Capítulo 21

"¡Mamá está aquí!" Gritó Kou Xiao, corriendo "¡Mamá está aquí!."

Las noches en las montañas no son muy tranquilas, había todo tipo de insectos y animales, el sonido del viento y el agua, pero no importaba cuál sonido fuese, no había sonido más perturbador que la de la voz humana. 

Huo Ran y Kou Chen se vieron cara a cara de forma aturdida, tomó el bastón de seguridad y la linterna brillante, asomó la cabeza fuera de la tienda y vio a Lao Yang asomando también la cabeza. 

—¿Qué está pasando? —Preguntó Lao Yang en voz baja. 

—No lo sé —respondió Huo Ran en voz baja— ¿Qué sucede con las tiendas de campañas de allí?. 

—No escuché nada, ¿pensaste que Kou Xiao estaba cantando? —dijo Lao Yang. 

—Iré a ver —dijo Huo Ran. 

Se sentía particularmente reacio a ir a ver, pero si no iba a verlo ahora mismo, no será capaz de pasar la noche. 

—Espérame —Kou Chen salió del saco de dormir. Y ahora, se lamentaba de haberse desnudado prontamente.

Huo Ran no lo esperó, se colocó los zapatos y salió de la tienda, probablemente porque tenía miedo de que el viento entrara, cuando quería asomar la cabeza, bajó la cremallera de la tienda con el revés. 

—Joder —Kou Chen maldijo por lo bajo, y rápidamente se colocó la ropa sobre su cuerpo: —¿Cómo diablos es jodidamente valiente?, con ese movimiento, en realidad...

—¿Has visto demasiadas películas de fantasmas? —Huo Ran volvió a abrir la tienda: —¿Cuándo has visto aparecer fantasmas en medio de la naturaleza en las películas de fantasmas?, no hay tumbas aquí. 

—No hay fantasmas en la naturaleza —dijo Kou Chen. 

—Mira alrededor del campamento, tu hermana todavía está escondida dentro de la tienda y no se atreve a salir —Huo Ran organizó las tareas— Lao Yang y yo iremos al borde del bosque. 

—Bien —Kou Chen finalmente se colocó los pantalones, tomó los zapatos y salió corriendo de la tienda. 

Huo Ran y Lao Yang caminaron hacia el borde del bosque, uno detrás del otro. Kou Chen miró alrededor del campamento mientras prestaba atención a todo tipos de movimientos. 

De las tiendas de allí, nadie salió. Las luces no estaban encendidas y no sabía si estaba durmiendo o haciendo algo más. Pero no escuchó ningún canto en este momento. 

Al pasar por la tienda de Kou Xiao, Kou Chen tomó el bastón de trekking que estaba en la entrada: —Hermana. 

—Mm —Respondió Kou Xiao desde el interior— ¿Ellos ya han ido al bosque?. 

—Ya fueron —Kou Chen abrió la tienda y le entregó el bastón de trekking— toma esto...

Kou Xiao estaba sentada dentro de la tienda, sosteniendo un pincho de hierro para barbacoa en la mano. 

—Esto parece bueno, se puede usar para apuñalar y hacer agujeros de ducha —dijo Kou Xiao. 

—...Ya veo, también puedes usar esto —Kou Chen asintió— Iré a echar un vistazo, si necesitas algo, solo llámame. 

—No te preocupes, ¿Quién crees que soy? —Kou Xiao levantó las cejas. 

Kou Chen volvió a mirar a Huo Ran y Lao Yang, que ya habían llegado al borde del bosque. Tomó una brillante linterna para alumbrar hacia el bosque, Kou Chen siguió la luz y miró hacia el bosque, pero no vio nada que se moviera. 

Caminó silenciosamente hacia el costado de las tiendas de aquellas parejas, escuchando antes de hablar. 

En las tres tiendas, hubo susurros en dos y hubo un grito ahogado en el otro...Kou Chen retiró la idea de hablar y se retiró sigilosamente hacia un lado. 

Se sentía que escuchaba a través de una pared, especialmente obsceno.

Sin embargo, después de que se retiró, recorrió alrededor de las tiendas nuevamente y no encontró nada inusual. 

Cuando regresó a su tienda, Huo Ran y Lao Yang también habían regresado.   

—¿Qué era? —Preguntó Kou Chen. 

—Hay personas dentro del bosque —dijo Huo Ran. 

—Probablemente una mujer —dijo Lao Yang— La escuchamos hablar, pero no vimos a nadie. 

—¿Eh? —Kou Chen se sorprendió— ¿No le preguntaron que estaba haciendo?. 

—En medio de la noche, una persona canta y habla en medio del bosque, además de que es una mujer —Huo Ran lo miró— ¿Y todavía quieres tener una conversación con ella?. 

—¿No dijiste que no hay fantasmas en la naturaleza? —dijo Kou Chen. 

—¿Dije que era un fantasma? —dijo Huo Ran— Claramente hay algo malo en su cabeza...

—Oh —Kou Chen de pronto lo entendió— Maldita sea, ¿me estás diciendo que es una lunática?

—Solo un 80% —Lao Yang suspiró— En general, en el pueblo de una montaña como es esta, si hay algún lunático en una familia, será imposible enviarlo al hospital, ya que a nadie le importa. Solo corriendo así, correrá y al final morirá. 

Huo Ran los llevó a ambos a esparcir pequeñas ramitas alrededor de las tiendas, de modo de que si una persona o un animal lo pisará, se escuchará. 

Después de estar de pie bajo el viento frío y hablar algunas palabras más, regresaron a la tienda.  

—¿Crees que esos aldeanos del pueblo estaban buscando a esa persona lunática? —Preguntó Kou Chen. 

—No lo sé —Huo Ran frunció el ceño— Si realmente estaban buscando algo, probablemente es algo que no quiere ser visto. Normalmente, si estás con varias personas buscando ganado, no nos preguntarían, y siempre y cuando no pregunte, debería haber algún problema. 

—Mm —Kou Chen comenzó a desvestirse nuevamente y desnudándose nuevamente. Metiéndose en el saco de dormir: —Yo dormiré primero, tú quédate un rato despierto, y despiertamente cuando sientas sueño más tarde, por la noche podemos cambiar de turno para vigilar. 

—Está bien —Huo Ran sonrió. 

Kou Chen se apretó dentro del saco de dormir, solo exponiendo su nariz y ojos, y luego cerró sus ojos. 

Huo Ran lo miró. 

Dos segundos después, Kou Chen abrió los ojos: —Joder, ¿acaso no te sientes conmovido?. Ahora que no tienes sueño, te dejo primero de vigilante y luego me levantaré, para reemplazarte cuando tengas sueño, ¿no entiendes esta secuencia?. 

—Entiendo —Huo Ran sonrió. 

—¿Entonces no te sientes conmovido? —Preguntó Kou Chen. 

—Estoy conmovido —Huo Ran asintió. 

—Joder —Kou Chen lo miró y cerró los ojos después de un rato —Es la primera vez que veo a alguien conmoverse tan tranquilamente. 

Huo Ran se rió: —La verdad, quiero preguntarte algo, ¿tienes que desnudarte hasta quedar en ropa interior dentro de un tienda de campaña en medio de la naturaleza?. 

—¿De lo contrario? Si no fuera una tienda de campaña, sino en mi casa, ni siquiera estaría en ropa interior —dijo Kou Chen. 

Huo Ran tomó un trozo de chocolate y dijo mientras comía: —No te quites de esa forma la ropa, en caso de cualquier incidente, otros simplemente pueden levantarse y correr...

—Si me colocó de pie, yo también puedo correr —dijo Kou Chen. 

—Ellos tienen ropa —dijo Kou Chen— es diferente para ti, tú estás desnudo. Estarías más a salvo si estuvieras desnudo en la ciudad. 

—¡Oye! —Kou Chen se sentó— ¿Me estás diciendo que salga de esto y me vuelva a colocar la ropa? ¡Para después volver a adentrarme! ¡¿No crees que ya es molesto?!

Huo Ran no habló, solo agitó la mano. 

Kou Chen se recostó y cerró los ojos. 

Estaba muy silencioso desde adentro de la tienda, tampoco se escuchó la voz de alguna mujer afuera. No hubo cantos ni palabras. 

Huo Ran sacó su teléfono y lo miró, pero no había señal. 

Para obtener algo de señal en el teléfono, pero de camino a Laoxikou y a unos kilómetros de distancia, habrá alguna señal. 

Cuando llegue mañana por la tarde. 

Durante ese tiempo, la señal de su teléfono se volvería un fantasma en medio de la naturaleza, ya que hubiera o no. 

Le envió un mensaje de texto tanto a su padre como a Xu Zhifan, en el momento en que tuvo señal, le informó su ubicación, como también lo próximo en su itinerario. Si sucede algo en el camino, pueden que lo encuentren...

Tsk. 

No quería pensar en esto, desde que comenzó a salir al aire libre, nunca había algo hablar de algún otro campista experimentado que haya tenido algún inconveniente con este camino. 

. . .

Kou Chen no fue capaz de dormirse de inmediato, no tenía la costumbre de acostarse a las ocho a las nueve, pero, aún así cerró los ojos e hizo todo lo posible para dormirse en todo ese transcurso de tiempo. Después de todo, Huo Ran y él tendrían que cambiar de turnos para vigilar por la noche, por lo que necesitaba recargar su espíritu.

Cuando finalmente comenzó a sentir un poco de sueño, su teléfono sonó. 

Este era el despertador que se colocó. 

Eran las 11 en punto. 

Era hora que se levantara y cambiara de puesto con Huo Ran. 

¿Mierda?

¡Ya estaba sintiendo un poco de sueño y ahora tenía que levantarse! 

Kou Chen lamentó ese arreglo de tiempo para vigilar en este momento. 

Abrió los ojos a regañadientes y vio que Huo Ran todavía estaba sentado en la misma posición, pero con la cabeza hacia abajo, como si estuviera dormido. 

Demasiado poco profesional, ¡qué tipo de ética profesional es esta! ¿Realmente se durmió durante la vigilancia nocturna?.  

—¿Haremos el reemplazo? —Preguntó repentinamente Huo Ran. 

—Maldita sea —Kou Chen se sorprendió— Pensé que te habías quedado dormido. 

—Solo cerré los ojos y descansé la mente —Huo Ran abrió los ojos y levantó la cabeza para sonreírle. 

—Ya veo —Kou Chen se sentó— Ve a dormir, te despertaré a las dos en punto. 

Antes de que pudiera acomodarse bien, Huo Ran se metió dentro del saco de dormir y se acostó. 

—...¿No te vas a quitar la ropa? —Kou Chen lo miró sorprendido. 

—Así es como duermo —Huo Ran se retorció varias veces dentro del saco de dormir y luego tiró su abrigo: —Despiértame a la 1 en punto, no a las 2, es demasiado tarde. 

—Oh —Kou Chen asintió. 

No tenía ropa puesta, así que se mantuvo sentado dentro de la tienda envuelto con el saco de dormir y miró de forma aturdida. 

Después de que Huo Ran se quedó dormido, por primera vez sintió que la noche era larga. 

Pero a la 1 en punto no despertó a Huo Ran como prometió. 

Ni siquiera a las 2. 

No fue porque él no quisiera. 

Es porque apenas duró media hora, luego de eso repentinamente se quedó dormido. Simplemente cayó acostado y durmió.

En el momento en que se cayó, solamente una oración pasó por su mente en medio de ese trance. 

Si alguien realmente viniera, al pisar una rama debería poder escucharlo.

Aparentemente, Huo Ran no se despertó conscientemente a la una, ni a las dos. 

Cuando Kou Chen fue despertado en la mañana por Huo Ran, la primera oración que escuchó fue: —Sabía que este sería el resultado. 

Kou Chen de repente se rió: —Oye, olvidé poner el despertador. 

—Afortunadamente no se concretó —Huo Ran hablaba mientras empacaba su saco de dormir— Hubiera afectado nuestro sueño. 

—No pasó nada anoche, ¿verdad? —Kou Chen se sentó. 

—Sí pasó algo —Huo Ran dejó de enrollar el sacó de dormir— Las alitas de pollo que no terminamos anoche ya no están. 

Kou Chen de repente sintió un escalofrío en la espalda: —¿He Hua acaso está aquí?. 

—Largo —Huo Ran casi no pudo contener una risa— Pudo haber sido un pequeño animal...por supuesto, también pudo haber sido una persona, así que levántate rápidamente, comamos fideos instantáneos y coloquémonos en marcha. 

Las parejas de las tiendas de allí no tenían idea de lo que pasó anoche, después de desayunar y empacar sus cosas, solo dos hombres que salieron de la tienda, fueron al borde del bosque a orinar. 

Huo Ran se acercó y le recordó que le prestaran atención a los extraños. Solo entonces, se acercaron a revisar su propio campamento y después de que se aseguraron de que no les faltaba nada, agitaron la mano: —Nos vamos. 

—Dejemos esto —Kou Xiao sacó las dos salchichas restantes— ¿Todavía nos queda carne seca y hay puntos de suministros más adelante, verdad? 

—Sí —Huo Ran asintió. 

—Entonces... —Kou Xiao vaciló— si alguien vino a comer las alitas de pollo en medio de la noche...

—Vamos al borde del bosque —Lao Yang entendió lo que quería decir y señaló una piedra que estaba al borde del bosque— Colócalo aquí para averiguar la verdad. 

—Bien —Kou Xiao se acercó y colocó la salchicha sobre la piedra. 

Debido a la experiencia de anoche, esta vez el ordinario itinerario de mirar el paisaje y sudar bastante, se volvió de repente muy emocionante. Durante tres horas después de que partieron, mientras caminaban por el pequeño valle del río, el tema de conversación siempre se trato de los aldeanos del pueblo y el canto de la medianoche. 

—Para ser honesto, si algo realmente pasara en este lugar, no se podría denunciar a la policía —dijo Kou Xiao— Mi teléfono no tiene señal. 

—Habrá señal más adelante —dijo Huo Ran— De vez en cuando llega, ¿Quieres llamar a la policía?. 

—¿Qué le diría a la policía? ¿Alguien cantó en medio de la noche y robaron tres alitas de pollo que sobraron de nuestra comida? —Kou Xiao suspiró. 

Kou Chen hurgó con el bastón de trekking mientras caminaba molesto: —Si vuelvo a encontrarme con algún aldeano del pueblo, definitivamente iré y agarraré a uno. Si realmente hay un lunático, las personas de esta zona...

El sonido de piedras rodando vino repentinamente desde atrás, junto con algunos ecos débiles en el valle. 

Había un lecho de río que estaba casi seco debajo de los pies, y era común hacer esta clase de sonido al pisar las piedras, pero este sonido estaba detrás de ellos, a cierta de distancia. 

Varias personas se dieron la vuelta abruptamente. 

Una figura brilló detrás de ellos, alguien se arrojó de la pendiente de tierra. 

—Vete a la jodida mierda —Kou Chen arrojó su mochila al suelo y corrió detrás de esa persona. 

Huo Ran no tuvo tiempo para detenerlo, por lo que solo pudo tirar su mochila al suelo y movió el bastón de seguridad, siguiendo a Kou Chen: —¡Yang-ge, cuida a la hermana!. 

—¡Qué cuidarme! ¡Lao Yang, vamos! —Kou Xiao se volvió ansiosa. Los que acababan de correr eran dos menores de edad, y además, uno de ellos era su hermano, y si algo malo le pasaba, sería ella la convertida en salchicha una vez que regresaran. 

Los dos simplemente arrojaron sus mochilas y los siguieron. 

Si este era un truco para robarse las mochilas en la montaña, básicamente todo sería solo ropa. 

La pendiente era muy baja, y Kou Chen se apresuró hacia la cima con unos par de pasos y vio hacia abajo solo trozos de hierba seca, algunos árboles dispersos, todos los cuales tenían una fea forma, tal como una hernia de disco lumbar. 

Había una persona vestida como un monje corriendo entre la hierba. 

—¡Maldita sea, detente ahí! —rugió Kou Chen, desde la parte superior de la pendiente, saltó, pisando alguna clase de suelo flotante, se deslizó hacia el suelo plano y continuó persiguiéndolo. 

—Mierda —Huo Ran no quería que Kou Chen lo persiguiera, pero por otro lado quería atrapar a esta persona y averiguar qué estaba pasando. O de lo contrario, todos ellos se sentirán inseguros en todo su viaje. 

No era tan hábil como Kou Chen, así que cuando bajó la pendiente, bajó con una postura semi agachada, deslizándose. Cuando comenzó a correr, miró hacia atrás, Kou Xiao y Lao Yang se deslizaron por la pendiente sentados.  

—¡Kou Chen, espérame! —Huo Ran continuó corriendo— ¡No te quedes solo! 

—¡Detente ahí! —Kou Chen ignoró por completo su pedido, estaba corriendo como si estuviera a punto de patearlo con su "¡Vuela por Laozi!", además, corría en medio de un suelo irregular, como si fuera un pista plana de 100 metros. 

¡Por qué jugaría al baloncesto con esta clase de velocidad! ¡Mejor debería presentarse al equipo de atletismo de la escuela!. 

Una tierra de cultivo se pudo ver a la distancia, pero el terreno en el que se encuentra era un terreno baldío, solo eran malezas y algunos arbustos con hojas caídas. Preocupado por el tipo extraño de ayer, Huo Ran miró hacia allí varias veces y se sintió un poco aliviado al no ver a nadie en el campo. 

—¡Aaaaaaah! —Exclamó una mujer por delante. 

—¡Kou Chen! —Rugió Huo Ran. 

—¡Ven! —Kou Chen también gritó. 

Huo Ran salió corriendo a la velocidad de un capitán de atletismo en un instante. Cuando llegó, vio que Kou Chen ya había derribado al eminente monje al suelo. 

El monje estaba luchando frénicamente en el suelo, agarrando la cara y el cuello de Kou Chen, como también pateándolo. 

Huo Ran se apresuró y primero sujetó las piernas del monje. 

Este monje estaba muy delgado, tan delgado que cuando apretó sus piernas, sentía que podía romperlas con un poco más de fuerza.  

—¡Ayuda! ¡No me mates! ¡No me mates! —Comenzó a gritar el monje: —¡Mamá! ¡Mamá! ¡mátame! ¡mátame!

—¡No te mataremos! —gritó Kou Chen— ¡No te mataremos! ¡Somos buenas personas! ¡Buenas! ¡Policía! ¡Somos la policía! 

Este monje detuvo sus movimientos, y de repente, Huo Ran vio claramente que era una mujer, ya que no era joven, parecía tener unos cuarenta años, su rostro estaba muy sucio y su cuerpo olía mal. 

Aquellos ojos llenos de confusión casi lo hizo sentir seguro, se trataba de una persona lunática, y ella debió ser la mujer que deambulaba por el campamento anoche.  

—¡Mamá está aquí! —Gritó Kou Xiao, corriendo— ¡Mamá está aquí!.

—¡Joder! —Kou Chen se tomó el tiempo para mirarla mientras el monje luchaba. 

—¡¿No estaban buscando una mamá?! —Preguntó Kou Xiao,  aún corriendo.

—...Sí —Kou Chen estaba aturdido. Después de que el monje le dio una bofetada en el cara, se enojó y se dio la vuelta junto con una primera reacción de enojo, rugiendo. 

Este monje no se calmó debido a Kou Xiao, era una mamá falsa, todavía luchaba de forma desesperada. Murmuraba indistintamente y cantó algunas líneas en el medio. 

Lao Yang sacó heroicamente la cuerda de su cintura: —Átala primero, no hay forma de que nos comuniquemos. 

Varias personas se unieron, incluso Kou Xiao, y que comenzaron a sacarse los cordones de sus pantalones. 

La escena era bastante miserable. 

Pero en este momento, no podían preocuparse por nada más, algunos simplemente presionaron a este monje y Kou Xiao le ató las manos y los pies con los cordones. 

Cuando alejaron sus manos, el monje finalmente se calmó, yaciendo inmóvil en el suelo y mirando hacia el cielo.