16 ¡Mucha gente me está golpeando!

Dos días después, en los campos de entrenamiento de la Escuela Necromántica.

Bryan estaba haciendo limpieza distraídamente mientras recordaba la última clase del Maestro Gene que había conseguido escuchar esa mañana y sus cejas estaban ligeramente fruncidas mientras meditaba en la teoría mágica… ¡Cuando de repente escuchó el sonido de una puerta abriéndose a toda prisa y alguien entró corriendo!

Era el gordito Jack que estaba jadeando con mucha fuerza mientras se apresuraba a decirle: - ¡Malas noticias, Bryan! ¡Carey y Borg vienen a vengarse de ti! -

A Bryan siempre le había irritado cuando lo interrumpían en medio de sus reflexiones, pero consiguió reprimir sus quejas en consideración a su amigo, que parecía bastante asustado por su seguridad y le preguntó amablemente: - ¿Y? ¿cuál es el problema? ¿La última vez no les di una buena paliza a esos dos idiotas? ¿Qué esperan lograr esta vez? -

- No lo sé, tampoco estoy seguro. Sólo oí que se sentían enfermos porque comieron algo esta mañana. ¡Sus rostros estaban verdes! ¡No dejaban de gritar que querían vengarse de ti por algo que les hizo Lisa! -

Desde su último accidente Bryan se había recuperado casi por completo gracias a la ayuda de la Esencia Mágica en su interior, aunque todavía sentía un poco de dolor cuando movía la espalda. Además, el Aura de Batalla del espadachín Erick estaba bien aprisionada dentro de su espina dorsal y parecía estar siendo digerida lentamente. Esto le daba un poco de seguridad, así que apretó la escoba en su mano con firmeza.

- ¡Bueno pues! ¡No es mi culpa si no valoran su integridad física! - Dijo con frialdad mientras se volvía hacia la puerta.

Pero la expresión de ansiedad en el rostro de Jack solamente se hizo más fuerte e inmediatamente le advirtió: - Bryan, esta vez es diferente. Carey y Borg consiguieron que unos tipos los ayuden y no parecen ser sirvientes de la escuela necromántica. ¡Todos son muy altos y fuertes! ¡Date prisa y corre! -

- ¡Maldito seas Bryan! ¡Te crees muy listo, ¿verdad, desgraciado?! ¡Te haremos pagar por esto! - La voz de Carey ya podía escucharse desde afuera de la estancia y acto seguido una multitud de personas entraron en la sala de entrenamiento y bloquearon todas las salidas.

Bryan estaba a punto de responder con un insulto, pero entonces reparó en que los rostros de Carey y Borg tenían una tonalidad verdosa, como si estuvieran sufriendo una fuerte infección estomacal. Borg incluso sufrió un ataque de arcadas apenas hubo atravesado el umbral y se llevó la mano al estómago mientras luchaba por contenerse… pero al final terminó vomitando un líquido negro, pegajoso y bastante apestoso.

Al ver esto, Carey también se llevó una mano a la boca y comenzó a temblar, pero no vomitó nada a pesar de intentarlo. Era evidente que ya había vaciado todo lo que tenía en el estómago.

- ¡Bryan!... ¡¿Qué mierda de brebaje le dijiste a Lisa que preparara?! ¡Nos obligó a bebérnoslo y ahora estamos así! ¡Hoy será mi muerte o la tuya! - El pobre hablaba con amargura mientras sujetaba su estómago con una mano y usaba la otra para apuntarle con un dedo acusador. Por su parte Borg parecía mucho más débil después de vomitar, así que tuvo que apoyarse en el marco la puerta para mantenerse de pie y ni siquiera tuvo ánimos para insultarlo.

Finalmente, Bryan entendió lo que estaba pasando y necesitó todas sus fuerzas para contener la risa. La última vez había engañado a Lisa diciéndole que consumió unos ingredientes repugnantes para hacerse más fuerte… ¡pero realmente no creyó que la chica se lo tomaría en serio o que intentaría replicar la repugnante mezcla! Era evidente que no solo lo había hecho, sino que encima experimentó con Carey y Borg, obligando a estos desafortunados abusivos a beberse esa asquerosa posición. No era extraño que los dos parecieran estar peor que muertos.

- ¡No, no, no! ¡Les juro que yo no tuve nada que ver con esto!... Al menos no directamente…. ¡Setenta a cuarenta máximo!... aunque tal vez… - Bryan sacudió la cabeza e intentó explicar mientras fingía una expresión de desconocimiento total. Se veía tonto e inocente.

- ¡Lisa ya nos contó todo, maldito mentiroso! ¡Cómo te atreves a decir que no lo hiciste! ¡Esta vez no voy a parar hasta haberte dado tu merecido! - Carey gritó airadamente e hizo un gesto a los chicos que había traído con él. 

Había seis muchachos, incluyendo a Borg. Todos se arremangaron las mangas y avanzaron amenazadoramente.

Esos otros chicos debían ser recaderos pertenecientes a otras escuelas de la Facultad de Magia Oscura, pero no se trataba de jóvenes altos y fuertes como los había descrito Jack, de hecho, estaban lejos de esa descripción. Sí, tenían un cierto tamaño, pero más bien eran larguiruchos. Algunos parecían más gruesos, pero no eran tan altos como Bryan. En general, los altos no eran fuertes y los fuertes no eran altos. Lo más seguro era que su capacidad de combate no superase la media.

Bryan flexionó sus manos, pero todavía mantuvo la expresión estúpida que siempre usaba como fachada. Pero en su interior despertaron otras emociones. Aunque ya habían pasado unos cuantos días, todavía tenía mucha cólera reprimida contra ese mago llamado Duke y su compañero espadachín por las terribles heridas que le habían provocado, pero hasta el momento no había podido hacer nada para desahogarse. Ahora, como caídos del cielo, llegaban un montón de estúpidos dispuestos a servirle como sacos de boxeo para liberar toda esa frustración.

“Hazlos sufrir.”

Este impulso violento le llegó de forma rápida e inesperada, pero inundó la mente de Bryan como un hechizo que lo estimulaba a actuar. Claro que esto contrataba bastante con su personalidad original, que era más bien pasiva y timorata. Antes de llegar a este mundo Bryan no podía recordar la última vez que tomo la iniciativa de ofender a alguien. De hecho, casi nunca actuaba de un modo arrogante, aunque no porque tuviese la virtud de la humildad, sino por miedo a meterse en problemas.

Lo más extraño era que su mente racional comprendía claramente que aún no se había recuperado lo suficiente como para derrotar a tantos oponentes al mismo tiempo. Aunque pudiera ganar peleando de forma tramposa, había un gran riesgo de que sus heridas volvieran a abrirse y también podría terminar llamando la atención de algún profesor, exponiéndose a un severo castigo.

Pero a pesar de saber todo esto, sus emociones continuaban descontroladas al igual que la última vez cuando se enfrentó con Lisa y su Guerrero Zombi. Era como si su raciocinio estuviese completamente disociado de su pasión. Bryan estaba muy asustado por esto, pero también se sentía tentado, porque la última vez que entró esta especie de frenesí violento su Esencia Mágica se había fortalecido hasta el punto de devorar por completo el Aura de Batalla de Claude.

¿Y si eso vuelve a suceder?” Pensó Han Shuo emocionado: “Al fin y al cabo la situación de hoy es esencialmente la misma: Tengo una enorme cantidad de Aura de Batalla atrapada dentro del cuerpo… ¡y unas ganas tremendas de desquitarme! Si consigo absorber esa molesta energía y fortalecerme ¿no vale la pena el riesgo?

Bryan se volvió un instante para mirar a Jack y el gordito se encogió atemorizado, pues no vio el menor rastro de la expresión tonta e inocente que usualmente llevaba su amigo como una máscara. En cambio, la mirada en sus ojos era tan aguda como un par de cuchillos, pero también contenían el brillo emocionado de un apostador que se sabe afortunado. 

Lentamente Bryan fue desenroscando el palo de la escoba para separarlo de la escobilla y luego se lo alcanzó a Jack mientras le susurraba con mucha frialdad: - ¡Pégale a cualquiera que intente golpearte! - Entonces hizo una pausa para señalarle la rosca de metal en uno de los extremos y le dijo sin ningún escrúpulo: - ¡Y utiliza el borde con fierro! -

El gordito Jack estaba ahora más asustado por el comportamiento de su amigo que por los abusivos. La fría voz con que lo escuchó hablar le provocó un calambre en las dos piernas. De pronto Bryan parecía haberse trasformado en alguien frío, tranquilo y sobrecogedor. ¡No había ni rastro de la timidez o la cobardía que siempre había tenido!

Bryan se alejó de su amigo tras dejarle la escoba para defenderse y entonces caminó hacia los abusivos mientras levantaba de nuevo esa falsa expresión de estúpido que ya había estado fingiendo durante tanto tiempo para que los tontos bajasen su guardia. Finalmente, se encogió como si estuviese muy asustado y comenzó a chillar de un modo patético: - ¡No, no me golpeen! -

- ¡Sáquenle su mierda! -

Las seis personas se precipitaron juntas, golpeando y pateando con fuerza, buscando lastimar todo cuerpo de Bryan, quien simplemente se agarró la cabeza con ambas manos y al principio retrocedió temeroso. Pero después de retroceder unos tres pasos se trasformó de repente en un demente y comenzó soltar alaridos enloquecidos. Luego corrió directo hacia sus atacantes como un toro salvaje.

Carey iba un poco adelantado al resto, pero se detuvo con el pie derecho aún en el aire, sin atreverse a terminar de dar el paso. De pronto su corazón empezó a latir con pánico al recordar lo que había sucedido la última vez que Bryan había “perdido la cabeza”.

Por supuesto que este arrepentimiento de último segundo no iba a evitar que Bryan le diese una soberana paliza. Sobre todo, porque sintió cómo la Esencia Mágica vibraba en su interior y comenzaba a digerir el poder Erick. Un instante después su mente se llenó totalmente de un único pensamiento: “Voy a golpear a todos estos idiotas hasta que se queden en el piso… ¡da igual si continúan respirando o no!

De modo que dio un rápido salto hacia adelante y sujetó con mucha habilidad la pierna de Carey que todavía estaba en el aire. Y antes de que el confundido abusivo pudiese entender lo que ocurría, Bryan la levantó violentamente haciendo que perdiese el equilibrio, provocando que cayese de espaldas violentamente en el suelo.

El movimiento fue tan repentino, violento y directo que sorprendió a la multitud que los abusivos habían reclutados para ayudarlos. La duda hizo que se detuvieran. Sus expresiones inicialmente desdeñosas se congelaron un instante, pero después se volvieron temerosas.

Pero Borg dio un paso adelante. Finalmente se había recuperado lo bastante como para recoger un banco de madera y se puso a blandirlo como arma, mientras exhortaba a sus compañeros: - ¡No se asusten, él está solo ¡y nosotros somos seis! ¡Podemos vencerlo fácilmente con solo golpearlo una vez! -

El gesto del abusivo fue suficiente para que la multitud recuperase la confianza perdida. De inmediato sacaron palos y piedras que llevaban escondidos entre sus ropas y cargaron junto con Borg, dispuesto a darle a Bryan la paliza de su vida.

 “¡Incluso habían preparado armas! No deja de tener cierto mérito.” Bryan entrecerró los ojos y usó ambas piernas para saltar a un constado y esquivar el taburete de Borg cuando estaba a punto de golpearlo.

“¡CRASH!”

El taburete golpeó el suelo de piedra y debía ser mucho menos robusto de lo que parecía porque sus patas vacilaron por impacto. Borg soltó un ligero - ¿eh? - y una expresión de incredulidad se formó en su rostro. No había imaginado que Bryan fuese capaz de esquivar el golpe ni que terminaría golpeando el suelo en su lugar. Pero un tuvo tiempo para asimilar lo ocurrido.

¡POW! Un puñetazo rápido y certero impactó contra la nariz de Borg y la sangre empezó a manar de su rostro. El golpe le volteó la cabeza hacia atrás, provocando que se tambaleara y sus manos temblorosas por el dolor soltaron su arma involuntariamente.

Con la cabeza baja, Bryan agarró el taburete que Borg había dejado caer y se volvió para atajar el golpe de un muchacho pelirrojo, bajo y algo fornido, que intentaba atacarlo por la espalda. El palo de madera silbó al cortar el aire, pero fue interceptado de forma repentina por el taburete, justo cuando estaba a punto de atinarle en la cabeza.

Mientras aferraba las patas del taburete con ambas manos, Bryan sintió que la Esencia Mágica concentrada en su espina dorsal se movía cada vez más rápido. Podía sentir claramente que el Aura de Batalla atrapada en su interior estaba desapareciendo y al mismo tiempo sus brazos se llenaron de una fuerza que parecía ilimitada. Así que ahí mismo agarró con fuerza las patas del taburete y las rompió de un tirón.

El taburete entero se partió a la mita. Bryan lanzó una viciosa patada con el pie derecho mientras sostenía las dos mitades en sus manos. El golpe conectó directamente con la parte baja del abdomen del chico del palo, cuyo rostro se volvió blanco de inmediato y se arrodilló en el suelo por el dolor.

Bryan no tenía intención de dejarlo escapar tan fácilmente. Ahora estaba disfrutando al ejercer la violencia y sólo pensaba en desahogarse por completo. Así que alzó sus manos y estrelló brutalmente ambas mitades del taburete sobre la cabeza del pelirrojo arrodillado. La sangre salió de su frente del pobre miserable a la vez que teñía de rojo las armas de Bryan.

- ¡Apúrense y deténganlo! ¡Ese maldito loco matará a Alva! - Borg gritó aterrorizado mientras se cubría la nariz con una mano para detener el sangrado de su nariz rota sin mucho éxito, porque toda su camisa ya estaba manchada.

Carey por su parte tenía problemas para volver levantarse porque al caer terminó perdiendo mucho aire. Pero consiguió ponerse de pie tembloroso a pesar de sentirse aterrado. Luego sacó un palo de madera que había escondido previamente y corrió hacia Bryan junto con el resto de abusivos… pero todo lo que consiguieron fue una violenta serie de golpes que resonaron en la habitación cunado Bryan comenzó a usar las dos maderas en sus manos para cubrirlos de moretones.

Esperando a un lado y con las piernas temblándole por el miedo, Jack observaba la escena sin creer lo que veía. Bryan alzaba una y otra vez las mitades del taburete y las blandía repetidamente contra los chicos, siempre tratando de golpear los lugares más dolorosos como las narices, los ojos o incluso los testículos. Muy pronto había sangre deslizándose sobre todos los rostros de la turba o la parte superior de sus cabezas.

Lo cierto es que el gordito estaba pasmado y no sabía qué hacer. Ya era inconcebible que Bryan pelease tan bien contra tantos adversarios, pero su amigo estaba empleando los métodos despiadados. Jamás habría pensado que su amigo, siempre tan tímido e inocente, pudiese siquiera concebir la idea de actuar de un modo tan violento y salvaje… ¡Mucho menos llevarlo a cabo!

Mientras su amigo gordo temblaba en una esquina, el aura de Erick finalmente terminó siendo completamente ser digerida por la Esencia Mágica durante el trascurso de la pelea. Además, Bryan se había explayado hasta la saciedad. Fue entonces cuando recuperó la conciencia y cayó en cuenta de lo que estaba haciendo. No pudo evitar sentirse un poco asustado por lo que acababa de hacer.

Mierda. Si alguien se entera de esto no solamente me castigarán… ¡Es posible que termine en un calabozo!

- ¡Qué es ese ruido! ¿Qué está pasando? ¡Voy a echar un vistazo a los campos de entrenamiento! -

Justo en ese momento Bryan escuchó la voz de Fanny hablando a lo lejos. Luego el sonido de pasos que se acercaban rápidamente.

¡Piensa! ¡¿Qué hago?! ¡¿Qué hago?! ¡¿Qué hago?!¡Vamos cerebro! ¡¿Qué hago?!” Pensaba Bryan desesperadamente mientras se volvía para mirar a Carey, Borg y compañía, que le devolvieron la mirada con expresiones aterrorizadas, llenas de consternación. Cada uno de esos pobres desgraciados estaba asustado hasta lo más profundo de su ser. Y si bien todavía sostenían firmemente sus armas de madera, ninguno se atrevía a dar un paso más para avanzar o retroceder.

Bryan sabía que se le avecinaba un problema bastante grave y empezó evaluar como un loco los distintos escenarios en su mente. Entonces se le ocurrió una idea.

Rápidamente corrió hacia las puertas del campo de entrenamiento, al mismo tiempo que tomaba parte de la sangre que aún quedaba en los trozos del taburete para frotársela en la cara o la cabeza. Después arrojó sus armas a un lado lo más lejos que pudo y se agarró el hombre, lo más cerca de donde la espada de Erick le había herido. Entonces respiró con fuerza y se dio un poderoso tirón junto con un aullido de dolor. La lesión, que todavía no había sanado completamente, se abrió de inmediato y su sangre fresca le manchó toda la espalda de rojo.

Ya en la puerta, Bryan cambió abruptamente de una carrera a toda velocidad a una inmovilidad completa y se tiró al suelo, mientras se arrastraba “dolorosamente” hacia la salida. Levantó sus dos manos manchadas de sangre con actitud suplicante, justo cuando Fanny y otros dos profesores abrían la puerta.

Luego gimió con una voz llena de terror:

- ¡Mu… mucha gente me está golpeando! -

Doble realidad, doble personalidad, la maldad en el interior

Nota del Traductor

Hola a todos, soy acabcor de Perú donde nació el gran Caitro Soto, el mejor cajonero del mundo y maestro compositor. Esta es una versión reeditada el 10/03/2021.

En mi país hay un terrible problema. El Presidente ha secuestrado el Jurado Nacional de Elecciones para darle tachas ridículas a casi todos los candidatos que no le gustan. No sé si iré a votar en estas elecciones porque es evidente que van a ser arregladas. Lo más triste es que es de un modo demasiado flagrante, porque número uno está un ex arquero de fútbol cuyo nombre nunca había escuchado antes. ¡Es imposible que esté primero!

Este capítulo originalmente se entendía con un poco de dificultad. Mis cambios fueron principalmente para aclarar lo eventos y darle más impacto a la pelea. La narración fue modificada un poco para que el lector sienta más el punto de vista de los abusivos porque así uno puede entender mejor el miedo que ellos sienten.

También cambié los diálogos, porque eran muy poco claros en nuestro idioma por otros más apropiados.

Bueno, espero que les hay gustado, por favor deje su opinión en los comentarios y nos vemos en el siguiente capítulo.