Capitulo 108

Se llevó a cabo una investigación exhaustiva de la escena de la explosión, pero no se encontraron pruebas para determinar la causa. Lo mismo ocurrió con los guardias. Los 20 hombres que estaban a cargo de la escolta ese día fueron investigados, pero no se encontró nada sospechoso.

—Hay uno que es el más sospechoso.

Declan dejó su taza de té y negó con la cabeza con frialdad.

----No hay evidencia clara.

Agregué, tomando una galleta de mantequilla en lugar de té. Estábamos en la terraza ahora mismo, tomando té mientras sentíamos la brisa de las tapas.

—Si hubiera sido alguien a quien pudieran atrapar tan fácilmente, no habría sufrido esto.

El culpable en el que él y yo estábamos pensando era el Duque Otienne. El día del incidente, los aristócratas vinieron repentinamente y pidieron audiencia, así que gané el premio. El motivo de la audiencia no parecía mucho.

----Entonces, tengo que planificar bien esta operación.

Para poder devolverla varias veces. Cuando pienso en las vidas que casi pierdo ese día, mi la ira hierve incluso ahora.

❃❃❃

Unos días después, el hombre de alguien apareció en una prisión oscura y oscura.

—Salihan.

Salihan, que estaba apoyado contra la pared, abrió lentamente los ojos.

—Su Excelencia le ha enviado.

—Has cumplido tu promesa. Mi señor es un hombre así.

Había una pequeña cantidad de alegría en su rostro demacrado.

—¿Estás listo?

—Sí, también encontré un cuerpo para reemplazar.

—Debes haber sufrido mucho.

—No.

Salihan le dio una palmada en el hombro a Han sin decir una palabra. Al levantarse de su asiento, Han sacó la llave de su bolsillo y abrió la ventana de hierro.

—Cámbiate de ropa.

Cuando salió de la jaula, arrojó el cadáver que otros hombres enmascarados tenían dentro. El físico y el color del cabello del cuerpo eran comparables a los de Salihan. Los hombres enmascarados luego le pusieron la ropa que llevaba Salihan en el cuerpo.

—No notarás que es falso, ¿verdad?

—La carne ya se ha descompuesto por el veneno y el rostro está irreconocible.

Después de revisar el rostro del cuerpo una vez más, se puso una túnica negra que Han le dio y presionó profundamente la capucha. Los enmascarados dejaron la botella de veneno y la nota alrededor del cuerpo, salieron y volvieron a cerrar la ventana de hierro.

—Te vas ahora.

Salihan miró el cuerpo dentro de la jaula y luego caminó en silencio. El guardia estaba ausente porque ya lo había sobornado, y los guardias ya habían sido derribados por Han y sus compañeros. Cuando salí del sótano y llegué al primer piso, respiré profundamente el aire cambiado.

No importa cuánto lo intente el emperador, no puede derrotar a su maestro.

Esta vez, volvió la cabeza inesperadamente, pero estaba en la palma de su mano.

Esta vez, seguro que dejara de respirar.

Salihan se apresuró a levantar las comisuras de la boca.

❃❃❃

<Han se movió. No esta solo esta vez.>

Tan pronto como recibí el informe de Shadow, me dirigí a la Prisión del Palacio Imperial con Liam y otros caballeros.

----¿Nos escapamos esta noche?

—Es muy probable. Han, que siempre se movía solo, se movió con otros.

Declan respondió a mi pregunta de manera sensata. Ya sea que el Duque Otienne planea sacar a Salihan, Han deambulaba por la prisión como si la estuviera espiando.

—Liam, rodea la entrada, encuentra un lugar para escapar y séllalo.

Liam inclinó la cabeza e instruyó a los caballeros, y se movieron rápidamente, ocultando su presencia. En poco tiempo, la quietud descendió hasta el punto en que ni siquiera se podía escuchar el sonido de los insectos de la hierba, lo que me puso aún más nerviosa.

Por favor, no se filtre a otros lugares.

Esa vez, mientras se escondía en la oscuridad con Declan, esperando a que Salihan saliera.

Clack clack.

Las capas negras comenzaron a aparecer en la entrada. Los caballeros que los esperaban levantaron sus espadas y se tensaron. En el momento en que fueron completamente revelados, el aplauso de Declan rompió el silencio. La luna, que había sido oscurecida por las nubes, apareció de nuevo, iluminando a Declan.

¡Ahora muéstrate!

Para confirmar sus identidades rápidamente, crearon esferas con poder divino y las hicieron flotar en el aire. Entonces, Salihan con una capucha negra y los hombres enmascarados, así como los caballeros que los rodeaban, lucieron brillantes.

—Aun así, no te desviaras ni un centímetro de mis expectativas.

Declan tomó la espada y dio un paso adelante con una sonrisa fría.

—Pensé que no conocía tus planes.

Salihan se quitó lentamente la capucha. Su rostro estaba pálido, pero no había conmoción.

—¿Pensaste que podrías salir de la cárcel? Nunca me pierdo un juego una vez que lo atrapo.

—Su Majestad no me atrapó, lo hice.

Salihan resopló y respondió tranquilamente. Inclinó la cabeza solo hacia el Duque Otienne, y el artillero atravesó el cielo.

—¿Crees que el plan para derribar al Duque ha fallado? Estás equivocado.

Declan lo levantó y se rió como si fuera una lástima incluso para él.

—El objetivo del juicio ese día eras tú, no el Duque. Quiero decir, fuiste tú quien se atrapó en mi trampa.

El rostro sarcástico de Salihan se endureció en un instante.

—Todo, desde que el Príncipe de Tiera reveló al duque, hasta que reveló la carta secreta para llamarte.

Estabas jugando en la palma de mi mano. Declan se rió a carcajadas y Salihan lo miró con expresión confusa.

—No crees que lo único que estoy buscando es un Duque, ¿verdad?

Salihan, que se dio cuenta de sus intenciones en ese momento, se mordió el labio.

—Mi padre no tiene nada que ver con esto.

—La verdad no importa. Es solo por esa razón. Es suficiente para lograrlo.

—...Su Excelencia no solo estará mirando.

—No te preocupes. El Duque Otienne te seguirá pronto.

—¡Demonios! ¿Crees que puedes vencer a tu jefe?

Su boca se torció ante la voz aguda.

—El Duque es bonito, así que no veo nada a la vista. Vi que también abandonó el ejemplo del emperador.

—Oye, ¿crees que la persona que mató al Emperador es digna del emperador?

Qué quiero decir. Miré a Salihan, que estaba acortando su vida por mi cuenta.

—¿Qué más has hecho además de estar loco por las muñecas y correr como un asesino?

Mientras Salihan continuaba, la expresión de Declan se volvió cada vez más fría.

—No podrás proteger nada a partir de ahora. Al igual que perdiste a la princesa, lo perderás todo.

La mano de Declan temblaba y temblaba mientras sostenía la espada. Esos ojos brillaron ferozmente como si fueran a desgarrar y matar a Salihan en cualquier momento. Pero pude ver las cicatrices y los miedos escondidos más allá de esa vida.

¿Dónde está eso de excavar a través de las heridas de Declan?

Sintió una sensación de sobresalto cuando agarró suavemente la mano de Declan, reprimiendo su rabia hirviente. Lenta y suavemente, acarició su mano, como para hacerle saber que estaba aquí contigo. Luego, la mano rígida comenzó a aflojar gradualmente.

----Nunca me apartaré de tu lado. Nadie puede lastimarme.

Repitió una y otra vez hasta que se calmó. Para ser honesto, quería cortar a Salihan de inmediato.

Pero si los matas ahora, te perderás un juego más grande.

Sobre todo, ya no quiero manchar la espada de Declan con sangre.

—Ahhh.

Exhaló profundamente, como si tratara de calmar sus emociones. Sin embargo, todavía había ansiedad en los ojos verdes. No tengas miedo, le dije que estaría bien.

—...Arresten a esos criminales. Asegúrese de capturarlos vivos.

Cuando se calmó y dio la orden, los caballeros se movieron.

¡Chang!

El sonido de los bruscos choques de los cuchillos resonó en el aire uno tras otro. Salihan se enfrentó a los caballeros con una daga, pero pronto fue vencida. Los hombres enmascarados también aguantaron durante bastante tiempo, pero no pudieron derrotar a la mayoría de los caballeros de élite. Se arrodillaron en el suelo con las manos y los pies encadenados.

—No perderé nada más por ti. Así que mira.

Esta vez lo perderás todo. Esas palabras fueron como una promesa que Declan se hizo a sí mismo.

—Pruébalo. Sería interesante verte caer en la desesperación después de esforzarte hasta el final.

Salihan dijo con sarcasmo y una expresión de desprecio en su rostro.

De lo contrario, no se llama rabia.

De repente, me pregunté qué tipo de expresión haría si el Duque Otienne colapsara.

—Veamos cuánto tiempo puedo reírme así.

Declan levantó una comisura de la boca, aparentemente pensando lo mismo.

—Contener a cada uno de ellos en confinamiento solitario.

El confinamiento solitario era un espacio estrecho y cerrado cerrado por gruesas puertas de hierro, donde se guardaban los delitos graves. Quizás nunca más intentarán escapar.

❃❃❃

—Je je, el Marqués de Berchen intentó asesinar al salvador.

—No, pequeño loco, ¡que diablos estas haciendo!

—¿Y si supieras esto de antes?

—Ya en estos días, el número de creyentes está aumentando, por lo que el poder de la denominación se está fortaleciendo, dijo.

—Por cierto, el salvador está a salvo, ¿no?

Los que hablaron del Marqués de Berchen fueron principalmente la facción imperial y los viejos nobles de la facción neutral. Mientras tanto, el Duque Otienne abrió la boca.

—Aún así, está arruinado. Es un castigo demasiado grande.

—Su Salvador es la prometida de Su Majestad. Intentar asesinarlo equivale a rebelarse contra Su Majestad.

Respondió el Duque de Buckle Lou, que estaba sentado en silencio en su asiento. Los dos ojos se encontraron con fuerza.

—Es una exageración decirlo. Aún no estás casado, así que aún no eres miembro de la familia real.

—Ni siquiera debes saber que la prometida de la familia imperial debe ser tratada como un cuasi-emperador.

—Aun así, no se puede decir que tengan el mismo estatus que la Familia Imperial. Entonces, solo es necesario castigar al Marqués.

—Creo que Su Majestad le ha dado el castigo que se merece. Nunca habrá más tonterías por esto.

Dijo el Duque Buckle Lou, con la mirada fija en el Duque Otienne. Incluso después de reconocer la intención, el Duque Otienne lo miró con facilidad.

—El sol del Imperio de Borgoña, Su Majestad el Emperador llega.

La puerta de la sala de conferencias se abrió con el grito del sirviente. Declan se acerca a su trono, y Mason lo sigue y se sienta junto al Duque de Buckle Lou.

—Hoy, comenzaremos con la agenda urgente.

La sala de reuniones rugió ante la palabra de una agenda urgente.

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