Capítulo 17

Me giré ligeramente hacia un lado para poder mostrar mi cara llorando lastimosamente.

“Firentia”

“Ja, abuelo...”

Pude ver como el indicador de ira de mi abuelo se disparaba aún más después de verme llorar.

“Eh, madre”

Cuando miré detrás de mi abuelo a través de sus dedos secándose las lágrimas ante el murmullo de Meiron, Shanannet caminaba con una cara no menos enfadada.

A diferencia de mi abuelo, que se detuvo frente al príncipe y los caballeros, Shanannet siguió caminando.

Y habló con frialdad frente a los escoltas del príncipe.

“Quítense de en medio”

Eso fue todo lo que dijo, pero los caballeros imperiales tuvieron que retroceder un paso cada vez y hacerse a un lado para que Shanannet pudiera pasar.

“¿Están bien? ¿Dónde se han hecho daño?”

Era un tono tranquilo, pero la voz le temblaba.

Quizá estaba muy preocupada porque sabía que los gemelos estaban conmigo.

Agaché la cabeza porque estaba avergonzada.

“Tia”

Me llamó Shanannet.

Me limpió las mejillas empapadas de lágrimas y dijo.

“¿Estás sorprendida?”

“Oh, no. No pasa nada”

Dije mis verdaderos sentimientos de golpe, pero a Shanannet le pareció que actuaba con dignidad.

Me acarició el pelo un par de veces y miró fríamente a Astana.

“He oído que el Príncipe viene a mi casa, pero no sabía que fuera un invitado tan grosero”

Dijo el abuelo al verme moquear.

“¿El Príncipe no ha oído hablar de la Lombardi y de la promesa imperial?”

“Me he enterado”

Astana se vio presionada por la energía de mi abuelo y no pudo levantar la nariz tanto como antes.

Sin embargo, eso no significaba que estuviera completamente al tanto del ambiente.

“¿Sabe mi padre de esa ridícula regla? Si sabe que hay una tierra en este imperio que no permite entrar a los caballeros de la familia imperial, no podrá quedarse”

En el momento en que Astana dijo eso, vi un profundo golpe en el rostro de mi abuelo.

Ahora estás muerto, pequeño estúpido.

“No es Jovanes, el padre del príncipe, sino un voto con el primer emperador, Romatili Durelli, y Benoch Lombardi, el entonces gobernador lombardo”

“Oh, el nombre de mi padre...”

El príncipe parecía más sorprendido de que mi abuelo llamara al nombre del emperador que de las antiguas promesas de los Durelli y los Lombardi.

Es correcto el nombre del emperador.

Pero el abuelo está bien.

Es el líder favorito de Lombardi.

Lo que significaba el antiguo juramento estaba claro.

No era sólo una disciplina militar.

Una relación mutuamente inviolable.

Y una alianza que debía mantenerse para la supervivencia del Imperio.

Esta era la relación entre la familia real Durelli y Lombardi.

Durante la larga historia del imperio, hubo varios emperadores que lucharon por escapar de las garras de Lombardi, pero ninguno lo consiguió.

Lo mismo ocurrió con el padre de Astana, el emperador Jovanes.

El abuelo gritó a la niñera y a los caballeros que estaban a su lado sobre Astana, que se quedó sin palabras.

“¿Es porque el principito aún no sabe distinguir el bien del mal?”

“Lo siento, lo siento”

Las niñeras y los caballeros inclinaron la cabeza.

Aunque estaban obligados a seguir las órdenes del emperador extremo, eran muy conscientes de lo que ocurriría si tocaban a Lombardi.

“Pasaré esto pensando que sigue siendo un error que el príncipe ha cometido”

Dijo que no protestaría oficialmente contra el emperador, atendiendo a lo que ocurriera entre los niños.

Si el abuelo se queja ante el emperador por haber roto su juramento, no tendrá más remedio que disculparse. Fue un gesto generoso aguantar este tiempo para salvar la cara del emperador Jovanes.

Mi abuelo, ¡qué genial eres!

Temblé de emoción al ver a mi abuelo siendo un Lombardi.

Entonces una mano me dio una palmadita en el hombro.

“No pasa nada. No te preocupes”

Shanannet parecía pensar que yo seguía asustada.

Pero Astana aún no había roto su terquedad.

Me señaló y me miró fijamente.

“¡Ja, pero esto pasó porque esa chica no me hizo caso! ¡Desobedeció las órdenes de recoger el sombrero y lo tiró más lejos!”

“Cuida tu lenguaje, Príncipe”

El abuelo volvió a lanzar un destello de sus ojos y advirtió.

“Parece que mi nieta debería haber recogido el sombrero del príncipe como una sirvienta”

“Eso es un hecho...”

La niñera agarró al príncipe por el hombro a toda prisa.

Tenía la intención de detenerse. El príncipe, que no pudo contener su ira durante un rato, acabó dando una bofetada a la niñera en la mejilla.

Se giró con tanta fuerza que su ropa se agitó y dijo en voz alta

“¡Vámonos! ¡No quiero estar más en este lugar!”

Hasta el final.

El príncipe se fue con los pies golpeando, y la paz finalmente llegó.

“Lo siento, señorita”

“Si usamos nuestros cuerpos, no sabemos cómo saldrán”

Los guardias que siguieron a los guardias se disculparon conmigo una y otra vez.

“No pasa nada. Si lo hubiera detenido en ese momento, habría dejado que sacara una espada”

Eso es todo lo que tenemos.

Estaba animando a los guardias y vi a dos personas que subían corriendo las escaleras por las que acababa de bajar el príncipe.

Eran padre, Vieze y Bellezak, que esperaban al príncipe en la puerta principal del edificio principal.

“Papá, ¿qué demonios está pasando aquí? ¿Por qué su majestad está tan enfadado porque se ha ido?"

“Firentia”

Mi abuelo ignoró a Vieze y me llamó.

Me voy a meter en un lío.

Respondí cortésmente para parecer lo más lamentable posible.

“Sí, abuelo”

“Buen trabajo”

“... ¿Qué?”

“Lombardi debe ser Lombardi delante de cualquiera”

El abuelo dejó las palabras y volvió a la oficina.

Debió significar realmente "buen trabajo", pero aun así me siento mejor.

Y mi abuelo, me gusta más Lombardi.

Shanannet me dijo de pie mirando su espalda.

“Debes haberte sorprendido mucho, así que vamos a tu cuarto”

“Estoy bien”

Realmente estaba bien, pero supongo que aún era joven.

Cuando intenté caminar, mis piernas se relajaron y casi se desplomaron.

Cuando Shanannet me vio, soltó un pequeño suspiro y le dijo al guardia que estaba a su lado.

“¿Puedes retener a Firentia en su residencia?”

“¡Oh, sí! Por supuesto”

Al final me detuvo un guardia de seguridad y volví a mi habitación, y por el camino me quedé dormida en algún lugar.

Hoy también fue un día agitado.

Gallahan quería ver la cara de su hija lo antes posible, así que cruzó dos o tres escaleras y volvió a casa.

“¡Tia, papá está aquí! ¿Hmm? ¿Qué haces aquí?”

Gallahan salió un rato y volvió a entrar en una escena muy desconocida en la que Shanannet estaba sentada en su salón.

Era para asegurarse de que había encontrado la casa correcta.

“Gallahan”

“Sí, hermana”

“¿Te gustaría sentarte aquí un momento?”

Risas.

Gallahan tragó saliva con fuerza para que le sonara la garganta.

El ambiente era extraño. Gallahan, que confirmó que su hija estaba dormida, se sentó tranquilamente en el sofá como ordenó Shanannet.

“Hoy Tia se ha dormido rápido, jaja”

De alguna manera, hizo un escándalo para aliviar el ambiente incómodo, pero no hubo oportunidad para Shanannet.

Shanannet, que miraba con cara inexpresiva a Gallahan, que se frotaba el sudor de las palmas de las manos en las rodillas, dijo.

“Firentia debe estar cansada hoy. Estaba muy sorprendida de tener algo que hacer durante el día”

“Esto, ¿trabajo? ¿Qué pasó con Tia?”

Cuando Gallahan, sorprendido, preguntó en voz alta, Shanannet le acercó un dedo a la boca.

“¿Vas a despertarla?”

Gallahan se calló inmediatamente.

“Esta tarde...”

En voz baja, Shanannet le explicó a Gallahan lo que había pasado durante el día.

A diferencia de lo que pensó que iba a saltar de ira, Gallahan sólo dio un gran suspiro.

“Gallahan, Firentia es una niña inteligente, pero sigue siendo una niña. Ya tengo edad para cuidarla”

Shanannet habló con severidad.

“No puedo creer que le hayas dejado solo todos los días. ¿Tienes alguna conciencia como padre?”

“...No pensé muy bien”

Gallahan no pudo levantar la cabeza.

“Pero eso no significa que estés pensando en dejar lo que haces y quedarte al lado de Firentia, ¿verdad?”

“Bueno, cómo puedo...”

“Débil”

Como si lo supiera, Shanannet negó con la cabeza.

“¿Crees que padre vivirá siempre con buena salud, Gallahan?”

El hombro de Gallahan se estremeció ante su pregunta.

Nacido en el seno de una poderosa familia llamada Lombardi, era una preocupación que siempre había tenido desde que tenía la cabeza grande.

“No pienses tontamente que, si mantienes el cuerpo agachado y te quedas quieto, podrás evitar la tormenta”

El tremendo deseo de poder de Vieze era conocido por ambos hermanos.

Y cuando el asiento del jefe está vacío, la codicia debe causar un revuelo.

“Ahora no tienes poder para defender a Firentia. Lo que le pase padre ahora, y lo que les pase a ti y a tu hija”

Shanannet estaba dando un consejo sincero a su hermano menor por primera vez.

“Afortunadamente, tienes muy buena cabeza. No te resultará difícil tratar con la gente porque es fácil caerles bien. Así que utilízalos para fortalecerte, Gallahan”

Tras terminar su discurso, Shanannet se levantó de su asiento.

Gallahan, que estaba perdido en sus pensamientos y se apresuró a seguirla, le hizo una reverencia.

Shanannet, que se dirigía a la puerta con pasos elegantes que ni siquiera hacían pisadas, miró de repente hacia atrás y dijo

“Si vas a estar fuera de casa mañana, mándame a mí. No tengo mucho trabajo como tú”

“Gracias, hermana”

Ante la sorpresa de Gallahan, Shanannet esbozó una rara y ligera sonrisa y salió de la habitación.

Gallahan, que se quedó solo, abrió cuidadosamente la puerta a Tia.

Habló en voz baja después de mirar un momento la redonda frente de su hija, que estaba dormida con un sonido colorido.

“Lo siento, Tia”

Pensaba que quería a la niña tanto como a la madre que se fue primero.

El papel de los padres no iba a terminar ahí.

Gallahan rozó la frente de Tia y juró una y otra vez.

La protegeré pase lo que pase.

Al regresar a palacio, Astana fue llamada por la emperatriz nada más cambiarse de ropa.

La emperatriz saludó a su hijo con una brillante sonrisa.

“¿Has estado bien, Príncipe?”

“¿No lo has oído todavía?”

Astana no pudo responder y dudó.

Después de ver a su hijo durante un rato, la emperatriz siguió sonriendo.

“No me ha escuchado. Le dije que tuviera cuidado cuando fuera a Lombardi”

“Lo siento, señora”

Astana, complaciente, se convirtió en el hijo más suave y gentil del mundo cuando estuvo frente a la emperatriz.

“En un futuro próximo, el príncipe volverá a visitar la mansión Lombardi con el regalo de mis disculpas”

“¡Pero...! ¡Uf!”

La emperatriz sujetó la mandíbula del emperador con dolor para protestar.

“El Príncipe”

“Sí...... uh, Madre”

“Hoy has sido muy humillado, ¿verdad?”

“...... ¿qué?”

La emperatriz tocó suavemente la cara de Astana como si la hubiera sujetado hasta que le doliera.

“Responde, príncipe”

“......sí, ha sido humillante”

“¿Cuál?”

“Soy un príncipe y voy a suceder a este imperio. Pero, por cierto, ellos...”

“Es como si fueran los amos de este imperio, ¿verdad?”

La emperatriz se rió como si estuviera bromeando.

“Esa es la clase de gente que tiene Lombardi. Han perdido el respeto por la familia real, creyendo en el poder del dinero”

Los ojos de la Reina se llenaron de viva hostilidad.

“Así que no olvides nunca lo que ha pasado hoy, Príncipe”

Como era de esperar, ¡mi madre sabe cómo me siento!

“Y un día, ese niño florentino se arrepentirá de haber sido grosero con nuestro príncipe. Esta madre hará que lo haga”

Astana asintió con entusiasmo.

“Lo haré a toda costa. Así que el príncipe sólo tiene que escucharme”

“Sí, madre”

La emperatriz sostuvo a Astana en sus brazos.

Eran una madre y un hijo hermosos por fuera.



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