Capítulo 61

"¿Estás buscando que te folle?"

Después de que Qiu Yi salió de la tienda de campaña, Bian Nan se cubrió con el edredón y por algún tiempo estuvo aturdido. Y cuando sintió quedarse sin aliento, sacó su cabeza. 

Se sentía un poco deprimido e infeliz, pero la calidez que sintió dentro del edredón, lo cubrió y después de un rato se volvió a dormir un poco aturdido. 

No supo cuanto tiempo durmió esta vez, pero cuando volvió a abrir los ojos, fue capaz de escuchar el fuerte canto de Qiu Yan. 

Bian Nan se frotó los ojos y se sorprendió al descubrir que el pequeño no estaba canatando tan desafinado. Y básicamente, comprendió que una parte de la letra correspondía a la canción "Destacamento de Mujeres Liange". [1]

—Buscando gemas, buscando gemas, hay muchas junto al río y debo recogerlas.

Tarareó un par de veces, y cuando estaba a punto de levantarse, Bian Nan escuchó que Qiu Yan no fue al río a buscar gemas, sino que se apresuró hacia su tienda de campaña. Abriendo hábilmente la cremallera de la tienda mientras cantaba. 

—¡Gran tigre! —asomó la cabeza y gritó. 

—Hola bebé —Bian Nan se sentó y abrió los brazos: —estoy contento de que no hayas cantado desafinado el día de hoy. 

Qiu Yan se quitó los zapatos, saltó dentro de la tienda y se abalanzó sobre él. Después de dar algunas vueltas, encontró una cómoda posición para apoyarse: —Es de mañana, así que hay papilla, palitos de masa frita, leche de soja, bollos al vapor. 

—¿Has comido? —Bian Nan miró hacia afuera de la puerta de la tienda que estaba abierta. 

Qiu Yi y Shen Tao ya estaban levantados, Wan Fei estaba saliendo de su tienda y no parecía estar muy consciente. Miró los dos pares de zapatos que habían fuera de la puerta, reflexionando durante mucho tiempo antes de saber cuál era el suyo y al final, se los colocó perezosamente. 

—Todavía no he comido, Shen Tao-gege dijo que todos nos levantemos y fuéramos todos juntos a comer, hacia el salón... —Mientras hablaba, Qiu Yan se retiró de la tienda. Bian Nan quería cronometrar el tiempo, para ver si era capaz de quedarse quieto por unos diez segundos. 

—¡Maldita sea! ¡hace frío! —Wan Fei gritó al salir de la tienda, encogiendo su cuello. Al girar la cabeza, vio que Bian Nan se estaba por levantar y agitó su mano rápidamente: —¡No salgas! ¡Nan-ge, no salgas! ¡hace demasiado frío! 

—¿Hace frío? —Sentado dentro de la tienda, Bian Nan sintió que el viento frío era mucho menor a comparación de ayer, ya que el sol brillaba por todo el suelo. Así que miró a Qiu Yi: —¿Frío? 

Qiu Yi sonrió y de repente extendió la mano, levantando su ropa y exponiendo su vientre, para luego taparse rápidamente: —No hace frío. 

Algunas personas quedaron atónitas, pero luego comenzar a reírse salvajemente y Wan Fei se apresuró al baño: —Qiu Yi, tu también estás loco. 

Bian Nan se sintió muy deprimido por la mañana. 

Probablemente porque Qiu Yi se escapó como un ladrón temprano por la mañana, lo que lo hizo sentir incómodo. 

Al principio también era alguien muy cuidadoso, con miedo de que lo descubrieran, miedo de que preguntaran, miedo de ser visto. Pero no sabía si esto se debió a que bebió anoche y se sintió estimulado emocionalmente por Wan Fei y Xu Rui, que de pronto actuar como alguien astuto lo hizo sentir incómodo. 

Al ver la mirada cautelosa de Qiu Yi, quiso enojarse. 

Pero Qiu Yi se burló de él y no sintió nada parecido en cuanto salió de la tienda. Además, al ver la sonrisa de Qiu Yi bajo el sol, aparte de poder controlar la sonrisa que estaba por extenderse en la comisura de su boca, no había necesidad de pensar en nada, ni con la necesidad de ir a tomar un examen médico.

¡Por qué pensar demasiado! 

—¿Xu Rui aún no se ha levantado? —Bian Nan vio a Shen Tan y Qiu Yi asentir. Pero girando su cabeza, solo podía ver a Wan Fei y no pareciendo que nadie se moviera dentro de su tienda. 

—Se despertó temprano, —Qiu Yan tomó una pequeña ramita e hizo un gesto frente a su cara: —pero regresó a maquillarse, ceñas, pestañas, labios. 

—¡Erbao, sabes demasiado! —gritó Xu Rui junto a una pequeña risa desde la tienda. 

Qiu Yan sonrió y corrió hacia la tienda. Asomó la cabeza y cantó: —Le pregunté en voz baja al santo monje, ¿mi hija es hermosa o no?, ¿mi hija es hermosa o no? [2] 

Las vacaciones de verano acaban de terminar —Bian Nan estaba feliz, pero ahora no podía volver a encontrar la melodía. 

—Mm —Qiu Yi lo miró: —¿Puedes colocarte tu ropa? 

—Tan particular, pensaba caminar y colocármela mientras tanto —Bian Nan bajó la cabeza y se enderezó la ropa. No podía ponerse de pie dentro de la tienda, por lo que solo se colocó la ropa al azar: —¿El agua está fría? 

—No está fría —dijo Qiu Yi: —Ve y lávate. 

Cuando Bian Nan entró al baño, Wan Fei estaba inclinado sobre el lavabo, lavándose la cara. Mientras se lavaba y tarareaba una canción, se acercó y le dio una palmada a Wan Fei sobre su trasero. 

—¡A la mierda! —Wan Fei giró la cabeza con cizaña, pero cuando vio que era él, inmediatamente sonrió: —Nan-ge, ¿Cómo dormiste anoche?

—¿De qué otra forma se puede dormir? —Bian Nan se paró frente al urinario: —Solo me fui a dormir después de beber. 

—¿En serio? —Wan Fei miró hacia la puerta del baño, se acercó a él y susurró: —¿Shen Tao no intercambió con Qiu Yi en medio de la noche? cuando regresé anoche, vi a Qiu Yi de pie al lado de la tienda azul.

Bian Nan estaba un poco avergonzando sin razón y lo miró de soslayo: —Piérdete, ten cuidado o tu orina podría sobresalir. 

—Tengo tanto miedo, voy, voy, voy —Wan Fei chasqueó la lengua, se subió los pantalones y con dos movimientos, se detuvo: —Joder, me oriné. 

Bian Nan se divirtió por bastante tiempo: —¿Tú y Xu Rui tuvieron una buena noche anoche? 

—No lo menciones —dijo Wan Fei con una expresión deprimida: —Ayer salimos a caminar por la orilla del río, estaba pensando en hacer un movimiento, como besarla, pero cuando lo iba a hacer, ¡dijo que su brazalete se le había caído! 

—¿Ah? —Bian Nan se congeló. 

—Estuve buscando el brazalete durante una hora y no pude moverme debido al frío —Wan Fei sonrió: —Estaba demasiado avergonzado como para continuar cuando regresamos a la tienda. 

—¿Tan tímido eres? —Bian Nan chasqueó la lengua: —Basura. 

—Eso significa que quieres hacer todo bien con esa persona —Wan Fei también chasqueó la lengua. 

—Vete a la mierda, ¿de dónde sacas tantas cosas? solo interrumpes —Bian Nan fue al fregadero a tomar un puñado de agua y rápidamente hundió su cara en el agua. 

Aunque había estado girando como si fuera una hélice anoche, su mente y sus recuerdos no fallaron. Pero recordando todo en este momento, el aliento de Qiu Yi, el tacto de su piel, la temperatura de sus manos, la insoportable excitación y placer de ser un desvergonzado, al igual que ese día en la cocina, provocó que le ardieran un poco las orejas. 

Si no fuera por el hecho de que Qiu Yi era un hombre, no se avergonzaría de decirle sobre esto a Wan Fei. 

Afortunadamente, Wan Fei parecía inmerso en el recuerdo del respeto que tuvo con Xu Rui. Quien a cada segundo levantaba y bajaba las cejas, no sabiendo si era arrepentimiento o complacencia, por lo que no hizo más preguntas. 

Todos se levantaron y ordenaron las cosas, y el jefe les preparó el desayuno en el comedor. 

Bian Nan se sentía mucho más hambriento que de costumbre, por alguna razón, devoró los cuatro grandes bollos de carne y bebió dos tazones grandes de gachas, como si jamás hubiera comido.

Tomó dos huevos y mientras los pelaba, miró a Qiu Yi a su lado. Qiu Yi mordió el bollo y lo miró: —¿Mm? 

Bian Nan susurró: —¿Por qué siento tanta hambre? 

—Es normal tener hambre al día siguiente después de beber, —Qiu Yi sonrió: —Ayer te considerabas un gran bebedor, ¿no? 

—¿De verdad? —Tan pronto como Bian Nan pensó en lo que sucedió anoche, tuvo una gran avalancha de recuerdos en su mente. 

Le tomó mucho tiempo seguir el ritmo de este castigo y tragarse el huevo. 

Después del desayuno, del grupo de personas de al lado, solo algunos se levantaron y encaminaron hacia el patio delantero con sus cabezas bajas como gallinas y con dos grande círculos debajo de sus ojos. 

—Con esas posturas —Wan Fei chasqueó la lengua: —y mirándolos, tengo la sensación de que debo rápidamente empacar toda la comida, recoger suministros y prepararme para escapar de un apocalipsis. 

—Vamos entonces, —dijo Shen Tao con una sonrisa: —ya estamos llenos, podemos huir en este momento. 

Las motocicletas estaban completamente cargadas, así que guardaron sus cosas y regresaron a la ciudad. 

Todavía se podía considerar que aún era de mañana. El viento en los suburbios era un poco más fresco, y era tan refrescante, que cuando tomaban un gran respiro, se sentía una gran sensación de vigor.

El viento refrescante y los rayos del sol hacían que las personas se sintieran bien. 

Bian Nan todavía conducía junto a Qiu Yan, y miraba de vez en cuando a Qiu Yi. 

Estaba de buen humor, pero cuando recordaba que era hora de regresar a la escuela, volvía a sentirse deprimido. 

Aunque las dos escuelas estaban a una distancia en la que pueden pelear, realmente no iba ser fácil encontrarse con Qiu Yi. Después del entrenamiento, si atravesaba el muro y salía, Qiu Yi ya se había apresurado a trabajar. 

Bian Nan de repente podía comprender ese sentimiento de amargura y tristeza que sentía Wan Fei junto a su teléfono todos los días. Ahora, incluso con Qiu Yi a su lado, ya estaba sufriendo. 

—¿Qué pasa? —Qiu Yi conducía su motocicleta y se inclinó a su lado. 

—Nada —Bian Nan tomó un hondo respiro: —¿Comenzarás a trabajar la próxima semana? 

—Mm, conversé con Man-jie —dijo Qiu Yi: —Si no fuera por su disposición de ayudarme, no hubiera sido sencillo para mi regresar. 

—¿No harás una pasantía el próximo semestre? —Bian Nan pensó por un momento: —No falta mucho, ¿verdad? 

—Faltan aún algunos meses y veremos la situación después del Año Nuevo. El dinero se gasta en esos pocos días de Año Nuevo —dijo Qiu Yi con una sonrisa: —No me has contado acerca de tu pasantía, ¿Cuáles son los arreglos? 

—Ah... —Bian Nan se sintió aún más deprimido cuando mencionó la pasantía: —Me quedaré en tu casa en un rato y te contaré lentamente sobre eso. 

—Bien —Qiu Yi asintió. 

. . .

Cuando regresaron a la casa de Qiu Yi, era casi mediodía, y todos llegaron con comida. 

Papá Qiu estaba conversando con la abuela de al lado en el patio, sobre su silla de ruedas. Cuando entraron junto con la comida preparada, la anciana sonrió: —Realmente regresaron con comida. 

—Abuela, comamos todos juntos —Qiu Yan corrió hacia la anciana junto con una porción preparada de pollo asado.

—Ya he comido —la anciana le dio unas palmaditas: —No puedo comer más ahora. 

—Entonces come caquis, recogimos muchos y todos nos repartimos una bolsa —Qiu Yan se acercó, tomó una bolsa de caqui de la mano de Bian Nan y se lo entregó a la anciana: —Es delicioso y muy fresco. 

Qiu Yi se acercó a papá Qiu y lo miró: —¿Has tomado tu medicamento? 

—La tomé, la tomé —Papá Qiu asintió: —todo se hizo de acuerdo a tus órdenes, y ahora estaba esperando el almuerzo también bajo tus órdenes. 

—Vamos a comer —Qiu Yi sonrió. 

Esta comida fue preparada y comprada en la entrada del callejón. Bian Nan fue a la cocina a buscar unos platos, para servirla y llevarla a la mesa.

—¿La pasaron bien? —Preguntó papá Qiu sentado en la mesa: —¿Incluso fueron a recoger caquis? 

—Mm, pasamos por una plantación de caquis, fuimos a recoger algunas y comimos mucho en ese momento —dijo Qiu Yi— ahora, cada vez que veo los caquis, tengo ganas de vomitar. 

—¿Sabes cómo se cosechan los caquis? ¿no se te cayeron? —preguntó papá Qiu. 

Bian Nan se alegró cuando lo escuchó: —Tío, Wan Fei fue el que salió perjudicado. 

—Lo sabía —Papá Qiu se rió por bastante tiempo: —Déjame contarte que cuando solíamos ir a recoger caquis, nos subíamos directamente al árbol y las comíamos ahí mismo.

Papá Qiu era muy activo a la hora de conversar, y mientras comía, contaba sus anécdotas sobre la recolección de caquis. Después de la comida, pasó de recolectar caquis a recolectar melocotones, luego a robar sandías y finalmente, robar batatas, en donde cavaban un agujero en un campo y las preparaban. 

—Si no se hornea bien, acabará blando o no se cocinará bien. Si está blando, no se puede comer y si no se llega a coser bien, tampoco se come, ¿entendieron? —Papá Qiu los miró y después de que todos asintieron, concluyó con una oración: —pero toda esta tontería se arruinó para la víspera de Año Nuevo. 

—¡Oye! —Qiu Yi suspiró y se colocó de pie para retirar los platos: —Eres tan... 

Bian Nan se divirtió desde un lado. 

Qiu Yan no vio a su padre toda una noche, y después de haber lavado los platos, corrió a la habitación de su padre para quedarse con él. 

Qiu Yi entró a la habitación trasera, seguido de Bian Nan. Antes de que pudiera cerrar la puerta, lo abrazó y lo mordió varias veces en el cuello y en los hombros. 

—La puerta no está cerrada, —dijo Qiu Yi con una sonrisa, envolviendo sus brazos alrededor de él y cerrando la puerta: —la puerta no está cerrada, escuché los movimientos de Erbao. 

—No vendrá a dormir ahora, ¿verdad? —Bian Nan empujó a Qiu Yi contra la pared que estaba a un lado de la puerta, levantó su ropa, metió la mano y acarició su cuerpo con fuerza. 

—Mm, lo más seguro dormirá en la habitación de papá —Qiu Yi se sintió incómodo al notar que tiraba de su ropa, y con solo un movimiento de su mano, se quitó la camiseta: —¿Piensas terminar con lo de anoche? 

—Joder, ¿aún no ha terminado lo de anoche? —Bian Nan se quedó atónito por un momento. Mordisqueando el hombro de Qiu Yi, dijo vagamente: —Creí que todo había terminado, ¿acaso aún te estás reprimiendo? 

—¿Acaso dije que había terminado? —Dijo Qiu Yi con una sonrisa, metiendo la mano dentro de sus pantalones y agarrando un poco de su trasero. 

—¿No es así? —Bian Nan estaba aturdido, mientras pellizcaba su cintura: —¿no se ha acabado?...oh, no te ayudé. 

—Eras el de la hélice, ¿y querías ayudarme? —Qiu Yi estaba encantado, se inclinó cerca de su oído y mordió el lóbulo de oreja: —eso es algo que yo mismo puedo manejar. 

—¡Maldita sea! ¡Realmente bebí demasiado anoche y no me di cuenta de esto! —Bian Nan chasqueó la lengua, agarró del brazo a Qiu Yi y lo arrojó sobre la cama, se abalanzó sobre él, lo presionó y lo frotó sobre sus pantalones: —vamos, vamos, vamos, es mi turno. 

Qiu Yi enganchó su brazo alrededor de su cuello, lo besó y la respiración de ambos de pronto se aceleró. 

Bian Nan estaba muy satisfecho con los pantalones deportivos de Qiu Yi el día de hoy. Con simpleza podía bajar su mano, sin obstáculo alguno.

Este tipo de sensación es maravillosa, los dedos de Qiu Yi sobre su espalda tenían un toque de frialdad y la trayectoria sobre su piel era clara. La respiración acelerada de Qiu Yi debido al movimiento de sus manos, junto con la emoción de la puerta cerrada, entrelazadas con el nerviosismo y el deseo incontrolable, era muy emocionante. 

Cuando sus manos se movieron más rápidos, el gemido bajo de la acelerada respiración de Qiu Yi fue en aumento, los cuales revoloteaban en sus oídos. Soltó los labios de Qiu Yi, bajó la cabeza y mordió su pecho. 

La mano de Qiu Yi se deslizó desde su espalda hasta su cintura, para luego lentamente bajar bajo sus pantalones. 

. . .

El perro del patio de al lado ladró dos veces antes de que Bian Nan volviera en sí, bajo el jadeo de ambos. Se dio la vuelta y se acostó sobre la cama, para tomar una caja de pañuelos que estaba junto a la cama, sacar algunos y entregárselo a Qiu Yi. 

La emoción no se había desvanecido por completo, se acostó por un rato antes de arreglarse y subirse los pantalones. 

—Oye, Dabao, —Se dio la vuelta y colocó su pierna sobre el estómago de Qiu Yi: —la manera en como gemiste, sé escuchó bien. 

—¿Debería darte las gracias por ese elogio? —Qiu Yi sonrió. 

—No es necesario —Bian Nan levantó la cabeza y lo miró: —Solo permíteme seguir escuchándote en el futuro. 

—Ah —Qiu Yi de repente se inclinó hacia su oído: —Bian Nan...Mmh, bebé, ¿te gusta esto? 

—¡Maldita sea! —Bian Nan de repente lo escuchó jadear y gemir tan repentinamente que su corazón dio un vuelco. Además de que acababa de terminar el trabajo y era realmente incapaz de mantener la cabeza en alto, por lo que presionó con fuerza a Qiu Yi: —¿Estás buscando que te folle? 

—¿Tú quieres? —Qiu Yi estaba divertido. 

—Oye —Bian Nan lo abrazó y lo frotó con fuerza: —no lo digas, ¿es realmente extraño no quererlo? 

Qiu Yi sonrió y no habló. Bian Nan lo abrazó por un momento, luego se dio la vuelta y se sentó: —Mejor no, no hay que pensarlo a ciegas, no quiero hacerte daño. 

Qiu Yi se divirtió durante mucho tiempo, se sentó, se colocó la ropa y le dio unas palmaditas sobre su pierna: —Háblame sobre tu pasantía. 

—¿Mm? —Bian Nan lo miró. Pero uego lo señaló después de un rato: —Realmente puedes apagar el jodido fuego. 

—Si se apaga, que se apague, de todos modos se vuelve a encender —Qiu Yi se apoyó sobre la cabecera de la cama: —¿Acaso algo no salió bien? 

—Algo así —Bian Nan se sentó a su lado y se apoyó en él: —Simplemente, Lao Jiang me preguntó si me gustaría ser asistente de un club de tenis. Pero cuando fui a casa, e iba a conversar con mi papá, solo descubrí que él y mi tía tenían algo arreglado para mi. 

—¿Arreglaron que fueras a la empresa familiar o algo así? —Qiu Yi sacó un pitillera debajo de la almohada, sacó un cigarrillo y lo encendió. 

—Si fumas así dentro de la habitación, ten cuidado. Erbao luego te reprenderá —Bian Nan lo miró. 

Qiu Yi se levantó de la cama, abrió la ventana y luego simplemente simplemente se acomodó a un lado de él: —Continúa. 

—Quieren que vaya a la empresa logística familiar y aprenda de ella. Bian Hao está a cargo de la compañía ahora mismo —Bian Nan suspiró: —y que Bian Hao me instruya, realmente no sé en qué están pensando. 

—¿Ellos no saben qué es lo que piensas tú? —Qiu Yi sonrió. 

—Lo dudo —Bian Nan acarició la pierna de Qiu Yi. ¿Cómo podrían saberlo? y aunque por lo general no le gustaba pensar en estas cosas. ¿Cómo podría él, que había estado reprimiendo su vida en tal atmósfera desde que era un niño, no saber ellos el por qué? 

—¿Entonces vas a ir? —Qiu Yi preguntó. 

—No, por supuesto que no —dijo Bian Nan— ¿No es como buscar a la misma muerte si voy?. Pero entonces, le dije a mi papá que quería ir al club y él no estuvo muy contento con esto, diciendo que no tengo futuro en eso. 

Qiu Yi no dijo una palabra, solo lo abrazó por sus hombros. 

—Qiu Yi —Bian Nan giró la cabeza para mirarlo: —Si fueses tú, ¿irías? 

—¿Qué sucede con Bian Hao en la empresa? ¿Él se opone a esto? —Preguntó Qiu Yi con un cigarrillo en la boca. 

—Él no se opuso. A la empresa le está yendo muy bien, o de lo contrario, mi papá no le habría confiado todo —dijo Bian Nan: —¿Irías?

—Podría ir —Qiu Yi sonrió: —después de todo, es un punto de partida más alto que un club. A veces, las fortalezas de una persona también se fortalecen sobre el dinero y los antecedentes familiares, ¿no? 

—Tú, chico realista —Bian Nan chasqueó la lengua. 

—No puedo evitarlo —dijo Qiu Yi con una sonrisa: —pero realmente no puedo entender el conflicto entre tú y Bian Hao. Si realmente te vas a ese lugar, tal vez no necesariamente actúe así, solo creo que si Bian Hao es alguien que puede hacer tales cosas, probablemente no sea demasiado escandaloso en el trabajo.  

—¿Entonces me estás diciendo que lo intente...? —Bian Nan vaciló. 

—No, no, eso no es lo que quise decir, —Qiu Yi tomó la pitillera vacía, tomó su cigarrillo y lo aplastó: —Pero si me lo preguntas y hablando desde mi perspectiva, dudo que sea capaz de seguirle la mentalidad a Bian Hao. 

—Joder —Bian Nan sonrió e inclinó la cabeza hacia atrás: —En cuanto a mi, de todos modos estoy acostumbrado a eso. A equivocarme y no ser capaz de soportar muchas cosas, esa es mi desventaja. 

—Solo tómatelo con calma —Qiu Yi se deslizó sobre la almohada y se acostó: —Es bueno que vayas al club y lo intentes, al menos es algo con lo que estás familiarizado. 

—Mm —Bian Nan extendió la mano y jugó suavemente con su cabello. 

—Pero si vas, hazlo bien. No seas descuidado y poco serio. 

—Maldita sea, no seré así. 

—Además, —Qiu Yi sonrió: —no siempre pienses que esa familia no tiene nada que ver contigo, al menos ese padre es tu padre. No te rindas por tu propia iniciativa, pero por supuesto, esta es solo mi opinión, después de todo nuestras situaciones son diferentes y no tengo el derecho de decir demasiado. 

—Debido a la poca confianza —dijo Bian Nan. 

—Mm, sí —Qiu Yi giró la cabeza y tocó la punta de su nariz: —¿También lo entiendes? 

—Por supuesto que lo entiendo, no soy estúpido —Bian Nan se rió un par de veces: —pero no es algo sencillo, así que primero intentémoslo. Asi que, si ves que no puedo, solo dame un empujón. 

—Basura —Qiu Yi sonrió. 

—e inútil—Bian Nan se dio la vuelta y lo abrazó: —¿Qué debería hacer? 

—Admitir tu mala suerte —dijo Qiu Yi. 

Bian Nan se rió, lo abrazó y lo besó: —Que lamentable por ti, este Gege te está haciendo tanto daño. 

—Estás loco —Qiu Yi le mordió ligeramente los labios: —¿Sabes lo que hiciste ayer? 

—¿Qué más pude hacer? me acosté y dejé que actuaras como un hooligan —dijo Bian Nan con una sonrisa. 

—Me mordiste la lengua, luché a la hora de comer el día de hoy —Qiu Yi suspiró. 

—¿Ah? ¿Realmente te mordí? —Bian Nan se colocó ansioso y lo miró mientras lo sostenía entre sus brazos: —¡Pensé que te había mordido dentro de un sueño de hooligan

—Eres increíble —Qiu Yi estaba divertido: —incluso sangré. 

—Ah —Bian Nan le dio un fuerte beso en los labios: —Supongo que estaba demasiado emocionado, solo fue una mordida, si pudiera comerte... 

—¿Y si? —Qiu Yi entrecerró los ojos. 

—¡No finjas! —Bian Nan le mostró los dientes. 

—¿Quieres follar? —preguntó Qiu Yi. 

—¡A la mierda Qiu Dabao! ¿puedes ser más sutil? —Bian Nan reprimió su voz y gritó. 

—Me dijiste que no fingiera —Qiu Yi sonrió y lo abrazó: —¿Lo quieres hacer?

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[1] 娘子军连歌, Esta canción es una canción revolucionaria muy conocida. Originalmente fue el tema principal de la película " Destacamento Rojo de Mujeres ". La película trata sobre las hazañas del Destacamento Rojo de Mujeres en Hainan durante la Segunda Guerra Civil Revolucionaria .

[2] Amor de hija (女儿情) con la voz de Wu Ying (吴静)