Capítulo 64
Lakis había salido mientras Yuri estaba fuera y en ese momento estaba regresando. Como siempre, para moverse lo más rápido posible y no ser notado por otras personas, eligió moverse por el techo de los edificios.
Era algo que podía calificarse de hazaña, si alguien lo veía. Lakis se movía rápidamente por los tejados sin la menor molestia, como si corriera por el suelo.
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"¿Quién dice "sé mi mujer" de la nada, es la moda entre los nobles ligar así?"
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Entonces recordó de repente lo que dijo Yuri ayer y cambió de dirección hacia la cafetería. Quería ver personalmente qué vagabundo le estaba diciendo esas tonterías.
Pero de camino a la cafetería, Lakis encontró a Yuri.
"¿Se conocen?
En ese mismo momento, las cejas alzadas de Lakis se crisparon mientras una molesta voz sonaba en su cabeza.
-¿Hm? Ahora que lo pienso, los dos tienen el pelo negro, ¿no? Es un color raro, ¿están emparentados con la sangre? ¡Ja, ja, ja, Lakis! ¿No te vas a cortar del todo?
"Basta de tonterías".
Dijo fríamente.
¿Cómo podían estar emparentados el dueño de la casa en la que se alojaba y la familia Crawford de Oriente? El rey del mundo oscuro, Lakis, y el gobernante de Oriente, Crawford, no coincidían.
Además, Lakis pensaba ocultar su identidad hasta que volviera a Carnot, así que si Yuri tenía alguna relación con los Crawford, la situación se pondría rara.
Sobre todo, cuando pensó en cómo Kalian Crawford y Yuri se atacaron de verdad la última vez en el mercado negro, la sospecha del bicho no tenía sentido.
Sin embargo...
¿Por qué entonces estaban los dos frente a frente ahora mismo? De forma tan amistosa, además. Por supuesto, su relación amistosa era sólo un malentendido de Lakis, pero él no lo sabía todavía.
-Siempre dices que me equivoco cuando señalo algo. Entonces, ¿por qué están los dos juntos?
La voz en su cabeza hizo la misma pregunta en la mente de Lakis.
-¡Ah...! No me digas... ¿tienen ese tipo de relación?
Y al momento siguiente, lanzó un grito en su cabeza como si se hubiera iluminado.
-¡Claro, ese es el pensamiento normal cuando un joven y una mujer están juntos! ¿Es ésta una de esas tramas de novela en las que el hombre no conoce la identidad de la mujer y se enamora?
El aire que rodeaba a Lakis se volvió más frío. Estaba inexplicablemente más molesto que cuando el bicho balbuceaba tonterías sobre el parentesco entre Yuri y Kalian.
‘... ¿es ese gamberro? El que le dijo a Yuri esas mierdas ayer'.
De repente, el cuerpo de Lakis se llenó de intenciones asesinas.
Sus ojos azules miraron fijamente a los dos que ahora se habían separado y empezaron a seguir su camino, y luego se dio la vuelta. Detrás de él, estaba el sol rojo poniente.
* * *
Cuando Yuri llegó a casa después del trabajo, estaba oscuro. Yuri se había acostumbrado a llegar a una casa poco iluminada desde hacía algún tiempo, así que se detuvo tras abrir la puerta.
Un portazo.
El sonido de la puerta cerrándose tras ella resonó con fuerza en la silenciosa habitación. Sin embargo, no estaba completamente oscuro. Un resplandor rojizo se asomaba entre las cortinas ligeramente levantadas.
Lakis estaba de pie frente a ella, mirando tranquilamente a Yuri.
Yuri recordó de repente lo ocurrido ayer y se sintió un poco incómoda. Entonces recordó bruscamente que siempre que volvía de fuera, Lakis la saludaba. Así que Yuri dudó un momento y luego abrió la boca impulsivamente.
"He vuelto".
Las palabras que pronunciaba por primera vez se sentían extrañas e incómodas en sus labios.
"Sí, bienvenida".
Lakis respondió a Yuri en voz baja.
Al llegar a la mesa, Yuri sintió de repente que algo estaba fuera de lugar. El aire que rodeaba a Lakis era diferente al de la casa.
"¿Ha vuelto a salir?
"Yuri".
Justo en ese momento, Lakis susurró su nombre y comenzó a moverse hacia ella. Su sombra oscura se acercaba rápidamente. Su pelo rubio teñido con el brillo del atardecer se agitaba suavemente ante sus ojos.
Antes de que pudiera pensar en reaccionar, se vio cubierta de calor. Lakis se acercó en un abrir y cerrar de ojos y cogió la mano de Yuri, enredando sus dedos con los de ella.
Un enorme torrente surgió en ella de sus dedos entrelazados.
"Ah..."
Un débil sonido salió de sus labios rojos ligeramente separados, pero era difícil decir si era un suspiro o un gemido. Los pelos de su nuca se erizaron y su cuerpo rebosó de una emoción parecida a la alegría. Extrañamente, las olas de hoy eran más intensas que de costumbre.
Sin darse cuenta, Yuri se tambaleó y dio un paso atrás. Pero había una mesa detrás de ella que detenía su movimiento, y el otro brazo de Lakis le rodeaba la cintura para que no pudiera retirarse más.
Se tambalea.
El agarre de Yuri de la bolsa de papel que tenía en la mano se debilitó. La manzana verde que traía de vuelta cayó al suelo, se rompió y su dulce olor se esparció por el aire. La bolsa de papel cayó y el cuerpo de Lakis ocupó el hueco. Pudo sentir con mayor claridad la temperatura del cuerpo en sus manos.
"Señorita Yuri".
Lakis volvió a susurrar su nombre. La mirada de Yuri quedó atrapada por la intensidad azul que tenía delante de ella.
"Tengo algo que me da curiosidad..."
Su voz grave llegó a sus oídos.
"¿Vas a responder?"
Sus ojos azules, tan profundos como el mar, estaban tan cerca de Yuri y la cautivaron.
Yuri hizo un pequeño gesto con la cabeza, como si estuviera poseída por algo. Entonces los labios de Lakis dibujaron un suave arco como si estuviera felicitando a un niño por la respuesta correcta.
"Desde que estoy aquí, no he visto ninguna señal de nadie más que de ti en esta casa".
Su voz baja y amortiguada le hizo sentir un pinchazo en los tímpanos. De alguna manera, al escuchar su voz, se sintió como una abeja empapada en miel.
"Háblame de tu familia".
Yuri estaba un poco aturdida y repitió las palabras de Lakis en su mente.
¿Por qué me pregunta eso?
Oh... tal vez se esté preguntando si alguien podría venir a visitarme mientras él está aquí".
respondió Yuri, un poco despistada:
"No tengo... nada de eso".
"¿No tienes?"
"Sí, soy huérfana, así que... estoy sola".
La mirada de Lakis se posó en el rostro de Yuri durante un rato. Después de un rato, Lakis hizo su segunda pregunta.
"Entonces... aunque no sea familia, ¿qué pasa con la persona que se ha quedado contigo hasta ahora?"
Con las manos entrelazadas, el dedo de Lakis acarició lentamente el dorso de la mano de ella de forma cosquillosa.
"Nadie..."
Yuri podía sentir incluso ese pequeño movimiento suyo y su respiración era superficial mientras respondía.
"No había nadie".
En ese instante, un brillo inexplicable pareció relucir en los ojos de Lakis. Su gran mano agarró la de ella con más fuerza. El cuerpo firme que obstruía la vista de Yuri se inclinó un poco más hacia ella.
"Ya veo... entonces supongo que soy el primero".
De alguna manera, su susurro parecía extrañamente satisfecho. Su voz posterior era un tono más bajo.
"¿Hay alguien a quien estés viendo ahora mismo?"
"¿Alguien a quien estoy viendo...?"
"Un amante".
Cuando Yuri preguntó incrédula, Lakis volvió a explicar amablemente.
"No sólo en esta casa, sino..."
La extensión de su suave voz era demasiado pegajosa.
"Cualquiera en tu mente".
La estimulación que fluía en ella era demasiado fuerte que sintió que la fuerza abandonaba su cuerpo.
Ah... como ella pensaba, tocarlo así se sentía tan bien, que no podía explicarlo con palabras. Pero no pudo evitar preguntarse, ¿por qué? Últimamente se había adaptado a ello, así que cuando tocaba a Lakis, la estimulación no era tan intensa. Pero ahora, su corazón se llenó de una sensación de satisfacción que era casi placentera.
"No hay... ninguna persona así".
"¿De verdad?"
Su cuerpo, que había perdido fuerza, se inclinó gradualmente hacia atrás. Su mano que empujaba la mesa también se perdió. Yuri se apoyaba casi por completo en la mesa. Pero los brazos que rodeaban su cintura la acercaron.
Ahora, sus rostros estaban tan cerca que sus narices casi se rozaban. El aroma de él, que permanecía bajo su nariz, hizo que su mente se tambalease, como si se tratase de algún tipo de droga.
Yuri volvió a responder con un "Sí...", con la voz un poco dispersa.
"El hombre que conociste antes en la plaza".
Y al momento siguiente, un ligero recelo se apoderó de la mente de Yuri.
"¿Por qué estaba con Kalian Crawford?"
¿Cómo sabía Lakis que había quedado con Kalian Crawford? Obviamente, él salió hoy mientras ella no estaba.
"Nos encontramos por casualidad hoy... y nos saludamos..."
Al instante, los ojos de Lakis adquirieron un brillo.
"¿Hoy?"
A él no se le escapó la palabra que ella dijo casualmente.
"Parece que os veis a menudo".
Por alguna razón, Yuri sintió que Lakis estaba siendo celoso en este momento.
"Quizás..."
Y pronto, una voz muy apagada brotó de sus labios.
"¿La persona de la que hablaste ayer es Kalian Crawford?"
¿Ayer? La persona de la que hablé ayer...
Yuri no entendió de inmediato a qué se refería Lakis. Pero pronto se dio cuenta de que hablaba de Damon Salvatore.