Capítulo 147
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Ramona.
Una persona que fue conocida como la amante de Pherez en su vida anterior.
Ramona, que siempre acompañaba a Pherez en los eventos oficiales.
Esa persona estaba aquí.
“En la parte superior de Monak Top, tiene el título de incesante, y con respecto al trabajo con la madera de Triva, parece que ella se encargó de todo".
Pensé que era un nombre que oiría algún día, pero igual me sorprendió un poco sin saberlo.
Estaba en forma.
No, sabía que se había graduado de la academia con Pherez, pero con respecto a Monak Top
No sabía que estaba trabajando allí.
De alguna manera, mi cabeza estaba en blanco.
"¿Señorita Florencia?"
Violeta me llamó ansiosa.
"¿Qué sucede?"
"No, no es nada".
Dije, sonriendo torpemente.
"Solo tengo curiosidad. Violeta tiene una gran intuición para valorar a la gente".
“Para ser honesta, Ramona tiene el talento suficiente como para querer llevarla a Pellets Company.
Con ese tipo de pasión, puedes confiar y encomendarle cualquier cosa".
Violeta asintió y dijo.
Me sentí un poco rara con esa apreciación.
Y también porque conquistó el corazón de Violeta.
Violeta parpadea sus ojos y la elogia como si pensara que yo estoy interesada en Ramona.
Comenzó a darme mayor detalle:
“… Como sabe, no pude asistir ese día a la casa de subastas, pero el agente fácilmente pudo haber ganado la subasta.
Estaba convencida de que lo haría. Por la tarde del día anterior, la encargada de Monak Top estaba bastante lejos.
Porque participé contra ellos en una subasta en la finca de D-Mac. Pero, la señorita Ramona llegó temprano por la mañana a la casa de subastas.
Probablemente estuvo montando a caballo toda la madrugada para llegar a tiempo".
"Es una persona que trabaja muy duro como dijo Violeta".
“La señorita Ramona todavía está en la propiedad de la familia Ivan, así que tal vez pueda encontrarse con ella.
Creo."
"¿Todavía está en Ivan?".
La madera de triva recolectada hasta ahora por Monak Top se guarda en un almacén en las afueras de Ivan.
Y todavía les queda tiempo para ir a Angenas.
Es por eso que todavía está en Ivan.
Eso pensé, miré a Violeta y dije riendo:
"Como dice Violeta, espero que nos encontremos al menos una vez".
Y tenía sentido.
Cuando vi la espalda de Pherez, quien salió de la mansión solo sin que nadie lo acompañara.
* * *
Vestido con ropas de civil y túnicas para pasar desapercibido, Pherez salió de los terrenos de la mansión.
Se acomodó mejor la capucha de la túnica.
Y asegurándose de que nadie lo esté siguiendo como un hábito, fue por la carretera, mezclándose por el mercado.
Escuchó atentamente.
Ingresó a un callejón del mercado en mal estado donde los nobles no caminaban a menudo.
Pherez, caminando entre la multitud con la cabeza gacha, subió a un pequeño edificio de dos pisos.
Al final de las escaleras, había una puerta con una placa de identificación, que era igualmente discreta.
[Monak Top]
Pherez, familiarizado con la puerta, la abrió y se quitó la capucha.
"Majestad."
Alguien se acercó a Pherez así.
"Ha pasado un tiempo, Ramona".
Ramona, una belleza de cabello escarlata rojizo y ojos azules brillantes.
Miró a Pherez y sonrió alegremente.
Su rostro blanco se puso rojo rápidamente.
Ramona, que se miró al espejo con una mirada de reojo, quiso llorar un poco.
Estaba enojada consigo misma por no poder ocultar sus sentimientos en absoluto.
Y con los ojos hinchados porque no pudo dejar de suspirar ni dormir ante la noticia de la llegada del Príncipe Heredero.
Tampoco le gustó su pelo rizado, que hoy estaba más desordenado.
Estas son cosas que por lo general ni siquiera le importan.
Cuando se paró frente a él, siguió viendo solo esas cosas.
Ramona dijo con una voz más alegre, tragando un pequeño suspiro:
“Preparé refrescos, Su Majestad. Te gustan los dulces".
Pero Pherez negó con la cabeza.
“Tengo que irme de inmediato. Bueno, primero recibo tu informe".
"Ah…"
Ramona miró con tristeza el pastel de chocolate que le compró a Pherez y miró hacia arriba.
Asintió con la cabeza.
Luego sacó del cajón un paquete delgado de papeles preparados de antemano y se lo entregó a Pherez.
"Entonces te lo diré mientras miras el informe".
El informe no fue muy extenso.
Durante todo este tiempo, ha estado informando constantemente por escrito, y solo cosas importantes sin decir nada irrelevante.
Esa es la forma de Ramona de recoger y entregar información.
Pherez permaneció en silencio un rato después de que terminó su informe.
Se apoyó en la ventana y leyó con atención el informe escrito por Ramona.
Y con un aleteo de la última hoja, dijo Pherez:
"Buen trabajo, Ramona".
"Gracias… Lo hago...".
El rostro de Ramona se sonrojó de nuevo.
Ha habido mucho trabajo hasta ahora, pero parecía que fue recompensado con esa sola frase.
Pherez agradeció a Ramona con un tono sencillo y no exagerado.
“Gracias a que hubo una oferta y demanda estable de madera, pudimos extraer efectivamente el presupuesto de Angenas".
"Me alegro de poder ser de ayuda, Majestad".
"Me alegra que haya alguien como tú a quien pueda confiar y encomendarle este trabajo".
Ahora las orejas de Ramona estaban tan rojas como el color de su cabello.
Pero Pherez preguntó, mirando por la ventana, no a Ramona:
"¿Qué tipo de persona es el patriarca Ivan?"
Después de reflexionar un rato sobre la pregunta de Pherez, a Ramona se le ocurrió una respuesta honesta.
“Es un típico noble del Norte. Aunque es generoso con los suyos y los jóvenes también, tiene una fuerte tendencia a ser exclusivo. Originalmente, era muy hospitalario, pero recientemente tuvo una enfermedad crónica durante mucho tiempo. Hay críticas de que su personalidad ha cambiado durante ese período de tiempo".
“La personalidad ha cambiado. Por supuesto".
"¿Qué está pasando con el patriarca Ivan?"
"Dijeron que no recibirán el dinero de socorro".
“… ¿Sí?"
Preguntó Ramona, confundida.
“Para ser precisos, no van a aceptar el dinero de la Familia Imperial. Los artículos preparados por Lombardi y Luman sí los aceptó".
"Sin embargo… No puedo entender. El Norte en este momento necesita toda la ayuda que pueda obtener, ¿por qué lo rechazan?"
"¿No es la escala del daño menor de lo que esperábamos?"
A la pregunta de Pherez, Ramona respondió con el ceño fruncido.
“Incluso con la ayuda del joven Ivan en este momento, el muro se derrumbó y muchas personas perecieron, incluso los soldados que lo custodiaban.
Hubo varias bajas. Además, las piedras de los muros de la fortaleza golpearon áreas residenciales y muchas casas están enterradas.
Incluso ahora, las personas que han perdido sus hogares tienen carpas cerca esperando que sus hogares sean reconstruidos.
Pero por qué el patriarca Ivan..."
"¿Me puedes llevar ahí?".
Pherez le preguntó a Ramona.
“No, mejor no, también conozco la geografía de Ivan, así que si me dices dónde está..."
"Yo te guiaré".
Pherez cambió de opinión y Ramona se levantó rápidamente de su asiento.
"Gracias. Entonces, por favor, Ramona".
Pherez volvió a colocarse la capucha para salir.
El sitio donde se derrumbaron las murallas de la ciudad no estaba lejos del mercado.
Pherez se paró frente a él y se detuvo.
La muralla negra del castillo hecha de roca grande y sólida de la que el territorio de Ivan estaba orgulloso se convirtió en escombros.
Estaba tirado en el suelo por todas partes.
Crack.
El dedo del pie de Pherez se enganchó en algo un poco diferente de los escombros en el muro.
Era un plato de porcelana simple.
Pherez miró hacia arriba y miró el enorme montón de tierra que había arrasado a través de las paredes.
“Debajo de mi..."
"Sí. Originalmente era un lugar donde se concentraban los hogares de los plebeyos".
La naturaleza era feroz.
Si hubieran brotado árboles verdes, se habría creído que era el jardín donde se encontraba originalmente.
Parte de la montaña derrumbada que golpeó las murallas de Ivan era enorme.
Suficiente para borrar todo rastro de las cosas que vivieron pacíficamente debajo de él.
"¿Pero por qué está tan silencioso?"
Fue extraño.
Tienen que desenterrar la tierra y sacar las piedras.
Había poca gente cerca.
En el mejor de los casos, algunos soldados estaban recogiendo la tierra con unas palas en una pequeña carreta.
“Además de esto, hay un lugar más donde las murallas de la ciudad se han derrumbado. Pero hay muchos monstruos allí.
Es un punto clave cercano al bosque. Todo el personal de recuperación se concentra allí".
“… Entiendo".
Pherez se mantuvo erguido frente a la terrible vista.
Ramona trató de inclinar levemente su cabeza para ver el rostro de Pherez.
Es tan silencioso y no hay cambios en sus expresiones faciales.
A veces, si no te tomas el tiempo de mirar la cara de Pérez, no podrás mirar en su corazón.
Fue porque no mostraba expresiones.
Por supuesto, incluso si Ramona lo hiciera, ocho de cada diez veces no lograría leer sus sentimientos. Pero igual ella lo hizo.
En ese momento, se escuchó un pequeño sonido parpadeante desde la distancia.
"Oye, señor..."
Naturalmente, los ojos de las dos personas se volvieron hacia la dueña de esa voz.
Era una niña agachada debajo de un edificio que estaba en buenas condiciones.
Una niña de unos siete años con una apariencia desaliñada miró los escombros que había con lágrimas en sus ojos descuidados.
Ramona se acercó a la niña con cuidado y le preguntó, secándole las lágrimas:
"Cariño, ¿por qué lloras así?"
"Tengo hambre…"
Se asustó.
Después de un rato, Ramona acarició la cabeza de la niña con voz amigable.
"¿Okey? Entonces, ¿vienes conmigo a la panadería de enfrente y comemos algo delicioso?
No es muy lejos, asi que tus padres no se preocuparán".
"Mamá y papá no están aquí".
Dijo la niña, secándose las lágrimas con la manga.
“Papá se fue a trabajar en el muro norte y mi madre..."
Los ojos de la niña llenaron un montón de palabras en silencio.
La casa y la madre de la niña deben haberse quedado enterrados en alguna parte de allí.
"Ah..."
Ramona perdió las palabras y abrazó con fuerza el hombro de la niña.
Pherez, que estaba mirando la escena, se dio la vuelta y caminó.
"¡Pequeña, espera un minuto aquí!"
Habiendo dicho eso a la niña, Ramona alcanzó a Pherez a media carrera. No era buena para leer la mente de Pherez, pero ahora no puedo entenderlo.
Qué enojado está ahora mientras caminaba adelante.
"¡Ey, tal vez pueda ayudar!"
"No. Esto no es algo en lo que puedas involucrarte".
Sin embargo, la respuesta de Pherez fue decisiva.
El trabajo en Monak Top y el trabajo como príncipe son definitivamente historias diferentes.
Ramona se dio cuenta de que había cruzado la línea y se disculpó.
“… Lo siento".
Pherez sacudió la cabeza de una manera inexpresiva y dijo:
"Listo. Cuando termines el trabajo del Norte, ven a la capital. En ese momento, mantendré la promesa que te hice".
Pherez,luego de decir esas palabras, se dirigió con un gran paso hacia la mansión de Ivan.
Ramona, que miró hacia atrás por un rato, se volvió hacia la niña y le dijo, sonriendo más alegremente:
"¡Vamos, esta hermana te comprará pan!"
Sin embargo, mientras tomaba la mano de la niña y entraba al mercado, la mirada de Ramona una vez más volteó para ver la silueta de Pherez alejarse.