La organización del culto

Éxodo 25-31

La legislación contenida en los capítulos siguientes codifica la vida litúrgica de Israel, el Pueblo sacerdotal, consagrado al culto del verdadero Dios. Estas prescripciones rituales son presentadas como provenientes directamente del Señor. Pero ese modo de hablar no se debe tomar al pie de la letra. Se trata, más bien, de un procedimiento literario para indicar que dichas normas expresan la voluntad de Dios y llevan el sello de la autoridad divina.

Estas leyes presuponen la tradición cultual del Templo de Jerusalén, gestada a lo largo de siglos, y fijada definitivamente por escrito después del exilio babilónico. Si su promulgación se pone en boca de Moisés, es porque las instituciones cultuales, lo mismo que el resto de la legislación, derivan del impulso dado por él a Israel en los albores de su historia.

La solemne majestad del culto israelita contrasta con las formas simples y espontáneas que parecerían caracterizar a un culto "en espíritu y en verdad" (Jn. 4. 23). Pero sería falso pensar que detrás de esta minuciosa codificación –semejante en muchos puntos a la de Ez. 40-48- no hay nada más que un formalismo ritualista. Una lectura que tenga en cuenta no sólo la "letra", sino el "espíritu" de estos viejos textos, podrá auscultar en ellos el latido de una auténtica religiosidad, dominada por el sentimiento de la infinita santidad de Dios.

Capítulo 25

Las contribuciones para la construcción del santuario

1 El Señor dijo a Moisés:

2 Ordena a los israelitas que me preparen una ofrenda. Después ustedes la recibirán de todos aquellos que vengan a traerla voluntariamente.

3 Las ofrendas que recogerán son estas: oro, plata y bronce;

4 púrpura violeta, púrpura escarlata y carmesí; lino fino y pelo de cabra;

5 cueros de carnero teñidos de rojo, pieles finas y madera de acacia;

6 aceite para las lámparas, perfumes para el óleo de la unción y para el incienso aromático;

7 piedras de ónix y piedras de engaste para el efod y el pectoral.

8 Con todo esto me harán un Santuario y yo habitaré en medio de ellos.

9 En la construcción de la Morada y de todo su mobiliario te ajustarás exactamente a los modelos que yo te mostraré.

El Arca

10 Tú harás un arca de madera de acacia, que deberá tener ciento veinticinco centímetros de largo por setenta y cinco de ancho y setenta y cinco de alto.

11 La recubrirás de oro puro por dentro y por fuera, y pondrás alrededor de ella, en la parte de arriba, una moldura de oro.

12 También le harás cuatro argollas de oro fundido y se las colocarás en los cuatro extremos inferiores, dos de un lado y dos del otro.

13 Asimismo, harás unas andas de madera de acacia, las revestirás de oro,

14 y las harás pasar por las argollas que están a los costados del arca, para poder transportarla.

15 Las andas estarán fijas en las argollas y no serán quitadas.

16 En el arca pondrás las tablas del Testimonio que yo te daré.

La Tapa del Arca y los Querubines

17 También harás una tapa de oro puro, de ciento veinticinco centímetros de largo por setenta y cinco de ancho,

18 y en sus dos extremos forjarás a martillo dos querubines de oro macizo.

19 El primer querubín estará en un extremo y el segundo en el otro, y los harás de tal manera que formen una sola pieza con la tapa.

20 Ellos tendrán las alas extendidas hacia arriba, cubriendo con ellas la tapa; y estarán uno frente a otro, con sus rostros vueltos hacia ella.

21 Después colocarás la tapa sobre la parte superior del arca, y en ella pondrás las tablas del Testimonio que yo te daré.

22 Allí me encontraré contigo, y desde allí desde el espacio que está en medio de los dos querubines, yo te comunicaré mis órdenes para que se las transmitas a los israelitas.

La mesa de los panes de la ofrenda

23 Tú harás, además, una mesa de madera de acacia, de un metro de largo por medio metro de ancho y setenta y cinco centímetros de alto.

24 La recubrirás de oro fino y le colocarás alrededor una moldura de oro.

25 Luego le pondrás un borde de un palmo de ancho, y adornarás todo el borde con una guirnalda de oro.

26 Después harás cuatro argollas de oro, y las ajustarás a los cuatro ángulos que forman las cuatro patas de la mesa.

27 Las argollas estarán bien cerca del borde, a fin de que sirvan de sostén a las andas que se usarán para transportar la mesa.

28 Harás las andas de madera de acacia y las recubrirás de oro; ellas servirán para transportar la mesa.

29 También harás fuentes, vasos, jarras y tazas de oro puro para las libaciones.

30 Y sobre la mesa pondrás los panes de la ofrenda, que estarán siempre ante mí.

El candelabro

31 Harás, asimismo, un candelabro de oro puro. Tanto la base y el tronco del candelabro como los cálices, los botones y las flores que le servirán de adorno, serán forjados a martillo y formarán una sola pieza.

32 De sus lados saldrán seis brazos: tres de un lado y tres del otro.

33 Cada uno de estos brazos tendrán tres adornos en forma de flor de almendro, los tres con un cáliz, un botón y una flor.

34 El tranco del candelabro, en cambio, tendrá cuatro adornos de esa misma forma, distribuidos de esta manera:

35 un botón irá debajo de los dos primeros brazos que salen de él, el otro estará debajo de los dos siguientes, y un tercero, debajo de los dos últimos.

36 Los botones y las flores formarán una sola pieza con el candelabro, y todo estará hecho con un solo bloque de oro puro, forjado a martillo.

37 Después harás siete lámparas y las dispondrás de manera que envíen la luz hacia adelante.

38 Las tenazas para arreglar los pabilos y sus platillos serán de oro puro.

39 Para hacer el candelabro y todos estos utensilios se empleará un talento de oro puro.

40 Y ten cuidado de hacerlo conforme al modelo que te fue mostrado en la Montaña.

Capítulo 26

La Morada

1 Para la construcción de la Morada emplearás diez cortinados de lino fino reforzado, de púrpura violeta, púrpura roja y carmesí, con figuras de querubines diseñadas artísticamente.

2 Cada cortinado tendrá catorce metros de largo por dos de ancho. Todos serán de las mismas dimensiones,

3 y estarán unidos entre sí en dos grupos de cinco cortinados cada uno.

4 Además, en el borde del último cortinado de la primera serie, pondrás unas presillas de púrpura violeta, y lo mismo harás en el borde del que está en el extremo de la segunda serie.

5 Pondrás cincuenta presillas en uno y cincuenta en otro, de tal manera que las presillas se correspondan unas con otras.

6 Después harás cincuenta ganchos de oro, y con ellos unirás los cortinados entre sí, a fin de que la Morada forme un todo.

7 También harás once toldos de pelo de cabra, para cubrir la Morada, a manera de carpa.

8 Cada uno de estos toldos medirá quince metros de largo por dos de ancho: todos tendrán las mismas dimensiones.

9 Luego unirás separadamente cinco de estos toldos en una parte y seis en la otra, y doblarás el sexto toldo sobre el frente de la carpa.

10 Después pondrás cincuenta presillas en el borde del toldo que cierra el primer conjunto, y otras cincuenta en el borde del que cierra el segundo conjunto.

11 Además, harás cincuenta ganchos de bronce y los introducirás en las presillas» así unirás la carpa, de manera que forme un todo.

12 En cuanto a la parte sobrante de los toldos, la mitad colgará en la parte posterior de la Morada;

13 y los cincuenta centímetros que sobran a lo largo de cada lado, colgarán sobre sus dos costados para cubrirla.

14 Además, tendrás que hacer para la Morada un toldo de pieles de carnero teñido de rojo, y encima de ella otro toldo de cueros finos.

La armazón de la Morada

15 También harás para la Morada unos bastidores de madera de acacia, dispuestos verticalmente.

16 Cada bastidor medirá cinco metros de largo por setenta y cinco centímetros de ancho,

17 y tendrá dos espigones ensamblados uno con el otro. Así armarás todos los bastidores de la Morada.

18 Harás veinte de estos bastidores para el lado sur, el que da hacia el Négueb,

19 y cuarenta bases de plata para sostenerlos, o sea, dos bases debajo de cada bastidor, uno para cada espigón.

20 Para el otro lado de la Morada, la parte que da hacia el norte, harás también veinte bastidores

21 con sus cuarenta bases de plata;

22 y para el fondo de la Morada, hacia el oeste, harás seis bastidores,

23 más otros dos para los ángulos de la parte posterior,

24 que estarán unidos, de abajo hacia arriba, hasta la altura de la primera argolla. Así se hará con los dos bastidores destinados a los dos ángulos.

25 Allí habrá entonces ocho bastidores con sus dieciséis bases de plata, dos debajo de cada bastidor.

26 Además, harás cinco travesaños de madera de acacia para mantener alineados los bastidores que están a un lado de la Morada,

27 cinco travesaños para los bastidores del otro costado, y otros cinco para los de la parte posterior, la que da hacia el oeste.

28 El travesaño central deberá pasar a media altura de los bastidores, de un extremo a otro.

29 Luego recubrirás de oro los bastidores, forjarás unas argollas de oro para pasar por ellas los travesaños, y a estos últimos también los recubrirás de oro.

30 Para la construcción de la Morada tendrás presentes todas las normas que te fueron dadas en la Montaña.

El velo del Santuario

31 Harás, asimismo, un velo de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y de lino fino reforzado, con figuras de querubines diseñadas artísticamente.

32 lo colgarás de cuatro columnas de madera de acacia revestidas de oro, que estarán provistas de unos ganchos del mismo metal y sostenidas por cuatro bases de plata.

33 Pondrás el velo debajo de los ganchos, y detrás de él colocarás el Arca del Testimonio. Así el velo marcará la división entre el Santo y el Santo de los Santos.

34 También colocarás la tapa sobre el Arca del Testimonio, en el Santo de los Santos.

35 Fuera del velo, pondrás la mesa, y frente a ella, en el lado sur de la Moneda, el candelabro. Así la mesa quedará situada sobre el lado norte.

La cortina de entrada

36 Para la entrada de la carpa harás una cortina de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y de lino fino reforzado, todo esto recamado artísticamente.

37 Y para sostener la cortina harás cinco columnas de madera de acacia revestidas de oro; sus ganchos también serán de oro, y las apoyarás sobre bases de bronce fundido.

Capítulo 27

El altar de los holocaustos

1 Luego harás el altar de madera de acacia; medirá dos metros y medio de largo por dos metros y medio de ancho –es decir, será cuadrado– y tendrá un metro y medio de alto.

2 En sus cuatro ángulos, y formando una sola pieza con él, le harás unos cuernos. Después lo revestirás de bronce.

3 Le harás recipientes para recoger las cenizas, y también palas, aspersorios, tenedores y braseros. Todos estos utensilios serán de bronce.

4 También le harás un enrejado de bronce en forma de red, y en los cuatro extremos de la red deberás ajustar otras tantas argollas de bronce.

5 Luego pondrás el enrejado debajo de la parte saliente del altar, de manera que la red llegue desde abajo hasta la mitad del altar.

6 Le harás, asimismo, unas andas de madera de acacia revestidas de bronce.

7 Y cuando haya que transportar el altar, las andas se pasarán por las argollas que están a ambos lados de él.

8 Harás el altar de tablas, hueco por dentro, y en su ejecución te ajustarás al modelo que te fue mostrado en la Montaña.

El atrio de la Morada

9 También harás el atrio de la Morada. Por el lado sur, en dirección al Négueb, el atrio tendrá unas cortinas de lino fino reforzado, dispuestas a lo largo de cincuenta metros.

10 Sus veinte columnas se apoyarán sobre veinte bases de bronce, y estarán provistas de ganchos y varillas de plata.

11 A lo largo del lado norte, las cortinas tendrán igualmente una longitud de cincuenta metros, y estarán sostenidas por veinte columnas apoyadas sobre veinte bases de bronce, y provistas de ganchos y varillas de plata.

12 A lo ancho del atrio, por el lado oeste, habrá veinticinco metros de cortinas, con diez columnas y sus respectivas bases.

13 Y sobre el lado este, hacia el oriente, el ancho del atrio medirá veinticinco metros.

14 Las cortinas colocadas a un lado de la entrada medirán siete metros y medio de longitud, y allí habrá tres columnas y tres bases.

15 Las del otro lado tendrán las mismas medidas, también con tres columnas y sus respectivas bases.

El cortinado para la entrada del atrio

16 Un cortinado de diez metros de largo, hecho de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y lino fino reforzado, recamado artísticamente, hará las veces de puerta. Este cortinado colgará de cuatro columnas apoyadas sobre cuatro bases.

17 Todas las columnas que rodean el atrio estarán unidas por varillas de plata; sus ganchos serán de plata y sus bases de bronce.

18 El atrio tendrá cincuenta metros de largo, por veinticinco de ancho y dos y medio de alto. Todas sus cortinas serán de lino fino reforzado y sus bases de bronce.

19 Los utensilios para el servicio litúrgico de la Morada, lo mismo que sus estacas y las del atrio serán también de bronce.

El aceite para el candelabro

20 Ordenarás a los israelitas que te traigan aceite puro de oliva molida para el candelero, a fin de alimentar constantemente una lámpara.

21 Aarón y sus hijos lo deberán preparar en la Carpa del Encuentro, fuera del velo que está delante del Arca del Testimonio, para que arda en la presencia del Señor, desde la tarde hasta la mañana. Este es un decreto irrevocable para todas las generaciones israelitas.

Capítulo 28

Las vestiduras del Sumo Sacerdote

1 Entre todos los israelitas, elige a tu hermano Aarón, y ordénale que se acerque a ti para que sea mi sacerdote. Manda que se acerquen también sus hijos Nadab, Abihú, Eleazar e Itamar.

2 Luego harás las vestiduras sagradas de tu hermano Aarón, a fin de que esté magníficamente ataviado.

3 Para ello tendrás que recurrir a los artesanos más competentes, a aquellos que yo he dotado de una habilidad excepcional, y ellos confeccionarán las vestiduras de Aarón, a fin de que sea consagrado para ejercer mi sacerdocio.

4 Las vestiduras que harán son las siguientes: un pectoral, un efod, un manto, una túnica bordada, un turbante y una faja. Y cuando hagan las vestiduras sagradas para que Aarón y sus hijos puedan cumplir sus funciones sacerdotales,

5 emplearán oro, púrpura violeta y escarlata, carmesí y lino fino.

El efod

6 El efod lo harán de oro, de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y lino fino reforzado, todo esto trabajado artísticamente.

7 Llevará aplicadas dos hombreras, y así quedará unido por sus dos extremos.

8 El cinturón para ajustarlo formará una sola pieza con él y estará confeccionado de la misma forma: será de oro, de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y de lino fino reforzado.

9 Después tomarás dos piedras de lapislázuli y grabarás en ellas los nombres de los hijos de Israel

10 –seis en una piedra y seis en la otra– por orden de nacimiento.

11 Para grabar las dos piedras con los nombres de los hijos de Israel, te valdrás de artistas apropiados, que lo harán de la misma manera que se graban los sellos. Luego las harás engarzar en oro,

12 y las colocarás sobre las hombreras del efod. Esas piedras serán un memorial en favor de los israelitas. Así Aarón llevará esos nombres sobre sus hombros hasta la presencia del Señor, para mantener vivo su recuerdo.

13 Harás, además, los engastes de oro

14 y dos cadenas de oro puro, trenzadas a manera de cordones, que luego fijarás en los engastes.

El pectoral

15 También harás el pectoral del juicio de Dios, trabajado artísticamente y confeccionado de la misma manera que el efod. Lo harás de oro, de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y de lino fino reforzado.

16 Deberá ser cuadrado y de doble paño, de un palmo de largo y otro de ancho.

17 Lo guarnecerás de piedras preciosas, dispuestas en cuatro hileras: en la primera habrá un jaspe rojo, un topacio y una esmeralda;

18 en la segunda, un rubí, un zafiro y un diamante;

19 en la tercera, un ágata, una cornalina y una amatista;

20 y en la cuarta, un crisólito, un lapislázuli y un jaspe verde. Todas ellas estarán engarzadas en oro.

21 Las piedras serán doce en total, como los nombres de los hijos de Israel, y cada una llevará grabado el nombre de una de las doce tribus, como se graban los sellos.

22 Además, harás para el pectoral unas cadenas de oro puro, trenzadas a manera de cordones,

23 y dos argollas de oro, que luego ajustarás a sus dos extremos superiores.

24 Sujetarás las dos puntas de las cadenas de oro en las dos argollas que están en los extremos superiores del pectoral;

25 y unirás las otras dos puntas a unos engastes, para poder colocarlas sobre las hombreras del efod, por la parte de adelante.

26 Harás, asimismo, dos argollas de oro y las ajustarás a los dos extremos inferiores del pectoral, sobre el borde interior, el que da hacia el efod.

27 También forjarás otras dos argollas de oro, adhiriéndolas a las dos hombreras del efod, por la parte de adelante y bien hacia abajo, o sea, cerca de la costura y encima del cinturón.

28 Así el pectoral se podrá sujetar haciendo pasar, entre sus argollas y las argollas del efod, un cordón de púrpura violeta, para que el pectoral quede fijo sobre el cinturón y no se desprenda del efod.

29 Cada vez que Aarón entre en el Santuario, llevará sobre su corazón, en el pectoral del juicio de Dios, los nombres de los hijos de Israel, para mantener siempre vivo el recuerdo de ellos en la presencia del Señor.

30 En el pectoral del juicio de Dios introducirás, además, el Urim y el Tumim, a fin de que Aarón los tenga sobre su pecho cuando se presente delante del Señor. Así Aarón llevará siempre sobre su pecho, en la presencia del Señor, el dictamen de Dios para los Israelitas.

El manto

31 También harás el manto del efod, todo de púrpura violeta.

32 En el centro tendrá una abertura para que pueda pasar la cabeza; y esa abertura tendrá un dobladillo alrededor, como el cuello de una cota de guerrero, para que no se rasgue.

33 Adornarás el ruedo con granadas de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y de lino fino reforzado, intercaladas con campanillas de oro.

34 Las campanillas de oro y las granadas estarán dispuestas alternadamente, una al lado de otra, a lo largo de todo el ruedo.

35 Aarón irá revestido del manto para ejercer su función sacerdotal, y el sonido de las campanillas tendrá que oírse cuando entre en el Santuario, delante del Señor, y cuando salga de él. Así no morirá.

El turbante y su flor, la túnica y la faja

36 Además harás una flor de oro puro, y grabarás en ella, como se graban los sellos: «Consagrado al Señor».

37 La sujetarás con una cinta de púrpura violeta, y así quedará fija sobre la parte delantera del turbante.

38 Aarón la llevará sobre su frente, para que pueda cargar con las faltas que los israelitas cometan al presentar sus ofrendas sagradas; y la flor estará siempre sobre su frente para que esas ofrendas sean aceptables al Señor.

39 Tejerás la túnica con lino fijo, y también harás un turbante de lino fino y una faja recamada artísticamente.

Las vestiduras de los sacerdotes

40 Harás túnicas, fajas y mitras para los hijos de Aarón, a fin de que estén magníficamente ataviados.

41 Así vestirás a tu hermano Aarón y a sus hijos. Luego los ungirás, los investirás y los consagrarás para que ejerzan mi sacerdocio.

42 También les harás unos pantalones de lino para cubrirse desde la cintura hasta los muslos.

43 Aarón y sus hijos los usarán cuando entren en la Carpa del Encuentro o se acerquen al altar para el culto del Santuario. De esa manera, no incurrirán en culpa y no morirán. Este es un decreto irrevocable para Aarón y sus descendientes.

Capítulo 29

La consagración de Aarón y de sus hijos

1 Esto es lo que harás para consagrarlos a fin de que ejerzan mi sacerdocio: toma un novillo y dos carneros sin defecto,

2 y prepara con harina de la mejor calidad panes ácimos, tortas sin levadura amasadas con aceite, y galletas sin levadura untadas con aceite.

3 Colocarás todo eso en una canasta y lo presentarás junto con los novillos y los dos carneros.

4 Después ordenarás que Aarón y sus hijos se acerquen a la puerta de la Carpa del Encuentro y los lavarás con agua.

5 Tomarás luego las vestiduras y revestirás a Aarón con la túnica, el manto del efod, el efod y el pectoral, y lo ceñirás con el cinturón del efod.

6 Le colocarás también el turbante sobre la cabeza y el signo de su consagración encima del turbante.

7 Tomarás después el óleo de la unción, lo derramarás sobre su cabeza y lo ungirás con él.

8 En seguida ordenarás que se acerquen sus hijos; los vestirás con túnicas,

9 los ceñirás con un cinturón y les ajustarás las mitras. Así el sacerdocio les pertenecerá por un decreto irrevocable. De esta manera investirás a Aarón y a sus hijos.

Las ofrendas de la consagración

10 Acercarás el novillo hasta la Carpa del Encuentro. Aarón y sus hijos impondrán las manos sobre su cabeza,

11 y tú lo inmolarás delante del Señor, a la entrada de la Carpa del Encuentro.

12 Tomarás un poco de su sangre, untarás con tu dedo los cuernos del altar y derramarás todo el resto de la sangre sobre la base del mismo.

13 Recogerás luego la grasa que recubre las entrañas, la protuberancia del hígado, los dos riñones y la grasa que está sobre ellos, y los quemarás sobre el altar.

14 Pero la carne, el cuero y los excrementos, los quemarás fuera del campamento. Este es un sacrificio por el pecado.

15 Luego tomarás uno de los carneros, y Aarón y sus hijos impondrán las manos sobre su cabeza.

16 Una vez que lo hayas inmolado, recogerás su sangre y harás una aspersión alrededor del altar.

17 Dividirás el animal en pedazos, lavarás sus entrañas y sus patas, y las colocarás sobre las partes restantes y sobre su cabeza.

18 Después dejarás que todo el carnero se queme sobre el altar. Este es un holocausto para el Señor, una ofrenda que se quema con aroma agradable al Señor.

19 Tomarás luego el segundo carnero, y Aarón y sus hijos impondrán las manos sobre su cabeza.

20 Una vez que lo hayas inmolado, recogerás un poco de su sangre y untarás con ella el lóbulo de la oreja derecha de Aarón y el lóbulo de la oreja derecha de sus hijos, el pulgar de su mano derecha y el pulgar de su pie derecho. Después harás una aspersión con esta sangre alrededor del altar.

21 Tomarás un poco de la sangre que está sobre el altar y un poco del óleo de la unción, y rociarás con ellos a Aarón y sus vestiduras, a sus hijos y también sus vestiduras. Así quedarán consagrados Aarón, sus hijos y las vestiduras de todos ellos.

La investidura de los sacerdotes

22 Luego tomarás la grasa de este carnero: la grasa de la cola, la que cubre las entrañas, la protuberancia del hígado, los dos riñones y la grasa que está sobre ellos, y también la pata derecha, porque se trata de carnero ofrecido para la investidura de los sacerdotes.

23 Recogerás además un pan redondo, una torta cocida en aceite y una galleta de la canasta de los panes ácimos que está delante del Señor;

24 depositarás todo esto en las manos de Aarón y de sus hijos, y realizarás el gesto de presentación delante del Señor.

25 Recogerás nuevamente todo esto y lo quemarás sobre el altar junto con el holocausto, como perfume agradable al Señor. Esta es una ofrenda que se quema para el Señor.

26 Tomarás también el pecho del carnero que se inmola para la investidura de Aarón y realizarás con él el gesto de presentación delante del Señor. Esta será tu parte.

27 Tú santificarás el pecho de la presentación y la pierna de la ofrenda, es decir, la parte presentada y ofrecida del carnero inmolado con motivo de la investidura de Aarón y de sus hijos.

28 Esta será la parte que Aarón y sus hijos recibirán de los israelitas, según un decreto irrevocable. Porque es una ofrenda que los israelitas deberán separar de sus sacrificios de comunión, como ofrenda reservada al Señor.

29 Las vestiduras sagradas de Aarón pasarán después a sus hijos, que las vestirán al recibir la unción y la investidura.

30 Y el hijo que lo suceda como sacerdote, cuando entre en la Carpa del Encuentro para el culto del Santuario, las vestirá durante siete días.

El banquete sagrado

31 Después tomarás el carnero ofrecido para la investidura y harás cocinar su carne en el recinto sagrado.

32 Aarón y sus hijos comerán la carne y el pan de la canasta, a la entrada de la Carpa del Encuentro.

33 Comerán aquello que sirvió para su expiación cuando fueron investidos y consagrados. Ningún extraño deberá comer con ellos, porque son cosas santas.

34 Si queda para el día siguiente algo de carne o de pan, deberás quemar ese resto. Nadie lo comerá, porque es una cosa santa.

35 Esto es lo que harás con Aarón y sus hijos, conforme a todo lo que yo te he ordenado. La ceremonia de su investidura durará siete días.

La consagración del altar de los holocaustos

36 Cada uno de esos días ofrecerás un novillo como sacrificio de expiación por el pecado; lo ofrecerás sobre el altar para expiar por él y lo ungirás para consagrarlo.

37 Durante siete días harás la expiación por el altar y lo consagrarás. Así el altar será algo santísimo, y todo aquello que lo toque quedará consagrado.

El holocausto cotidiano

38 Cada día ofrecerás sobre el altar dos corderos de un año, y esto en forma permanente.

39 Ofrecerás uno a la mañana y otro a la hora del crepúsculo.

40 Con el primer cordero ofrecerás también la décima parte de una medida de harina de la mejor calidad, amasada con un litro sesenta de aceite puro de oliva, y una libación consistente en un litro sesenta de vino.

41 El otro cordero lo ofrecerás a la hora del crepúsculo, con una oblación y una libación iguales a las de la mañana, como aroma agradable, como ofrenda que se quema para el Señor.

42 Este es un holocausto que se ofrecerá perpetuamente de generación en generación, en la presencia del Señor, a la entrada de la Carpa del encuentro. Porque es allí donde me encontraré contigo para hablarte.

43 Allí también me encontraré con los israelitas, y ese lugar será consagrado por mi gloria.

44 Yo consagraré la Carpa del Encuentro y el altar. También consagraré a Aarón y a sus hijos para que sean mis sacerdotes

45 Yo habitaré en medio de los israelitas y seré su Dios.

46 Entonces ellos sabrán que yo, el Señor, soy su Dios, el que los hice salir de Egipto para habitar en medio de ellos. Yo soy el Señor, su Dios.

Capítulo 30

El altar de los perfumes

1 También harás un altar para quemar el incienso. Lo harás de madera de acacia,

2 de cincuenta centímetros de largo por cincuenta de ancho, es decir, cuadrado. Tendrá un metro de alto. Sus cuernos formarán una sola pieza con él.

3 Recubrirás de oro puro su parte superior, sus costados y sus cuernos, y le colocarás alrededor una moldura de oro.

4 Luego le harás unas argollas de oro, y las pondrás debajo de la moldura, dos de un lado y dos del otro, a fin de pasar por ellas las andas que servirán para transportarlo.

5 Estas últimas las harás de madera de acacia y las recubrirás de oro.

6 Después pondrás el altar delante del velo que oculta el Arca del Testimonio, frente a la tapa que está sobre el arca, allí donde yo me encontraré contigo.

7 Todas las mañanas, al preparar las lámparas, Aarón deberá quemar en él incienso aromático;

8 y a la hora del crepúsculo, cuando vuelva a arreglar las lámparas, lo hará nuevamente. Y ustedes presentarán constantemente delante del Señor esta ofrenda de incienso aromático, a través de las generaciones.

9 No ofrecerán sobre él incienso profano, no holocaustos, ni oblaciones, ni derramarán sobre él ninguna libación.

10 Una vez al año, Aarón realizará el rito de expiación sobre los cuernos del altar. Con la sangre del sacrificio ofrecido el día de la Expiación, hará el rito de expiación a lo largo de las generaciones. Este altar es una cosa santísima, consagrada al Señor.

El impuesto para el Santuario

11 El Señor habló a Moisés en estos términos:

12 Cuando hagas un censo de los israelitas, cada uno pagará al Señor el rescate de su vida, para que no recaiga sobre ellos ninguna calamidad con ocasión del empadronamiento.

13 La cantidad que pagarán todos los que sean sometidos al censo será medio siclo, según el peso de los siclos del Santuario; y este será un tributo reservado al Señor.

14 Todos los que sean sometidos al censo, o sea, los que tengan más de veinte años, pagarán la ofrenda reservada al Señor.

15 El rico no dará más de medio siclo, ni el pobre menos, para cumplir con el impuesto debido al Señor en rescate de sus vidas.

16 Tú recibirás de los israelitas el dinero del rescate y lo destinarás para el servicio de la Carpa del Encuentro. Eso servirá de memorial delante del Señor, en favor de los israelitas, para el rescate de sus vidas.

La fuente de bronce

17 El Señor habló a Moisés en estos términos:

18 Harás una fuente de bronce, con su base también de bronce, para las abluciones. La pondrás entre la Carpa del Encuentro y el altar, y la llenarás de agua,

19 para que en ella se laven los pies Aarón y sus Hijos.

20 Se lavarán cuando entren en la Carpa del Encuentro, para no morir. Y harán lo mismo antes de acercarse al altar a presentar la ofrenda que se quema para el Señor.

21 Se lavarán las manos y los pies, para no morir. Este es un decreto irrevocable para Aarón y sus descendientes, a través de las generaciones.

22 El Señor habló a Moisés en estos términos:

23 Consigue especies aromáticas de la mejor calidad: quinientos ciclos de mirra pura, la mitad –o sea, doscientos cincuenta siclos– de cinamomo, doscientos cincuenta siclos de caña aromática,

24 quinientos siclos de casia –todo esto en siclos del Santuario– y siete litros de aceite de oliva;

25 y prepara con ellos una mezcla aromática, como lo sabe hacer el fabricante de perfumes. Este será el óleo para la unción sagrada.

26 Con él deberás ungir la Carpa del Encuentro, el Arca del Testimonio,

27 la mesa con todos sus utensilios, el candelabro con sus accesorios, el altar de los perfumes,

28 el altar de los holocaustos con todos sus accesorios y la fuente con su base.

29 Así los consagrarás, y serán una cosa santísima. Todo aquello que los toque quedará consagrado.

30 También ungirás a Aarón y a sus hijos, y los consagrarás para que ejerzan mi sacerdocio.

31 Luego hablarás a los israelitas en estos términos: Ustedes emplearán este óleo para la unción sagrada, a lo largo de sus generaciones.

32 El no será derramado sobre el cuerpo de ningún hombre y no se hará ningún otro que tenga la misma composición. Es una cosa santa, y como tal deberán considerarlo.

33 El que prepare una mezcla semejante o derrame el óleo sobre un extraño, será excluido de su pueblo.

El incienso sagrado

34 El Señor dijo a Moisés: Consigue las siguientes sustancias aromáticas en cantidades iguales: resina, ámbar, gálbano perfumado e incienso puro,

35 mezcla todo eso, como lo hace un fabricante de perfumes, para hacer un perfume salado, puro y santo.

36 Reduce a polvo una parte de él y colócala delante del Arca del Testimonio, en la Carpa del Encuentro, o sea, en el lugar donde yo me encontraré contigo. Esto será para ustedes una cosa santísima,

37 y para su uso personal no harán ningún otro que tenga la misma composición. Deberás considerarlo algo consagrado al Señor.

38 Cualquiera que prepare otro semejante para aspirar su fragancia, será excluido de su pueblo.

Capítulo 31

Los obreros para la construcción del Santuario

1 El Señor habló a Moisés en estos términos:

2 Yo designé a Besalel –hijo de Urí, hijo de Jur, de la tribu de Judá–

3 y lo llené del espíritu de Dios, para conferirle habilidad, talento y experiencia en la ejecución de toda clase de trabajos:

4 tanto para idear proyectos y realizarlos en oro, plata o bronce,

5 como para labrar piedras de engaste, tallar la madera o hacer cualquier otro trabajo.

6 Junto con él puse a Oholiab, hijo de Ajisamac, de la tribu de Dan, y doté de una habilidad especial a todos los artesanos competentes, a fin de que puedan ejecutar lo que les he ordenado, a saber:

7 la Carpa del Encuentro, el Arca del Testimonio, la tapa que la cubre y todo el mobiliario del Santuario;

8 la mesa con sus utensilios, el candelabro de oro puro con todos sus accesorios, y el altar de los perfumes;

9 el altar de los holocaustos y todos sus utensilios, y la fuente con su base;

10 las vestiduras litúrgicas, o sea, las vestiduras sagradas para el sacerdote Aarón y las que usarán sus hijos para las funciones sacerdotales;

11 el óleo de la unción y el incienso aromático para el Santuario. En la ejecución de todas estas cosas, ellos obrarán conforme a todo lo que yo te he ordenado.

El Sábado

12 El Señor dijo a Moisés:

13 Habla a los israelitas en los siguientes términos: No dejen nunca de observar mis sábados, porque el sábado es un signo puesto entre yo y ustedes, a través de las generaciones, para que ustedes sepan que yo, el Señor, soy el que los santifico.

14 Observarán el sábado, porque es sagrado para ustedes. El que lo profane, será castigado con la muerte. Sí, todo el que haga algún trabajo ese día será excluido de su pueblo.

15 Durante seis días se trabajará, pero el séptimo será un día de descanso solemne, consagrado al Señor. El que trabaje en sábado será castigado con la muerte.

16 Los israelitas observarán el sábado, celebrándolo a través de las generaciones como signo de alianza eterna.

17 Será un signo perdurable entre yo y los israelitas, porque en seis días el Señor hizo el cielo y la tierra, pero el séptimo día descansó y retomó aliento.

18 Cuando el Señor terminó de hablar con Moisés, en la montaña del Sinaí, le dio las dos tablas del Testimonio, tablas de piedra escritas por el dedo de Dios.

El Arca de la Alianza. James Jacques Joseph Tissot, 1836-1902

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