Capítulo 65

"¿Por qué no llamas a la Directora Xu mañana?" 

Antes de que Cheng Boyan dijera las palabras "tu suegra" Xiang Xi realmente no había pensado detenidamente sobre este tema. Su posición con la Directora Xu, la madre de Cheng Boyan, si tuviera que incluirse a sí mismo con un título, la palabra "suegra" apareció en su mente, junto con la palabra Directora Xu. 

Por supuesto, la palabra pasó en un instante y luego se vio perturbado por el hecho de que la anciana tía gorda, la llamó bajo una generación equivocada. 

Sin embargo, escuchar a Cheng Boyan decir "tu suegra", lo hizo volver al tema y regresó a sus sentidos. ¿Seguía existiendo este problema entre ellos? 

—¿Qué pasa? —Le preguntó Cheng Boyan con una sonrisa, mientras apretaba su espalda: —¿En qué piensas? 

—Su... —Xiang Xi de repente dudó en abrir la boca y miró a Cheng Boyan, sintiendo que se ofendería al decirlo: —Suegra. 

Cheng Boyan no dijo nada. Con un rostro serio, se concentró en apretarlo por un rato, antes de comenzar a reír y decir: —¿Suegra? 

—Sí, ¿Qué pasa con eso? —Xiang Xi lo miró fijamente, un poco molesto con su risa: —¡Por qué te ríes! ¡Aprieta bien! 

—De acuerdo —Cheng Boyan sonrió y apretó su cintura con cuidado. 

Xiang Xi no habló, se recostó en el sofá con los ojos cerrados y después de un rato, preguntó en voz baja: —¿Por qué no puede ser tu suegra? 

—¿Por qué no te recuestas en un rato y luego te digo porque es tu suegra? —Cheng Boyan metió su mano dentro de sus pantalones y le tocó el trasero. 

—¡No es necesario! No soy un tonto —Xiang Xi abrió un poco los ojos y lo miró de reojo: —No siempre pienses que no entiendo nada. 

—No entiendes, ¿acaso alguna vez has visto películas pornográficas...? —Cheng Boyan se rió a mitad de sus palabras: —No, ya has visto mis clips refrescantes. 

—Viejo desvergonzado... solo lo miré un par de veces —Xiang Xi chasqueó la lengua: —También puedo darme cuenta sobre lo que está pasando. 

—¿En serio? —Cheng Boyan también chasqueó la lengua: —¿De verdad hablas sin saberlo? yo conozco incluso noventa y ocho posturas.  

Xiang Xi cerró los ojos y se rió: —Solía pensar que yo era una persona descarada. Pero realmente, no esperaba que mi visión fuera demasiado estrecha...

Cheng Boyan apretó la espalda de Xiang Xi y luego fue a darse una ducha. Cuando salió, Xiang Xi todavía estaba acostado en el sofá con los ojos cerrados, pero no estaba dormido, tenía los brazos colgando en el sofá y rascaba el suelo con los dedos. 

—¿No está sucio? —Cheng Boyan frunció el ceño: —Lávate las manos. 

—No está sucio. Lo trapeas al día como ochenta veces, ¿Cómo puede estar sucio? —Xiang Xi continuó remando. 

—Mi abuela y mi tía ni siquiera se cambiaron de zapatos —Cheng Boyan se acercó y le dio una palmada en la espalda: —¡Ve a lavarte las manos! 

—Ya me duché, así que no necesito lavarme las manos, ¿verdad? —Xiang Xi abrió los ojos, pero aún se mantuvo acostado y no se levantó. 

—Ve a ducharte de nuevo entonces —Cheng Boyan levantó la cintura de sus pantalones y a la vez, levantó la mitad de su cuerpo del sofá: —Date prisa. 

—¡Oye, oye, oye! —Xiang Xi sintió asomar su trasero: —¡Me iré a duchar! ¡Sigue así y terminarás de destrozar la cintura de mis pantalones! 

Cuando Xiang Xi salió de la ducha, Cheng Boyan ya había recogido el plato de frutas de la mesa de café, viendo que la mesa de café había sido nuevamente limpiada. 

—Eres tan diligente —Xiang Xi entró al dormitorio: —¿También trapeaste el piso? 

—No —Cheng Boyan encendió la lámpara de la mesa y se apoyó en el pequeño sofá junto a él, leyendo un libro: —Como promesa, se trapea el piso una vez al día. 

Cuando entra al dormitorio todos los días, Cheng Boyan estaba apoyado en el pequeño sofá junto a la ventana y leyendo un libro, era como un paisaje, una clase de paisaje que hace que las personas se sientan a gusto. 

La cálida luz amarilla y cada vez que Xiang Xi veía a Cheng Boyan bajo esa luz, pareciendo muy inclinado cómodamente y con un libro abierto en la mano, sentía ganas de tumbarse a sus pies o frotarse contra sus piernas. 

—¿Qué número del acuerdo es ese? —Se apretó dentro de ese pequeño sofá y colocó sus piernas sobre las piernas de Cheng Boyan. 

—No lo recuerdo, lo escribiré bien cuando tenga tiempo —dijo Cheng Boyan mientras leía: —No uses el trapeador para trapear el piso, usa un papel especial de la cocina...

—¿No podemos usar agua y desinfectante? —dijo Xiang Xi. 

—Primero usa agua, luego rocía un poco de desinfectante, eso está guardado en el mueble debajo del televisor —Cheng Boyan explicó: —Después de rociarlo, limpia y también lava las suelas de los zapatos. 

—Oye, dijiste que nunca antes habías tenido una relación formal... un novio, ¿verdad? —Preguntó Xiang Xi. 

—Mm, ¿y qué? —Cheng Boyan lo miró. 

—Te lo digo, con todo este problema tuyo de misofobia, no es que alguien te menosprecie al final, sino que es posible que ni siquiera se atreva a mirarte —Xiang Xi frunció el ceño: —¿No es un poco agotador? 

—Algo —Cheng Boyan estiró los brazos detrás de él y abrazó su cintura: —Por lo que ahora es difícil encontrar a alguien quien se fije en mi, por lo que debo aprovechar. 

Xiang Xi se rió un par de veces, luego pensó y dijo: —No se notará si simplemente lo trapeo de la otra forma, ¿verdad? 

—¿Qué tal si lo intentas? —dijo Cheng Boyan. 

—¿Lo dices en serio? —Xiang Xi nunca ha trapeado el piso de esta manera en su vida, por lo que estaba un poco inseguro. 

—Habrán muchas gotas de agua si lo trapeas a tu manera. Después de que el piso se seque bajo la luz del sol, notarás después esas manchas —Cheng Boyan sonrió: —No se limpiará al final. 

—Yo... —Xiang Xi apretó los dientes y dijo: —demasiado increíble, ¿Es esto lo que te enseñó la Directora Xu? 

Cheng Boyan sonrió y no dijo nada. 

Pensando en la Directora Xu, Xiang Xi de repente recordó que acababa de conocer a una hermana...no, su suegra. Olvídalo, no importa si es su suegra o no, de todas formas acaba de conocer a la madre y familia de Cheng Boyan...

Pensando en esto, de repente se sintió nervioso otra vez. 

—Oye —le dio un codazo a Cheng Boyan: —¿Qué impresión crees que tiene la Directora Xu de mi? ¿Será mala? 

—Lo habría olvidado si no me lo hubieras dicho —Cheng Boyan colocó un marcapáginas en el libro y lo dejó a un lado: —¿Cuándo fue que defendiste a mi madre en la calle? Nunca me lo dijiste. 

—¿Ah? —Xiang Xi se congeló: —¿Ella dijo eso? 

—Solo lo mencionó y no pregunte nada a detalle —Cheng Boyan se rascó la cabeza: —¿Cuándo sucedió?

—Sucedió hace algún tiempo —Xiang Xi pensó por un momento y le dio unas palmaditas en la pierna: —¡De verdad, tu madre supo ocultarlo bien! Realmente no estaba seguro si ella me reconoció por ese día o si en parte siquiera me reconoció. 

Xiang Xi le contó a Cheng Boyan lo que pasó ese día: —Al final, vino la policía. Estaba tan asustado que quise darme la vuelta y huir...pero viendo la reacción de tu madre, ¿Qué crees que piensa ella sobre esto? Ese día dijo que no hablara de forma tan agresiva y que es un poco preocupante. 

—¿Maldijiste? —Cheng Boyan sonrió. 

—¿Y qué crees? No es como si hubiera estado delante de ti. No le presto mucha atención debido a la conmoción —Xiang Xi inclinó la cabeza: —¿Estoy condenado? 

—No —Cheng Boyan lo enganchó por el brazo y besó la comisura de su boca: —No estabas haciendo nada malo, solamente te comportaste así ayudando a los demás. Eso es una buena perspectiva para la vida, sólo tienes mala boca y con eso no podemos hacer mucho. 

—¿Y lo que pasó esta noche? —Xiang Xi frunció el ceño: —Traté a alguien como una anciana. 

—Ella es mi tía y no tienes que preocuparte por ella —Cheng Boyan se rió: —Oye, me dieron ganas de reír. Cuando lo recuerdo, de verdad me quiero reír. 

—Oye, no te rías. Yo... —Xiang Xi estaba muy ansioso, pero Cheng Boyan lo ignoró por completo y ya se estaba riendo. Pero mirándolo por un momento, también comenzó a reír: —no, soy bastante bueno juzgando a las personas. Inicialmente, pensé que la tía mayor debía tener aproximadamente la misma edad que la Directora Xu. 

—Espera un momento —Cheng Boyan se dio la vuelta y se rió salvajemente hacia la lámpara. Le tomó mucho tiempo darse la vuelta: —De ahora en adelante, mi tía mayor probablemente tendrá una sombra cada vez que te vea. 

—¿Qué debo hacer? —Xiang Xi frunció el ceño: —Pero para ser honesto, la personalidad de tu tía mayor es realmente desagradable. 

—No te preocupes, ella es así, siempre diciendo tonterías —Cheng Boyan acarició su muslo: —Incluso si realmente no le agradas, a nadie le importará su opinión. 

—Pero siento que le agrado a tu abuela —Xiang Xi sonrió: —¿Verdad? 

—Mm —Cheng Boyan asintió: —A la abuela le gustan muchos los chicos guapos...por lo que le agrada más si esa persona está en la vida de su nieto. 

—Mientras hablas de mi, ¿puedes calmarte? —Xiang Xi frunció el ceño: —Diciendo cualquier cosa y actuando descaradamente. 

—¿Acaso debería dejar de hablar? —Cheng Boyan lo cargo, envolviendo su piernas y se levantó, para luego arrojarlo sobre la cama: —A ella le gustan los chicos guapos como tú. 

Cheng Boyan apagó las luces, ajustó la temperatura del aire acondicionado y se acostó en la cama. 

Xiang Xi se frotó contra su cuerpo y cerró los ojos, oliendo su limpio olor a limón después de tomar una ducha: —Oye, ¿por qué no llamas a la Directora Xu mañana? 

—¿Por qué? —Cheng Boyan colocó su mano sobre su cintura: —¿Solicitando información? 

—Sí, ¿tú no quieres preguntar? ¿Qué es lo que piensa ella de mi? —Xiang Xi susurró: —No me siento cómodo y sigo pensando en esto. 

—Bien, la llamaré mañana —Cheng Boyan se giró y lo abrazó: —¿Hay alguna recompensa? 

—¿Por qué estás tan...? —Xiang Xi tomó la mano de Cheng Boyan, que tocaba sus pantalones: —¿No piensas dormir? 

—¿Tú puedes dormir? —dijo Cheng Boyan en forma de susurró a su lado: —Deberías estar en una edad en la que te colocas duro sin motivo alguno al caminar por la calle, ¿de verdad estás tan tranquilo? 

Xiang Xi no dijo nada. El susurró de Cheng Boyan en su oído parecía tener un poder mágico en todo momento, y este poder mágico le producían diferentes efectos según la situación. 

Lo calma cuando está ansioso, lo calma cuando está en pánico, lo calma cuando estuviera en problemas. Pero ahora...le haría tener pensamientos bastante locos. 

Aunque fue solo una vez, todavía recordaba claramente cada movimiento de las manos de Cheng Boyan sobre su cuerpo. Como también, recordaba la excitación y placer que nunca antes había sentido, y que era básicamente irresistible...

Un toque como una descarga eléctrica.

Un gemido ahogado que aterrizaba precisamente sobre un nervio sensible. 

Cuando la mano de Cheng Boyan se deslizó dentro de sus pantalones, tocó la parte inferior del abdomen de Cheng Boyan con su revés. 

Cuando el vientre firme y plano de Cheng Boyan se tensó ligeramente cuando lo tocó tan de repente, esta sutil reacción lo hizo respirar un poco más rápido. 

..... 

—¿No puedo ir a darme una ducha? —Xiang Xi yacía en la cama con los brazos y piernas extendidos: —Creo que estoy bastante limpio. 

—No —respondió Cheng Boyan sin pensar desde un costado, con las manos todavía tocando la cama y el cuerpo de Xiang Xi de un lado a otro. 

—¿Qué buscas? —Preguntó Xiang Xi. 

—No encontré nada —dijo Cheng Boyan: —Solo palpaba para ver si algo había quedado, ¿no me dejaste encender la luz? 

—Enciéndela —Xiang Xi se dio la vuelta y se acostó boca abajo: —De todos modos, no tengo nada de qué avergonzarme ahora. 

Cheng Boyan encendió al luz y revisó las sábanas: —No está sucia, ve a ducharte. 

—Ah... —Xiang Xi hundió la cara en la almohada: —No iré, estoy cansado y con sueño. 

—Deja de decir tonterías —Cheng Boyan rodeó su cintura con su brazo y lo arrastró fuera de la cama. Luego lo agarró del brazo con fuerza, medio arrastrándolo y medio abrazándolo lo sacó de la cama: —Te ayudaré a lavarte. 

—Ah... —Xiang Xi se colgó en él: —¿Por qué eres tan molesto...? 

Al entrar al baño, Xiang Xi se apoyó con la cabeza sobre la pared, Cheng Boyan ajustó la temperatura del agua y lo lavó con la boquilla de la ducha. 

Xiang Xi no quería ducharse, pero la temperatura del agua era muy cómoda y provocó que se sintiera relajado ahora que estaba siendo lavado. Suspiró: —No me mojes el pelo. No quiero lavarme el pelo, no me mojes el pelo. 

—La próxima vez, te lavaré la cabeza completa —Cheng Boyan acarició su espalda. 

—Loco —Xiang Xi inclinó la cabeza y entrecerró los ojos con una sonrisa: —¿y por qué? 

—Me correré en tu cara —dijo Cheng Boyan. 

—Oh, mierda —Xiang Xi realmente no pudo contener esta oración. Una de las especialidades de Cheng Boyan es que podía hablar con un rostro serio cosas desvergonzadas, sin sonrojarse ni reírse: —Me abofeteas y quieres hacerlo, ¿en qué clase de cosas piensas todo el día...? 

—Eso es todo lo que quiero decir —Cheng Boyan sonrió, se colocó detrás de él y besó su cuello: —Está bien, regresa a la cama. 

Xiang Xi sintió que su reloj biológico no se basaba en el tiempo, sino en si Cheng Boyan estaba presente. 

No importaba a qué hora se levantara Cheng Boyan por la mañana, podía sentirlo. Se despertaba tan pronto como sentía sus brazos vacíos y se despertaba aturdido, cuando Cheng Boyan iba al baño. 

—Come pan y leche esta mañana —dijo Cheng Boyan, tocándose las cejas: —¿De acuerdo? 

—Mm —Xiang Xi se apretó y se apoyó más a él: —¿Hay pan? ¿Es necesario comprarlo? 

—Solo ve a comprar los que venden en la planta baja —Cheng Boyan frotó sus brazos y se sentó: —Mañana haré mi propio pan, hace mucho que no uso la máquina para hacer pan. 

—¿Máquina de pan? puedo hacerlo —Siguió a Cheng Boyan y apoyó su cabeza sobre su regazo: —Dime cómo hacerlo y lo haré. 

—Compraré un poco de mermelada hoy, después del trabajo... —Cheng Boyan tiró un poco de su cabello un par de veces, colocó una almohada debajo de su cabeza y se levantó de la cama, como si no lo hubiera escuchado: —Duerme un poco más. 

Huevos, leche, pan. 

Cuando Xiang Xi se levantó, Cheng Boyan había preparado el desayuno y lo había puesto sobre la mesa del comedor. Después de lavarse, se sentó en la mesa y Cheng Boyan le trajo otro vaso, pero de jugo. 

—¿Mm? —Xiang Xi lo probó, era un vaso de jugo de mango: —¿Cómo hiciste esto? 

—Lo aprietas con las manos, lo cortas y le quitas el centro, lo metes en una bolsa de plástico, lo trituras con las manos, lo viertes y le agregas un poco de agua —dijo Cheng Boyan mientras comía pan. 

—Qué complejo... —Xiang Xi reaccionó a la mitad de lo que estaba diciendo: —¡Solo estás usando una máquina de jugo! ¡Casi te creí! ¿Por qué lo apretarías con las manos? No puedo creerte si viene de ti, tienes misofobia y no eres capaz de eso. 

Cheng Boyan se rió: —¿Cuál crees que sería el resultado? así también se hace el puré de papas. 

—Hoy volvamos a comer puré de papas —Xiang Xi pensó por un momento: —Ahora que tengo guardaespaldas, no debería haber ningún problema para salir, ¿verdad? ¿No está el supermercado al frente? 

Cheng Boyan lo miró: —Si tus guardaespaldas no están abajo, no salgas. 

—No hay problema —Xiang Xi chasqueó los dedos. 

. . .

Cheng Boyan terminó de desayunar, le explicó a Xiang Xi las precauciones para trapear el piso hoy y luego salió. Cuando bajó las escaleras, también notó que las guardaespaldas de Song Yi habían llegado y estaban de pie debajo de un árbol en el pequeño jardín, observando al anciano practicando Tai Chi.  

Tan pronto como lo vio salir, estas personas rápidamente se escondieron detrás del árbol. 

Cheng Boyan suspiró. Estas personas reclutadas por Song Yi, que no eran pandilleros, más bien gente valiente. Y tal como dijo Song Yi, si algo realmente sucedía podía encargarse de ello, pero lo más probable estas personas no puedan hacer nada. 

Es solo que estaba habilidad de seguimiento tan básico, puede que no dure mucho hasta que el tío Ping y su pandillas sean capturados, estas personas primero tendrán que ser arrestados por los guardias de seguridad de la comunidad. 

Cheng Boyan ha estado un poco ocupado estos dos días. El doctor Liu fue obligado a tomarse dos días libres para un examen completo y a descansar. Aunque no tiene que tomar el turno por él, hay muchos más pacientes de lo habitual en la clínica de Cheng Boyan. 

Originalmente, quería tomarse un tiempo para preguntar sobre la situación de Mantou, pero nunca encontró la oportunidad. Solo conversó con sus colegas de departamento durante el almuerzo. 

Dijeron que le iban a dar el alta del hospital por la tarde. Su colega bajó la cabeza, comió y dijo: —De hecho, en un caso así, una vez que ingrese al centro de detención estará mejor. 

Para Mantou esto se le puede considerar seguro, pensó Cheng Boyan mientras comía. Era difícil para el caso de Xiang Xi, si el tío Ping y los demás no son atrapados, no habrá día en que no se sienta aliviado. 

Cuando salió del trabajo por la tarde, vio el auto de la policía en la entrada. Pero cuando se acercó, el auto ya había arrancado y probablemente, vino a buscar a Mantou. 

—Boyan —Alguien lo llamó de pronto desde atrás. 

Esta era la voz de su madre, se giró sorprendido y vio a su madre de pie detrás de él: —¿Por qué estás aquí? 

—Vine a buscar los resultados de la pruebas de tu abuela, fueron dos papeles —Su madre sonrió: —¿Acabas de salir del trabajo? 

—Mm —Cheng Boyan asintió: —¿Por qué no viniste a verme a la clínica? No le pasa nada malo a la abuela, ¿verdad? 

—No planeaba ir a verte, solo te llame en cuanto te vi. —Su madre le entregó los resultado de su abuela: —No hay problema alguno, la cirugía está programada para principios del próximo mes. Debe controlar el nivel de azúcar en su sangre durante este tiempo y también, tú debes decirle a tu abuela que no sea codiciosa y que aguante por ahora. 

—La llamaré esta noche —Cheng Boyan sonrió: —¿Viniste aquí a pie? ¿te llevo? 

—Estoy conduciendo —Su madre miró el reloj que había en la pared: —¿Tienes prisa por regresar? si no tienes prisa, conversemos un poco. 

—De acuerdo, solo espera, que debo ir a cambiarme de ropa —dijo Cheng Boyan. 

Si su madre quería hablar con él, debería ser por Xiang Xi. 

Pero Cheng Boyan no podía adivinar el contenido de la conversación. Su madre nunca ha interferido demasiado en sus asuntos, como tampoco ha dicho mucho sobre su orientación sexual. Pero después de todo, esta era la primera vez que vivía con alguien en su casa, por lo que su madre probablemente se sentía incómoda. 

—¿Quieres buscar un lugar para sentarte? —Cheng Boyan se cambió de ropa y salió junto con su madre: —Hay un pequeño café al frente. 

—No voy a ir, sólo quedémonos en la calle por un rato —Su madre miró al otro lado de la calle: —No siempre vayas a esos lugares a comer y beber algo tan a ciegas. La nutrición...

—No lo hago, realmente no lo hago —dijo Cheng Boyan con una sonrisa: —Entonces, quedémonos aquí y conversemos. 

—Boyan —Su madre lo miró y enderezó el cuello de su ropa, que no había acomodado bien cuando se cambió de ropa: —Ese Xiang Xi, ¿Cuánto sabes sobre él? 

—¿En qué aspecto? —Preguntó Cheng Boyan. 

—¿Solo piensas conocer solo un cierto aspecto de tu novio y más con el que vives? —Su madre frunció el ceño y sonrió: —Por supuesto que en todos. 

Esta pregunta parecía muy simple. Si fuera otra persona, respondería fácilmente, pero para Xiang Xi, esta pregunta es realmente difícil de responder. 

La situación de Xiang Xi es demasiado complicada. Si le contara todo a su madre, sin mencionar que él realmente no entendía muy claramente algunas cosas, como la experiencia de vida Xiang Xi. 

Al final, eligió una respuesta muy al "estilo Cheng Boyan": —Ya sé todo lo que quiero saber. 

—¿De verdad? —Su madre lo miró: —Bien, esto lo puedes resolver por ti mismo. La verdad, solo quiero preguntar lo principal, ¿Xiang Xi acaso tiene antecedentes complicados? Su educación y entorno de vida deben ser diferentes a ti, ¿verdad? 

Cheng Boyan no dijo nada, conocía el problema de su madre sin decirlo explícitamente. Todo esto, significaba que su madre...no estaba muy satisfecha con Xiang Xi.