Capítulo 100

"Tu hermano no tiene novia"

Bian Nan escribió en el diario menos de 100 palabras, lo reescribió varias veces y revisándolo bien, y cuanto más escribía, más parecía el diario de un estudiante de primaria. 

Una hora más tarde, Qiu Yan terminó su tarea de vacaciones de verano el día de hoy, y Bian Nan pidió su diario, y acercándose a leerlo. 

[ Hoy hubo buen tiempo, no hizo demasiada calor. Mi hermano Bian Nan y yo fuimos a ver un partido de tenis a Zhanfei, el juego fue maravilloso, todos jugaron muy bien, especialmente los dos tíos que todos aplaudieron desesperadamente y mis manos se volvieron rojas. Creo que jugar al tenis es genial, y quiero jugar tenis en el futuro, solo haré que mi hermano Bian Nan me enseñe, pero no sé si tendrá tiempo, él está muy ocupado con el trabajo todos los días y mi hermano también está muy ocupado con su trabajo. ]

En el diario de Qiu Yan, se escribió cientos de palabras sobre el partido del tenis y sobre el trabajo de su hermano. Después de que lo leyó, Bian Nan sintió una necesidad de copiar el diario de Qiu Yan para hacer los números de palabras que le faltaban. 

Solo faltaban dos días para el cumpleaños de Qiu Yi y se tomó un tiempo de su apretada agenda para escribir, y solo iba a la mitad de la carta de amor. 

Que preocupante. 

Después de que Bian Nan ayudó a Qiu Yan a terminar de revisar la tarea el día de hoy, la puerta del patio sonó. Qiu Yan inmediatamente saltó del sofá, salió corriendo y gritó alegremente: —¡Mi hermano está de regreso! 

—Regresó, regresó —Bian Nan se estiró y se colocó lentamente de pie. 

Antes de que pudiera dar un paso hacia la puerta, luego escuchó nuevamente a Qiu Yan gritar en el patio: —¡Hola, yiyang-gege! 

—¡Maldita sea! —Cuando Bian Nan lo escuchó, gritó desde la casa: —¡Eres tan molesto Luo Yiyang!

—¡Vamos! ¡Vamos a comer! —Gritó Luo Yiyang en el patio. 

Bian Nan abrió la puerta y vio a Luo Yiyang de pie en el patio mirando alrededor, luego se acercó y asomó la cabeza dentro de la casa: —Esta casa no está mal, el ambiente es muy agradable y la planificación de este lugar costará mucho dinero. 

—¿Por qué está aquí? —Bian Nan miró fijamente a Qiu Yi, que estaba en cuclillas en el patio hablando con Qiu Yan

—No pude quitármelo de encima —dijo Qiu Yi. 

—¿No podemos comer juntos? —Luo Yiyang chasqueó la lengua y abrazó el hombro de Bian Nan: —Estuve corriendo junto con él toda la tarde y mi estómago está por desaparecer.  

—Entonces vete a tu casa y come —Bian Nan lo miró con los ojos entrecerrados.

—¿Entonces por qué tú no te vas a casa y comes? —dijo Luo Yiyang: —¡Quiero estar contigo! Me estoy sintiendo afectado. 

—¡Ahh! —Bian Nan suspiró impotente. 

—¡Yo invito! —dijo nuevamente Luo Yiyang. 

—No es necesario que invites —Bian Nan miró a Qiu Yi: —Vamos. 

Luo Yiyang pareció haber sido golpeado, él pensó que era fácil encontrar un lugar para alquilar una casa, pero después de correr toda la tarde, no pudo encontrar un lugar. 

—Realmente no esperaba que Qiu Yi fuera tan prolijo —Se acostó sobre la mesa y miró a Bian Nan que estaba estudiando el menú: —¿Cómo te las arreglas para tratar con él? 

—Porque soy más hablador que él —dijo Bian Nan: —¿Por qué piensas que es tan prolijo? 

—No quiero hablar más —Murmuró Luo Yiyang con tristeza.

—No se trata de solo alquilar la propiedad sin que importe el precio, el entorno o las condiciones, y las formalidades se pueden eliminar, todo eso se puede olvidar —Qiu Yi sonrió: —Queremos que este montón de cosas genere dinero en el futuro, no solo colocar todo como si fuera un estante, se debe tener en consideración el seguimiento. 

—Entendido —Luo Yiyang agitó su mano: —Entendido, te escucharé. 

—¿Has escrito tu tarea y el diario hoy? —Qiu Yi le dio unas palmaditas en la cabeza a Qiu Yan. 

—La escribí, Gran Tigre la revisó por mi —Qiu Yan abrazó su vaso de jugo y lo bebió: —Escribí dos páginas en mi diario. 

—Tan increíble, ¿Qué escribiste? —Qiu Yi sonrió. 

—Escribí sobre el partido de tenis que vi hoy —Qiu Yan sacudió las piernas: —Se vio muy genial. 

—¿Eh? —Luo Yiyang se enderezó cuando escuchó esto: —¿Hubo un juego hoy? ¿Qué juego? 

—En Zhanfei, ¿no te lo dijeron antes? fue un tipo de enfrentamiento interno —dijo Bian Nan: — Shi Jiang y Yang Xu se enfrentaron. 

—¿Ah? ¿Se enfrentaron? —Luo Yiyang se quedó atónito por un momento, y luego se deprimió: —Maldita sea, ¿y me lo perdí? ¡Sabía que no debí haber ido a ver lugares hoy! ¡Porque de todos modos no encontramos el correcto! ¡Y no pude verlos! 

—Su enfrentamiento fue maravilloso, Gu Wei los grabó si quieres verla —Cuando Bian Nan pensó en este enfrentamiento, también estaba muy emocionado. Sería genial si él y Qiu Yi puedan jugar así una vez, en diez años. 

—Todavía me siento deprimido, hubiese sido interesante ver aquella escena —Luo Yiyang suspiró: —Olvídalo, iré mañana y podré jugar contigo. 

—No —dijo Bian Nan sin pensarlo: —Estoy muy ocupado ahora y la clase de los niños pronto terminará. Todavía en estos días debo seguir con los emparejamientos y engañar a las personas para que continúen tomando las clases en estos últimos días.

—Yo jugaré contigo —Qiu Yan de pronto levantó la cabeza y dijo esto. 

—¿Tú? —Luo Yiyang quedó atónito. 

—Mm, puedo responder —Qiu Yan asintió: —pero no tengo raqueta. 

—Está bien, lo tengo —Luo Yiyang inmediatamente se interesó: —¿Una raqueta para niños? ¡Zhanfei lo tiene, lo conseguiré por ti! 

Qiu Yan se volvió para mirar a Qiu Yi: —Hermano, ¿está bien? 

—Mm, está bien —respondió Qiu Yi, Miró a Bian Nan, pero Bian Nan no emitió sonido alguno, ambos solo reprimieron la risa. 

—Entonces está arreglado, te recogeré por la mañana ¿de acuerdo? —Luo Yiyang miró a Qiu Yan. 

—Está bien —dijo Qiu Yan con un rostro serio. 

El día siguiente, justamente cuando Bian Nan salió del dormitorio y fue a un lado del campo a esperar a que llegaran los estudiantes, vio a Qiu Yan que estaba jugando al tenis en la cancha junto a él. 

—¡Erbao! —Bian Nan corrió hacia la red y lo llamó. 

—¡Gran tigre! —Qiu Yan también se apresuró, agarrando la red protectora: —¿Por qué llegaste tan temprano? quería llamarte, pero Luo Yiyang dijo que aún no te habías despertado. 

—Me acabo de despertar, es muy temprano para ustedes dos —dijo Bian Nan con una sonrisa, preguntándose si Luo Yiyang sufrirá un golpe cuando él y Qiu Yan jueguen. 

—Fue a mi casa temprano por la mañana —Qiu Yan saltó: —Ven aquí, ¿de acuerdo? hablar así es como si estuviéramos en la cárcel. 

Bian Nan caminó con una sonrisa y fue a abrazar a Qiu Yan: —¿Ya desayunaste? 

—Desayuné —Qiu Yan asintió y sacó una pequeña bolsa de papas fritas de su bolsillo: —¿Quieres papas fritas? 

—No quiero comer, ¿Dónde está Luo Yiyang? —Bian Nan miró a su alrededor, pero no vio a Luo Yiyang. 

—Fue a buscar la raqueta, pero ve a trabajar y no es necesario que me hagas compañía —dijo Qiu Yan como un pequeño adulto. 

—Está bien —Bian Nan vio que Gu Wei se acercaba, así que señaló la cancha del otro lado: —Estoy justo al lado de esta cancha, si necesitas algo, ve a buscarme. 

Cuando Bian Nan ayudó a Gu Wei a llevar la máquina de pelotas a la cancha, Luo Yiyang ya había traído una raqueta para Qiu Yan, y ambos estaban en cada extremo de la cancha, listos para jugar. 

—¿Nadie ha jugado hasta este punto con el segundo joven maestro? —Gu Wei miró hacia allí: —¿Ese pequeño no es el hermano de tu amigo? 

—Mm —Bian Nan se rió: —No sé lo que está pensando. 

Qiu Yan estaba sosteniendo la pelota, y le dio unos pequeños golpes con la pelota. 

Luo Yiyang vio esa postura e inmediatamente adoptó una postura de caballo muy cooperativamente. 

Qiu Yan lanzó la pelota con la calma, levantó el brazo y agitó la pequeña raqueta, y la pelota fue servida muy maravillosamente. 

—Por supuesto —Gu Wei chasqueó la lengua: —¿Cuánto tiempo ha estado aprendiendo? 

—No lo sé, solo hemos jugado un par de veces —dijo Bian Nan. 

Luo Yiyang atrapó la pelota con bastante facilidad, y probablemente para probar la fuerza de Qiu Yan, le devolvió la pelota a Qiu Yan. 

Qiu Yan sostuvo la raqueta con ambas manos y se balanceó hacia la pelota. 

Golpeando el vacío. 

Luo Yiyang quedó atónito por un rato: —Está bien, vamos de nuevo. 

—¡Mm! —Qiu Yan asintió, corrió recoger la pelota y se preparó para servir nuevamente. 

Bian Nan no podía dejar de divertirse desde su lado, y ocupándose de las cosas mientras se divertía. Los estudiantes llegaron uno tras otro, y él dispuso que todos corrieran para calentar. 

Tan pronto como salió de la cancha, y estaba a punto de correr algunas vueltas junto con todos, escuchó a Luo Yiyang gritarle: —¡Bian Nan! 

—¡¿Qué pasa?! —Gritó Bian Nan con una sonrisa.

—¡Ven aquí! —Luo Yiyang lo señaló. 

—No hay tiempo, ¿no me ves ocupado aquí? —Bian Nan pasó corriendo a un lado de la cancha: —¡Juega bien Erbao! 

—¡Está bien! —respondió Qiu Yan en voz alta. 

—¡Por qué no me dijiste ayer que solo aprendió a servir! yo pensé que... —Luo Yiyang gritó dos veces y vio a Bian Nan huir sin mirar atrás, señalándolo: —¡Detente ahí! 

La mayor ventaja de Qiu Yan es que no importa si lo lástimas o si estás molesto con él, realmente no podía decir si era realmente estúpido o fingía no entender. 

Aunque Luo Yiyang estaba extremadamente insatisfecho con el nivel de Qiu Yan, pero Qiu Yan no pareció sentirlo en absoluto y se tomó en serio manejar la raqueta, sirviendo y atrapando la pelota una y otra vez. 

Los dos siguieron jugando hasta que Bian Nan se tomó el descanso del mediodía, antes de detenerse. 

La ropa de Qiu Yan estaba empapada de sudor, Bian Nan le tocó la cabeza y solo tocó agua con su mano. 

—Maldita sea, ¿Ustedes dos salieron a nadar? —Bian Nan tomó su propia toalla y limpió de un lado a otro la cabeza, la cara y el cuerpo de Qiu Yan: —¿Estás cansado? te llevaré al dormitorio para que te duches en un rato. 

—¡Fue tan divertido! —Qiu Yan estaba muy emocionado, pero probablemente estaba demasiado cansado, así que simplemente se apoyó en la pierna de Bian Nan y dijo esto. Aún hablando y saltando en signo de descansar. 

—¿Qué te pareció? —Bian Nan miró a Luo Yiyang, quien se acercó y se sentó en la silla. 

Luo Yiyang suspiró: —Quiero llorar, pero no tengo lágrimas. 

—Gracias por jugar conmigo, aunque no juego muy bien —Qiu Yan volvió la cabeza y le dijo a Luo Yiyang, para luego darse unas palmaditas sobre su bolsillo: —Te compraré agua más tarde, mi hermano me dio diez yuanes. 

—¡No, no! ¡Jugaste bien! —Luo Yiyang agitó las manos rápidamente: —Tú eres el que jugó conmigo, por lo que te invitaré a ti y a Bian Nan más tarde a cenar. 

Bian Nan sonrió y los llevó a ambos al dormitorio a tomar una ducha. Qiu Yan es así, con una mirada lamentable y linda cuando pestañeaba, no sabiendo si estaba siendo sincero o no, pero nadie podrá enojarse con él, y no se sentirá como un ser humano si llegas a lastimar el corazón de este niño. 

Al mediodía, Luo Yiyang los invitó a ambos a comer. Antes de que se terminara la comida, inexplicablemente se sintieron atraídos y acordaron enseñarle a Qiu Yan a jugar. 

—Mi hermano no sabe jugar, —Qiu Yan comió un bocado de arroz: —y Gran Tigre está ocupado con el trabajo. 

—Yo no estoy ocupado —Luo Yiyang miró a Bian Nan con confusión. 

La cancha estaba llena por la tarde, Luo Yiyang llevó a Qiu Yan a un lado para jugar contra la pared de practica. 

Bian Nan organizó el entrenamiento y estaba a punto de llamar a Qiu Yi, pero su teléfono sonó y era Qiu Yi. 

—Nuestros corazones conectados —Contestó el teléfono. 

—Recogeré a Erbao en un rato —dijo Qiu Yi con una sonrisa: —Había un lugar que quería visitar por la tarde, así que lo recogeré e iré a comprobarlo.  

—¿Y también con Luo Yiyang? él jugó con Erbao toda la mañana —Cuando Bian Nan pensó en esto, se sintió feliz. 

—Deja que Erbao lo siga lastimando, —dijo Qiu Yi: —Y no le digas nada, ¿puedes salir por cinco minutos? come algo conmigo primero, es aburrido comer solo. 

—¿Todavía no has comido? —Bian Nan frunció el ceño cuando escuchó esto, e hizo un gesto hacia Gu Wei, diciéndole que iba a salir por unos minutos, para luego irse trotando hacia la puerta: —Hay un bibimbap [1] es la esquina de nuestra calle, es bastante bueno, iré directamente allí y ordenaré por ti. 

Cuando llegó Qiu Yi, la comida ordenada por Bian Nan estaba sobre la mesa. Cuando llegó a Qiu Yi, tan pronto como se sentó, Bian Nan empujó la comida frente a él: —Date prisa y come. 

—¿No quieres comer? —Qiu Yi sonrió: —Pareciera que ambos somos tan pobres que tenemos que compartir el uno con el otro. 

—Que romántico —Bian Nan chasqueó la lengua dos veces: —Piénsalo, somos tan pobres que solo podemos comer una olla de arroz, todavía pegados el uno al otro y negándonos a separarnos. 

—Oh vamos, si somos tan pobres, nos acuclillaremos en casa temprano por la mañana y comer fideos, ¿Cuánto crees que cuenta unos fideos hecho a mano? —Qiu Yi lo miró: —Joven maestro, nunca has sufrido y sigues viéndolo tan románticamente, pero si te gusta esto, ven a mi casa esta noche y te preparé bibimbap con salsa de soja. 

—¡Eres tan molesto! —Bian Nan frunció el ceño. 

—¿Quieres que comparta la mitad contigo? sé romántico —Qiu Yi tomó una cucharada de arroz: —¿Por qué mejor no te doy de comer? evitamos un desperdicio de esa manera...

—¡Demasiado loco! Vamos, come rápido —Bian Nan se apoyó en el respaldo de la silla y se palmeó el estómago con impotencia: —Acabo de comer, Luo Yiyang nos invitó y si hubiera sabido que no comiste, se hubiera llevado a Erbao a comer y te esperaría. 

—Has reducido tu apetito recientemente —dijo Qiu Yi mientras comía: —Podías comer luego de haber comido una comida antes. 

—La cantidad de ejercicio han disminuido. Solía entrenar todos los días y no estaba lleno desde el desayuno hasta la noche —Bian Nan se pellizcó la cintura y el estómago varias veces: —Me preocupa que tarde o temprano mis músculos serán cubiertos por grasa. 

—¿No corres con los estudiantes todos los días? —dijo Qiu Yi. 

—¿Puede ser lo mismo? No es suficiente correr con los estudiantes un kilómetro, y algunas personas piensan que engañando con dinero, pueden jugar sin la necesidad de correr —Bian Nan parecía disgustado: —Pero mételos dentro de la escuela deportiva durante una semana y sabrán lo que es entrenar. 

—Entonces, ¿Qué deberías hacer? ¿Qué tal ir con Wan Fei para obtener una tarjeta? —Qiu Yi sonrió y tomó un sorbo de la sopa. 

—Él me estaba rogando dándome una tarjeta, llorando y diciendo "Nan-ge, ven aquí y practica" —Dijo Bian Nan imitando la voz de Wan Fei: —No tengo tiempo para ir al gimnasio. Te enseñaré a jugar después de haber estado ocupado en los últimos dos meses, aumentaré la cantidad de entrenamiento para ti, y por cierto, practicaremos seriamente. 

—¿Hablas en serio? —dijo Qiu Yi impotente: —Te prometo que no me convertiré en un hombre blanco gordo, ¿de acuerdo? 

—No, ¿Entonces yo me convertiré en un hombre oscuro gordo? —dijo Bian Nan. 

—Entonces me convertiré en un hombre gordo para hacerte compañía —Qiu Yi infló sus mejillas: —No debería verme mal. 

—Piérdete —Bian Nan se rió: —Ni lo pienses, siempre he pensado que ambos nos vemos guapos estando juntos, pero si somos dos gordos, nuestros colores se verían mal, y da miedo pensar en eso. 

Después de que Qiu Yi terminó su comida, los dos salieron del restaurante. Qiu Yi compró una bolsa de duraznos en el puesto de frutas al borde de la calle: —Llévales un poco a Gu Wei y Luo Yiyang en un rato. En un tiempo, las uvas en el patio deberían estar ya maduras, así que recuerda llevarles algunas, no podremos con ellas nosotros. 

—Mm, tan preocupado que eres —Bian Nan tomó un durazno y le dio un gran mordisco: —Dulce. 

—Te diré algo, así que tienes que estar mentalmente preparado —Qiu Yi lo miró. 

—Dilo, mientras no signifique terminar conmigo, podré soportarlo —dijo Bian Nan mientras comía. 

—Quiero decírselo a Erbao en mi cumpleaños —Susurró Qiu Yi. 

—¿Q...Qué? —Bian Nan de repente recobró un poco de sentido después de preguntar, e inmediatamente se colocó nervioso: —¿Sobre nosotros? 

—Mm —Qiu Yi asintió: —Creo que es un buen día. 

—Nada mal, está bien —Bian Nan lo detuvo: —Que tengas un buen cumpleaños, arruinando el ambiente. 

—Para el cumpleaños Erbao debería estar feliz, y es mi cumpleaños. Creo que es alguien bastante sensato, si hay algo que lo haga infeliz, es capaz de decírmelo a la cara —dijo Qiu Yi en voz baja. 

—Joder, ¿No dijiste que Erbao no sabe expresarse bien? tiene poco contacto con estas cosas y tampoco tiene un concepto especifico —Bian Nan lo miró fijamente: —Ahora dime la verdad, tú también tienes miedo. 

—Tendré cuidado —Qiu Yi sonrió. 

Bian Nan pensó durante mucho tiempo, para luego apretar los dientes: —Está bien, díselo, en el peor de los casos, Erbao me regañará. 

De regreso en Zhanfei, Bian Nan cargó a Qiu Yan y salió. 

—Puedo caminar solo, no estoy cansado —Qiu Yan puso sus brazos alrededor de su cuello y se acomodó sobre sus hombros: —Las personas pensarán que soy demasiado aprensivo si me abrazas así. 

—Quiero abrazarte —Bian Nan sonrió: —Erbao, ¿sabes cuánto me gustas? 

—Lo sé —Qiu Yan sacudió sus piernas: —Sé que te gusto mucho, porque tu hermana menor no es tan linda como yo. 

Bian Nan se divirtió y se rió durante mucho tiempo: —Mm, solo quiero tener un hermano menor como tú y una hermana menor también es posible, pero desafortunadamente no tengo una como tal. Realmente me gustas mucho, como si fueras mi propio hermano menor. 

—¡Mm! —Qiu Yan asintió vigorosamente: —También me gustas, ahora tengo dos hermanos mayores. 

—Hablas bien —Bian Nan lo besó, salió por la puerta y lo bajó. 

En el cumpleaños de Qiu Yi, Bian Nan originalmente solo le preocupaba la carta de amor, pero ahora había otra cosa. Obviamente esto era mucho más preocupante que una carta de amor. 

Aunque pensaba que Qiu Yan debería ser capaz de aceptar esto, pero, ¿y si él no lo acepta? 

Bian Nan de repente sintió un poco de miedo al pensar en esto, realmente le gustaba mucho el bollo Qiu Yan, y si Qiu Yan comenzaba a ignorarlo a partir de ahora, cree que su preocupación incluso no lo dejará dormir por la noche. 

Sin mencionar que en caso Qiu Yan lo ignorara, aún sin haberle dicho nada, no durmió durante dos días consecutivos y debido al insomnio, básicamente terminó de escribir la carta de amor, siendo sus palabras largas y enredadas. 

Pensó que sería bueno poder jugar a los hooligan en su cumpleaños por la noche, pero ahora, ni siquiera tenía tiempo para pensar y pedirle a Qiu Yi que use el lubricante esta vez. 

El cumpleaños de Qiu Yi no fue un fin de semana, ambos tenían que trabajar y Shen Tao iba a recién a desembarcar del barco en días más, y ese día resultó ser el fin de semana. Así que primero decidieron celebrarlo solos y luego llamarán a todos los amigos el fin de semana. 

Bian Nan compró un regalo por adelantado, una raqueta de tenis y verde, a Qiu Yi le gustará. 

Pidió un pastel en la tienda que estaba al lado de Zhanfei al mediodía ese día y la chica le recomendó hacer uno, y estaba realmente bien hecho. 

Hizo que alguien le escribiera en el: "Feliz cumpleaños gordo Qiu". 

Por la tarde, salió del trabajo media hora antes, tomó el pastel y tomó un taxi hasta la casa de Qiu Yi. 

Qiu Yan ya había regresado a casa. Esta vez, su regalo para Qiu Yi era un pequeño cenicero que aprendió a hacer con latas de Coca-Cola en la escuela, después de haberse cortado y quería dárselo. Cuando Bian Nan llegó, estaba sosteniendo el cenicero y tratando de atar un lazo con tiras de colores. 

—¡Gran tigre! —Qiu Yan saltó de la silla y fue hacia su lado: —¡El pastel está aquí! 

—Colócalo en el refrigerador —Bian Nan le entregó el pastel y caminó hacia la mesa: —¿Qué clase de estilo estás usando? 

—Siempre termina torcido, lo ato y terminó torcido. ¡No puede quedar derecho! —Gritó Qiu Yan desde la cocina. 

—Eres demasiado tonto —Bian Nan lo ayudó a atar el lazo nuevamente: —¿Deberías esconder esto primero? 

—Mm —Qiu Yan guardó el pastel, salió corriendo y llevó el cenicero hacia la habitación trasera y colocándolo bajo la almohada. 

Bian Nan entró y echó un vistazo: —Realmente lo colocas aquí todos los años, eres tan poco creativo.

—¿Qué pasa si se me olvida si lo coloco en otro lugar? —dijo Qiu Yan. 

Bian Nan se rió: —¿Eres un pez? 

Qiu Yi también regresó un poco más temprano hoy, y cuando entró al patio, llevaba una bolsa de verduras en la mano, como también, una bolsa que contenía un montón de regalos envueltos. 

—Que gran cosecha, ¿Quién te las dio? —Bian Nan tomó la bolsa y miró dentro, habían cajas grandes y pequeñas. 

—Es un regalo de su novia —Dijo Qiu Yan mientras miraba dentro de la bolsa: —Muchas novias. 

—Ese eres tú —Bian Nan le entregó las bolsas: —¿Quieres abrirlas para tu hermano? 

Qiu Yan corrió hacia debajo de la pérgola de uvas y sacó todas los regalos de la bolsa, tomando una caja rosa: —Esta es la más grande, este es el regalo de su novia. 

—Erbao —Qiu Yi llevó los platos a la cocina, y cuando salió, sonrió cuando escuchó esto, caminando hacia Qiu Yan: —Tu hermano no tiene novia. 

—¿Por qué? el hermano de otra persona tiene novia estando en escuela secundaria —Qiu Yan abrió cuidadosamente la caja: —¿Por qué nunca has tenido novia? 

—Sí, ¿Por qué? —Qiu Yi miró a Bian Nan, tomó un taburete y se sentó junto a Qiu Yan: —¿Quieres saber por qué? 

—Quiero —Qiu Yan se giró para mirarlo. 

Bian Nan estimó que Qiu Yi quería hablar de eso después de comer pastel, pero ahora que Qiu Yan ha hecho tal movimiento, parecía un buen momento y Qiu Yi también tenía la intención de hablar sobre este tema ahora. 

Pero cuando se sentó en el patio con tanto orgullo, y planeó comenzar a hablar, Bian Nan de repente de puso nervioso. Sería problemático para cualquier vecino agudizara los oídos al escuchar y no importaba cuán buenos sean los vecinos, es posible que no puedan aceptarlo 

Se acercó y le dio un empujón a Qiu Yi: —Ve a la casa y habla allí. 

—Entonces entra a la casa y hablaré —Qiu Yi sonrió, se levantó y entró a la casa. 

Qiu Yan lo siguió dentro de la casa, asomando la cabeza nuevamente: —¿No escuchará, Gran tigre? 

—No escucharé —Bian Nan se sentó: —Sé por qué. 

—Oh —Qiu Yan asintió.

Bian Nan vio a Qiu Yan entrar a la casa, sintiéndose un poco incómodo en el corazón. Se aclaró la garganta, chasqueó los dedos y tarareó en voz baja. 

Es la canción con la que Qiu Yi, las hermanas y las tías mayores compitieron la última vez. Quien se enteró que ganaron el tercer lugar. 

Vengo de la pradera, calienta tu corazón.

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[1] El bibimbap es esto: