Capítulo 03

¡Dramático! 

—Apresúrate, —Tan pronto como Kou Chen ingresó al salón de clases, Wei Chaoren agitó la mano: —Ve a la oficina a aceptar el bautismo de Liang Mulán, sobre el respeto a los maestros y a la enseñanza. 

—¿Ahora? —Kou Chen se congeló. 

—El culpable principal ya se ha ido. Xu Chuan también fue y aunque no tenía nada que ver con él, fue a escuchar —dijo Wei Chaoren. 

—¿Quién más? —preguntó Kou Chen dándose medía vuelta y caminando hacia la puerta del salón de clases. 

—Xu Zhifan y tu padre —dijo Wei Chaoren detrás de él. 

Kou Chen se detuvo y volvió la cabeza: —¿Quién? 

—Tu padre —Wei Chaoren estaba encantado. 

—¿Quieres pelear? —Kou Chen lo señaló— solo espera. 

—Me equivoqué —Wei Chaoren admitió de inmediato su error. 

—Eso no me sirve —Kou Chen salió del salón de clases y de pronto levantó la voz: —¡Mejor date prisa! ¡Quítate la ropa interior y cuélgala afuera! 

Hubo un estallido de risas por detrás. 

—¡Vete a la mierda! —maldijo Wei Chaoren. 

Kou Chen bajó las escaleras y cuando pasó por el salón de clases 2-3 que estaba en el primer piso, miró hacia adentro. El polvo en el suelo ya había sido limpiado, pero debido a que se trataba de un piso de madera, aún quedaban residuos de color blanco. 

—Kou Chen, ¿no tienes vergüenza? —dijo una chica que estaba fregando el piso, quien giró su cabeza al verlo. 

Ella era la ex presidenta de su clase, Lu Huan, junto con su dulce voz. 

—No fue mi intención —dijo Kou Chen. 

—¿Qué no fue tu intención? al parecer a todos los atacó la viruela y comenzaron a saltar —Lu Huan le entregó el trapeador, diciendo en broma: —¿Por qué mejor no vienes y trapeas el piso? 

—Está bien —Sin dudarlo, Kou Chen entró directamente al salón de clases de la clase 3 y tomó el trapeador que estaba en la mano de Lu Huan. 

—¡¿Quién dejó a entrar a la clase 1?! —gritó alguien de inmediato. 

—¿Qué? ¿Quieres comprar un boleto? —Kou Chen levantó la mirada. 

No sabía quién había dicho esto. Pero de todos modos, muchas personas de que estaban presentes lo miraban, e incluso, dos de sus ex compañeros de clases le sonrieron. 

—Olvídalo, Kou Chen, ¿no estabas yendo a la oficina? mejor date prisa y mueve tu trasero de aquí —un chico que estaba a un lado, tomó el trapeador que estaba en su mano. Él era su compañero de clases, el cual estaba sentado en el asiento delantero el semestre pasado, pero Kou Chen dentro de esos tres segundos, no pudo recordar su nombre. 

Kou Chen se transfirió hace un semestre y no pudo reconocer a primera vista quién era esta persona. E incluso, después de las vacaciones de verano, pareciera que se cambió de clase y olvidó todo. 

Sin embargo, su impresión sobre la maestra Liang sigue siendo muy profunda. Una vez la maestra Liang se hizo cargo de su clase, tomando un examen y habló sin detenerse, sobre que jamás subestimarán las clases de chino, sobre la deshonestidad al hacer trampa, y de como la mayoría solía faltarle al respeto, también contando que los estudiantes la llevaron al querer irse...

Kou Chen, quien originalmente solo podía completar algunas preguntas al azar, se sorprendió que de que no fue capaz de hacer nada. Por lo que no pudo evitar decir: "Tal vez si voy al mercado a escribir, tal vez sea más silencio que aquí". Y desde ese momento, la maestra Liang no tuvo una muy buena impresión de él, y que incluso, lo echaban de la clase como mínimo 3 veces a la semana. 

Cuando entró a la oficina, la maestra Liang le estaba dando la espalda a la puerta. Sin embargo, Kou Chen aún fue capaz de ver, a través de su espalda, que estaba realmente molesta. 

—¡Fue enorme! ¡Todo se derrumbó! ¡El techo por completo se derrumbo! —dijo la maestra Liang— ¡¿Qué clase de comportamiento es este?! ¡¿Cómo es posible que suceda algo tan terrible en nuestra escuela?! ¡Demasiado terrible! ¡Es lo peor que pudo haber pasado! 

—Los estudiantes estaban peleando, creo que eso es mucho peor que eso —se escuchó la voz de Lao Yuan. 

—¿No fue medio techo? —preguntó alguien desde un lado. 

Kou Chen reconoció esta voz, le pertenecía a la del director, y mirando bien, también estaba el subdirector. 

—Solo un tercio —dijo Kou Chen. 

La maestra Liang volvió repentinamente la cabeza cuando lo escuchó: —¿Acaso lo has medido? 

—Solo lo vi —dijo Kou Chen— pero si quieres que lo mida, entonces lo haré. 

—No es necesario, no es necesario —Lao Yuan agitó la mano, desde su sitio al lado de la ventana: —Kou Chen, vamos, ¿puedes explicarme esto? 

—Solo estaba de pie ahí y no me moví, y el piso de repente se agrietó, aunque no estoy seguro de que si antes lo estaba o no, pero de pronto lo pisé y mi pierna lo atravesó —Kou Chen entró a la oficina y se acercó a Lao Yuan. 

—Jamás escuché tal cosa —dijo la maestra Liang. 

—Jamás he oído algo así —dijo Huo Ran, que había estado de pie a un lado y en silencio. 

Kou Chen lo miró, su atractivo rostro detonaba una impaciencia casi descontrolable. 

—Pero pude verlo con mis propios ojos —añadió Huo Ran. 

—El punto ahora no es quién pisó primero el piso —dijo la maestra Liang— el punto es, saber cuáles son las consecuencias, ¡de que un grupo de personas se colocaran a saltar y que el techo cayera directamente sobre nuestro salón! 

—El techo no se cayó —dijo Xu Zhifan. 

—Solo las capas del techo agrietado se cayeron —también respondió Xu Chuan— un tercio. 

—¡Qué forma de hablar es esa! —la maestra Liang estaba muy molesta. 

—Creo que esto es bastante bueno —dijo Lao Yuan— todos son estudiantes de secundaria, por lo que deberían tener el coraje de expresar sus ideales, pensamientos y sus posiciones. Este después de todo, también uno de los propósitos de nuestra escuela, de manera correcta o incorrecta, siempre que estén dispuestos a hablar, seremos capaces de guiarlos. 

—Comenzamos a saltar, después de que la clase 3 se acercó y dijeron de manera agresiva que lo hicimos a propósito —dijo Xu Zhifan— la actitud no fue la correcta y tampoco escucharon explicaciones, así qué, ¿Quién no se enojaría? 

—Ya veo, creo que la situación se puede comprender, por lo que los estudiantes puedes regresar al salón de clases —Lao Yuan agitó la mano.

Kou Chen ni siquiera dudo en darse la vuelta y salió, seguido por algunas personas detrás de él. Todos salieron de la oficina de manera apresurada. 

—¡Maestro Yuan! ¡¿Qué clase de actitud es esa al manejar la situación?! —La maestra Liang levantó la voz luego de recuperar el sentido. 

—Comenzaron a manejarlo correctamente ahora —dijo Lao Yuan. 

—¡Que se disculpen! —la voz de la maestra Liang seguía siendo muy alta. 

—Hablaremos sobre eso después de que se tome una decisión —respondió Lao Yuan. 

. . .

—¿Puede Lao Yuan hacerle frente a Liang Mulan? —preguntó Xu Chuan, algo preocupado mientras bajaba las escaleras. 

—Si él no es capaz, nadie más puede —dijo Xu Zhifan: — ¿Alguna vez Liang Mulan fue derrotada? 

—No lo sé —dijo Xu Chuan— solo se rumoreaba por parte de unos antiguos estudiantes, de que se asustó debido al edificio fantasma.

—¿Edificio fantasma? —Huo Ran hizo una pausa— ¿Este? 

—¿Qué tipo de edificio fantasma puede ser este? —dijo Xu Chuan— hablamos del que está pasando el campo de campo de fútbol, la que aún no se ha derrumbado.

—ya veo, ¿por qué aún no la han demolido? —preguntó Huo Ran. 

—Por ser una reliquia —Kou Chen lo miró— hay una gran placa de piedra en la entrada del edificio fantasma, en la que se describe como una unidad de las reliquias culturales.

Huo Ran no habló, solo le devolvió la mirada. 

Kou Chen lo miró por un momento, luego de pronto asintió: —Aún no te has atrevido a ir allí, ¿verdad? 

Huo Ran abrió la boca para hablar, pero Kou Chen se adelantó y le dio incluso una palmada sobre su hombro: —No te preocupes, incluso las chicas no se atreven a ir. 

—¡Jodete! —Huo Ran intensificó su mirada. 

—Andando —dijo Kou Chen. Cuando Huo Ran giró la cabeza para seguir bajando las escaleras, extendió la mano y agarró el hombro de Huo Ran nuevamente: —Repite lo que acabas de decir. 

—Jodete —Huo Ran se acercó sin dudar en girarse ni por un segundo. 

—¡Oigan, oigan, oigan! —Xu Chuan muy rápidamente se interpuso entre los dos: —¡Recuerden que estamos afuera de la oficina del director!

—Regresemos al salón de clases, regresemos —Xu Zhifan entre empujando y tirando a Huo Ran subieron las escaleras. 

Cuando no hubo más personas en las escaleras, Xu Chuan miró a Kou Chen: —¿Qué sucede contigo? él incluso habló por ti, Liang Mulán dijo que lo hiciste a propósito, pero Huo Ran siguió insistiendo que el piso se agrietó solo. 

—El precio de ser mi padre —dijo Kou Chen. 

—Entiendo, ya todo terminó —dijo Xu Chuan— entonces, ¿Por qué intentas hacerlo enojar? 

Kou Chen de manera lenta saltó los escalones: —Su apariencia es atractiva.

—¿Qué? —Xu Chuan estaba un poco confundido. 

—¿Has notado que se parece mucho a Lu Huan? —dijo Kou Chen. 

—¿Lu Huan? —Xu Chuan miró la parte posterior de la cabeza de Kou Chen. Kou Chen preguntó sobre el nombre de Lu Huan cuando se transfirió, y pareció gustarle, pero lo extraño es que el día anterior, Lu Huan se presentó, y le dijo claramente su nombre. 

Xu Chuan no entendía del todo el circuito cerebral de Kou Chen. 

—¿Hay alguna relación lógica entre los dos? —preguntó nuevamente Xu Chuan. 

—No lo sé —Kou Chen saltó el último peldaño de las escaleras: —¿Te gustaría visitar el edificio fantasma esta noche? 

—¿Estás loco? —dijo Xu Chuan. 

—He estado aquí tanto tiempo y aún no he ido —Kou Chen volvió la cabeza y lo miró de manera expectante: —me pregunto cómo fue que Liang Mulan se asustó. 

—Largo, no voy a ir —dijo Xu Chuan. 

—Tú.... —Kou Chen se rió. 

—Soy una chica —dijo Xu Chuan. 

El edificio de artes liberales está al lado del edificio de la oficina de maestros. De pie junto a la ventana, se podía ver a Lao Yuan y a Lao Yiang en la oficina que estaba en el segundo piso. 

Casi todas las personas de la clase 2-1 estaban amontonadas junto a la ventana, otros pegados a la ventana, y algunos se subieron a sus sillas y mesas, todos viendo hacia la misma dirección. 

La maestra Liang estaba un poco alterada en la oficina, aunque no se podía escuchar lo que decía, casi se podían adivinar cuando señalaba tanto al cielo como al suelo. Lao Yuan estaba mucho más tranquilo y básicamente no mostraba expresión corporal, pero cuando se dio la vuelta y vio a todas esas personas amontonadas junto a la ventana, se acercó, agitó la mano y cerró las cortinas. 

En términos de ubicación, son mucho mejores que los de la clase 3 que están abajo. Después de que las cortinas fueron corridas, encontraron de igual a manera a muchos de la clase 3 en la parte de abajo.

—¡¿Puedes mirar?! —alguien preguntó hacia abajo. 

—¡No puedo! —respondió alguien en la planta baja— ¡Qué fue lo que viste! 

—Estaban discutiendo —dijeron desde arriba— ahora cerraron las cortinas y no se puede ver. 

Las personas de la clase 3 continuaron con el cuello levantado. Wei Chaoren no pudo evitar hacer una pregunta: —No se puede ver, tampoco se puede oír, ¿entonces que hacen ahí? 

—La maestra Liang Muling lo dijo —dijo la persona de abajo— Antes de que se resuelva este asunto, no podremos regresar al salón de clases hasta que ustedes se disculpen con nosotros. 

—¿Qué? ¿y que hay de la discusión? —dijo Wei Chaoren. 

—¿Qué tonterías le acaban de decir? —Lu Wei estaba muy molesto luego de haber tenido un repentino intercambio amistoso con los de la planta baja e interrumpió. 

—Disculparse no es posible, —dijo Wei Chaoren— no hay necesidad de pensar en eso. 

. . .

Veinte minutos después, Lao Yuan entró al salón de clases y no se podía ver si hubo victoria o derrota en su rostro. 

—Lao Yuan, ¿Cuál es la situación? —Alguien en el salón de clases preguntó ansiosamente sobre los resultados de la batalla. 

—Kou Chen, Huo Ran —dijo Lao Yuan— ustedes dos son los jefes, bajarán las escaleras e irán a limpiar los residuos o algo así. 

—Ya limpiaron —dijo Kou Chen. 

—Entonces actúa —dijo Lao Yuan— haz gestos o algo pudo haber quedado. 

Huo Ran miró a Kou Chen. Kou Chen se colocó de pie y él también se colocó de pie. 

Cuando los dos salieron juntos, Lao Yuan agregó otra oración: —Lleven implementos, en el caso de que los de la clase 3 no permitan que usen los suyos y luego tengan que subir a buscarlas. 

Huo Ran suspiró. Miró las escobas que estaban en la esquina y descubrió que no todas eran nuevas, solo una se veía en buen estado, por lo que se acercó rápidamente e incluso, si solo iba a ir a actuar, todavía quería llevar uno en buen estado. 

Justo cuando iba a tocar la barra de la escoba, la mano de Kou Chen se asomó desde un lado, tomándola y golpeando con fuerza el dorso de su mano y el dolor provocó que retirara la mano de repente. 

—Tú... —Cuando apretó los dientes y se volvió para mirar a Kou Chen, Kou Chen ya había tomado la escoba nueva con su mano y le sonrió. 

Huo Ran resistió el impulso de maldecir, por lo que tomó la otra escoba. Justo cuando estaba a punto de irse, Kou Chen, que ya había salido del salón de clases, regresó hacia atrás, tomando una cubeta que estaba a su lado con una sonrisa en el rostro y salió nuevamente con su expresión que decía: Mírame, tomé dos cosas, soy un hombre con una gran lealtad. 

Cuando los dos bajaron las escaleras, la maestra Liang estaba de pie al lado de la puerta de la clase 3, sin hablar. 

Huo Ran miró el salón de clases, realmente no había nadie aquí, todos estaban de pie en el espacio abierto de afuera. 

Sin embargo, la tensa atmósfera que había entre las dos clases fue agitada por bastante tiempo, todo se fue de a poco y ahora todo se puede ver con diversión. Incluso cuando Huo Ran y Kou Chen entraron al salón al salón de clases, alguien los saludó. 

Kou Chen levantó la cabeza, caminó hacia la parte donde cayeron resto de polvo del techo y golpeó el suelo con la escoba: —Justo aquí, barramos. 

—¿Barrer qué? —Huo Ran miró el piso, del cual se notaba que no solo había sido barrido, sino que también trapeado. 

—¿Por qué no vas a preguntarle a Liang Yuan? —Kou Chen se inclinó y comenzó a agitar la escoba en el suelo, barriendo muy seriamente. Cuando barrió hacia la mesa, movió incluso la mesa y barrió a fondo. 

¡Dramático!

Huo Ran es muy desdeñoso, pero no tuvo otra que comenzar a barrer el suelo. 

Para demostrar su diferencia con los del club de teatro, barría muy superficialmente, sin doblar la cintura. 

Principalmente porque realmente no había nada que barrer, solo podía ver más polvo en la mesa que no se ha limpiado durante todas las vacaciones de verano que en el suelo. 

—Barre con dedicación —Kou Chen giró la cabeza. 

Huo Ran no habló, solo lo miró. 

—Liang está en la puerta, si no está satisfecha, no dará una medía hora más de "no me respetas" —Kou Chen miró hacia la puerta—  O yo mismo te ataré en el edificio fantasma esta noche. 

Huo Ran vaciló por un momento, luego se inclinó y barrió con la misma pose de Kou Chen, pero no estaba contento con las palabras de Kou Chen: —Es como si el edificio fantasma fuera tu hogar, pero dejando de lado lo de entrar y atarme, es posible que no te atrevas a siquiera entrar, lo más probable es que te irás corriendo.

—Mm —Kou Chen se detuvo, lo pensó y luego preguntó: —de acuerdo. 

—¿Qué? —Huo Ran se congeló. 

—No hay necesidad de que te quedes ahí y que te ate —dijo Kou Chen— 1 hora, de 12:00 a la 1:00, el que salga primero, pierde. 

—¿Ir al edificio fantasma por la noche? —Huo Ran se volvió a congelar. 

—No te preocupes, si no te atreves a ir, no se lo diré a nadie —Kou Chen continuó hablando, mientras se inclinaba y barría. 

—¿Qué apostamos? —preguntó Huo Ran. 

—Lo que sea —dijo Kou Chen— si pierdo, te llamaré padre. 

—No es necesario, —dijo Huo Ran— me gustan las chicas.

Kou Chen pensó: —Si uno pierde, hará cualquier cosa por el otro, siempre y cuando no se infrinja la ley, se hará cualquier cosa que el otro le pida. 

—Está bien —Huo Ran aceptó de manera simple: —Te doy la opción, ¿Quieres salir corriendo primero? ¿o corremos uno al lado del otro? 

—Imposible —dijo Kou Chen— ¿Por qué piensas tanto? solo dime si vas a ir o no. 

—Iré —dijo Huo Ran. 

Kou Chen realmente lo subestimó demasiado. Realmente nunca había estado en el edificio fantasma, no es que no se atreviera, es porque ni siquiera pensó en ir, después de todo, la escuela decía que era un edificio peligroso y que los estudiantes no tenían permitidos entrar. 

Por supuesto que le tenía miedo a los fantasmas, ¡pero quién no le temé a los fantasmas! 

Todo el mundo le teme a los fantasmas, incluso él tenía puntos débiles, sin mencionar el antiguo edificio en la que planeaba pasar una noche, cuando se atrevió a armar una tienda de campaña en la naturaleza en medio de la noche, ¡Kou Chen ni siquiera había ingresado a la escuela secundaria! 

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             Clase 1     🤝     Clase 3

 Pelearse y luego unirse por el chisme.