Capítulo 64

"......¿Quién dijiste que vendrá?"


Cerré el libro que estaba leyendo y miré a Loreal


"Su Alteza el Segundo Príncipe estará visitando la mansión Lombardi....... yo acabo de recibir el notición del Palacio Imperial


Dudé por un momento si había escuchado bien.


¿Pherez viene a Lombardi?


¿Él está en una situación en la que puede hacer lo que quiera?


Por supuesto, él no estaba en una situación en la que tuviera que vivir sin aliento como antes, al parecer no le tomó mucho tiempo en salir del Palacio Imperial y caminar libremente.


Pero, ¿qué significa que venga apresuradamente desde el territorio del emperador a Lombardía?


Es una imagen perfecta para ser atacado por alguien en el camino.


"¿Hoy?"


"Sí, estará aquí alrededor del mediodía".


"Ahhh..."


Pherez no es estúpido.


No hay razón para que venga a Lombardi, sería algo excesivo.


"No puede ser, ¿por qué diablos lo haría?"


"No lo sé...."


Loreal se encogió de hombros y susurró.


"Pero mi señorita, ¿Usted es cercana a su Alteza el Segundo Príncipe?"


Oh, ahora que lo pienso, Loreal aún no lo sabe.


"Um, yo solía … Sólo he estado intercambiando cartas".


"¡Oh! Por casualidad, él......."


Asentí con la cabeza en lugar de responder.


Y claro que sí.


Una extraña sonrisa apareció en el rostro de Loreal.


"¡Oh, Dios mío! ¡Así que el Segundo Príncipe viene a ver específicamente a mi señorita!"


Suspiró


Parece estar imaginándose cosas raras


"No creo que sea por eso. Estoy segura de que hay algo más".


"Pero el hecho de que el vasallo del palacio imperial transmita la información a mi persona, definitivamente significa que viene a verte, ¿no crees?"


"Él...... ¿Él hizo eso?" ¿Loreal eras la única que estaba allí?"


"Bueno, no. Estaba con otros dos mayordomos".


El mayordomo está a cargo de la mansión, pero suele ocuparse del entorno de mi abuelo.


"Eso significa que vendrá a verme a mí y a mi abuelo…"


Pero no había ninguna razón particular para adivinar.


Especialmente en esta situación en la que él y yo fingimos no conocernos.


"Bueno, lo descubrirás cuando venga Pherez".


Dijeron que iban a venir de todos modos, pero sin otra información.


Y desde la mañana, una comisión del palacio real llamó a la puerta de la mansión Lombardi, y todos los que no sabían que Pherez vendría ya lo sabían.


Seguí leyendo libros, sin hacer caso a Loreal, quien me miraba con una sonrisa de tipo emoticon 😁.


Era un libro que contenía información sobre varias enfermedades raras, como el Síndrome de Guillain-Barré y ejemplos de tratamiento.


El tiempo pasó rápidamente y se hizo el mediodía, cuando el sol se puso en medio del cielo.


A lo lejos, pude ver el carruaje imperial de Pherez acercándose.


Sin embargo, los Caballeros Imperiales lo acompañaban en la parte trasera e incluso llevaban una gran bandera imperial.


Significaba una visita muy formal.


Mi abuelo me envió una carta en la que me pedía que lleve a Pherez a su oficina, aunque solo después de que coma con Pherez ya que el abuelo tenía un compromiso previo.


Pero yo no era la única que estaba frente a la mansión.


"La Sra. Shanet, el Sr. Vestian y el Sr. Laurel. Todos ellos enviaron a sus sirvientes familiares".


Dijo Loreal en voz baja a mi oído.


Eso era cierto.


¿Por qué fui la única en salir personalmente? Todos parecían enviar a alguien a ver la situación.


¿Por qué es el Segundo Príncipe quien visita a Lombardi y no el Primer Príncipe que ya había estado en más contacto con nuestra familia?


Y ¿por qué me llamó a mí?


Me di cuenta al ver que los ojos de mis sirvientes no se apartaban de mí.


Dag, dag, dag, dag.


Finalmente, el caballo dejó de andar y la puerta del carruaje, espléndidamente decorada, se abrió.


Pherez, con un rostro inexpresivo, volvió a caminar hacia nosotros.


A diferencia de su rostro, noté que sus ojos tenían un brillo particular.


Él está muy emocionado en este momento.


Me apresuré a doblar ligeramente las rodillas antes de que Pherez se equivocara e hiciera una ligera cortesía.


"Hola, Su Gracia, Segundo Príncipe. Bienvenido. He estado esperando".


"Oh.... Hola, Señorita Lombardi ".


Pherez miró a su alrededor por un momento y sintonizó con mi melodía.


"Por desgracia, mi abuelo tiene un compromiso previo, así que le llevaré a casa de mi padre. Comamos juntos y después vayamos al despacho del abuelo".


"......sí".


Es un éxito.


Conseguimos realizar un saludo torpe, como el que personas que apenas se conocían lo harían.


Los ojos persistentes de los sirvientes que habían estado en la misión siguieron alcanzándonos hasta que salimos del vestíbulo de la mansión y entramos en el anexo.


A pesar de que el mayordomo dio una severa advertencia.


Sólo pude relajarme cuando entré a mi casa después de un largo pasillo.


Afortunadamente, los caballeros que acompañaban a Pherez se instalaron para vigilar el exterior de la puerta principal.


Pregunté, agitándome en el sofá del salón.


"Vaya. ¿Por qué estás aquí, Pherez?"


"Cía, para verte".


"No juegues conmigo".


"Te lo estoy diciendo en serio".


Cuando Pherez y yo empezamos a reñirnos, los ojos de Loreal se abrieron de par en par.


"Señorita..."


"¿Por qué?"


"Estás más cerca de lo que pensaba..."


"Te estoy hablando".


"......¿Loreal?"


Cuando Pherez dijo su nombre, Loreal se sorprendió tanto que dio un salto.


"Vaya, ¿cómo Su Gracia puede conocerme?..."


"Porque Cía lo ha mencionado varias veces en su carta".


"Ah, sí... ya veo".


Loreal se sonrojó al mirarme.


"No cambies de tema. ¿Por qué estás aquí hoy?"


"Oh, mi señorita..."


Loreal me miró sorprendida por mi voz aguda.


En realidad, yo también estaba un poco alterada.


No debería haberme molestado tanto.


Mis nervios parecían estar mucho más sensibles que de costumbre debido a la enfermedad de mi padre.


"Vengo a entregar esto".


Pherez sacó de sus brazos un sobre de carta con cara de despreocupación.


Esta se puede reconocer a diez millas de distancia por la aplicación de oro fundido.


"¡Espera! ¿Es la carta del Emperador?"


"Sí, sí…".


Sabía que la personalidad de Pherez estaba fuera de lugar.


La correspondencia del Emperador es diferente a la que escribe la gente común.


Si el emperador ordena oficialmente a alguien que entregue la carta, éste tendrá la gran responsabilidad de entregar la carta a la persona cuyo nombre está escrito en el sobre lo antes posible.


Esto es de sentido común, todo el mundo conoce qué debe hacerse, al menos aquí.


Pherez nos miraba a mí y a Loreal, ella aún estaba avergonzada.


Me apresuré a acercarme el sobre.


"Lulak Lombardi..."


"¡Enviaré a alguien a la oficina!"


dijo Loreal, sujetando el dobladillo del vestido con una mano para poder correr.


"Espera".


Levanté una mano para detener semejante camión.


"Pherez, ¿sabes por casualidad qué hay en este sobre?"


"Servirá para protegerme espalda".


Pherez no dudó en publicar lo que estaba escrito en la carta del Emperador.


Suspiré, agarrándome la cabeza.


"Lo estoy pasando mal......."


El papel del emperador equivale a una declaración oficial de que la familia del niño y mi familia apoyarán al Segundo Príncipe en la batalla por el trono.


Me di cuenta con sólo mirar a Astana y Belsach.


Tras anunciar que Astana era el primer hijo y posible sucesor del emperador, esas personas se reunieron en torno a Vieze.


Mientras Vieze, de quien se espera que sea el próximo personaje importante de los Lombardi, apoyaba al primer emperador, la cotización de Angenas también aumentaba día a día.


"¿Te genera problemas?"


me preguntó Pherez.


"Bueno, no es tan bueno como pinta".


El incidente ya ha trastornado por completo a Astana y a la emperatriz viuda.


No es solo porque Astana y yo tuvimos una pelea. Se trata de que la espada fue empujada al cuello de Astana.


Además, se extendió ampliamente que Pherez podría utilizar poder divino.


Su aparición pública del Banquete Internacional de la Fundación se mostró oficialmente con el hecho de que Pherez, que todavía tiene sólo 13 años, utiliza el poder divino y la espada al mismo tiempo, es todo un genio.


Sin embargo, caer del lado de Astana fue un asunto diferente a estar completamente del lado de Pherez.


Para ser exactos, significaba que el tercer hijo de la familia de Lombardi, estaba declarando su apoyo a Pherez.


Esto podría tener un gran impacto en el negocio de mi padre.


Aunque fuese en el peor momento de mi padre


Pherez y mis ojos se encontraron.


Sus ojos ligeramente fruncidos me miraron y me hicieron una pregunta.


"Así que ser mi as bajo la manga, mi garantía, es un dolor de cabeza para ti, ¿verdad?"


Intenté explicarle la razón con un leve movimiento de cabeza.


pero


"¡Qué estás haciendo!"


Un acto bruto


Pherez rompió la carta del Emperador por la mitad exactamente.


¡Debe estar loco!


Pero Pherez dijo con firmeza.


"No lo necesito si te pone en problemas".


"¡Oh, no importa!"


¡Sigue siendo una carta del Emperador!


Sostuve la carta en mis manos y me quedé con la mirada perdida.


"Mis pensamientos no abarcaron todos los caminos, no el de meterte en problemas".


Pherez habló con bastante calma.


"Pensé que sería bueno deshacernos de la carta".


"Oye, ¿estás loco?"


Me merecía estar de mal humor.


Pregunté con cuidado, pero Pherez negó con la cabeza.


"No, lo digo en serio. Olvida esta carta, me encargaré de ello".


¿Qué vas a hacer?


Pherez ahora está en problemas aun estando fuera de la vista del Emperador.


"No… Tienes que adjuntarla bien y llevársela a mi abuelo".


El destinatario de la carta era mi abuelo.


"De qué correspondencia estás hablando".


"Oh, papá...."


Mi padre estaba apoyado en el marco de la puerta abierta del dormitorio.


" Gallagher, Príncipe Lombardi".


Pherez saludó rápidamente a mi padre.


"¿A qué correspondencia se refiere, Segundo Príncipe?"


Pherez me miró un momento y le tendió la carta del emperador, que se había partido por la mitad.


Mi padre preguntó: "¿Qué debo hacer con estos niños?".


"He oído que escribe para que Cía sea su seguidora".


"Sí, así es".


"Al final, Su Majestad......."


Mi padre había adivinado que esto podría suceder.


¿Acaso lo habían hablado entre adultos?


Mi padre miró a Pherez con ojos extraños por un momento.


Tenía una cara que daba miedo, no era propio de mi padre, ni amistosa ni simpática en absoluto.


El hombro de Pérez, bajo la mirada intensa de mi padre, dio un pequeño respingo, y pude ver que se estaba cansando mucho.


Los dos no se movieron como si estuvieran teniendo una pelea de bolas de nieve.


"Hey...."


Fue cuando saqué el tema de que él estaba peor…


Mi padre, que estaba apoyado en la puerta y se esforzaba, sacó algo de la parte de atrás de la puerta con un "kkkkkkkkkkkkk".


Era una muletilla que le había dejado el doctor O'Malley esta mañana.


"La correspondencia de Su Majestad debe ser entregada inmediatamente. Vamos a la oficina de mi padre".


"¡Ya voy! Pero las piernas de papá...”


"Todavía puedo caminar".


Papá sonrió y dijo con firmeza.


"Puedes caminar con muletas…”


“Tu padre debería ayudarte con tu trabajo".


Los pasos de mi padre con muletas me daban mucho miedo, todo parecía peligroso.


Lo mismo ocurría al caminar por un pasillo plano, pero aún más al bajar las escaleras.


Loreal y yo nos ofrecimos a ayudar, pero mi padre se negó.


"Puedo hacerlo solo".


Por un momento, se mostró tan testarudo que puede ver reflejado a mi abuelo en él.


Pero al mismo tiempo, ver que su espalda era tan grande no me producía ningún miedo de nada en el mundo, mientras me dirigía a la oficina.



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