Capítulo 51: Testamento

Tan Ye había hecho este tipo de cosas no más de una o dos veces, ya que Jiang Ran solía avergonzarse demasiado, pero ahora sentía que esto era normal. 

Lo único que lo hacía dudar es que ahora estaban en un lugar público. 

Pero Jiang Ran no creía que esto era algo malo, solo le gustaba un chico, que no era diferente a los demás. 

—Ten cuidado con las caídas —Recordó Jiang Ran. 

—No eras así antes —Tan Ye suspiró, bromeando: —Ahora eres mucho más valiente. 

Los labios de Jiang Ran se elevaron un poco. 

La vida que ha estado viviendo en la escuela secundaria Yizhong era completamente diferente a su vida anterior en una escuela privada, como también sus hábitos de llevarse bien y otras cosas más, todo se vio influenciado por ellos. 

Se podía decir que era un gran cambio. 

—¿Qué pasa si hay alguien aquí que nos reconozca? —Jiang Ran de pronto pensó en esta pregunta: —Por ejemplo, compañeros de la clases de la escuela. 

—No te preocupes —dijo Tan Ye. 

Tan pronto como estas palabras se dijeron, Jiang Ran vio un par de figuras familiares en la entrada opuesta por el rabillo de su ojo. Era Zhang Lihua y algunos compañeros de la clase dos de al lado. 

—¡Mira!. 

—¿Qué debo mirar?. 

Tan Ye siguió la dirección de Jiang Ran y frunció ligeramente el ceño: —Que casualidad, he venido muchas veces antes y no me lo había encontrado. 

"......"

Jiang Ran pensó para sí mismo, ¿acaso esto es lo que llamaban una bofetada en la cara?. 

Pensó que no era nada en particular, ambos estaban un poco lejos de la entrada y además, hay muchas personas, llevaba algo grueso y de esa forma era difícil que los vieran. 

—¿Ese es Tan-ge?. 

Zhang Lihua no estaba muy familiarizado con la espalda de Jiang Ran, después de todo, solo fue un semestre. Pero estaba muy familiarizado con Tan Ye. 

La persona a su lado lo miró dos veces y dijo con cierta duda: —De ninguna manera, ¿Crees que Tan Ye saldría tan seriamente con alguien?. 

Zhang Lihua pensó que tenía sentido sus palabras. 

Pero al momento siguiente, volvió a hablar: —No es tan así, Tan-ge trata muy bien a su compañero de asiento ahora. 

A pesar de lo que dijo, ambos rápidamente lo olvidaron y se sumergieron entre la multitud. 

La pista de patinaje era enorme, así que Jiang Ran y Tan Ye no fueron divisados.

En invierno, la mañana pasaba lentamente. Además, la hora de comer al mediodía no había cambiado, por lo que no había mucho tiempo para divertirse. 

Hubo varias oleadas de personas entrando y saliendo muy rápidamente de la pista de patinaje. 

Jiang Ran vio a muchas personas que no sabía cómo patinar, algunas practicaban con sus novios, pero varios se cayeron los dos juntos. 

Con tal comparación, Tan Ye era alguien muy estable. 

¡Jiang Ran estaba orgulloso de que su novio pueda hacer cualquier cosa!. 

Ambos jugaron en la pista de patinaje toda la mañana, y a las once en punto la pista de patinaje se había llenado de personas, así que se cambiaron de zapatos y regresaron a comer.

Probablemente habrá más personas aquí por la tarde. 

Después de comer al mediodía, Jiang Ran no continuó hablando mucho con Tan Ye, en cambio, los dos decidieron escribir juntos los dos exámenes que se dejaron como tarea para estas vacaciones de invierno. 

Por supuesto, se besaron unas cuantas veces más en el camino. 

Jiang Ran regresó a casa por la noche del día siguiente.   

La tía Sun era la única en casa, había sido avisada antes y salió de la cocina: —En unos minutos más estará listo. 

Jiang Ran preguntó: —¿Mi madre no regresó?. 

—No, la señora dijo que estaba muy ocupada esta noche —Temiendo de que pudiera malinterpretarlo, la tía Sun se apresuró a agregar: —Se trata de la empresa. 

Está bien si no se trata de Lu Yuan. 

Jiang Ran había estrangulado hace unos días a Lu Yuan, así que desde el Año Nuevo no había aparecido por la casa. Esto era realmente bueno. 

Debió haber sido así antes. 

Pero ambos aún así no han terminado y Jiang Ran realmente no sabía qué tenía y por qué a Lu Min le gustaba tanto. 

—¿Cómo te has sentido, Joven maestro, en estos dos días? —La tía Sun vio que su expresión no era muy buena, por lo que cambió rápidamente de tema. 

—Bien. 

La expresión en el rostro de Jiang Ran se volvió feliz, como si quisiera decir mucho, pero al final solo esta palabra salió. 

Probablemente aprender y estar con Tan Ye, eran la dos cosas por las que se sentía feliz ahora. 

La tía Sun no hizo más preguntas cuando lo vio. 

Jiang Ran subió rápidamente las escaleras y luego no puedo esperar para llamar a Tan Ye: —¡Estoy en casa!. 

Nunca pensó que sería tan pegajoso. 

Jiang Ran era así cuando era niño, siempre con su padre, nunca con Lu Min. Pero después ocultó esta forma de actuar. 

Hasta ahora. 

A veces, Jiang Ran se preguntaba si esto podría ser malo, pero Tan Ye parecía disfrutarlo mucho, le gustaba mucho. 

Había armonía arriba, pero alguien de pronto abrió la puerta en el piso de abajo. 

La tía Sun volvió a salir de la cocina y se sorprendió un poco al ver que Lu Min había regresado temprano: —Señora, ¿no dijo que iba a regresar tarde?. 

Lu Min se frotó la frente: —Se acabó temprano. 

La tía Sun sabía que solo era una ama de llaves, así que no se preocuparía en nada además de su trabajo, así que se dio media vuelta para irse a la cocina. 

De repente recordó algo y giró la cabeza. 

Jiang Ran ya estaba arriba, por lo que la tía Sun bajó la voz para recordarle: —Señora, mañana es el cumpleaños del joven maestro. 

Aunque no sabía si Lu Min lo sabía o no, sintió de todas maneras que debía recordárselo. 

Si una madre ni siquiera recordaba el cumpleaños de su hijo, sería un poco escalofriante esto. 

Especialmente porque su relación originalmente no es muy buena. 

Lu Min se sorprendió un poco, como si hubiera recordado la fecha dentro de su memoria y dijo: —Ya veo. 

Al escuchar esto, la tía Sun suspiró para sus adentros. 

Obviamente, bajo este ritmo significaba que fue capaz de olvidarlo. Afortunadamente, Jiang Ran no estaba aquí o de lo contrario, se iba a entristecer al escucharla. 

Ella no era Lu Min, pero no entendía cómo un niño con tal buen comportamiento, tuviera una madre con esa clase de mentalidad, un poco deformada. 

La tía Sun de repente recordó la llamada que recibió ayer. 

El abogado no dijo mucho en ese momento, solo preguntó específicamente sobre el cumpleaños de Jiang Ran, obviamente había algo que decir en relación a esto. 

Temía que el ambiente de la familia Jiang no iba a ser tan pacífica.

Jiang Ran fue capaz de olvidar su propio cumpleaños al día siguiente. 

Probablemente esto es lo que sucede a muchas personas, probablemente lo recordaba hace dos días, pero cuando llega el día de su cumpleaños lo olvidaba. 

El plan de Jiang Ran el día de hoy era escribir los exámenes en casa.

Aunque las vacaciones de invierno eran cortas, no habían muchas tareas asignadas por la escuela, pero habían muchos exámenes dadas por cada tema.   

Cuando bajó las escaleras para verter agua en un vaso, la casa estaba vacía como de costumbre. 

Lu Min debió haber ido a trabajar y la tía Sun debió haber ido de compras. 

Jiang Ran sostenía un vaso con agua y estaba a punto de volver a subir, cuando escuchó sonar el timbre de la casa, así que se acercó hacia una pantalla y se quedó desconcertado por un momento. 

Tenía una vaga impresión de la personas que se veía en esa pantalla. 

Jiang Ran lo vio de manera ocasional cuando era niño, y su padre también, antes de que falleciera. Pero había pasado demasiado tiempo y no lo había visto en casi diez años. 

¿Por qué el tío Li venía a la casa tan de repente?. 

Jiang Ran dejó su taza y salió a recibirlo: —Tío Li. 

El hombre de traje y zapatos de cuero estaba de pie en la puerta de la casa, con un bolso de documentos en la mano. Sonrió levemente: —¿Todavía me recuerdas?. 

Jiang Ran dijo: —Por supuesto que te recuerdo. 

—Eso es bueno —dijo Li Chenwei: —Entremos y conversemos, hay algo que se debe hablar hoy. No estabas en casa cuando llamé hace dos días. 

Jiang Ran sabía sobre esto, la tía Sun se lo mencionó. Pero no pensó mucho en eso. 

Después de muchos años, Li Chengwei volvió a entrar a la casa de los Jiang, fue directo al grano y colocó directamente el bolso de documentos: —Ve este asunto. 

Jiang Ran sospechaba, pero aún así lo tomó. 

No habían muchos documentos adentro, grandes y pequeños papeles. Las primeras palabras captaron claramente sus ojos. 

La sala de estar estaba inquietamente silenciosa. 

Li Chengwei solo abrió la boca cuando estaba a la mitad de las páginas: —Solo tu padre y yo sabíamos sobre este asunto, tu madre no lo sabe.  

Jiang Ran casi lo soltó: —¿Por qué me lo dices ahora?. 

—Porque estaba esperando a que fueras un adulto. 

La razón era tan simple. 

Jiang Ran nunca pensó en tal cosa. Estaba acostumbrado a la relación que existía con Lu Min, pero nunca esperó que hubiera un testamento para su cumpleaños. 

Esto era un regalo o algo así...

Cuando la tía Sun regresó, vio a Jiang Ran sentado en la sala de estar y dejó la cestas de verduras que llevaba en las manos:  —¿Qué pasa?. 

Nadie le respondió después de mucho tiempo.

La tía Sun se sobresaltó: —¿Estás bien?. 

Después de un largo rato, Jiang Ran levantó la cabeza y respondió en voz baja: —Estoy bien. 

¡Obviamente algo andaba mal!. 

La tía Sun le hizo la misma pregunta durante bastante tiempo, pero no logró nada. Así que dejó de preguntar y lo vio subir las escaleras. 

Jiang Ran no sabía qué decir. 

El contenido de este testamento no es difícil de entender, en ese entonces, muchas de las pinturas de su padre se vendían a precios elevados. Algunas incluso se usaron para iniciar la empresa y lo demás se lo quedó. 

Había notado el cambio de Lu Min hacia él, desde su corazón comenzó a pensar que le estaba prestando atención, esta idea realmente la había pensado. 

Jiang Ran dejó escapar un suspiro. 

Rara vez preguntaba sobre la compañía que Lu Min manejaba y nunca pensó en qué la iba a heredar. Todo lo que le importaba antes, eran solo sus calificaciones. 

Como resultado, de pronto le dijeron que tenían muchas acciones. 

Tan repentino. 

Este asunto era difícil de ocultar, Lu Min pronto lo iba a saber.

Llamó directamente a la agencia de abogados de Li Chengwei y preguntó enérgicamente: —¿Esto es cierto o no?. 

—Es cierto. 

Después de colgar el teléfono, Lu Min quedó aturdida. 

Había pensando sobre qué manos caería la empresa en el futuro, por eso odiaba a Jiang Ran antes. Si su hijo fuese un genio, no habría razón alguna para preocuparse. 

Pero Jiang Ran no era eso. 

Sin embargo, las calificaciones de Jiang Ran estaban mejorando, por lo que su esperanza regresó. 

El padre de Jiang Ran falleció hace muchos años, y Lu Min la ha estado manejando, por lo que nunca pensó que tal cosa podría suceder. 

Era él quien fue que invirtió en la empresa, y por supuesto, era el que tenía más acciones. La propia Lu Min era solo dueña de algunas de estas y luego le compró las acciones a algunos accionistas minoritarios, pero la suma de todo no valía la pena. 

No sabían qué sería de Jiang Ran a partir de ahora, pero este tipo de muestra que brillaba, la hizo sentir incómoda. 

Resultó que él también había estado protegiéndose contra ella desde un principio. 

¿Cuándo empezó? ¿Qué incluso tuvo que esperar hasta ahora?. 

El tiempo pasó, el sol se estaba poniendo. Lu Yuan se había adentrado a la empresa, llamó a la puerta y entró a la oficina: —Escuché desde abajo que aún no has salido del trabajo. 

Lu Min volvió en si: —Estaba pensando en algunas cosas. 

Lu Yuan, como novio cariñoso, naturalmente la quería consolar: —¿Qué es lo que te molesta tanto? dime, tal vez pueda ayudarte. 

Lu Min negó con la cabeza: —Nada. 

Lu Yuan frunció el ceño. 

Desde que Jiang Ran le llamó la atención la última vez, dejando finalmente la casa de los Jiang con ira. Su relación con Lu Min no era lo que solía ser. 

Lu Yuan era capaz de persuadir a Lu Min cuando estaba así. Por supuesto, tenía esta clase habilidad y después de una media hora, finalmente preguntó al respecto. 

Se quedó aturdido. 

Lu Yuan abrió la boca durante mucho tiempo, pero no fue capaz de encontrar su propia voz. 

Jiang Ran en realidad poseía más de la mitad de las acciones de la empresa. ¿Ahora ya no había necesidad de seguir escuchando a Lu Min?. 

Entonces, ¿Qué es lo que conseguiría así?. 

Lu Yuan giró la cabeza y dijo rápidamente: —¿Entonces eso significa que desconfiaba en ti?, en ese momento todavía estaban casados y él tuvo tal idea, ¿acaso está tratando de echarte de la empresa?. 

Al escuchar lo que dijo, Lu Min frunció el ceño: —¿Qué tontería estás diciendo?, ¿Cómo podrían echarme de la empresa?, ¿Puedes ver menos dramas en la televisión?. 

Lu Yuan: "...."

Respiró hondo: —Entonces, ¿Qué harás ahora?, ¿Qué vas a hacer?. 

—¿Qué hacer? —Lu Min sintió que lo que preguntó fue muy problemático: —Jiang Ran es mi hijo, no todo será suyo en el futuro, solo necesito guiarlo. 

Estaba tan aturdida, porque no esperaba que el padre de Jiang Ran le ocultara algo como esto, siempre sabiendo lo que pensaba.