Capítulo 103

No era una mirada fría ni aguda, pero por alguna razón ponía nerviosa a la gente.

Nunca la había experimentado en mi vida anterior, pero cuanto más tiempo mantienes el poder en una posición alta, más te gustan las personas que no tienen pretensiones.

No rehuí los ojos de la doncella Impigra, si no que la miré a la cara.

Luego, por un momento, pude ver que sus ojos brillaban.

“Solo soy una anciana insignificante, pero voy a enseñar a los jóvenes que se están preparando para su debut, así que espero su amable cooperación".

Fueron palabras de infinita cortesía y humildad, pero la mirada de Fonta nunca lo fue.

Incluso en ese breve momento, pude sentir la mirada de los participantes debutantes.

“Para el exitoso debut social de las señoritas, a partir de este momento, al igual que el día de su debut, recuerden seguir la etiqueta imperial ".

En ese momento, una niña que estaba de otros jóvenes junto a la ventana dio un paso al frente.

Era una impresionante chica de mediana edad con cabello rubio brillante y ojos marrones profundos.

"Escuché mucho sobre Fonta-nim".

Era una voz tranquila y llena de confianza.

Aparentemente, parecía ser el tipo de persona que estaba acostumbrada a llamar la atención de la gente.

"Esta es Mabe Caporia".

La señorita Caporia, quien pronunció su nombre inclinando ligeramente sus rodillas, la saludó con elegancia.

Fue un impecable saludo de la nobleza.

"Mmm."

Por un momento, la dama Impigra frunció ligeramente el ceño como muestra de disgusto.

"¿Fo, Fonta-nim?"

¿Hice algo mal?

La señorita Caporia, se sintió profundamente avergonzada por lo que le pregunto a la dama Impigra, pero no hubo respuesta

No parecía tener ninguna intención de decirle qué estaba mal o la respuesta correcta fácilmente.

No parecía tener intención de mencionar que estuvo mal.

En cambio, miró al grupo de jóvenes reunidos.

Como una forma de darles una oportunidad

Sin embargo, nadie dio un paso al frente, puesto que la señorita Caporia quien estaba actuando como líder del grupo, fue humillada.

Debido a que todos los presentes dudaban, la mirada de la dama Impigra volvió a mí.

No parecía tener muchas expectativas.

Probablemente porque cree que soy igual al resto de los jóvenes.

Puse mi mano derecha cerca del corazón, sosteniendo el dobladillo del vestido con mi mano izquierda, al mismo tiempo que moví mi pierna derecha hacia atrás doblándola ligeramente.

Sin olvidar el inclinar la cabeza con gracia.

Fue un saludo acorde a la etiqueta imperial que aprendí hace unos años, para asistir la cena de la Emperatriz.

Posteriormente, la dama Impigra dijo.

“Ten en cuenta que a partir de este momento debes seguir la etiqueta imperial como si fuera el día de tu debut”.

"Oh..."

Como si finalmente hubiera encontrado lo que buscaba, la dama Impigra sonrió.

"¿Cuál es el nombre de la joven señorita?"

"Es Florencia Lombardi, Dama Impigra".

De hecho, no hay problema en llamarlo 'Fonta-nim' como lo hizo la señorita Caporia.

Sin embargo, quería expresar mi respeto por las personas mayores que han ocupado el puesto de dama de honor durante más de 40 años.

He estado a cargo de hogares pequeños y grandes en la mansión de Lombardi durante un tiempo, así que sé lo difícil que es.

"¡Eres la joven señorita de Lombardi!"

La dama Impigra sonrió satisfecha.

“Fue un saludo imperial perfecto, ¿En la familia de Lombardía, aprenden la etiqueta imperial por separado?"

"No. Aprendí de mi tía ya que tuve que asistir al palacio".

"Si es tú tía... ¡Ah, debe ser Shanet!

Cuando mencionó el nombre de Shanet, la cara de la dama de Impigra se iluminó.

“Definitivamente es una de las grandes jóvenes producidas por el debut imperial.

Tienes una muy buena maestra, señorita Lombardi”.

"Gracias."

Dije una vez más, doblando ligeramente mis rodillas.

La doncella Impigra me miró una vez más con satisfacción y luego se dirigió a las jóvenes reunidas en el salón de banquetes.

“Es un honor haber sido seleccionadas para entrar en sociedad en el baile imperial de debutantes, el mejor del imperio.”

La Dama Impigra bajó la voz.

"La reputación del baile de debutante imperial proviene de un banquete perfecto donde existen estrictos estándares de selección y no se toleran errores. Así que a partir de ahora vendrán dos veces a la semana para aprender".

"Dos veces a la semana…"

Sabía que era difícil, pero los suspiros fluían de un lugar a otro. Como si la reacción le fuera familiar, la dama Impigra volvió a sonreír.

“No pueden permitirse el lujo de ser descuidadas porque será su debut oficial en el mundo social del Gran Imperio Lambru."

Qué trágica es la voz que lo dice.

Empiezo a pensar que tal vez no lo logre.

“Pero al final, el propósito más importante del mundo social no es mostrar que soy el mejor. Se trata de reconciliarse, interactuar y aprender unos de otros. Por eso es importante dar bien el primer paso ".

Era una perspectiva un tanto informal pero clásica, como la de una dama de la corte imperial.

"Es nuestro primer día, así que tomemos algunos refrigerios y conozcamos a los demás. Traeremos té y comida, así que esperen aquí".

La dama Impigra, seguida por las doncellas de la corte imperial, abandonó el salón de banquetes.

Solo quedan las jóvenes señoritas que participarían en el baile de debutantes.

De repente, un silencio frío y extraño fluyó dentro del salón de banquetes.

Y sin darme cuenta me volví hacia la ventana y encontré una mirada cautelosa sobre mí.

"Oh, esta es la primera vez de nuevo".

Para ser honesto, me he acostumbrado a que las personas me tratan favorablemente.

La mayoría de la gente de Lombardi lo hizo, y las personas con las que trabajamos, incluido Cleiban.

Incluso en uno de los pocos banquetes a los que había asistido, los nobles no podían hablar conmigo porque estaban ansiosos.

Entonces, es cierto que me miraban en silencio y me revisaban.

"Está fresco".

¿De esto se trataba la vida social?

Estaba un poco emocionada porque sentí que estaba viendo una escena social que nunca había experimentado en mi vida anterior.

Entonces una pequeña voz habló desde un lado.

“Bueno, señorita Lombardi..."

"Solo señorita es suficiente".

"¡Ah, sí! ¡Señorita Lombardi! "

La chica que se ve inusualmente débil era impresionante con su cabello rojo y leves pecas en su nariz.

"Soy Tilliana Gitterwell del este".

¿Eh, Gitterwell?

Mientras estaba distraído por el nombre de la familia que me recordaba alguna información relacionada, Tilliana preguntó avergonzada con el rostro enrojecido.

"Si no te importa, ¿Podrías enseñarme a saludar de acuerdo a la etiqueta imperial?"

No es una solicitud muy difícil.

"¿No enseñaría todo eso más tarde la dama Impigra?"

“Eso es correcto, pero ... ... De alguna manera, el saludo de la señorita Lombardi es elegante y hermoso..."

Esa es probablemente la influencia de Shanet.

Incluso si es el mismo saludo, la atmósfera y la forma son ligeramente diferentes según la persona.

"Mmm, si te molesta, no puedo evitarlo, pero ... Por favor ".

Dijo Tilliana, apretando los puños con fuerza, como si fuera valiente, mientras dudaba.

“Toda la familia decidió venir desde el Este al Palacio Imperial para asistir a mi debut... Quiero mostrarles una buena imagen ".

No era una excusa plausible, parecía sincera.

No parece que tenga una personalidad que pueda pronunciar las palabras que solía decir en primer lugar.

"¡Te compraré algo delicioso!"

"Sí, por supuesto."

No digo que te compre algo delicioso.

En realidad, solo estaba tratando de enseñarte desde el principio.

Mientras hablaba con Tilliana, la multitud que estaba junto a la se acercó a mí.

"Señorita Lombardi".

Fue Mabe Caporia, quien se adelantó hace un momento y saludó a la dama Impigra.

La familia Caporia era miembro de la asociación de nobles y una de las familias nobles más antiguas del imperio.

Recientemente, la Sra. Caporia comenzó a trabajar como asistente de la emperatriz Lavigne. También era una familia importante en el mundo social.

"No hagas eso allí, ven aquí y conversa con nosotros".

¿No desconfiabas de mí hace un tiempo?

"La ventana es tan brillante y cálida".

Mabe Caporia estaba excluyendo a Tilliana por completo de la conversación, sin siquiera mirarla.

Cuando miré a Tilliana, estaba mirando la mesa con una sonrisa incómoda.

Estoy fingiendo estar bien, pero realmente no puedo estarlo.

Sonreí y le dije a la señorita Mabe Caporia.

"Estoy bien."

“… ... ¿Qué?"

La señorita Caporia parecía realmente avergonzada.

Parecía que pensaba que me levantaría de inmediato y me uniría a ellos.

No soy una persona ingenua, no importa que nunca haya experimentado la sociedad.

Incluso si abandono aquí a Tilliana y me uniera a su grupo, no hay forma de que pueda encajar correctamente en un grupo de señoritas que han estado juntas desde la infancia.

“Estoy resfriada. Creo que sería bueno sentarse aquí ".

Realmente no puedo tener un resfriado.

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Sin embargo, hablar de esta manera es un método de conversación que disfrutan los aristócratas.

Al igual que la señorita Caporia usó el 'sol' como excusa.

“… ... Oh, Dios mío, no debería ser una gran enfermedad".

La cara de la señorita Caporia decía: '¡Lucha con la fiebre durante una semana y arruina todo lo relacionado con el baile de debutantes!'

Pero respondí con una sonrisa como si no me hubiera dado cuenta.

"Gracias por tu preocupación, señorita Katarina”

Cuando dije intencionalmente el nombre equivocado, la boca sonriente de la señorita Caporia se contrajo.


Cariño, todavía queda un largo camino para vencerme.

Dije que era mi primera vez en sociedad, pero no dije que fuera la primera vez que tenía 12 años.

Caitlin se acercó e informó a Pherez, que estaba leyendo un libro.

"Príncipe, ha venido un invitado".

“Pensé que habías dicho que por el momento no habrá visitantes en el Palacio Poirak”.

La voz de Pherez, que había sido acosado por la gente enviada por la Emperatriz durante un tiempo, era fría.

"Véalo una vez".

Cuando Caitlin dijo algo diferente, Pérez la miró, apartando los ojos del libro.


"¿Quién el invitado?"


"Es Fonta Impigra, doncella del palacio imperial".

Ahora, Pherez también sabe quién trabaja para la emperatriz y quien trabaja para el emperador en el palacio imperial.

Me estaba agarrando.

Entre ellos, Fonta Impigra fue uno de los que lucharon contra la Emperatriz.

"Dile que entre."

Al rato, Fonta Impigra se acercó con un bastón y lo saludó cortésmente.

Y durante un rato, se limitó a mirar a Pherez en silencio, como si recordara a alguien a quien extraña.

Y en un momento, la Doncella Fonta Impigra, dijo decidida.

"Me atrevo a hacerle una sugerencia a Su Majestad el Segundo Príncipe".