Capitulo 7

3. Voluntad de despertar el Caos

Fue una noche oscura cuando todo terminó.

No sé cuántos días pasaron. Ahora sí que no podía mover un dedo.

El olor fresco de la hierba y el olor de las flores en Ansrium son ahora familiares. Las plantas del bosque que había temido eran incluso aburridas.

Mientras estaba tumbado en un lecho de hierba, Ansrium acarició la piel desnuda de Gladia. Toca sus mejillas, toca sus hombros, frota sus brazos. No sé si es porque los humanos son increíbles. No me pareció muy significativo.

Mi cuerpo aún estaba sensible, así que mi piel tembló de inmediato. No era una mala sensación. Gladia cerró los ojos, sintiendo la cuidadosa mano de Ansrium como un hoohee.

Mucho tiempo después, Ansrium abrió la boca.

".... ¿Podemos saberlo antes de volver a dormir?"

"¿Qué?"

"De qué se trata esta emoción".

Gladia, que descansaba mientras dormía, abrió los ojos y lo miró. Los ojos rojos que parecían no tener emoción se fijaron aquí.

"Cuando te veo, sigo pensando en ti."

¿Significa emoción? ¿Significa deseo sexual? Seguí escuchando sus valores, pero sinceramente no estaba de acuerdo con ellos.

"...No es extraño tener sentimientos. Al menos los humanos los tienen."

"¿De verdad?"

"Así es como naciste".

"¿Sabes cómo naciste?"

Además, dice algo que esta planta ni siquiera entiende. Cansada, Gladia contestó con brusquedad.

"... ¿Origen? Nací allí porque mi madre me dio a luz."

Ansrium negó con la cabeza.

"Estamos hablando de la primera vez."

"¿La primera vez?"

"El caos nos despierta. El caos nos da voluntad y deseos."

El deseo de Ansrium era volver a ser como era, porque su voluntad y sus deseos eran vergonzosos.

El caos, seguramente fue en el momento en que la guerra comenzó a crecer.

De hecho, las tribus de flores y los monstruos del bosque no aparecieron sólo en Quilohaim.

He oído rumores de que aparecieron en otros continentes en el pasado, y rara vez me contaron las experiencias que los viajeros conocieron una vez.

La historia tenía algo en común. La época en la que aparecían era siempre una época caótica a causa de una larga y gran guerra de la que se conocía hasta un país lejano.

Aunque nacieran del caos, parecían correctos.

"La primera vez…no sé si es el caso."

"No me extraña que no lo sepas."

"¿Por supuesto?"

"Acabamos de despertar, así que sabemos el origen. Todavía hay rastros en el mundo. Pero los primeros recuerdos intensos se desvanecen con el paso de las generaciones".

El caos se convirtió en una especie de flores porque se convirtieron en flores voluntarias.

Sólo entonces se dio cuenta Gladia del significado de su pregunta. Ansrium estaba preguntando cómo eran los humanos antes de tener voluntad.

"¿De verdad? Entonces así es como los humanos se despertaron al principio. Vosotros sois plantas. Nosotros somos roca o pez...podría haber sido algo así, o tal vez nuestros orígenes ya no existen."

"... ¿Es así?"

"Entonces tú y yo no somos tan diferentes."

"¿Es así?"

"Todavía no lo entiendo. Es la emoción, la voluntad, y lo que es la deshonra. Es una cuestión de costumbre."

"¿Es así?"

"Sí...Ansrium. Eso es todo lo que tengo que decir."

"..."

"No sé si puedo comunicarme contigo o no."

"¿Es así?"

"...Sí."

Tenía sed, así que miré a mi alrededor para beber agua, y había un vaso de madera. Pensé que no podría alcanzarlo aunque extendiera la mano, y Ansrium me trajo un vaso y me lo puso en la boca.

La parte superior del cuerpo estaba levantada para evitar que se derramara al beber, y el vaso estaba inclinado para que fuera más fácil beber. Fue natural sin vacilar hasta que terminé de beberlo y lo volví a dejar en el suelo.

"Me aseguraré de que no haya ningún traumatismo."

"...Sí."

El movimiento de mirar alrededor del cuerpo era como tratar con un amante justo después de mezclar el cuerpo.

El área alrededor del corazón que ya no estaba allí era un escalofrío.

Era una planta que, aunque plagada de tentáculos, funcionaba según la voluntad de Ansrium. Pensando así, sentí que mezclaba mi cuerpo con Ansrium durante unos días. Sólo besé el cuerpo de Ansrium y acaricié la parte inferior de su cuerpo.

La actitud de Ansrium era demasiado dulce. La realidad es que quiere asegurarse de que las semillas que harán realidad sus deseos estén a salvo, pero la apariencia era muy amistosa.

Las tribus de flores, que creía duras, eran más puras de lo que pensaba, y más suaves que los prejuicios.

Gladia miró al lado de Ansrium, que estaba concentrado. Las largas orejas se agitaron una vez. De repente pensaba que era como un gato.

Ansrium giró la cabeza para ver si sentía la mirada.

"¿Te sientes incómoda?"

"...No creo que sea mi cuerpo."

Estaba tan cansado que no quería levantar una mano, pero no me sentía pesado. Tuve que estar empapado de sangre y sudor por lo que tuve que sufrir, pero ahora no huelo nada de eso.

"La estructura del cuerpo debe haber cambiado. Va a cambiar cada vez más".

"¿Ahora soy más una planta que un ser humano?"

"¿Un hombre vegetativo?"

"..."

No te lo voy a decir. Gladia simplemente optó por hacer girar la rueda.

"Ya no soy una Gladia humana, ¿Debo cambiar mi nombre?"

"Bien. ¿Tienes algo en mente?"

Gladia asintió con la cabeza.

Enseguida se me ocurrió un nombre.

Pensé que estaría bien que me dieran un título.

"Arcanders."


✥✥✥


Hacía tiempo que había empezado a trabajar como mercenario.

Era el momento de empezar con el grupo de vigilantes de la aldea de Arkanders, empezar a recibir encargos de viajeros y, sobre todo, lidiar con las plantas de Quilohime, donde corría el rumor de que eran bastante buenos en su trabajo como mercenarios.

Fue entonces cuando Gladia fue contactada por el reino.

Había dos reinos con el mismo nombre en la zona, que abarcaba el bosque de Quilohaim. La gente simplemente llamaba al país el Oeste y el Este, o más sencillamente el Oeste y el Este. Parecía haber un nombre más largo y colorido, pero a nadie le importaba.

Hubo un tiempo en que estuvo unificado, pero si se memoriza el nombre del reino, hubo algún conflicto entre las fuerzas aristocráticas, y hubo noticias de que el país estaba dividido de nuevo. Se ha repetido varias veces, por lo que el nombre ha mejorado.

De hecho, a Gladia le parecía igual en el oeste y en el este.

Esta vez también, el nombre del país cambiará después de la guerra, y los retratos de las monedas de oro, que son difíciles de ver para la gente común una vez en su vida, pronto se olvidarán después de escuchar los nombres de algunos nobles coloridos por primera vez.

Las afueras de Quilohaim, donde vivía Gladia, estaban al oeste o al este, o a ninguna de las dos cosas. Debido a las frecuentes guerras, era un lugar al que acudían diversos refugiados que ni siquiera tenían sentido de pertenencia.

Así que la gente de esta zona tenía una cosa en común, independientemente de su identidad. Se trataba de querer acabar con esta sangrienta guerra.

Fue un noble del Este el que llegó a Gladia un día.

Presentó su nombre como Klaus. Los otros nombres que siguen son demasiado largos para ser olvidados.

"Necesito tu ayuda para acabar con esta dolorosa guerra. Madosa Gladia de Arkanders."

"Arcandus es sólo un vigilante de la aldea."

"Humilde, puedes enorgullecerte de ello."

Ojos que abrazan lo frío y lo cálido al mismo tiempo. Nunca había visto unos ojos así más que a mí mismo. Tal vez él pensaba lo mismo.

Gladia se calentó con él. De hecho, tal vez sea más apropiado llamarla curiosidad. Y es que resultaba sorprendente que un noble reconociera la capacidad del pueblo llano para levantar la vista y acudiera a su encuentro de la mano.

Los orientales, los occidentales y los aristócratas aparecieron en algún momento y arrastraron a todos los que trabajaban medianamente, diciendo que se trataba de un reclutamiento o de un impuesto. Y libraron una guerra utilizando como objeto a personas que no tenían nada que ver con sus intereses.

Crowe era muy parecido a la representación que su padre hacía de vez en cuando de su difunta madre, de una noble enfatizada y obsesionada.

Pensé que tal vez esto era lo que decía mi madre, la oportunidad de recuperar su posición.

Gladia aceptó de buen grado su oferta, diciendo que Gladia podría ganar el título si la larga guerra terminaba en victoria.

He visto docenas o cientos de huérfanos de guerra desde que nací. Familiares, mercenarios, todos eran niños así. Se me ocurrió por primera vez que tal vez podría mejorar esta situación y vivir en un entorno mucho mejor con mi familia.

Por encima de todo, a Gladia le encantaban las palabras de Klaus para acabar con esta dolorosa guerra, que no era más que la víctima.

Un día en la guarnición de Klaus, todo se debió a esa mentalidad.



Con el apoyo total de Nube, hay más herramientas que necesitan ser fabricadas. Lo que Claw pide es más y más. Así, Gladia vivió en una guarnición del reino con los mercenarios de Akander.

No pasó mucho tiempo desde que empezara a vivir allí. Como de costumbre, hubo algo que llamó la atención de Gladia, que se movía desde la guarnición para recibir materiales.

Los soldados de Klaus estaban atando algo y arrastrándolo.

"Espera. Detente ahí."

"¡Oh, hola, madosa!"

"¡Madosa Gladia!"

Los dos soldados se saludaron cordialmente.

Madosa era una especialista, así que Gladia entró en la zona y recibió una posición relativamente alta. Pero los soldados no lo pasaron mal.



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