VOLUMEN I

Capítulo 01

Xiang Xi, recogido en el oeste

Cheng Boyan miró el reloj de la pared, eran las cinco y media. 

Ya estaba oscuro afuera, y las ramas desnudas se podían ver a través de la ventana, moviéndose a través del compás del viejo viento del norte y se balanceaba como si estuviera tomando prestado quinientos años del cielo. 

El pronóstico del tiempo dice que habrá nieve mañana, y mirando ahora el cielo, se estima que caerá esta noche.  

El doctor Liu en la sala de consulta de al lado estaba medio rugiendo y hablando con un paciente que estaba algo sordo. Después de hablar durante un día, gritó por un rato y su garganta sonaba como si estuviese a punto de partir. 

Cheng Boyan tomó rápidamente un caramelo para la garganta y se lo metió en la boca, llamando al siguiente paciente. 

Ayudaron a un tía a entrar y se sentó, y una de sus piernas no podía tocar el suelo; la expresión de su rostro era de solo dolor. 

Después de sentarse, miró a Cheng Boyan por un momento y antes de que Cheng Boyan preguntara algo, apresuradamente dijo: —¿Está disponible el médico mayor de al lado? ¿Puedes dejar que él me vea? 

—Él ahora mismo ya tiene algunos pacientes. Si desea elegir un médico, debe concertar una cita —Cheng Boyan sonrió— ¿Se lastimó la pierna? 

—No pude hacer una cita, no podía saber con días de anticipación de que me iba a lesionar la pierna —la tía señalo su pierna— ¿No puedo cambiar de médico? me estoy haciendo vieja y no es posible que no me vuelva ocurrir, por lo que los médicos mayores tienen más experiencia, ¿no? 

Cheng Boyan se estaba sintiendo indefenso: —Deje que primero la revise, ¿si? no demore en tratar su fractura. 

La tía miró a Cheng Boyan, probablemente debido al dolor, y no dijo nada más: —Muchacho, por favor, hazlo con cuidado. 

—Tía —Cheng Boyan se levantó de la silla y se colocó en cuclillas frente a la tía— ¿El dolor está en la pantorrilla? 

—Sí —la tía frunció el ceño—Dios actúa realmente sorprendente, solo estaba viendo televisión y ¡mis pierna termino lesionada! ¡¿Cómo se le llama a eso?! 

—¿Cómo sucedió? —Cheng Boyan estuvo congelado por un tiempo. Extendió la mano y trato de subir suavemente las perneras de pantalón de la tía para poder mirar, pero la tía llevaba demasiada ropa, por lo que no funcionó. 

—Coloque las piernas sobre la mesa de centro y después de ver el canal de noticias central el día de hoy, pensé en salir a comprar comida luego de tomar una siesta. No hay comida en casa, por lo que tengo que ir a comprarla, para luego cocinarla y servírsela a esos conocedores de comida... 

—Tía —Cheng Boyan tuvo que interrumpirla: —tomaste una siesta, ¿y luego qué? 

—¿Y luego? no paso mucho, porque tan pronto levanté la pierna, —dijo la tía y le dio un golpe sobre la mesa: — ¡Crack! ¡mi pierna estaba rota! ¡ni siquiera pude tocar el suelo! tuve que esperar a que mi niña regresara a casa y me trajera aquí, me duele hasta la muerte doctor cúreme rápido por favor. 

Cheng Boyan entendió lo que estaba pasando, por lo que le dije a la tía y su hija que estaban junto a él que estaba preparando un orden para que le tomaran un examen de rayos X

—Doctor, ¿Qué cree lo que me pasó? hago ejercicio todas las mañanas y ¡bang! ¿Cómo que cuando levante mi pierna mi pierna se fracturó? ¿ha visto algo así antes? este debe ser un caso único, ¿verdad? —La tía no entendía muy bien su situación. 

—Cuando ya es mayor, la osteoporosis es muy frecuente,  —Cheng Boyan sonrió, bajó la cabeza y abrió comenzó a escribir una orden para un examen— por la mañana, una hermana mayor se levantó y cuando se dio media vuelta, sintió dolor en su muslo. Normalmente hay que prestar atención, así que no haga movimientos bruscos, le daré una orden para que se tome una examen de rayos X  lo más antes posible. 

Cheng Boyan atendió los últimos pacientes antes de que saliera la tía que le dio una orden para que tomara un examen de rayos X. Cuando era la hora para salir del trabajo, miró la hora, hoy accedió ir a cenar a casa de su abuela, por lo que estima que la comida ya estaba lista. 

Solo pudo encontrar el tiempo para enviar un mensaje de texto rápido a su madre diciéndole que llegaría tarde. 

Afortunadamente, no habían muchas personas que necesitaban un examen de rayos X en este momento. Salió de manera rápida el examen de la tía. Cheng Boyan la miró y vio que la fractura no era demasiado grave. 

—Doctor —la tía se sentó en la sala de atención y miró a Cheng Boyan: —¿Retrasaste tu salida del trabajo? 

—Está bien, saldré del trabajo cuando termine aquí —Cheng Boyan la miró: —Tengo que primero...

—Lo sé, lo sé, esperar a que me lo quite —La tía inmediatamente hizo un gesto con su mano y su hija se acercó para poder ayudarle a quitarse la pernera de un pantalón: —Si hubiese sabido que mirando la televisión mi pierna se iba a fracturar, no habría usado este tipo de pantalones gruesos. 

La tía en verdad hablaba mucho. Cuando Cheng Boyan hizo todos los arreglos en silencio, ella siguió preguntando: —Doctor, ¿Cuántos años tiene? 

—Estoy en los 30 —respondió Cheng Boyan. 

Yo, no creí que fueras tan mayor, solo pareces de veintiocho y veintinueve —dijo la tía. 

—...Es cierto —Cheng Boyan sonrió. 

—¿Estás casado? —preguntó la tía mirándolo nuevamente a la cara. 

—No —Cheng Boyan le acomodó la férula. 

—¿Qué tal una novia? —dijo la tía con entusiasmo: —Estás tan ocupado que no debes tener tiempo para enamorarte, ¿verdad? 

Cheng Boyan temía que si continuaba, se atrevería a arreglar con entusiasmo un matrimonio para él, por lo que respondió: —Tengo novia. 

—Oh... —la tía se giró para mirar a su hija con decepción: —ahora la chica de la antigua familia Chen ya está fuera del juego, pero este doctor es realmente guapo. 

—No existe tal cosa como preguntar si hay novia o la antigua chica de la familia Chen, no es un drama —su hija se estaba sintiendo indefensa: —Mamá, no preguntes tonterías, que descortés eres. El doctor está ocupado, por lo que por favor no interrumpas. 

Después de finalmente despedir a la tía, Cheng Boyan respiró aliviado, se cambió de ropa, cerró al puerta con llave y salió rápidamente por la puerta del hospital. 

De camino al estacionamiento, llamó a su madre: —acabo de salir. 

—Mm, compra unas botellas de aceite en el supermercado que está a la entrada, a tu abuela aún le gusta mucho el aceite y diciendo que todo se vuelve inútil sin el, así que cómpralo y tráelo aquí directamente —explicó mamá por teléfono. 

Mamá, la ex nutricionista, será así donde quiera que vaya y la casa de la abuela era su posición clave esta vez. 

—Entendido —Cheng Boyan se subió el cuello, el viento era fuerte. 

. . .

El viento del norte soplaba tan fuerte que cuando pasaba junto a él, creía que se apresuraba a reencarnar, y barría los rostros de las personas causándole dolor.

Parecía que iba a nevar dentro de un rato, el día de hoy se oscureció muy temprano. Era como un juego de sombras antes de la seis en punto y después de eso, todo se volvió oscuro. 

Xiang Xi se apoyó contra la pared, mirando a los autos que ocasionalmente pasaban por la carretera, mientras sentía como el viento del norte entraba en su cuello y empujando a las personas, sintiendo pánico en su corazón. 

El siguiente mes es víspera de Año Nuevo. 

Ya es otro año.    

—Es casi víspera de Año Nuevo —Mantou [1] quién había estado en cuclillas, resguardándose del viento junto con sus piernas y preguntó de manera elocuente. 

—Mm —respondió Xiang Xi, mirando que la colilla de cigarro que estaba en su boca, que ya estaba en su límite. 

Xiang Xi extendió su mano e hizo volar el cigarrillo que estaba en su boca cerca de Mantou. 

—¿Cuánto dura el año nuevo? —Mantou se colocó de pie y encogió el cuello— ¿A donde vamos? 

—No lo sé —Xiang Xi se subió el cuello, se dio la vuelta y camino por la calle en misma dirección en la que iba el viento. 

—¿No lo sabes? ¿No sabes cuándo es el Año Nuevo o a dónde ir? —Mantou cojeaba detrás de él. 

Mantou no está en realidad tan cojo, y cuando caminaba normalmente se le notaba un poco, por lo que siempre estaba dispuesto a esforzarse un poco más y que no se le note. 

Esta situación parecía bastante miserable. Pero Mantou dice que si llegan a atraparlo, podía hacerse pasar por un victima de corazón puro. 

—No lo sé — Xiang Xi no quería hablar demasiado. Primero, si abre la boca, solo sentirá el viento frío. La segunda razón es porque lleva dos días sin pagar algunas cuentas y si no tenía el dinero esta noche, tendría que pasar un rato más en medio de la noche y cuando regresara, tendría que pedirle al tío Ping que lo empaquetara como un tocino. 

No tan de buen humor. 

Después de caminar por la calle por un rato, Xiang Xi dobló en una esquina. No estaba muy familiarizado con este lugar y rara vez venía. Si iba más lejos, ya no se encontrará en el territorio del tío Ping, lo cual era sencillo meterse en problemas en este lugar. 

Pero el día hoy tenía que arriesgarse un poco, las áreas residenciales aquí eran muy antiguas, las propiedades eran pocas y algunas, ni siquiera estaban separadas por alguna clase de valla, por lo que era fácil entrar y salir. 

Dio vueltas dos veces alrededor de varios edificios residenciales antiguos, y todo lo que podía ver eran viejas motocicleta a baterías, todo era tan aburrido. 

Finalmente, Xiang Xi se detuvo frente a un puesto de almacenamiento. 

Mantou no dijo ninguna palabra, se acercó a mirar varias puertas y se detuvo en frente de una de ellas, sacando un par de alicantes de su bolsillo y abriendo el candado de la puerta de almacenamiento con dos golpes. 

—Ahh —Tan pronto como Mantou abrió la puerta, susurró felizmente. 

Habían cosas completamente nuevas adentro, pero estaba bien cerrado y solo podían sacar baterías. 

Xiang Xi miró a ambos lados, luego levantó la cabeza y miró hacia arriba detrás de él. Todas las demás puertas estaban cerradas y la viendo la luz de la ventana, Xiang Xi sintió una sensación indescriptible de perdida. 

Que jodidamente pretencioso.

Las habilidades en lo que se refiere a la descarga de baterías por parte de Mantou no son tan buenas como las de Xiang Xi, pero Xiang Xi resultó herido el día de hoy, y fue debido a esta herida que tuvo que aceptar el trabajo. 

Mirando las luces de la calle a la distancia, que no eran mucho más brillante que las velas. Xiang Xi miró el trasero de Mantou que parecía que parpadeaban en la puertas del puesto de almacenamiento, sus movimientos eran bastantes torpes y vio que había estado entrando y saliendo durante varias rondas, y aún no había acabado. 

Después de esperar unos diez segundos, Xiang Xi no pudo esperar más y estaba por ir y cambiar de lugar con Mantou. 

Era la hora de la cena, y el viento del norte soplaba de manera miserable. En términos generales, nadie saldría, pero Xiang Xi no quería correr riesgos, además no ha comido y su cuerpo sentía frío y siempre sentía que si lo perseguían lo aplastarían en un segundo cuando correrían. 

Solo dio dos pasos hacia adelante, cuando escuchó el sonido desde el corredor trasero en diagonal. Sonaba bastante urgente y no era el ritmo de una forma de caminar normal. 

—¡Vamos! —Xiang Xi no pensó mucho en eso, agarró las cosas y tiró del cuello de la ropa de Mantou y corrieron hacia la calle lateral. 

—¡Atrapen el ladrón! —la voz de un hombre sonó detrás de él, y se escuchaba su tono llena de rabia— ¡Atrapen al ladrón! 

Xiang Xi no necesitaba mirar hacia atrás, solo por el sonido podía decir que esta persona era fuerte, pero él también lo era e incluso si lo lanzaran sobre diez personas, no serían lo suficiente para que lo atraparan por el brazo. 

—¡Persíganlo! ¡Hay que matarlo a golpes! —otra voz rugió— ¡Ayer no pudimos atraparlo! ¡y se atrevió a regresar el día de hoy! 

¡Mierda! Xiang Xi se tambaleó, ¡En realidad son dos! 

—¿Nos separamos? —preguntó Mantou mientras corría salvajemente. 

—En un momento —dijo Xiang Xi, girando la cabeza y miró, ambos no tenían nada en sus manos. 

Esta no es una reunión con mucha coincidencia, estas personas lo estaban mirado desde algún punto y decidieron perseguirlos con algo. 

Y al escuchar esto, ya había venido alguien el día de ayer con el mismo objetivo. 

Que jodido dolor de espalda. 

Xiang Xi suspiró cuando escuchó los pasos ligeros y pesados de Mantou detrás de él. 

Estos edificios son relativamente altos, las plataformas abajo eran grandes y tenían que bajar unas cuentas escaleras para llegar al nivel del suelo.  

Después de que los dos dieron la vuelta al edificio, Xiang Xi de repente redujo la velocidad y empujó a Mantou hacia atrás debajo de la plataforma y suprimiendo la voz: —Te irás en un rato. 

Mantou fue empujado hacia atrás como un saco. 

Xiang Xi lo miró, la plataforma no era tan alta, pero si se colocaba en cuclillas podía pasar desapercibido y siguió caminando hacia adelante. 

Aunque las peleas y las palizas no son el fuerte de Xiang Xi, pero correr lo es. Los soldados que lo perseguían detrás de él lo persiguieron persistentemente hasta la calle y finalmente se dieron por vencidos. 

Xiang Xi encontró un esquina del muro y se apoyó, después de jadear durante mucho tiempo, ya no sentía frío, solo sentía su cuerpo sudar, pero su garganta estaba seca y astringente. 

. . .

—¡Maldita sea! ¡Estas personas son fuertes y ni siquiera tenían algo en las manos! —Mantou se topó con él en la intersección— ¿Estás bien? 

—Estoy bien —Xiang Xi lo miró, probablemente se golpeó en el suelo cuando fue empujado hacia abajo, y su rostro estaba cubierto de cenizas, y se metió las manos en los bolsillos— Vamos. 

—¿A dónde vamos? —Mantou escupio el suelo, sacó la pitillera, la miró y estaba vacía, aplastó la pitilla vacías y la arrojó a un lado: —¿Tienes cigarrillos? 

—No —Xiang Xi caminó hacia adelante con la cabeza enterrada— Vamos a comer algo. 

—¿Comer? ¿no iremos por algo? ¿regresará hoy? —Mantou palmeó las cenizas en las perneras de su pantalón— Si regresamos de esta manera, probablemente no lo pasaremos bien, cuando salí el día de hoy, vi el rostro largo del tío Ping...oye, Xiao Zhan, ¿por qué te ves tan desinteresado recientemente? antes no eras así, y no has tenido nada durante dos días, ese no es tu estilo...no más palabras. 

—¿Quieres fumar? —Xiang Xi sacó una pitillera de su bolsillo y se la entrego a Mantou. 

—¡Oye! —Mantou sacó dos, guardó uno detrás de su oreja y encendió el otro— ¿No dijiste que no tenías? 

—Hablas demasiado, mejor toma un cigarrillo y descansa tu lengua —dijo Xiang Xi— recientemente cambié a un estilo más serio, ¿puedes cooperar conmigo? 

Xiao Zhan es el apodo que el tío Ping le dio a Xiang Xi cuando lo recogió. 

Dentro de la colcha en la que estaba envuelto había un papel que debería haber sido su fecha de nacimiento y apellido, y según este apellido, el tío Ping lo llamó Xiang Xi. 

Xiang Xi, recogido en el oeste. 

También le puso un apodo, diciendo que tenia grandes ambiciones. 

Xiang Xi nunca ha ido a la escuela, no sabe lo que significa "grandes ambiciones". Cuando creció, el falso ciego que vivía al lado que usaba el nombre de un adivino que engañaba y jugaba con las mujeres le explicó el significado de estas palabras, las cuales recién entendió. 

Diviértete hasta la noche. 

¿Grandes ambiciones? 

Esto es lo que debería llamar grandes ambiciones. 

Además, ¿Qué clase de imagen puede exhibir una persona como él? 

—¿Por qué no estás comiendo? —Mantou miró a Xiang Xi mientras comía su tazón de arroz. 

—No quiero comer —Xiang Xi clavó los palillos en la comida varias veces, luego tomó un trozó de carne y lo dejó. 

—¿Es por el viento que hay y el dolor de estómago? —Mantpu frunció el ceño— ¿Por qué mejor no lo cambias por gachas y bebes gachas para nutrir tu estómago? 

—Estoy bien, solo come lo tuyo —Xiang Xi se apoyó contra la pared, eso no era un elixir, en que solo lo bebas y te recuperas. 

Miró por la ventana, a través de las dos capas de vidrió y el aliento que lo empañaba. La tenue escena de la calle afuera era como una película de fantasmas, con puntos de luces borrosos y sombras. 

—Xiao Zhan —Mantou bajó la cabeza para comer por un rato, dejó los palillos y miró a Xiang Xi— por lo de ahora...gracias, eres alguien genial. 

Xiang Xi levantó la comisura de su boca y sonrió: —No somos mucho, así que no es necesario que me lo digas. 

Mantou no emitió ningún sonido, simplemente recogió los palillos y siguió comiendo.  

—Estabas corriendo demasiado lento, por lo que solo podría arrastrarte y al final no podriamos haber escapado —Xiang Xi tomó un sorbo caliente de té, sintiendo como si alguien le estuviera raspando el estómago con un cuchillo sin filo. 

—Hombre...si quieres hacer algo como eso, solo dilo —Mantou se rió dos veces— Entonces, ¿Por qué no bajaste conmigo y escondernos juntos hasta que las personas se alejen de nosotros? ¿tienes que dejar a las personas?

—¿Acaso tu cerebro fue frotado con una zapatilla? —Xiang Xi suspiró, presionando su mano en forma de puño su estómago— Tan pronto como alguien se hubiera dado la vuelta y ver que dos personas desaparecieron así como así, habrían descubierto en un segundo que ambos estaban escondidos debajo de la plataforma. Un cerebro como el tuyo, no es fácil pensar como Er Pan te ha mantenido todo este tiempo. 

Er Pan es un hermano jurado del tío Ping y Mantou está bajo su cuidado. 

Tan pronto como Mantou escuchó el nombre de Er Pan, su rostro se volvió inmediatamente feo. 

El tío Ping es el jefe y a menudo escucha del tío Ping sobre Er Pan, que es un hombre despiadado y de comportamiento feroz. La pierna de Mantou fueron golpeadas por Er Pan debido a un juego y casi se las rompe por completo, por lo que Mantou tenía miedo de volver a jugar con él. 

Pero al igual que cuando a Mantou le mencionan a Er Pan y siente que su hígado tiembla, Xiang Xi le tiene miedo al tío Ping. El tío Ping es de una cara redonda y se ríe cuando ve a las personas y disfraza su crueldad con eso, a pesar de que Xiang Xi creció con él, no es capaz de entender su temperamento. 

—Xiao Zhan —Mantou terminó de mala gana la comida frente a él— Tengo algo que decirte. 

—No me digas nada —Xiang Xi se colocó de pie, tomó su abrigo y se dio media vuelta para irse— No quiero escucharlo. 

Xiang Xi jamás había visto esa expresión de Mantou, pero sabía que Mantou quería decirle algo importante, pero no quería saber sobre este asunto ya esto tan importante solo puede relacionarse con Erpan y el tío Ping, y si ahora lo sabía, sabría que solo se metería en problemas. 

—Siento que me estoy asfixiando, —Mantou lo agarró de la mano— solo quiero hablar con alguien. 

—Entonces dímelo ahora —Xiang Xi lo miró a la cara— y le diré a Er Pan sobre esto cuando regrese. 

—Me voy a ir —Mantou apretó los dientes, después de hablar, lo soltó y se recostó en la silla: —Ahora ve y habla con Er Pan. 

Decirlo o no decirlo, de acuerdo al temperamento de Xiang Xi puede en uno segundo ir y vencerlo de un solo plano como si fuera una voltereta. 

Pero Xiang Xi no se movió, todavía lo miraba fijamente, le tomó unos segundos de que soltara una oración entre los dientes: —ve a joder a tu madre. 

Mantou es diferente a Xiang Xi, Xiang Xi fue recogido por el tío Ping cuando tenía unos meses y ha estado con él hasta ahora. Mantou por otro lado, fue traído por Er Pan cuando tenía siete u ocho años.

Cuando Er Pan fue a un "viaje de negocios" al sur lo encontró, y cuando llegó aquí, Xiang Xi no podía entender lo que decía Mantou. 

No fue un secuestro, Mantou insistió es decir que se escapo de casa y una vez afirmó que no quería volver a casa nunca más. 

—¿Estás cansado de esta vida? —Xiang Xi se recostó en la silla. 

—No lo soporto más, —Mantou se mordió el labio, se arremangó con conmoción y subiéndose las perneras del pantalón, dándose palmadas en los brazos y en las piernas— ¿Cuántas heridas crees que tengo? si no lo sabes, entonces menos yo, ¡estaré jodidamente muerto si sigo quedándome aquí! 

Xiang Xi entrecerró los ojos y no habló. Es verdad que tiene muchas heridas, y Mantou no ha mencionada sobre esto durante todos estos años, por lo que no era imposible querer irse por esto. 

—Regresaré al sur —Mantou se sirvió una taza de té y tomó dos sorbos— regresaré a casa. 

—Sé que no puedes creerme y que no pueda cambiar, si me atrevo a correr Er Pan me encontrará y me matará, tampoco hay dinero para correr... —la voz de Mantou era muy baja, y cuando dijo esto, miró a Xiang Xi con unos ojos brillantes— pero ahora lo tengo. 

Xiang Xi no habló. 

—Hay 30.000 yuanes en casa de Er Pan...y yo sé dónde esta —dijo Mantou. 

Xiang Xi parecía haber sido apuñalado por algo, saltó de la silla, agarró su chaqueta, se dio media vuelta y salió. 

No había nadie en la calle, por lo que Xiang Xi planeó tomar el metro. 

Encogió el cuello y caminó por un rato, una persona salió del supermercado que estaba al frente, Xiang Xi lo miró y rápidamente giró la cabeza hacia atrás, Mantou cojeaba unos metros detrás de él.

Este hombre salió del supermercado con dos bolsas en una mano y estaba sosteniendo su teléfono con la otra. 

No llevaba bolso, sus pantalones eran ajustados y podía ver que no llevaba nada en sus bolsillos, su billetera estaba en el bolsillo interior de la chaqueta, y como acababa de salir del supermercado con calefacción, la cremallera de su abrigo no estaba cerrada. 

Xiang Xi le silbó a Mantou. 

Mantou miró hacia adelante e inmediatamente entendió, cojeando, gritó: —¡Oye, idiota! ¡Espérame! ¡vas muy rápido! 

—Jodete idiota... —dijo Xiang Xi y camino rápidamente hacia el hombre. 

—No corras —Mantou corrió y se abalanzó hacia él— ¡Vamos a beber algo! 

Xiang Xi tropezó hacia el hombre con este impulso.  

. . .

—Lo compré, lo compré en el supermercado que estaba al costado de la carretera —dijo Cheng Boyan a su madre con su teléfono— Yo...

Antes de que terminara de hablar, sintió que alguien iba a chocar frente a él y antes de que pudiera ver con claridad, alguien golpeó con fuerza su pecho y frunció el ceño: —¡Ah! 

—¡Por favor, intenta no hacer el ridículo! —el hombre que chocó con él, le gritó al hombre que iba a lado de él al abalanzarse, luego giró su cabeza y se inclino hacia él: —Lo siento hermano mayor, lo siento. 

—¿Qué pasa? —la voz de su madre vino del teléfono. 

—Nada —Cheng Boyan dejó ir a las dos personas y siguió caminando— alguien chocó conmigo, yo...espera, mamá te llamaré más tarde. 

Cheng Boyan colgó el teléfono y se tocó el bolsillo interior de su chaqueta. 

Estaba vacío. 

Giró la cabeza y las dos personas que chocaron con él ya no estaban a la vista. 

Es un milagro que un lisiado pueda correr tan rápido. 

Después de estar de pie por unos segundos, Cheng Boyan siguió caminando hacia adelante junto con sus cosas. Después de hacer algunas llamadas pidiendo bloquear sus tarjetas bancarias, su madre volvió a llamar: —¿Qué pasó? 

—Estaba saliendo y... me robaron —Cheng Boyan suspiró. 

—¿Te robaron? —Su madre estaba un poco sorprendido. 

—Mm, ahora mismo —Cheng Boyan volvió a girar la cabeza, no había nadie allí. 

—¿Dejaste tu tarjeta de identificación en tu billetera otra vez? —Su madre suspiró— ¿Cuántas veces te he dicho que no coloques tu tarjeta de identificación en tu billetera? 

—Me equivoqué —Cheng Boyan sonrió— Debía usarla hoy, por eso la guardé ahí. 

—Olvídalo, ven aquí primero —Su madre no dijo nada más— tu abuela está esperando. 

—Mm —Cheng Boyan colgó el teléfono y se subió la cremallera de la chaqueta. 

. . .

Xiang Xi abrió la billetera, sacó el dinero y lo contó, más de 4000.

—Mierda, nos topamos con un pez grande —Mantou olfateó a un lado. 

Xiang Xi dejó todo el dinero en la mano de Mantou: —Es todo tuyo. 

—Xiao Zhan... —Mantou se congeló y no aceptó el dinero. 

Xiang Xi colocó el dinero en su bolsillo, se dio la vuelta y caminó hacia adelante: —No me digas nada, ¿no es esto algo que quieres? y ahora yo no sé nada. 

—No te hice un amigo en vano —hubo un repentino ahogo en la voz de Mantou. 

—¿Quién es tu amigo? —Xiang Xi frunció el ceño y lo miró— no seas un idiota, ¿de acuerdo? 

Avanzando en silencio, Xiang Xi vació el resto de la billetera. Algunas tarjetas bancarias eran inútiles e incluso todavía había una tarjeta de identificación, Xiang Xi lo sacó y lo miró, Cheng Fuyan.  [1]

Que nombre tan incompatible. 

Era extraño ver la foto de un hombre que pueda considerarse guapo en la tarjeta de identificación. Xiang Xi chasqueó la lengua, se dio la vuelta hacia la oficina de correo que estaba en la esquina, tiró la tarjeta de identificación en el buzón y lanzó las tarjetas bancarias que había en la billetera a la basura. 

La billetera es de buen cuero y parecía nueva, así que la conservó. 

Después de dos pasos, se detuvo nuevamente, ¿Cheng Fuyan? 

o era, ¿Cheng Boyan? 

Xiang Xi nunca fue a la escuela, todo los caracteres que aprendió provino desde la mesa de cartas y los libros amarillos del ciego falso. Podía recordar los trazos de algunos caracteres simples, pero solo la forma de algunos caracteres complejos. 

Al final era ¿Fuyan o Boyan?

Se dio la vuelta y caminó de regreso al buzón, miró la abertura del buzón y extendió la mano para sacarlo. 

—¿Qué estás haciendo? —Mantou lo miró de manera inexplicable. 

—Mierda —Xiang Xi rodeó el buzón dos veces y lo pateó— Olvídalo, vámonos.

Cheng Boyan. 

¿Quién llamaría "Fuyan" a un niño? demasiado superficial. 

. . .

Debido a que tenían dinero, los dos tomaron un taxi de regreso.  

—Zhaojiayao —Xiang Xi informó la dirección en el asiento trasero. 

El conductor los miró a los dos varias veces y luego agregó una oración: —Solo hasta la intersección. 

—Lo sé —dijo Xiang Xi con impaciencia. 

Zhaojiayao es como un pueblo dentro de la ciudad. Es el lugar más caótico de la ciudad por su destacada capacidad para esconder la suciedad e inmundicia, todos los días, los mafiosos de todos ámbitos de la vida se dedican a realizar una obra de teatro llamado "No dudes que te mataré hasta desaparecerte". 

Básicamente, cada vez que toma un taxi de regreso, el conductor agregará esta oración, "solo hasta la intersección". 

Hay un letrero de color blanco en la intersección junto con el nombre de la calle y también había un letrero de color azul por debajo, con tres palabras escritas, Calle Yanguan

El taxi se detuvo frente al letrero, Xiang Xi abrió la puerta y salió. 

No sabía cuándo se colocó ese letrero, pero este letrero parecía no tener ningún otro papel además de transmitir a todos que aquí iniciaba el peligro. 

Y no solo esta calle, sino que todo el distrito debería llamarse Yanguan

Mantou le dio dinero al del taxi, y al tocar el bolsillo parecía querer discutir con Xiang Xi sobre la división de los más de 4.000 yuanes. Xiang Xi no lo tomó en cuenta, se dio la vuelta y antes de entrar solo dijo "No toques el dinero de Er Pan". 

Casi no hay alumbrado público en Zhaojiayao, y los diversos cables se entrecruzaban tanto que al ver la luna llena parecían verse en migajas como decoraciones. Confiando solo en las luces de los edificios ilegales que no parecían tener fin a los lados, no podían ver bien las sombras de las personas en las esquinas de las calles, y de vez en cuando escuchaban las maldiciones que venían de la nada y un grito que se elevaba una octava. 

En esta atmósfera, y no solo al entrar, con solo mirar la intersección desde fuera era capaz de asustar a las personas. 

El tío Ping era dueño es un departamento de dos pisos en el centro de la ciudad, N° 17, Dawali, Zhaojiayao. Habían algunas tiendas y casas de alquiler, todas construidas de manera ilegal. 

Este ha sido el "hogar" de Xiang Xi durante más de diez años. 

Tan pronto como giró hacia la calle estrecha, daba la sensación de que el terreno era cada vez más bajo, empujando a las personas hacia abajo y en ocasiones la sensación de no poder respirar bien. 

Cuando aún faltaba diez metros para llegar al n° 17, un breve grito provino de la plataforma del segundo piso del edificio de al lado, seguido del rugido de un hombre: —¡Vete a la mierda! 

Antes de que Xiang Xi mirara hacia arriba, una figura delgada salió volando de la plataforma desde el segundo piso y cayó pesadamente frente a Xiang Xi y Mantou. 

...................

[1] Mantou, significa "bollos al vapor"

[2] Significa "superficial".