Pimientos Rellenos de Pollo y Pavo
INGREDIENTES
1 kg de Pimientos Rojos pequeños (tipo morrón o california)
1 kg de Carne picada de Pollo y Pavo
2 Huevos M
1 c/s de Pimentón dulce
1 c/s de Perejil liofilizado
1 c/s de Sal
Pimienta
2 Rebanadas de Pan de Semillas y Pipas de Calabaza
20 cl de Leche
Harina
Aceite de Oliva Virgen Extra
Cebollino
Para la Salsa
1 Puerro
3 Zanahorias pequeñas
3 Tomates de Pera
Agua
Sal
ELABORACIÓN
Poner la carne en un bol con los huevos, el perejil, el pimentón, sal y pimienta.
Añadir las dos rebanadas de pan desmigadas y mojadas con la leche. Mezclar.
Lavar y secar los pimientos. Quitar el pedúnculo y las semillas del interior.
Rellenar los pimientos con la farsa, ayudándoos de una cucharilla, para que no queden huecos, pero sin apretar. Con la carne que sobre, hacer unas albóndigas.
Pasar la tapa de los pimientos por un poco de harina.
Calentar el aceite y freír la tapa de los pimientos y las albóndigas, previamente enharinadas. Reservar en un plato.
Decantar el aceite sobrante y cubrir el fondo de una cazuela con un poco del mismo.
Cortar el puerro a rodajas, pelar y cortar las zanahorias, también a rodajas. Lavar y secar los tomates y trocearlos.
Añadir las verduras a la cazuela. Sazonar y sofreír.
Triturar el sofrito y ponerlo en el fondo de la cazuela.
Disponer los pimientos rellenos de forma que queden con la tapa hacia arriba. Poner las albóndigas en los huecos para que no se vuelquen los pimientos. Cubrir con agua hasta la mitad. Llevar a ebullición.
Tapar y cocinar a fuego medio unos 15/20 minutos. Rectificar de sal si fuera necesario, la salsa.
Si queréis que la farsa quede menos compacta, podéis poner un solo huevo, yo pongo dos para asegurarme que el relleno no se salga de los pimientos, aún así tanto el interior de los pimientos como las albóndigas, siguen quedando blando y jugoso.
La salsa debe quedar con una textura similar a una crema de verduras, si no estuviera lo suficientemente espesa, proceder a espesar con un poco de maicena diluida en agua (yo no he necesitado hacerlo)
Para la salsa en lugar del corte tipo mirepoix (1'5 cm/2 cm), podéis cortar las verduras en brunoise (½ cm) y no triturarlas, cambiaría la textura y el aspecto de la salsa, resultando un caldo ligero, pero delicioso.
Servir al gusto con unas ramitas de cebollino fresco.