosas, que las huertas han estado abandonadas durante cuarenta años, pero que sólo las puede cuidar los fines de semana. Del camino que sube por la otra ladera me indica señalándolo dónde empieza pero que él no lo ha hecho, que a veces ve gente en lo alto del otro lado.
Sigo sus indicaciones para bajar al cauce del barranco. Me cuesta trabajo atravesar la vegetación crecida y sólo voy viendo el sendero gracias a que en el suelo hay cartones debajo de las plantas, después del árbol no veo ningún sendero a la izquierda así que bajo hasta el barranco atravesando una serie de huertas aterrazadas. En el cauce del barranco, que es ancho y arenoso, bajo un trecho, pero no encuentro el sendero que sube, así que me lanzo hacia arriba campo a través hasta que encuentro un canal y lo sigo hacia la izquierda. Pero la trayectoria del canal es muy salvaje, está lleno de plantas, llego hasta un grupo de arbustos insalvable después de recorrer unos cincuenta metros por el canal. Entonces oigo un silbido y es el hombre de la huerta que me señala a lo lejos que por aquí no es, que me voy a matar, que tengo que bajar por el barranco para dar con el sendero. En el barranco se oye perfectamente a una gran distancia. Le doy las gracias y le pregunto su nombre (Pedro) y le digo el mío.
Regreso al cauce del barranco, sigo bajando, tiene muy poco desnivel, logro encontrar el sendero (515m), está un poco antes de un salto. El día está maravillosamente soleado y en el cauce del barranco hace calorcito. Una vez localizado el sendero es claro, aunque en una tanquilla de agua pierdo el camino y después de intentar atravesar unas telarañas enormes y desalojar a su dueña me doy cuenta de que el sendero está por la izquierda. Entonces oigo voces que me llaman, me llaman montañés, que si me echo uno (vaso de vino supongo), y me llaman por mi nombre. Enseguida me doy cuenta de que son un par de hombres trabajando, un poco más arriba de donde estaba Pedro, que me están tomando el pelo.
El sendero sube constantemente y se distingue bastante bien, aunque por momentos está oculto por la vegetación. Tengo que tener cuidado con las piteras y sus peligrosas puntas, de hecho, una me pincha en la pantorrilla. A medida que subo voy viendo en toda su dimensión la maravillosa y profunda curva que forma el barranco de Araca. Incluso hay un mirador con una vista estupenda de la ladera de enfrente y todas las pequeñas huertas. Y mirando por donde he bajado distingo un poco más debajo de las huertas por las que bajé por dónde va el sendero que no he encontrado al bajar. Lo intentaré en el regreso.
El sendero sigue subiendo y subiendo y siempre por el borde de la ladera. Al llegar a los 680m aprox. encuentro un canal a la izquierda, el sendero sigue subiendo. La subida la dejo para otro día. Sigo el canal hacia la izquierda. Me encanta descubrir que se puede ir por el canal que es muy estrecho o a su lado. La vegetación (jaras, sobre todo) hace un poco complicado el paso y las puntas de las piteras siempre amenazantes. El camino-canal sigue por otro barranco y otro más (de Joncho) y ya con muchos pinos y el suelo cubierto de pinocha. Pero me topo con un túnel con rejas (galería El Portezuelo número 20) y no puedo seguir. Cuando estoy volviendo me parece ver un camino por debajo, lo dejo para otro día. Este es el tipo de senderos que me encanta descubrir, poco transitados y sin señalizar.
El regreso es más agradable, siempre lo es, sobre todo cuando es en bajada, lo que me permite ir más descansado y disfrutar de todo el barranco. Además, el día soleado permite ver el barranco en toda su gloria. Tomo a la izquierda al llegar al cauce, subo y tomo el camino que he visto desde arriba, aunque enseguida me encuentro con que está tupido de vegetación, como no son plantas nudosas ni tiene pinchos puedo avanzar entre ellas, con cierto esfuerzo, eso sí, como nadando, y poco a poco voy progresando hacia arriba. Entre el sol, tener que ir subiendo y que además no veo donde piso la cosa se hace un poco agobiante. Pierdo el pie un par de veces y casi me caigo a terrazas colindantes. Desde luego que no me paro a pensar en las arañas ni en los bichos que puede haber en las plantas y sigo hacia arriba por lo menos un tramo de unos 40 metros hasta que por fin llego al árbol que me sirvió de referencia al bajar. Y después todavía tengo que seguir subiendo venciendo un desnivel de unos 60 o 70 metros. Vuelvo algo tocado al coche.
Ya en el coche bajando me paro un momento para preguntar a unos hombres por un camino para acceder al barranco desde abajo, para evitarme la subida que acabo de hacer y me dicen que no hay ninguna que sólo por arriba. Sin embargo, no me lo creo, me da la sensación de que por alguna razón que se me escapa no quieren que vaya por donde están ellos. Otro día tengo que volver y explorarlo. Pedro, el agricultor, me dijo que sí había una entrada por abajo.
Afortunadamente es de esos maravillosos sábados en que mi mujer se ocupa de la comida y cuando llego a casa todo está preparado.
---------
Pulsar en el siguiente enlace para descargar el track de la excursión
Track orientativo, no obtenido durante la excursión, elaborado después de realizarla
drive.google.com/file/d/18wx_qQD-euL66SjLJJHoeQnifHHdW-72/view?usp=sharing