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El Tribuno Marcio había incrementado el ritmo del entrenamiento militar de los legionarios, pero contrario a lo que Jaime Luccar y César Germánico desearían, esta decisión fue recibida con entusiasmo por todos los soldados que luego de los últimos acontecimientos pensaban en su general como un héroe y estaban deseosos de probarse dignos de su liderazgo. De modo que los dos Centuriones corruptos eligieron detener sus conspiraciones por el momento y esperar una ocasión más propicia.
Gracias a su Sexto Sentido, Bryan podía distinguir este cambio de humor entre sus hombres y por este motivo decidió que podía dejar a sus Tribunos a cargo de la Fortaleza con relativa seguridad, por lo menos durante unos días. Así que fingió que tenía que hacer un viaje a la Ciudad de Odisea para recibir un documento oficial, pero en secreto habló con Druso y le explicó que estaba a punto de retirarse durante una semana a un lugar aislado para recuperar sus poderes.
- ¡¿Acaso estás herido?! - Preguntó Druso alarmado.
- Nada serio, pero necesito buscar un lugar privado para meditar. - Respondió Bryan con un gesto tranquilizador: - Y no puede ser aquí, porque en este momento las tropas no deben verme débil. ¡Tienen que saber que poseen un general capaz de matar cientos de bárbaros sin esfuerzo alguno! Por favor transmite mis instrucciones a Silano y Marcio luego de que me haya ido. -
- Entendido. -
- Cuando regrese, lo primero en lo que nos enfocaremos es en los bandidos, así que asegúrate de coordinar a esos exploradores con Valerio. -
- Se hará como dices. - Asintió Druso marcialmente, aunque luego añadió: - Solo una cosa… ¿Por qué tengo que esperar a que te vayas para decírselo a los demás? -
- Bueno, si se lo digo a Silano también se lo tendría que decir a Marcio. - Comenzó a explicar Bryan dudando un poco, pero luego añadió con un suspiro: - Si se entera de que voy a Odisea, Marcio podría pedirme que le envíe una carta a su amada… Gloria, ¿verdad? -
- Ah, es verdad. -
- Nunca podría traer a esa niña aquí, donde tendría que vivir junto a potenciales violadores y asesinos. Por lo menos no hasta que los haya roto por completo y recompuesto como legionarios obedientes. -
- Eso tiene mucho sentido. - Comentó Druso asintiendo: - Aún no puedo creer que necesitásemos hacer el espectáculo con el orco hasta tres veces para que aprendieran a mantener su falo bajo control. -
- Precisamente, es por eso que le alquilé una residencia permanente en una posada para que no estuviese sola y siempre fuese vigilada. - Dijo Bryan: - Pero sigue siendo cierto que todo este tiempo Marcio ha trabajado bastante y los dos no han podido verse. Así que me sentiría mal negándome a una petición tan simple como la de entregar una carta a su esposa aprovechando mi supuesto viaje a Odisea. -
En realidad, la posada en cuestión era una base secreta del Manto Oscuro. Se trataba del único sitio en la Provincia de Valderán donde podía mantener a alguien completamente a salvo y al mismo tiempo asegurarse de tenerla bajo vigilancia constante, sin que la persona en cuestión se diese cuenta. Y es que, aunque de momento Marcio había demostrado ser muy confiable, Bryan todavía sentía la necesidad de tener en sus manos la única debilidad del veterano Tribuno. Al menos de momento.
- Si, yo también me sentiría mal rechazando esa petición. - Asintió Druso.
- En cualquier caso… - Continuó Bryan luego de pensarlo un poco: - Cuando pacifiquemos esta región podremos construir una residencia permanente aquí y entonces los tortolitos podrán vivir juntos sin preocupaciones. -
- Seguro que eso lo motivará a trabajar más duro. - Dijo Druso sonriendo.
- Mis pensamientos exactos. - Asintió Bryan.
- Por el trueno, hasta me pone un poco celoso. - Comentó Druso soltando una sonora carcajada: - ¿Quizá debería buscarme una querida? -
Pese a la alegría de su amigo, la reacción de Bryan al escucharlo fue la de entornar los ojos para darle una mirada de advertencia mientras le decía: - Te lo digo desde ahora. No me importa si te diviertes, pero si te metes con una mujer casada haré que te arrepientas. -
- ¡…! ¡¿De dónde vino eso?! - Preguntó Druso confundido.
- Confesaste que te gustan las maduras en frente de todos nuestros compañeros cuando celebramos nuestra graduación del entrenamiento militar. - Le recordó Bryan
- ¡¿Qué?! ¡Solo estábamos hablando del tipo de mujer que más nos gustaba! Ya sabes: Sus pechos, culo y caderas… - Trató de excusarse Druso medio atolondrado: - ¡Yo nunca mencioné nada sobre su edad! -
- No fue necesario, fue demasiado obvio por los detalles que recalcabas. - Le dijo Bryan con una sonrisa socarrona: - Y no fui el único que se dio cuenta, sino todos los demás. -
- ¡…! -
- Así que recuerda… ¡Nada de mujeres casadas! -
- ¡ja! ¡Yo nunca haría algo así! -
Bryan simplemente lo miró sin decir nada.
- ¡Hablo en serio! Está bien, me gustan mayores. ¿Qué tiene eso de malo? Sinceramente no entiendo por qué alguien preferiría casarse con una escuálida quinceañera. - Exclamó Druso levantando el pecho: - Yo prefiero mil veces una dulce y elegante treintona. ¿Y qué si ya ha dado a luz antes? ¡Eso sólo es una prueba de que es fértil! ¿Cuál es el problema? -
Bryan estaba pensando en decir algo sarcástico, pero al final decidió no hacerlo. Lo cierto era que no estaba en contra de lo que su amigo pensaba y tampoco estaba de acuerdo con muchos criterios que usaban en este mundo para buscar pareja.
A Druso le gustaban las maduras
Lo que ocurría era que, debido a los riesgos que implicaba dar a luz para las mujeres, la norma general era que se casaran a los catorce. Ese fue el caso de Emily, que se casó con Aureliano precisamente un mes después de su decimocuarto cumpleaños. Y habría sido también el caso de Phoebe, si el padre de esta no hubiese muerto dejándola legalmente emancipada, con una gran fortuna personal y el apoyo de su maestro Cyrano Constantino.
En el caso de Fanny, el motivo de que siguiese soltera era el hecho de que Esteban había ordenado quemar todas las propuestas de matrimonio que le eran enviadas. También influyó mucho cierto evento con un noble insolente y demasiado engreído, que visitó a Esteban en persona para forzar un compromiso. El noble en cuestión acabó cayéndose “accidentalmente” en una madriguera de orcos en donde fue devorado vivo, esto último luego de que, de nuevo “accidentalmente”, sus piernas y brazos se rompiesen justo antes de la caída. Por lo menos ese era el informe oficial que Esteban envió a la familia del difunto, junto con una carta en la que se comprometía a recibir muy hospitalariamente en su residencia a cualquiera que desease pedirle más explicaciones.
Claro que en ese momento ni Bryan ni Fanny eran conscientes de ello.
- Haz lo que quieras. - Le dijo Bryan a su amigo: - Solamente no quiero que un feliz matrimonio se rompa por tu culpa. -
- Te repito que yo no haría eso. -
- Más te vale. -
- ¿Se puede saber por qué a ti te importa tanto? - Preguntó Druso mirándolo extrañado.
- Causa y efecto. - Respondió Bryan de forma automática
- ¿Qué? -
- Solo digamos que intento compensar un poco al destino por todo lo que le debo. -
- ¿Cómo? -
- Nada, yo me entiendo. - Dijo Bryan evadiendo la mirada de su amigo.
Poco después Bryan se marchó volando a toda prisa y de ese modo consiguió también justificar el que no se llevase a su guardia de Lictores. Si bien había mentido, una parte de lo que le dijo a Druso era cierto, necesitaba aprovechar el tiempo para analizar el daño del Desgarrador Sombrío y también para ayudar a Lawrence en su campaña contra las tribus bárbaras que en realidad recibían el apoyo de la Alianza Mercante de Tiro.
“Seguramente él ya habrá llegado a su destino.” Pensó Bryan preocupado: “Solo espero que su campaña esté transcurriendo sin problemas.”
Aún debía hacer algo muy importante antes de irse y era encontrar un lugar seguro para colocar su Matriz de Transporte portátil. Después de pensarlo un poco decidió que su mejor opción era crear un refugio temporal en un lugar elevado, que luego pudiese camuflar. Así que sobrevoló varias montañas, hasta que encontró una bastante inaccesible desde tierra y la revisó cuidadosamente en busca de señales de presencia animal, sobre todo nidos de aves gigantes. Después de todo, lo último que necesitaba era que algún tipo de grifo o algo parecido se llevase su matriz.
Una vez que se aseguró de que la montaña parecía libre de inquilinos ocasionales, tanto humanos como animales, se acercó a una sección que era difícil de ver e invocó al Zombi Élite de Tierra para pedirle que lo ayudase a excavar una cueva. La criatura asintió y comenzó a usar sus poderes para hacer una hendidura, la cual fue extendiendo poco a poco.
- Tómate tu tiempo y presiona bien la tierra contra los bordes. - Le advirtió Bryan: - Lo último que necesito es que una roca se caiga del techo justo encima de las varillas y rompa el circuito de la matriz. -
“¿Siquiera me entiende?” Se preguntó Bryan: “Sé que el Pequeño Esqueleto puede comprender órdenes complejas, ¿pero hasta qué punto puede hacerlo un Zombi Elemental?”
Como si quisiese responderle, la criatura se llevó un puño al pecho, en un gesto que claramente quería decir “¡déjemelo a mí!” y entró él mismo en la abertura que estaba excavando, mientras la nube de arena que lo cubría aceleraba su velocidad al máximo, puliendo de este modo toda la superficie.
Bryan estaba impresionado y felicitó al Zombi Élite de Tierra, pero por si acaso usó una llamarada de Fuego Glacial Místico púrpura para congelar la superficie. Luego ingresó junto con el Zombi y armó la Matriz de Transporte en la parte más profunda.
- Cierra la entrada. - Ordenó Bryan al Zombi de Tierra y este desplomó las rocas sobre la abertura para que esta quedara completamente bloqueada desde afuera, aunque el espacio en el interior era apenas lo bastante grande para ambos.
Bryan agradeció al Zombi de Tierra y lo envió de vuelta al inframundo. Luego activó la Matriz de Transporte y apareció en el Cementerio de la Muerte.
*****
Bryan se dirigió directamente al Laboratorio de Encantamientos para examinar el Desgarrador Sombrío. Toda la superficie estaba repleta de grietas y había un segmento del filo mellado en el lugar donde su arma entró en contacto con el Fragmento de Khilani-Veda. La única buena noticia era que todavía podía sentir el poder del encantamiento de la Asimilación de Tesoros Mágicos en su interior, aunque su energía estaba casi agotada. Sin embargo, era imposible estar seguro de hasta qué punto se extendía el daño.
Daños del Desgarrador Sombrío
“Necesito una opinión experta.” Decidió Bryan y se dirigió a la Aldea de sus amigos enanos.
- ¡Bienvenido, Han! -
Como siempre, Bennet fue el primero en saludarlo efusivamente. Y poco después se corrió la voz en la aldea, para que todos saliesen a darle una efusiva bienvenida. Incluido el Patriarca Calvin, que a pesar de sus años caminaba firmemente como el que más.
- ¡Estimados amigos! - Respondió Bryan sonriendo alegremente: - Muchas cosas me han sucedido desde la última vez que nos vimos. Pero por favor cuéntenme primero sobre ustedes. ¿Cómo han estado? -
- Gracias a las provisiones que nos diste todos sobrevivimos al invierno sin ningún muerto e incluso tuvimos suficiente para cultivar cebada. - Explicó Calvin agradecido: - ¡También hicimos muchos cambios en nuestro pueblo! -
- Si, noté que fortificaron la entrada. -
Al principio los enanos confiaban principalmente en pasar desapercibidos para mantenerse a salvo, pero como los troles del bosque ya habían encontrado la entrada a su pueblo una vez, decidieron cambiar de enfoque y colocaron una gran puerta de hierro con gozones de piedra tallada, la cual además estaba reforzada con un encantamiento de magia de trueno.
Y no hay que mencionar que este hecho despertó muchas ideas en Bryan, cuya fortaleza estaba sufriendo por la falta de puertas resistentes.
“Quizá mis amigos puedan ayudarme con más de un molesto problema… Pero primero lo primero.” Se dijo Bryan mientras escuchaba con especial atención a todos los cambios que los enanos habían hecho en su aldea y tomaba nota para saber cómo podría ayudarlos más adelante. Finalmente, cuando le pidieron que él les contase sus propias novedades, Bryan aprovechó para mostrarles el Desgarrador Sombrío.
- ¡¿Qué le ha pasado a tu espada?! - Exclamó Calvin adolorido y sin poder contenerse, pues él mismo era quien la había forjado inicialmente y como todos los artistas, valoraba su obra de forma muy personal.
- ¡Ay, patriarca! ¡Fui emboscado traidoramente por un enemigo que portaba un arma terrible! Afortunadamente la espada que forjaste me salvó la vida. Pero a cambio terminó en este estado tan lamentable, que me duele como si me hubiesen arrancado un brazo… -
Las palabras de Bryan eran bastante ciertas, pero también estaba exagerando un poco para así aliviar el dolor en el corazón del patriarca. Después de todo, si este pensaba que no había tratado su creación con el debido respeto, tendría derecho a negarle su ayuda para repararlo. Así fue como inició una narración previamente preparada, en la que les contaba cómo su nación lo envió a luchar contra sus enemigos, resumiendo sus enfrentamientos con Odón Ascher, el Culto de Caelos, Sigrid Bazán y el resto de murientes, para finalmente cerrar con broche de oro al contar el enfrentamiento que tuvo con Vlad Cerrón.
En cada evento que relataba, se aseguraba de omitir nombres y lugares concienzudamente. También hablaba específicamente del Desgarrador Sombrío, describiendo cómo lo había usado en cada batalla, hasta el punto en que el arma se convirtió en una especie de segundo protagonista. Esto despertó una gran alegría y fervor en las expresiones de los enanos, sobre todo en el anciano patriarca que ahora sentía que su trabajo en cierto modo estaba ayudando a forjar el destino de un poderoso imperio.
Finalmente, Bryan terminó explicando el ataque del Templo de Idramón y el poder divino que encerraba el artefacto que tenían.
- Esa barrera no solamente era indestructible, sino que mermaba todos mis poderes hasta un punto en que mis posibilidades de supervivencia estaban increíblemente limitadas. - Dijo finalmente Bryan poniendo fin a su narración: - Si no hubiese usado tu arma como lo hice, dudo que ahora mismo pudiese estar aquí. - Se volvió hacia el anciano enano para mirarlo a los ojos: - Patriarca Calvin, le debo la vida a la espada que has forjado. -
Entonces Bryan se levantó e hizo una profunda reverencia.
- ¡No más, amigo Han! ¡Por favor no te inclines! - Exclamó Calvin profundamente conmovido: - ¡Si mi arma ayudó a nuestro más querido amigo, eso es algo que me llena de una gran alegría que no puedo expresar! Además… ¿cuántos pueden decir que forjaron un arma capaz de destruir un artefacto divino? ¡Este es el mayor honor que cualquier herrero que se aprecie de serlo podría soñar con recibir! -
- Pues tal honor es bien merecido, Patriarca Calvin. ¡Te lo aseguro! - Exclamó Bryan con una sonrisa, pero luego se inclinó sobre la mesa que compartía con sus amigos para preguntarle con cierta emoción contenida: - Precisamente porque es un arma tan buena, quiero saber si es posible arreglarla. -
- Déjame verla. -
Calvin sujetó la hoja entre sus manos para examinarla con suma atención, mientras que todos los enanos que los rodeaban observaban en silencio, con un brillo de respeto en sus miradas por todas las historias que Bryan les estuvo contando. Pasó casi una hora y Calvin continuaba examinando en silencio cada milímetro del arma, mientras que todos a su alrededor guardaban silencio.
- Afortunadamente el núcleo sigue en su sitio, aunque se encuentra agrietado. - Dijo finalmente Calvin suspirando: - Eso significa que la reparación es posible. -
- ¿En serio? -
- Hay dos opciones para reparar la hoja, pero son complicadas. -
- ¡Por favor dímelas! - Exclamó Bryan inmediatamente: - Haré lo que tenga que hacer. -
- La primera forma es volver a forjarla completamente. - Explicó Calvin: - Es el método más seguro para preservar su integridad física. El problema es el encantamiento que has colocado en su interior… me temo que desaparecería por completo y tendrías que volverlo a colocar. -
Bryan tragó saliva. Si se tratase de un simple encantamiento de fortalecimiento, no habría ningún problema con ello. Pero la magia de Asimilación de Tesoros Mágicos que había imbuido en el Desgarrador Sombrío lo convirtió literalmente un objeto único, cuyo poder se desarrollaba por etapas, según se incrementaba la propia comprensión de Bryan sobre la magia demoníaca y las habilidades que tenía. Perder todo esto para volver al punto de partida le parecía devastador.
- Eso… - Comenzó a responder Bryan eligiendo con cuidado sus palabras: - Podría ser complicado. El encantamiento que le coloqué es un poco único en su tipo. -
- Si no quieres perder la magia que contiene, tú única opción es la alquimia. - Propuso Calvin luego de pensarlo un poco: - Pero será muy difícil, porque solamente un mago bastante poderoso podría realizar esta reparación con éxito. ¡Y tendría que poseer el mejor de los equipos! Básicamente lo que necesitarías hacer es rellenar las partes quebradas con un nuevo material mágico, mediante un proceso de transmutación activa y luego compactar todo durante al menos un mes o dos. De ese modo mantendrás el encantamiento actual. Pero la forma cambiará. Eso es inevitable porque estarás agregando masa de metal. -
- ¿Qué tanto cambiaría su forma? -
- Dejaría de ser una espada corta. -
Durante unos momentos Bryan guardó silencio. Si bien había aprendido mucho de esgrima y la Verdadera Destreza de Cyrano Constantino, también era cierto que su estilo de combate había sido refinado para adaptarse al tamaño actual de su hoja, así que modificarlo en este punto le parecía bastante complicado.
“Cambiar mi estilo de combate o perder todo el desarrollo de mi Desgarrador Sombrío hasta el momento.” Se dijo Bryan, pero entonces tuvo una idea que quizá podría ayudarlo a mejorar sus posibilidades: - ¿Es posible usar este material para la modificación? -
Entonces Bryan se levantó y extrajo un único saco de su Anillo Espacial, aunque con algo de dificultad.
- ¿Qué es esto? - Se preguntó Bennet mientras abría el paquete para examinar el contenido, pero entonces sus ojos se abrieron por la sorpresa y exclamó: - ¡Mithril Blanco! ¡Miren todos! ¡Es Mithril Blanco! -
“Como se esperaba de los enanos.” Pensó Bryan sonriendo: “Incluso en estado bruto sólo necesitaron darle un vistazo para saber de qué mineral se trataba.”
Mientras tanto la multitud de enanos examinaba atentamente los trozos de rocas blanquecinos aparentemente normales, pero en sus ojos brillaba la misma emoción que una persona tendría al contemplar una joya preciosa y perfectamente cortada.
- ¡¿De dónde sacaste esto?! - Preguntó Bennet asombrado.
- Es una larga historia, pero tengo varios cientos de estos. - Respondió Bryan sonriendo, pero luego añadió con cierta ilusión: - Sé que la cantidad se reducirá si se refina… ¿Pero crees que es posible usar Mithril Blanco como material? -
- Me temo que no. - Negó el patriarca, echando agua fría sobre sus esperanzas: - El Mithril blanco es maravilloso para intervenir con el efecto de la magia, en cambio el Oricalco la potencia y el Oro Negro refuerza la capacidad del primero, manteniéndola siempre en equilibrio. No amigo, me temo que el único material que puedes utilizar es otro trozo de Oricalco. -
Bryan maldijo su suerte, pero no lo expresó, sino que bajó la vista durante un momento mientras pensaba y pensaba en alguna solución. El problema era que el oricalco era un mineral demasiado raro que no podría obtener únicamente con dinero, incluso si gastaba la mitad de su fortuna.
- Supongo que mi mejor opción es tratar nuevamente con esa mina. - Comentó en voz alta mirando al patriarca: - Sé que es mucho pedir. ¿Pero me darían permiso para minar nuevamente aquella veta? Quizá encuentre un trozo de Oricalco que me sirva. -
“Esta vez iré con un ejército entero de Zombis y excavaré en ese lugar hasta convertirlo en un cráter si es necesario.” Pensaba por dentro.
El Patriarca Calvin negó con la cabeza: - Créeme cuando te digo que aquella veta ya no contiene minerales valiosos. El instinto de nuestro pueblo jamás falla respecto a los metales y sabemos bien que ya no hay nada ahí. -
Bennet y el resto asintieron apesadumbrados.
Al oírlos, Bryan soltó un suspiro apesadumbrado. Aparentemente su única opción era volver a forjar el arma por completo y perder todos los poderes que había conseguido ganar. Estaba a punto de decir esto, cuando de pronto notó que el Patriarca se levantaba de la mesa y sin decir nada se dirigió hacia la casa principal.
Después de unos momentos, el anciano regresó llevando un cofre pequeño entre sus manos y cuando le mostró su contenido, Bryan estaba sin palabras.
Era un gran trozo de oricalco.
- Este es el último que quedó luego de que nos ayudaras antes. Por favor úsalo. -
- ¡No puedo! - Exclamó Bryan levantándose.
No es que no lo desease, pero sabía que para sus amigos el oricalco era un elemento tan valioso que era casi sagrado. Incluso no dudarían en arriesgar sus vidas para obtener este material. ¡Era como pedirles su propia sangre!
- ¡Tómalo, Han! -
- Pero… -
- ¿Sabes cómo es la muerte por hambre? - Intervino Bennet de pronto, atrayendo las miradas de todo el grupo: - Yo elegiría morir quemado lentamente en un horno antes de tener que morir por falta de alimentos, donde el propio cuerpo se consume a sí mismo con el pasar de las horas. ¡Y sin embargo muchos tuvimos que ver como nuestros familiares y amigos padecían ese terrible destino en más de una ocasión!
Bennet
Tal habría sido nuestro destino esta vez si tú no hubieses venido con esos alimentos. Quizá yo mismo o cualquiera de nosotros hubiese tenido que ver cómo su familia moría de esta manera. ¡Tú nos salvaste de eso!
Así que sí, este oricalco es tan valioso como la vida para nosotros. ¡Pero tú, amigo Han, nos has salvado la vida! ¡Has salvado la vida de nuestros hijos!
Además, lo que más nos dolería al perder este trozo de oricalco es que terminase siendo mal utilizado en una obra de calidad inferior. Pero si lo volvemos parte de un arma enana que consiguió vencer una reliquia dejada por los dioses… ¿No sería acaso el mejor uso que podríamos darle? -
Todos los enanos asintieron con emoción a las palabras de Bennet hasta que finalmente Bryan, con profundos sentimientos de gratitud, aceptó llevarse el tesoro. A cambio les propuso que durante los próximos días les traería a los enanos todo el Mithril Blanco que tenía para que lo purificasen en lingotes. Entonces, se los repartirían mitad y mitad. Según el Patriarca Calvin, purificar el Mithril Blanco requeriría de varios meses en la forja, pero estaban muy emocionados de poder poner sus manos sobre otro mineral legendario y aceptaron felizmente el desafío.
- Tengo una pregunta. - Dijo Bryan antes de partir: - ¿Sería posible que les encargase unas puertas como las que han puesto en la entrada de su valle? -
- ¿Puertas? -
- Verán, mis gobernantes me han asignado que defienda una fortaleza con muchos problemas. Y el peor de ellos es que solamente tenemos una de las cuatro puertas necesarias. Además, la que queda no soportará una nueva temporada de lluvias. -
- ¿Te dieron una fortaleza sin puertas? ¿Es en serio? - Preguntó Bennet sin poder creerlo y el resto de enanos no pudieron contener las carcajadas por el absurdo.
- Así es. - Respondió Bryan riéndose con ellos: - Trabajar para el emperador realmente requiere que me rompa los codos por el esfuerzo. -
- ¡¿Por qué aceptarías algo así?! -
- Hay muchos motivos… - Canturreó Bryan: - Pero sería largo de contar. Por ahora dejémoslo en que es auténtico orgullo profesional. -
- Pues bien, no te preocupes amigo Han. - Dijo Bennet tras recuperar el aliento: - Resulta que yo soy el mejor haciendo puertas por aquí. Dame las medidas y tendré listos los mejores portones reforzados con hierro que podrías imaginar. Es más, tengo una idea. - Se volvió hacia el anciano Calvin: - Patriarca, sé que el Mithril Blanco tomará mucho en ser refinado y además usarlo en unas simples puertas sería un gran desperdicio. Pero al refinarlo obtendremos bastante escoria que podría contener varias partículas de este metal. ¿Qué le parece si fundo los restos de la purificación con otros metales para producir una puerta cuyos goznes y refuerzos sean más resistentes a los ataques mágicos?
- Bueno, es muy raro que tengamos Mithril Blanco para trabajar, así que nunca se me ocurrió intentarlo… ¡Pero podría funcionar! -
- Entonces me esforzaré para tener tus nuevas puertas listas cuanto antes, amigo Han. -
- Gracias Bennet, te estoy agradecido en mi nombre y en el de mis soldados. - Respondió Bryan con mucha gratitud.
- ¡Basta de darnos las “gracias” entre nosotros! ¡Vamos a beber cerveza! -
Celebrando con los enanos
De manera que aquel día celebraron una auténtica fiesta y al día siguiente Bryan se marchó para traer el resto de sacos de mineral. Por su parte, Calvin se ofreció a dibujarle un esquema y escribirle instrucciones para que pudiese arreglar el Desgarrador Sombrío, ya que, aunque los enanos conocían de alquimia no eran capaces de ejecutarla ellos mismos. Así que Bryan tendría que hacer el trabajo.
Afortunadamente el Laboratorio de Encantamientos en el Cementerio de la Muerte ya tenía todo el equipamiento que necesitaba.
*****
No era la primera vez que utilizaba la mesa de trabajo para realizar Transmutación Alquímica, pero el bloque rectangular de mármol negro siempre lo hacía sentir un poco intimidado. Pese a todo, Bryan se tragó sus inseguridades y se concentró en el trozo de tela que Calvin le había entregado, donde había dibujado con carbón un esquema muy detallado del nuevo Desgarrador Sombrío.
No sería fácil ejecutar esta reparación.
Primero colocó el trozo de oricalco con mucho cuidado sobre el pedestal de NIGREDO, la descomposición, y comenzó lentamente a trabajar el material. Sin embargo, esta vez no deseaba transformarlo en un nuevo elemento sino únicamente volverlo más maleable, así que, en el instante en que el trozo de oricalco se convirtió en un fino polvillo de color oscuro, Bryan se apresuró a operar la compleja serie de matrices para trasladarlo al pedestal de ALBEDO, la purificación y síntesis. De este modo obtendría un oricalco increíblemente más refinado de lo normal.
“Aunque tengo que llenar las grietas de mi arma con el mismo material, este no puede tener la misma composición que el original, sino que requiere un poco más de flexibilidad para que la estructura no rechace la unión.”
Bryan se quedó un día entero trabajando únicamente en el pedestal de ALBEDO para asegurarse de que la sustancia tuviese exactamente la textura que quería. Finalmente suspiró con alivio y se retiró un momento a descansar, pues refinar oricalco era mucho más difícil que hacerlo con otros materiales y requirió que consumiese gran parte de su Fuerza Mental. Técnicamente aún podía continuar, pero decidió que no valía la pena arriesgarse en un proceso tan delicado, por lo que decidió que continuaría al día siguiente.
Después de un buen desayuno, Bryan se tomó toda la mañana para mover hasta el último saco de Mithril Blanco a donde sus amigos enanos y entonces por la tarde continuó con su trabajo. Esta vez, antes de que el oricalco refinado pasase por el cilindro de CITRINITAS, Bryan colocó al Desgarrador Sombrío en el pedestal de RUBEDO, donde ocurriría la recomposición. Entonces se concentró al máximo para imbuir muy lentamente su arma mágica con el oricalco refinado, llenando cada una de las grietas, mientras que al mismo tiempo transmutaba el objeto en sí. Le tomó varias horas, pero finalmente consiguió tener éxito, aunque el esfuerzo mental fue tan grande que casi se desmayó y todo su cuerpo estaba repleto de sudor.
- Jamás me imaginé que reparar algo podría ser tan complicado en comparación a crearlo desde cero! - Exclamó Bryan dejándose caer al suelo de espaldas por el agotamiento: - El Patriarca Calvin decía la verdad. ¡Nunca lo hubiese logrado si no tuviese la Fuerza Mental equivalente a la de un Gran Mago! -
Se tomó un momento para examinar el arma que flotaba en el pedestal de RUBEDO. Definitivamente su forma ya no correspondía a la de una espada corta, aunque tampoco llegaba a ser una espada larga propiamente dicha. Sería un punto intermedio entre ambas. Una espada de mano y media, con un largo similar a la que utilizaba Trunks, pero de una forma mucho más esbelta, elegante y sobre todo versátil. Bryan sonrió mientras pensaba en cómo los enanos eran capaces de concebir obras tan extraordinarias incluso cuando ellos mismos no eran quienes las fabricaban.
Pese a todo, el Desgarrador Sombrío aún no estaba realmente reparado. Calvin le había dicho que luego de la transmutación inicial, el arma debía seguir siendo refinada constantemente durante al menos dos meses antes de poder estar lista. Afortunadamente este proceso ya no era activo, así que no requería que Bryan estuviese presente para dirigirlo constantemente y podía hacerse de forma automática con el poder almacenado en el propio Laboratorio de Encantamientos.
Solo tenía que dejarlo reposar.
Si el Cementerio de la Muerte estuviese habitado por alguien más, Bryan se quedaría ahí hasta el último segundo, pues cualquier interrupción del proceso de transmutación podría destruir su arma. Pero afortunadamente él era el maestro de esa fortaleza y la única persona que podía entrar o salir. Así que se tomó un tiempo necesario para recuperar sus energías y abandonó el Cementerio de la Muerte, pero esta vez en dirección a la Aldea de los Troll del Bosque para arreglar el asunto de Lawrence.
Trasmutación en progreso
Nota del Traductor
Nota del Traductor
Hola amigos, soy acabcor de Perú. Hoy es miércoles 15 de noviembre del 2023.
Continuando con la nota histórica.
Para entender lo que es el fascismo hay que saber más o menos qué pasaba en el mundo cuando esta doctrina política fue creada. El fascismo apareció justo después de la Primera Guerra Mundial y desapareció (en teoría) después de la Segunda. En aquel entonces había una doctrina/filosofía/pensamiento político muy importante que se llamaba Nacionalismo y tiene mucho que ver con el fascismo.
Ahora bien, algunos pueden pensar que ser nacionalista es lo mismo que ser patriota, pero ese realmente no es el caso. No voy a entrar en detalles para no hacer muy larga esta explicación, pero resumiéndolo en pocas palabras ser PATRIOTA es pensar “Amo mucho a mi país y estoy dispuesto a dar mi vida para defenderlo”. Por el contrario, NACIONALISTA es pensar “Mi país está primero que nada” o, en casos extremos, “¡Mi país es mejor que el tuyo!”.
¿Notan la diferencia? Uno se basa en el amor natural al país, otro es exaltar mucho la devoción al país hasta el punto en que, si uno se excede, puede terminar cayendo en el desprecio a todos los demás países.
Pues bien, cuando apareció el fascismo, toda Europa vivía con mucha fuerza el nacionalismo, hasta el punto en que las naciones se odiaban bastante. Y esta fue una de las principales razones por las que se desató la Primera Guerra Mundial, una guerra tan terrible en la que murió más gente que en todas las guerras de Europa desde el inicio de la historia. Hablo en serio. Hay historiadores que se dieron el trabajo de registrar el número de todos los muertos en batalla que hubo en Europa desde que aparecieron los primeros registros históricos de bajas de guerra. Estoy hablando desde los tiempos de los etruscos, romanos y griegos, la Edad Media, las Cruzadas, la Guerra de los Cien Años, las Guerras Napoleónicas, etc. Si uno suma todos esos muertos que hubo durante casi 4,000 años de historia bélica, no suman tantos como los que murieron en la Primera Guerra Mundial. Y por eso al principio la llamaron La Gran Guerra e incluso muchos hablaban de ella como “La guerra que acabaría con todas las guerras”.
Ahora bien ¿qué tan locos tenían que estar los europeos para, después de vivir ese infierno, meterse en la Segunda Guerra Mundial solo 20 años después? Y todos saben que en la Segunda murió más gente que en la Primera.
Pues, aunque no lo crean, el Socialismo fue uno de los principales responsables de la Segunda Guerra Mundial. Y es que deben entender que, aunque tengan nombres diferentes y algunos detalles cambien en el exterior, finalmente el Socialismo, el Comunismo y el Fascismo son esencialmente lo mismo.
El fundador del Fascismo era un hombre llamado Benito Mussolini, que había luchado por Italia durante la Primera Guerra Mundial. Pero incluso antes, en 1900 el… era un miembro del Partido Comunista Italiano y llegó a ser secretario del sindicato de albañiles y obreros, así como editor del semanario comunista La Lotta di Classe (La lucha de clases). Luego siguió escalando hasta ser editor del periódico oficial del partido comunista llamado Avanti en 1912.
Así es, el fundador del fascismo, era un comunista de izquierda. Y encima un académico de izquierda. Igual que todos esos miembros que hoy pululan en las ONG. ¿Realmente es necesario decir más para probar mi punto de que al final Fascismo y Socialismo son fundamentalmente lo mismo? ¡Lenin, el autor de la Revolución Rusa, era su amigo! De hecho, cuando Mussolini funda por primera vez su partido Fascista, Lenin le envió un telegrama de felicitación. ¿Y por qué? Porque era un camarada socialista revolucionario.
Pero la historia no acaba ahí.
En aquellos tiempos ocurría un fenómeno que los historiadores del comunismo llamaban “La Gran Crisis del Marxismo”. Básicamente la Revolución Rusa ocurrió, mataron al Zar, luego mataron a todos los demócratas y se instaló una dictadura en la que “el Pueblo” (LOL), representado por el Estado (Stalin), era dueño de todo y no existía la propiedad privada. O sea, el sueño ese que le vendieron al hipotético joven que estaciona carros en el hotel Hilton. Y todos los comunistas estaban seguros de que estallarían revoluciones similares en todos los países industrializados del mundo. ¡Todos los trabajadores y obreros se levantarían, matarían a sus gobernantes y tomarían los países para formar una gran Comunidad Socialista Internacional o Internacional Socialista! Así lo había profetizado Carl Marx: “Cuando la primera Revolución ocurra, también ocurrirá la caída del Capitalismo y todos viviremos en una utopía revolucionaria en donde los obreros serán los que gobiernen, no habrá ricos ni pobres, el Estado será el único dueño de todas las empresas. ¡Una dictadura de los Obreros!”
Pero, oh sorpresa, esa supuesta oleada de revoluciones no ocurrió. Peor aún, la Revolución de momento se estancó en Rusia. Así que los ideólogos comunistas estaban muy preocupados y tratando de descubrir en qué se había equivocado Marx. ¿Por qué no habían ocurrido las revoluciones? ¿Por qué no se levantaron en armas los obreros del mundo? ¿Qué cosa era lo que faltaba? Y como miembro del Partido Comunista Italiano, Benito Mussolini también estaba muy preocupado por resolver esto.
Entonces Mussolini, que acababa de regresar de la guerra se dijo algo como: “¡Esperen! ¡Durante la Primera Guerra Mundial, los socialistas franceses pelearon por Francia! ¡Y los obreros ingleses lucharon por Inglaterra! ¡Y los alemanes también lo hicieron!
POR LO TANTO: ¡La “Clase Social” no es lo Único que genera solidaridad entre los obreros! Hay otro factor que los socialistas pasamos por alto. ¡El nacionalismo es una fuerza que puede hacer que los obreros se levanten en armas! Lo que tenemos que hacer es fusionar el Nacionalismo con el Socialismo”
Y es entonces que Benito Mussolini decide hacer una fusión: Socialismo + Nacionalismo. En lugar de una visión “internacional” él piensa que el socialismo debe ser “Nacional”. Eso es Fascismo: Socialismo Nacionalista. Nada más. En cambio, Comunismo también es Socialismo, pero desde un punto de visa Internacional. Por lo demás… SON ESENCIALMENTE IGUALES. Son la misma locura.
Es por eso que poco después, Adolfo Hitler, inspirado por Mussolini, decidió hacer lo mismo en Alemania y funda el Partido Nacional SOCIALISTA Obrero Alemán (Nationalsozialistische Deutsche Arbeiterpartei) coloquialmente conocido como el Partido Nazi.
¿Ahora entienden por qué es ridículo cuando un político de izquierda, que siempre son socialistas, le grita “¡facho!” o “¡Fascista!” a alguien? Son básicamente lo mismo. Ambos son izquierdistas. Y, de hecho, recurren a los mismos métodos que los Nazis: Te insultan cuando te muestras en desacuerdo, usan la violencia, tratan de crear leyes para que el Estado te censure, acose sistemáticamente y se te castigue si dices o piensas algo que no vaya de acuerdo con su ideología. La forma en que proceden los “progresistas” es la misma que Hitler, Mussolini, Lenin y Fidel Castro aprobaban. Todavía no han llegado al punto de cometer genocidios abiertamente, pero le entran al aborto y la eutanasia con mucho entusiasmo.
Pero, después de la Segunda Guerra Mundial, cuando se hace público el Holocausto y los campos de concentración, los nazis tienen mala publicidad. Para solucionar ese problema los izquierdistas de la postguerra deciden hacer una campaña mediática internacional para que la gente creyese que los Nazis son “la Extrema Derecha”. Y lo hicieron aplicando un lema que repetía el Ministro de Propaganda Nazi Joseph Goebbels, quien decía: “Miente, miente que al final algo quedará. Una mentira, repetida mil veces, al final termina siendo una verdad.” A base de repetir que “los Nazis son la extrema derecha”, la gente terminó creyéndoselo y esta mentira terminó dando origen a otras mentiras.
Pero basta con investigar un poco, para descubrir los hechos aplastantes que destruyen esa narrativa. A veces incluso ni siquiera es necesario estudiar. Basta con usar el sentido común.
La Extrema Derecha se caracteriza por ser ultraconservadora y muy celosa de las tradiciones nacionales. Pero si Hitler hubiese sido de extrema derecha, se habría hecho llamar Kaiser, habría abrazado la religión luterana y recreado la sociedad del Sacro Imperio Romano Germánico, que es la tradición del pueblo alemán. En cambio, Hitler trató de crear una Nueva Alemania, donde él era la figura central y hasta desarrolló un culto propio, basado en mitología escandinava y mucha fantasía. Nada que ver con ser conservador. De hecho, Hitler era un revolucionario que, al igual que Marx, creía que el Estado debía controlarlo todo y decirle a cada uno de los alemanes cómo comportarse y cómo pensar, tanto en público como en privado.
Exactamente igual que los Comunistas. Exactamente igual que los Socialistas. Exactamente igual que los “Progresistas”. Son la misma especie, solo que con diferente piel.
Sin embargo, faltaría tratar algunos temas. Sobre todo, aquella pregunta que uno naturalmente hace cuando escucha que los Nazis y los Comunistas son iguales: Si eran tan parecidos y creían lo mismo… ¿Por qué fueron enemigos durante la Segunda Guerra Mundial?
Bueno, eso lo responderé en el siguiente comentario.
Ahora, sobre el capítulo. Es bastante corto, lo sé, pero no todos pueden ser capítulos largos y creo que este está bastante bien. En el original Bryan simplemente se va al Bosque Oscuro porque sí. Siente ganas de ir y nadie lo detiene ni le pide explicaciones. Era francamente ridículo.
Fue idea mía que el Desgarrador Sombrío se rompiese por haber golpeado el artefacto divino para darle a Bryan una razón de peso para retirarse, más allá de su amistad con Lawrence. Y es que, si lo piensan bien, irse de ese modo es un riesgo terrible.
También vemos que Bryan, aunque satisfecho con Marcio, todavía es prudente con respecto al Tribuno que durante años sirvió bajo las órdenes de Tiberio Claudio. Pero además había un asunto interesante que quizá no han considerado del todo: Gloria no puede estar en el campamento de esos legionarios indisciplinados, pero eso significa que estará mucho tiempo lejos de Marcio y sola… durante meses.
¿Y si Tiberio Claudio envía a alguien por ella? ¿Si es atacada por alguien? ¿Si es violada por alguien? Etc. El mundo antiguo no era nada seguro para las mujeres y por eso Bryan estaría siendo muy irresponsable si solamente la “dejase” por ahí. Sobre todo, porque la joven no tiene poderes. Precisamente por eso hice que la dejase en una Base del Manto Oscuro en Odisea.
La parte de cómica de Druso gustándole las mujeres maduras está inspirado en muchos animes, pero principalmente en el razonamiento del protagonista del anime Trapped in a Daiting Sim, que se enamora de la Reina de su país pese a estar casada y tener un hijo. Naturalmente hay buenas razones para ello, principalmente que la mayoría de las chicas de ese mundo son una porquería.
Definitivamente lo más difícil del capítulo fue en sí la reparación de la espada. La verdad es que hace tanto que escribí la sección de Alquimia que me había olvidado un poco de cómo configuré esa magia y tuve que recordarla. Originalmente pensaba hacer que Bryan hiciese todo el proceso solo, pero después pensé que eso sería demasiado fácil para el protagonista y se me ocurrió hacer que visite la Aldea de los Enanos para pedir consejo, dejar el Mithril Blanco y solicitar puertas nuevas. Eso también añadía más justificación para el viaje de Bryan al Bosque Oscuro en un momento tan delicado.
El resto fue cuestión de dramatizar bien el procesamiento alquímico. Espero que se haya entendido todo. Además, me dio una buena excusa para modificar el tamaño del arma de Bryan. En el original el Desgarrador Sombrío es apenas más grande que un cuchillo, la típica daga voladora china, yo lo modifiqué a una espada corta para que por lo menos se sintiese como un gladio romano, pero tenía la intención de hacer que en el futuro el arma sufriese algunas transformaciones como si siguiese un proceso de evolución. Sin embargo, la idea de tener que agregar oricalco me permitió adelantar mucho este paso. Así que ahora Bryan peleará con una espada de Mano y Media, llamada así porque se puede usar con una o dos manos, dependiendo del gusto de la persona.
¡Y con esto también doy inicio a la emocionante búsqueda de una imagen que represente al nuevo Desgarrador Sombrío! Por favor, si encuentran alguna imagen genial, compártanla en el grupo de Facebook. Los requisitos son los siguientes: Buena resolución, claramente un arma oscura (nada que parezca una espada de la luz) y naturalmente NO KATANAS.
Aprovecho para recomendar un Anime que me pareció bueno. Quiero decir, con Eminence in Shadow season 2, Dead amount dead Game season 2, Ragna Crimson y Goblin Slayer Season 2, entre otros, creo que hay buenos animes de sobra esta temporada. Pero hay uno que vi por accidente y resultó ser muy bueno en cuanto a trama. Tampoco es que sea una obra maestra, pero me gustaría recomendarlo: Tearmoon Empire Story.
Está inspirado en la historia de María Antonieta, la reina de Francia que fue decapitada. Naturalmente es una anime de fantasía y quizá por eso podría pasar desapercibido, pero la premisa es qué hubiese pasado si una princesa decapitada durante una revolución regresase en el tiempo antes de que comenzasen los eventos que la llevaron a la guillotina. Es una tragicomedia bastante buena y amena, esos tesoros escondidos que solamente los japoneses saben hacer tan bien.
Pero en lo personal me gusta mucho porque, cuando estudié la Revolución Francesa a profundidad, descubrí que era básicamente una gran estafa y realmente no pude evitar indignarme de lo que los franceses les hicieron a sus reyes y luego a su propio pueblo, instigados por unos supuestos “luchadores por la libertad” que francamente eran unos miserables. “Libertad, igualdad y fraternidad” mi culo. Básicamente mataron a todo aquel que se atreviese a expresar una opinión diferente y literalmente provocaron que corrieran ríos de sangre inocente en las calles de todo París. Realmente me dio gusto que Napoleón los matase a todos al final. Se lo merecían.
Creo que el escritor de la novela en la que se basa el anime también sintió lo mismo que yo al estudiar la Revolución Francesa y por eso escribió esta divertida comedia. En fin, si quieren, pueden darle una oportunidad.
Eso sería todo por el momento.
Pero déjame saber tu opinión en los comentarios: ¿Qué te pareció la conversación de Druso y Bryan? ¿Te gustó todo el proceso de restauración para el Desgarrador Sombrío? ¿Extrañabas a los buenos amigos enanos del protagonista? ¿Te pareció que los eventos tenían sentido?
Si te gusta esta historia por favor ayúdame con donaciones a mi cuenta Patreon y compartiendo esta página en redes sociales. También puedes señalar cualquier error ortográfico o de concepto que se me haya podido escapar.
¡Nos vemos en el siguiente capítulo!
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