Capítulo 22

Tengo cinco años. ¿Es normal estas vueltas de la vida?

En cuanto abrí los ojos, solté un largo suspiro. No creo que tenga un día más tranquilo que en mi vida anterior.

-"Eh..."

Mis hombros estaban tensos y rígidos cuando me levanté. Cuando me quité la ropa, la herida no era tan grande como pensaba. Parece haber sido tratada adecuadamente.

Toque con cuidado alrededor de la herida roja y miré hacia arriba.

-"Espera, ¿qué pasó con el mocoso?"

El último recuerdo que tengo era cuando empujé toda mi energía hacia Baek.

Cuando vacié mi Danjeon hasta el punto de pensar que realmente había dejado ir mi vida, perdí inmediatamente el conocimiento al sentir un dolor en mi bajo vientre.

Así que no tenía ni idea de lo que había pasado con Yeon y de cómo logro evitar a todos esos asesinos.

Recordé lo que dijo antes de entrar en el pasaje secreto.

<<No sé qué me pasa. Tenía que alejarme de ti, pero no funciono. No puedo.>>

Sabía muy bien que, aunque yo volviera por él, sería solo una carga para él.

También sabía que lo racional era bajar al pueblo y pedir ayuda. Pero no pude.

Así como Yeon dijo que no sabía por qué lo hacía, yo tampoco sé porque lo hice. Sabía que no debía hacerlo, pero no podía dejarlo solo.

-"¿Todo salió bien...?"

Sacudí la cabeza mientras imaginaba algo siniestro. Si yo estoy a salvo, el mocoso también está a salvo.

Me esforcé por consolarme a mí misma, pero la puerta se abrió y alguien entro.

-"¡Señorita!"

Seoyoung tiró el recipiente de agua que traía y corrió hacia mí. Parece que mientras estuve en cama la paso mal, ya que se miraba muy demacrada.

Seoyoung me abrazó y dejó caer lágrimas.

-"Lo siento, no debí haberme ido. Lo siento mucho."

-"No es culpa de la niñera. Ya estoy bien."

-"Sólo dices eso para no preocuparme."

-"Estoy bien, enserio. No me duelen los hombros en absoluto."

-"Todavía no está curado, y ya no te sientes mal... ah, mi bebé ha crecido demasiado."

Pregunté con cuidado, limpiando las lágrimas de Seoyoung.

-"¿Qué ha pasado? ¿Cómo está el pequeño maestro?"

-"Se puso bien mucho antes que la señorita. Ahora está entrenando."

Oh, eso es un alivio. Gracias a Dios.

Pensar en Yeon, que estuviera entrenando con una expresión tranquila como si nada hubiera pasado, me dio una sensación de alivio.

La razón por la que está tan obsesionado con el entrenamiento de cierre, no era sólo para aumentar su fuerza.

Era porque había algo que debía hacer en el centro de entrenamiento de cierre.

Así que eso fue aún más sorprendente.

Un niño de 10 años que supera la necesidad de descansar y hace un esfuerzo silencioso para sus propios fines. Oh, Dios mío. ¿Dónde hay un niño de 10 años que sea así?

-"¿Qué hay de los asesinos? Creo que los enviaron del Palacio de hielo del Mar del Norte. ¿Lo sabias?"

Seoyoung me arregló el cabello desordenado. Tras un momento de duda, su expresión se volvió repentinamente decidida.

-"Seré sincera contigo porque al final lo descubrirás."

***

-"¿Qué?"

-"Han eliminado al Palacio de Hielo del Mar del Norte y al Río Negro, el mayor grupo de asesinos del centro de campo."

El Palacio de Hielo del Mar del Norte no era lo suficientemente pequeño ni débil como para desaparecer de la noche a la mañana. Por cierto, ¿así de fácil era deshacerse de él?

-"¿Fue… mi padre?"

-"Sí, y el gran maestro ha anunciado oficialmente la existencia de la señorita al exterminar el Palacio de Hielo del Mar del Norte".

-"¿Así que nadie sabía de mi existencia?"

-"No del todo. El maestro no tuvo más remedio que esconderte del mundo y alejarse de ti. Hubiera sido peligroso que los enemigos del maestro supieran que eras lo más valioso que tenía."

-"..."

Una escena que había olvidado de repente vino a mi mente.

<<No merezco tomar tu mano. No puedo porque estarías en peligro por mi culpa. Así que....>>

<<No te acerques a mí. No me tomes de la mano ni pienses en un monstruo como yo, como tu padre.>>

Pensé que era un sueño, pero no lo era. La pesada confesión de Cheonma y el hecho de que le acaricie la mejilla, todo fue real.

-"Para darme a conocer oficialmente, hizo eso."

-"Tú eres lo único y lo más precioso para el maestro."

Seoyoung, que hablaba con calma, apretó los dientes con fuerza.

-"Ahora todos en el centro del campo lo sabrán a través de este incidente. El precio de tocarte es la muerte."

Unos días después, la noticia de la extinción del Palacio de hielo del Mar del Norte se extendió por todo el centro del campo.

***

Mi existencia parece ser conocida por el centro del campo. Al ver el aumento explosivo de regalos.

No sólo la congregación, sino también las guardianas menores que querían entrar en la escuela, por supuesto, eran malas.

Entraron tantos regalos como para hacer un almacén aparte.

-"Me gustan, así que no quiero tirarlas si me lo dicen."

No me siento cómoda desde que descubrí que lo que pasó con Cheonma no fue un sueño.

Además, cuando descubrí de repente que los abuelos, que me habían estado dando regalos, eran los mayores de la escuela, mi propósito se debilitó indefinidamente.

¿Puedo escapar para vivir sola? Dejando atrás a Cheonma y a los Abuelos.

Pero era un problema si no escapaba. Ya que no había forma de cambiar mi miserable futuro.

-"¿Qué está pensando, señorita?"

-"¿Eh? Nada. ¿Cuántas llevamos?"

Estuve haciendo adornos con flores de hielo mientras esperaba a Cheonma y a los ancianos que regresan del Palacio de hielo del Mar del Norte.

Era una forma sencilla que se completó cuando apliqué pegamento de goma a la flor de hielo que hice y le puse una pinza de ropa.

De hecho, lo pensé como un artículo para recaudar fondos después de la huida, pero decidí hacerlo por adelantado para los que trabajaron duro para mí.

-"Hiciste un total de diez."

-"Todavía tengo un largo camino por recorrer."

-"¿Eh? Se los vas a dar a los ancianos y al maestro, así que ¿por qué haces más?"

-"Pero aún faltan, al menos unos 30 más. Para la niñera, la maestra, las hermanas y a Eunyeong. "

Seoyoung dudó como si no hubiera pensado en ello.

-"... ¿Puedes darme a mí?"

-"Sí, la niñera es la más bonita."

Seoyoung removió la goma con las mejillas teñidas de rojo.

-"No tienes que darme…"

-"¿Por qué? ¿No te gusta?"

-"¿Qué? De ninguna manera. ¡Es una bendición lo que me estás dando!"

-"Entonces tómalo. Tómalo y ponlo en tu ropa."

-"¡Claro! ¡Por supuesto! ¡Lo llevaré conmigo para siempre! Podría perderlo, ¡así que no lo dejaré ir!"

Qué sentido tiene eso... Si lo pierdes, puedo volver a hacerlo.

Me rasqué la mejilla avergonzada y miré a Baek.

Después de ese día, el niño blanco no se movía. No tomaba mi almohada por la noche, ni me obligaba a darle mi energía.

Era sólo una creación suave de flores de hielo. Estaba nerviosa porque no respondía, pero decidí esperar pacientemente.

Las flores no se desasían y se miraban bien por fuera. Tal vez esté descansando por toda la energía que uso.

En ese momento, una persona vestida de negro apareció en la habitación donde estábamos solo Seoyoung y yo.

-"¡Oh, Dios mío! Señor, tiene que avisar de su llegada."

Había una mirada de vergüenza en los ojos de Eunyeong. Era gracioso pensar que una persona que tiene que moverse en secreto como una sombra, le pidan que avise de su llegada.

-"... Lo siento, lo siento."

Eunyeong se disculpó con una voz bastante inexpresiva. Me encogí de hombros y me reí.

-"Oye, estoy bromeando. Pero, ¿qué pasa?"

-"El maestro... llego."

En cuanto oí la voz ronca de Eunyeong, las flores de hielo cayeron de mis manos. Me levanté de un salto e intenté salir corriendo de la habitación.

-"¡Señorita! ¡Tiene que tomar esto! Dijiste que te gustaría dárselo en cuanto llegara el maestro."

-"Oh, claro."

Corrí hacia Seoyoung y le quité la cesta.

Cuando salí al jardín de flores, vi a Cheonma y a diez ancianos que estaban parados en el jardín.

Me enteré de que una persona normal tarda más de dos meses en llegar al puente desde el Palacio de Hielo del Mar del Norte.

Aunque el viaje, que duraba más de cuatro meses, se acortó a sólo un mes, los ancianos ni siquiera parecían cansados.

Cuando los ancianos, que tenían un aspecto renovado como si su dolor de diez años hubiera disminuido, me vieron y de repente se vieron preocupados.

Debían sentirse mal al pensar que me engañaron ya que frente a mi tenían que fingir ser unos ancianos enfermos.

Los miré finamente y me volví hacia Cheonma.

-'¿Por qué me late el corazón cuando veo sus ojos tranquilos mirándome?'

Ya me lo había imaginado antes. El cómo se sentía el tener una familia.

-'Así es como se siente.'

Traducción: Jiho

Corrección: Jiho