Capítulo 22
Pero afortunadamente, ese no fue el caso.
"Los niños del orfanato de la calle Red Ferret desaparecieron. Me sorprendió mucho cuando me enteré de esto en la clínica antes."
En ese mismo momento, una luz tenue pasó por los ojos de Yuri.
Niños desaparecidos en un orfanato.
Eso es muy similar al incidente que anunció el comienzo de la novela en la que Anne Marie era la protagonista femenina. ¿Pero no debería ser el momento de que la historia comience?
Yuri inclinó la cabeza.
Por otra parte, ha pasado un tiempo desde que Lakis Avalon apareció en este lugar. ¿Significa esto que todos los eventos ocurrieron con un poco de anticipación?
Espere... Dejando el tema de Lakis a un lado, si el incidente del orfanato ocurrió realmente cerca de aquí...
¿Eso significaba que el lugar donde vivía la heroína cuando empezó la novela era en realidad esta calle Ferret? ¿No decía que era una casa destartalada? ¿No decía que era una casa demasiado pequeña para que la heroína viviera con su hermana menor?
Yuri recordó la descripción de la novela y miró a la persona delante de ella con los ojos llenos de dudas. Y ella pronto entendió.
“…”
Bien, esta señora era la hija de una familia rica.
Yuri se dio cuenta de que una casa que le parecía buena no era más que una pequeña y destartalada casa para Anne Marie. Al darse cuenta de este hecho, Yuri se sintió un poco desanimada por alguna razón.
Quién sabe cómo Anne Marie tomó el ligero cambio en la mirada de Yuri, pero su expresión se volvió sombría y habló.
"He oído que pronto enviarán a alguien de arriba para investigar la calle Ferret por esto".
"Qué cosa más aterradora. Pensar que algo así sucedería tan cerca."
"¿Verdad? Tal vez porque Hestia tiene una edad similar, así que estoy aún más preocupada. Sería genial si todos los niños volvieran a salvo..."
Anne Marie parecía estar preocupada por los niños desaparecidos y como el incidente sucedió tan cerca, también estaba preocupada por su hermana pequeña. Porque Anne Marie estaba en el trabajo, Hestia estaba sola en casa.
Yuri recordó el contenido de la novela y abrió la boca.
"Tú y Hestia..."
- ¡Choca!
Justo entonces, un pequeño sonido parecido a alguien tosiendo vino de más allá de la puerta detrás de Yuri.
Yuri inconscientemente dejó de hablar. Tal como lo había notado antes, Anne Marie tenía buen oído, así que parecía haber oído el sonido también.
"¿Uh, supongo que tienes un invitado?"
"Hm, bueno... sí."
En realidad, es el villano que debería haber hecho una escena en tu casa originalmente.
Pero como Yuri no podía decir eso, ella respondió evasivamente.
"Oh no, no lo sabía, y te he estado reteniendo demasiado tiempo. Date prisa y entra".
"No, está bien. No hace mucho que salí."
Pero Anne Marie no parecía tener ninguna intención de continuar la conversación y Yuri ya no dijo nada más.
"Entonces, cuídese, Srta. Anne Marie. Gracias de nuevo por el regalo".
"Es un placer. Hasta mañana entonces. Buenas noches."
Así, Anne Marie volvió a su casa.
Y después de confirmar que Anne Marie había entrado, Yuri también se dio la vuelta y abrió la puerta.
* * *
Cuando Yuri entró en la casa, la atmósfera se volvió incómoda de nuevo.
Lakis estaba en medio de ponerse una camisa en el torso, pero se detuvo ante la aparición de Yuri. Pronto, empezó a moverse con calma de nuevo. Su cuerpo envuelto en una venda fue cubierto por una camisa blanca.
Yuri se preguntaba qué decir sobre lo que había pasado antes. Y cuando sintió la mirada de Lakis en la cesta que tenía en la mano, subconscientemente la extendió.
"¿Quieres unas galletas?"
Por supuesto, justo después de que las impulsivas palabras salieran de su boca, se arrepintió un poco.
Por otro lado, Lakis estaba irritado por el bicho, que empezó a animarle y regañarle en cuanto Yuri volvió a la casa. Sólo logró detener su ruidoso alboroto después de que él lo amenazara brutalmente.
Al oír la pregunta de Yuri, Lakis la miró brevemente antes de asentir con la cabeza.
Yuri se sintió aliviado interiormente.
Bien, la mejor manera de lidiar con esto sería enterrar en secreto lo que pasó antes.
"La persona que acaba de pasar por aquí me las dio".
Pero cuando metió la mano en la cesta para sacar una galleta para dársela a Lakis, se detuvo de repente por un pensamiento que le vino a la mente.
Espera, debería estar bien darle una galleta hecha por la heroína a Lakis, ¿verdad? Sí, ella no pensó que sólo esto le pondría una bandera de amor a la heroína.
"Aquí tienes. Están deliciosas."
Anne Marie a veces había hecho galletas como esta antes, así que Yuri podia garantizar el sabor.
Lakis se sentó en el pequeño sillón a su lado y le extendió la mano a Yuri, que le estaba dando la galleta. Esta vez, como ambos estaban siendo extremadamente cuidadosos para que sus manos no se tocaran accidentalmente, el incidente de antes no se repitió.
Al final, la galleta que Yuri le dio entró en la boca de Lakis. Honestamente, un dulce como este no era adecuado para un paciente como Lakis, pero como ninguno de los dos eran humanos comunes, no se dieron cuenta de ese hecho.
Y al instante siguiente, la cara de Lakis se endureció como una piedra.
...veneno? ¿Esto es veneno?
Por supuesto, las galletas no estaban realmente envenenadas. Pero el sabor era así de malo. Hasta el punto de que era comparable al desayuno que Yuri hizo.
-Urgh, esto sabe a mierda de verdad...!
Mientras el silencioso bicho compartía las papilas gustativas de Lakis, la sensación se transmitió a él y gritó de dolor.
- ¿No me digas que esto es lo que le gusta a la gente del este? ¿Así que tenemos que seguir comiendo este tipo de **** mientras estemos aquí? ¡¿Eso es todo?!
El bicho sintió una desesperación casi similar a la de cuando Lakis fue apuñalado en el estómago y su vida pendía de un hilo.
En realidad, cuando Anne Marie estaba haciendo cuidadosamente galletas para dárselas a Yuri, por error puso algo de especias en lugar de azúcar, haciendo que el sabor fuera extraño, pero Yuri y Lakis no lo sabían.
Mientras estaba en estado de shock, Lakis vio a Yuri metiendo la mano en la cesta para coger una galleta para ella. Instantánea e inconscientemente arrastró la cesta hacia sí mismo con prisa para disuadirla.
"Eh... ¿te gustan las galletas?"
Yuri preguntó con sorpresa por el comportamiento de Lakis. De repente, le recordó a Snow de la cafetería. Lakis ahora mismo, mostraba una fijación en la cesta de galletas, como Snow, que sostenía su girasol como un tesoro.
Tan pronto como Lakis escuchó la pregunta de Yuri, se asustó. Pero suprimió su deseo de protestar ferozmente y asintió con una sonrisa congelada en sus labios.
"Entonces sólo tomaré una..."
Aprieta.
Los nudillos de Lakis eran claramente visibles cuando agarraba la cesta. Al ver eso, Yuri cambió sus palabras.
"No importa". Puede tenerlos todos, Sr. Lakis.”
Pensó que estaría bien tener al menos uno considerando la sinceridad de Anne Marie al darlo, pero la cesta ya estaba en los brazos de Lakis. Aparentemente, Lakis estaba terriblemente obsesionado con las galletas.
[Estas galletas, ¿quién te las dio?]
Lakis garabateó una pregunta en el papel de la mesa.
"Siguiente..."
Yuri estaba a punto de responder reflexivamente que su vecina le había dado, pero de repente se detuvo. Era la primera vez que veía a Lakis actuar con tanta codicia hacia algo.
¿Era éste el poder de la heroína? Entonces, ¿no sería malo que le dijera quién se lo dio?
Con el papel que desempeñó, algo tan ridículo como "eres la primera persona que me da un bocadillo tan delicioso" podría suceder, presentando a Anne Marie un futuro de ruina otra vez. Para ser justos, Lakis era un personaje tan impredecible, incluso en la novela, que era imposible saber cuándo o dónde se activaría su bandera de obsesión por la heroína.
"Simplemente, un vecino cercano me la dio."
Así que Yuri respondió de manera indirecta.
Los ojos de Lakis brillaban fríamente mientras mantenía la respuesta de Yuri en su mente. El bicho se desesperó porque esto podría ser un sabor normal en el este, pero Lakis pensó de forma diferente. No sabía quién le dio las galletas, pero tal vez estaban tratando de dañar a la mujer que estaba delante de él.
No queriendo que Yuri tuviera la oportunidad de comer este terrible bocado, empezó a vaciar la cesta de su asiento. Por supuesto, no había razón para que protegiera la lengua y el estómago de la mujer que tenía delante.
- ¡Uwaak! ¡Gah! Hey, deja de comer ya! Tú, tú, ¿planeas torturarme de nuevo como esta mañana?
Sintiendo los ojos de Yuri sobre él, Lakis sonrió despreocupadamente, ignorando los gritos que sonaban en su cabeza. Por supuesto, en su interior, rechinaba los dientes ante el indescriptible sabor a m***** de la merienda.
Pero al no conocer sus pensamientos internos, Yuri se puso un poco seria.
"...no me digas que acabo de ponerle una bandera a Anne Marie?
Bueno, una bandera fue activada de hecho. Una bandera de la muerte, no de amor.
Pero como Yuri no era consciente de ello, se arrepintió un poco de haberle dado la galleta a Lakis en primer lugar.
Así, la noche pasó con los dos teniendo pensamientos diferentes a pesar de estar en la misma situación.
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