Capitulo 91
"Originalmente es un ser humano muy calculador. Es un hecho para mantener esa posición."
A pesar de su daño patrimonial, hablaba con mucha objetividad.
Irina, que le sacaba la lengua a la frialdad, sintió que una sospecha florecía en su mente. Se trataba de un reciente incendio en la fábrica de costura.
"Oye, Juan Manuel vino a la tienda no hace mucho. Dijo: '¿Por qué no trabajas conmigo?', en lugar de contigo."
Inmediatamente endureció su expresión.
"¿Por qué hablas de eso ahora?"
"Porque me negué en el acto. No había nada más especial."
"......."
"Pero ese día hubo un incendio en la fábrica de costura. Es extraño. ¿Las costureras realmente hicieron eso? Claro que sé que lo sienten por nosotros."
Sólo hay sospechas. Pero Irina sentía ahora que esta sospecha era cada vez más cierta.
"No es gente corriente la que atacó la fábrica textil. Todos eran personas entrenadas, y normalmente no pueden contratar a tanta gente a la vez a menos que sean ricos."
Elenoa asintió. La conjetura de Irina era razonable.
Y esta vez hizo un sonido que él no esperaba.
"Yo, debería establecer una Cúpula. La Cúpula de Nordiak. Sería genial."
Después de hablar, Irina miró a Elenoa. Porque pensó que no le daría la bienvenida muy feliz.
Sin embargo, Irina reconoció que la Cúpula de Manuel se había hecho demasiado grande. Se enfrentaban a una batalla obligada, y sólo el último ganador se mantendrá en el mercado.
Elenoa sacudió la cabeza con una mirada firme.
"Es peligroso si te pones al frente así. Sigues atrayendo la atención de la gente."
"Eso es lo mismo para ti."
"......."
"El propietario de la Cúpula de Manuel dijo eso. Puedes hacer una máquina de coser, pero no cualquiera puede hacer un trato con Ilphenon."
"......."
"No puedes hacerlo, lo intentaré. Debería ir a Ilphenon en este momento."
Elenoa no pudo aceptarlo hasta el final. No quería que Irina fuera al frente, pero lo que más odiaba era que volviera a montar en un barco.
"Pronto descubrirán que estás trabajando conmigo. La Familia Real de Ilphenon no es tan incompetente."
"Pero está bien. Soy Nordiak. Mi padre también hizo un trato con la Familia Real, así que no podrá ponerme tales normas políticas."
"...... ¿No puedes quedarte aquí hasta que construya un barco de vapor?"
Irina sonrió y negó con la cabeza.
Eso era ridículo. No se sabía cuándo estaría terminado y, como dijo Elenoa, no era tan sencillo. Además, ella podía adivinar que el barco de vapor estaba en contra de la tripulación, al igual que la máquina de coser estaba en contra de la costurera.
"No puedo esperar tanto tiempo. Tú también eras así. El tiempo es importante para un hombre de negocios."
"......."
"No te preocupes. Si sigue el buen tiempo, podré volver en 15 días. Tendré que adivinar si puedo entregar mi ropa de trabajo. Hay más minas en Ilphenon."
La industria del algodón empezó con Ilphenon primero, pero la ropa prefabricada es un negocio que empezó con Kissen primero.
Mientras Irina seguía persuadiéndolo con rostro seguro, Elenoa no tuvo más remedio que asentir. Tampoco tenía derecho a impedírselo.
Elenoa, que suspiró profundamente, citó hechos pasados.
"A veces me arrepiento de haber roto los documentos de deuda."
"¿No es un poco tarde?"
Irina sonrió.
* * *
Decidida, comenzó a ponerlo en práctica al día siguiente. Estableció la Cúpula y comenzó a reclutar marineros.
Nick fue la primera persona en unirse a la Cúpula, y ella advirtió medio en broma y medio en serio. Esto es porque estaba preocupada de que Nick se asentara naturalmente en Kissen.
"Esto es una suscripción doble. Me van a culpar."
"Mientras que perteneces a Sergioz. También tienes una placa de Schuberg. Triple suscripción y doble estándar. Es increíble."
"......."
Irina no tuvo más remedio que cerrar la boca y permitirle unirse.
Sin embargo, a diferencia de la capacidad de ejecución de Irina, no todo fue fácil. El reclutamiento de marineros era un reto.
Kissen era una sociedad mucho más injusta que Il’s. Era habitual que el linaje de los hombres heredara el puesto, no el de las mujeres, e incluso aquí no intentaban llevar bien a las mujeres en la línea de comercio.
Ella sabía que el viaje era duro. También sabía bien que no era muy útil físicamente para ellos.
'Pero hay muchas otras cosas que puedo hacer. Puedo responsabilizarme de ellos hasta el final. ¿Por qué la percepción de la gente no mejora así?'
Era Nick quien estaba más resentido y reconfortado con esta situación que ella.
"Toda la gente de aquí es rara excepto tú. ¿No puedes encargarte de la navegación? La cabeza de todos está vacía."
Su país estaba siendo criticado delante de ella, pero Irina sonrió.
"Yo tengo un problema, pero tú también lo tienes. ¿No recuerdas lo que dijiste cuando traté de conseguir un viaje en barco en Ilphenon? ¿No has dicho que daba mala suerte?"
"...... Lo siento mucho, así que, por favor, olvida el pasado."
Irina sonrió ante su cara de desvergüenza. No hay resentimiento por el pasado en absoluto. Más bien, Nick fue el que más se puso del lado de Irina a bordo.
"Lo he olvidado todo, idiota. He recibido suficiente recompensa por el trabajo. De hecho, recibí más que eso. Aprendí que son buenas personas. Entiendo a los marineros y ellos me entienden a mí."
Los marineros de Il’s mostraron a Irina lo que era la confianza y la lealtad humanas. Por eso quiere creer que el mundo es bello, aunque la siga frustrando.
Los prejuicios pueden derribarse, y la gente puede saltar la sólida valla que han construido.
Parecía saber ahora que lo que confundía al mundo era, al final, el trabajo para avanzar en una dirección mejor.
Capítulo 12. Háblame del amor.
El problema del reclutamiento de marineros se resolvió más fácilmente de lo esperado. Cuando Irina, que se esforzaba, fijó la remuneración a un nivel ridículamente alto en comparación con el precio del mercado, los marineros acudieron naturalmente.
Las actuaciones y las tiendas en las que invirtió Irina han sido ya un gran éxito.
Aunque hubo disuasión por parte de algunos, Irina se convirtió en una de las personas más ricas de Kissen a medida que el rendimiento de los almacenes generales adquiridos mejoraba uno tras otro.
Así que ahora no era un desperdicio de dinero.
Pero sintió una profunda amargura en su corazón. ¿Significa esto que se compra el corazón de la gente con dinero?
Refunfuñó Irina.
"¿Tengo que sentir más presión que los demás cada vez que salgo en una nave de Kissen?"
Sin embargo, esto es un poco injusto.
Elenoa sonrió ante la cara de desaprobación.
"¿No lo sabías? La vida siempre es injusta."
"Hoy eres siempre tan consecuente...... ¿Estás siendo descarado?"
Irina habló con timidez y Elenoa sonrió.
"Así es el mundo, así que no esperes demasiado de la gente. La decepción existe porque la esperas algo."
"Vaya. Muy bien. Lo tengo."
Refunfuñó hasta el final, pero en realidad sólo quería confesarse con alguien cercano.
El punto de partida de cada uno es siempre diferente. No tenía intención de negar ahora que provenía de una familia noble histórica y que también había empezado en una posición ventajosa respecto a los demás.
Cuando Irina cerró la cara con un dolor de cabeza, Elenoa se detuvo un poco.
Cuando llegó a la mansión y se preparó para partir, Irina se puso muy sensible. Elenoa, que la veía tan aguda por primera vez, sólo se quedó sentado a su lado porque no sabía cómo consolarla.
Fue entonces cuando llamaron a la puerta del dormitorio del Conde.
Fue Darren quien abrió la puerta y entró en cuanto le dijeron que pasara.
"Elenoa, la fábrica textil fue atacada de nuevo. No hubo daños porque me preparé para ello..."
Irina miró el reloj. Eran poco más de las dos de la madrugada.
Fue la primera en salir corriendo mientras recitaba una palabrota difícil de decir.
* * *
A primera hora de la mañana, Irina se dirigió a la sede principal de Manuel, no a la tienda. Era una especie de visita de protesta.
Nick y otros miembros de la Cúpula de Nordiak y Schuberg intentaron disuadirla.
"Irina, ¿cómo puedes hacer esto de repente? No hay pruebas de que Manuel lo haya hecho."
"Sólo insistiré."
"¿Qué?"
"Es así por ahora."
"......."
"Hay que hurgar para ver qué sale."
Parecía tranquila, pero estaba bastante enfadada, y nadie podía manejar el temperamento en ese momento.
Cuando Irina y el personal de las Cúpulas se apresuraron a llegar desde la mañana, Juan Manuel parecía muy interesado.
"¿Has cambiado de opinión?"
"......."
Era una idea descarada. Él mismo es un comerciante, pero ¿los comerciantes nacen básicamente con tanta desvergüenza?
Irina replicó con gran emoción.
"Si eres un comerciante que vende cosas, deberías luchar con tu rendimiento en lugar de este sucio truco. ¿Qué estás haciendo ahora mismo?"
"¿Por qué dices eso?"
Mirando la cara sonriente, Irina también sonrió profundamente.
"¿Qué? ¿No has entendido de qué estaba hablando? Era de madrugada, así que no hubo gente que lo presenciara."
"No lo sé. No estoy seguro de lo que estás hablando."
Sin embargo, la sonrisa desapareció temporalmente de Juan Manuel.
Nick miró a Irina por la sorpresa de que se hubiera comido tal imprudencia y por la preocupación de que Irina pudiera estar demasiado excitada.
Después de haber estado observando a Juan Manuel durante mucho tiempo, dijo.
"Si intentas hacer algo con este viejo truco, estás pensando muy mal. ¿Crees que el Rey está realmente de tu lado?"