Capítulo 31

Mientras Lakis estaba aturdido, Yuri, que estaba atrapada debajo de él, levantó su rodilla y le dio una patada. Luego volvió a disparar su hilo, atando a Lakis antes de saltar del techo.


"¡Espera...!"


Lakis tercamente no se dio por vencido en atraparla. Una vez que salió de los hilos, inmediatamente la persiguió. Instintivamente se movió para usar el poder de la ruina para atrapar a la persona que huía adelante y luego se detuvo.


La principal habilidad de Lakis consistía en usar la sangre, así que era mejor no usarla cuando estaba herido como ahora. Por encima de todo, esa habilidad estaba especializada para matar. Así que no podía usarla con alguien que le provocara una corazonada por alguna razón.


Lakis maldijo en voz baja y al final bajó la mano. Mientras tanto, la persona que estaba delante de él desaparecía gradualmente de su vista.


Yuri estaba pensando en cambiar sus planes y mezclarse con la multitud.


"¡Kyaa!"


Pero en el momento en que Yuri aterrizó en el laberinto de un callejón, un débil grito atravesó sus oídos. Cabellos plateados, con mechones como si estuvieran tejidos con la luz de la luna, se arrastraron hasta la vista de Yuri. Mientras tanto, un par de anchos y verdes ojos verdes tomaban la apariencia de Yuri.


"¿Por qué estás aquí?


Yuri se tragó las palabras que casi salieron de su boca.


"¿Q-Quién eres?"


La persona que Yuri conoció no era otra que AnneMarie.



Parte 6: ¿Qué bandera es esta?



Volvamos a hace 30 minutos.



"Kreung".


Leo se aburría mientras pasaba el tiempo solo en el monasterio vacío.


¡Chirrido!


Después de que Yuri se fue, jugó con la paloma blanca que entró en el monasterio hasta que se cansó de ella y luego se revolcó en el suelo. El pájaro cuyas plumas había arrancado Leo hasta que se aburrió, finalmente obtuvo su libertad y salió llorando del monasterio.


Las plumas blancas que flotaban en el aire se hundieron y se aferraron al pelo marrón de Leo.


"¡Achoo!"


Leo estornudó y golpeó el suelo con su cola.


No podría estar más aburrido. Pensó que Yuri había venido a jugar con él, pero sus esperanzas se desvanecieron. Así que se sintió aún más aburrido al esperar a que terminara su trabajo y volviera.


Finalmente, Leo salió del monasterio.


Desde el principio, fue un error de Yuri pensar que Leo se quedaría quieto y esperaría a que ella le trajera dulces de melón. Leo tenía mentalmente 13 años. Por supuesto, parecía haberse degradado más que eso por alguna razón...


En cualquier caso, era un niño que no podía quedarse en un lugar por mucho tiempo porque estaba inquieto.


"¿Hm?"


Después de salir del monasterio, Leo notó un delicioso olor que venía de alguna parte. Empezó a babear sin darse cuenta.


Los ojos de Leo se iluminaron y se dirigió al callejón donde el festival estaba en su apogeo.


* * *


"Hestia, empecemos a dirigirnos a la torre del reloj."


Anne-Marie vagaba por las calles festivas con su hermana menor, Hestia, y de repente se dio cuenta de que era la hora que había acordado con Yuri.


Hestia asintió con la cabeza, sosteniendo un pincho comprado en uno de los puestos de la calle. Con similares ojos verdes y pelo plateado, Hestia se parecía mucho a su hermana mayor. Su cara parecía muy tranquila y madura para una niña de 12 años, pero en su cabeza tenía una máscara de rana que Anne-Marie le compró y que llevaba como un sombrero.


"Mn. Pero Unni, ¿puedo tener un pincho de carne más?”


Hestia preguntó furtivamente pero Anne-Marie se negó firmemente.


"No. Ya has tenido dos. Si comes más, te dolerá el estómago".


Hestia se enfurruñó un poco y siguió en silencio, cogiendo la mano de Anne-Marie. Ya no molestaba a su hermana con el pincho de lagarto.


"Oh, mira quién es. Anne-Marie, ¿verdad?"


Mientras caminaban hacia la plaza donde se encontraba la torre del reloj, alguien apareció, pareciendo conocer a Anne-Marie.


Anne-Marie también parecía conocer a la persona que la llamaba y la saludó con agrado.


"Hola, Sra. Meriel."


Era la Sra. Meriel del taller, una de las vecinas de Anne-Marie en Grey Ferret.


"Supongo que vino a ver el festival con su hermana."


"Sí, ¿está sola, Sra. Meriel?"


"No, mi compañera fue a comprar algo allí. Oh, Sra. Anne-Marie, ¿tal vez los conozca? La librería del vecindario de al lado, Swan..."


La Sra. Meriel del taller de reparaciones era originalmente una persona muy habladora. Así que ella fácilmente agarraba a cualquiera que conociera y divagaba sobre los rumores que escuchaba o cosas sobre ella misma. Y desde hace medio año, su vecina favorita no era otra que Anne-Marie.


Con el carácter amable de Anne-Marie, no sabía cuándo cortar a la Sra. Meriel y terminaba escuchando el discurso de la mujer por un tiempo. Y parece que ese lado de ella le gustaba a la Sra. Meriel.


"Uh, Mrs. Meriel. Lo siento pero tenemos algo más que hacer."


"Oh no, ¿en serio? No sabía que te estaba reteniendo cuando estás ocupada. Entonces, terminaré lo que estaba hablando rápidamente. Así que conoces a ese amigo, ¿verdad? Fue estafado por el primo tercero de los suegros y..."


Como era de esperar, la Sra. Meriel no mostró ninguna señal de detener la conversación en un futuro próximo.


Pensando que aún tenía tiempo antes de su acuerdo con Yuri, Anne-Marie continuó escuchando la historia de la Sra. Meriel, mientras creía que la Sra. Meriel estaba terminando.


Hestia vivía en el mismo vecindario, así que ya sabía qué clase de persona era la Sra. Meriel. Dejó que la historia fluyera por un oído y se volvió para buscar en otra parte. Había muchas atracciones en la calle donde se celebraba el festival. Así que ni siquiera notaría que el tiempo pasaba mientras miraba a su alrededor.


¡Chasquido!


Y justo entonces, Hestia descubrió a alguien cuando su mirada aterrizó en un callejón.


"¿Eh?"


La figura encorvada en el oscuro callejón con la cola enroscada parecía un gran perro. Pero aunque su cola esponjosa y sus orejas puntiagudas eran las de un animal, el resto era un contraste. Comían una brocheta de lagarto como la de la mano de Hestia, y su cara y cuerpo era como el de un humano.


Entonces tal vez sintió la mirada de Hestia, ya que la figura (tal vez humana o animal) giró la cabeza.


Instantáneamente, sus ojos se encontraron.


Los ojos dorados, como brillantes monedas de oro, reclamaron la vista de Hestia. La persona que Hestia había descubierto, no era otro que Leo.


Leo fue atraído a las calles del festival por el delicioso olor. Pero como había tanta gente alrededor, no podía salir del callejón. Cuando la gente empezó a moverse para ver los fuegos artificiales y no prestaba atención, había tomado un bocadillo de uno de los vendedores de comida.


Pero mientras estaba distraído por la carne, fue atrapado por una joven humana.


.


"Te traeré un dulce de melón cuando regrese. Compórtate bien solo.


.


Las palabras que Yuri dijo antes de repente pasaron por la mente de Leo. La cola de lagarto que estaba masticando se le cayó de la boca.


"Yuri también me dijo que no causara ningún problema la última vez...


Pero si Yuri descubriera que no sólo se había colado en secreto entre la multitud, sino que también fue atrapado por alguien!


.


Así que reflexiona sobre ti mismo. Si lo haces de nuevo, puede que me enfade mucho la próxima vez'.


.


No...!


Leo se puso de pie rápidamente y empezó a correr hacia el callejón.


En el momento en que la esponjosa cola comenzó a balancearse ante sus ojos, Hestia inconscientemente soltó la mano de Anne-Marie.


"¡Cachorro, espera...!"


"¡Ah, Hestia...!"


Anne-Marie gritó, sorprendida por Hestia que corría de repente hacia delante.


Pero Hestia no pudo oír la llamada posterior porque pensaba que había asustado al niño y lo había ahuyentado (todavía no sabía si era humano o animal pero decidió pensar en él como humano por ahora).


Anne-Marie extendió la mano para tratar de agarrar a Hestia. Pero en ese momento, la multitud la bloqueó y su intento fracasó. Al final, Anne-Marie perdió de vista a su hermana menor en la calle del festival.


* * *


"¡Hestia!"


La cara de Anne-Marie estaba terriblemente pálida mientras caminaba por el callejón donde Hestia había desaparecido. El callejón era como un laberinto, por lo que era difícil encontrar su camino. Naturalmente, tampoco podía ver a Hestia.


"Hesti... ¡Kyaa!"


¡Swish!


Una sombra negra apareció repentinamente ante Anne-Marie mientras deambulaba por el callejón. Alguien con una máscara blanca había saltado de repente desde algún lugar sobre su cabeza.


A juzgar por su vestimenta, parecía ser un hombre. Pero extrañamente, llevaban un lujoso frac frac que no coincidía con el festival callejero. Su pelo largo y negro fluía ante los ojos de Anne-Marie.


"¿Q-Quién eres?"


Anne-Marie preguntó inconscientemente.


No tenía ni idea de que el que aparecía delante de ella era su vecino, Yuri.



Yuri, por otro lado, se sentía desconcertado por la repentina aparición de Anne-Marie.


Ya estaba siendo perseguida por Lakis y ahora le toca a Anne-Marie aparecer... ¿Era éste el llamado poder de la heroína para causar incidentes dondequiera que vaya?


"¡Espera!"


Además, mientras ella estaba momentáneamente atascada, Lakis seguía pisándole los talones y se acercaba justo detrás de ella.


Yuri se sintió tan frustrado que quiso agarrar la oreja de Lakis y gritarle.


"¡Soy tu salvavidas! Y ella es la heroína de la que podrías enamorarte algún día!


Por supuesto, a juzgar por sus acciones hasta el momento, ella dudaba que esas palabras fueran a salir adelante.


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