Investigación Áulica

Entre el 15 y el 19 de enero se llevó a cabo el Taller La investigación áulica como actividad formativa del docente de lenguas, a cargo del Mtro. Leonardo Herrera González, docente de la Escuela Nacional de Lenguas, Lingüística y Traducción, adscrito al Departamento de Lingüística Aplicada de la Escuela.

En palabras del Mtro. Herrera, el salón de clases es un espacio de experimentación académica, investigación y reflexión formativa. Así, la experiencia del profesor se modifica de manera constante a partir de su práctica diaria, del intercambio de informaciones con profesionales afines y de las observaciones hechas por él mismo en su trabajo de clase.

“La información puede ser encaminada hacia una mejor comprensión de lo que hace a través de la reflexión mientras lo hace. Así, observar, preguntar y reflexionar constituye la base de la investigación de y en su práctica profesional”.

Como docentes investigadores, considera que “la observación del trabajo del aula nos lleva a identificar y caracterizar los elementos que inciden en la práctica. Nos permite también problematizar y plantear preguntas de investigación sobre los sentidos y significados de nuestras acciones”.

De este modo, lo deseable es que, al reflexionar sobre la práctica específica —enseñanza y aprendizaje de lenguas—, y a la luz de los hallazgos hechos tras la observación y su consecuente discusión, se promueva una transformación constante y una formación continua del docente de lenguas.

El Taller de investigación Áulica se realizó con el objetivo de sensibilizar al profesor sobre una observación investigativa de su clase y “el reconocimiento de elementos recurrentes en el trabajo interactivo del aula que le permitan elaborar preguntas de investigación”; familiarizarlo con los planteamientos teóricos de la investigación-acción, como una orientación metodológica colaborativa que promueva la correlación entre la investigación, la práctica docente y la formación continua; favorecer la formación de un sentido crítico y reflexivo del maestro en torno a la práctica del salón de clase de lengua extranjera y sobre su formación continua, y propiciar la oportunidad de que el docente participe en una experiencia de investigación social.

De acuerdo con el Mtro. Herrera, el taller buscó llevar a los asistentes a tomar conciencia de la necesidad y posibilidad de hacer de su trabajo diario en el aula un espacio para la observación y reconocimiento de las particularidades de su quehacer profesional, en una perspectiva crítica, buscando identificar elementos a partir de los cuales puedan experimentar académicamente y llegar a constituir objetos de investigación.

Una vez identificado algún hecho o problema resultante del trabajo interactivo, procede “problematizarlo” o encaminarlo hacia una descripción del problema y las posibles preguntas de investigación que nos gustaría ver respondidas tras someterlo a una serie de etapas o pautas de seguimiento y experimentación, ya sea siguiendo los procedimientos de la investigación convencional o positivista, o bien los planteamientos metodológicos de la investigación cualitativa.

Durante el taller se abordaron temas como: Intereses y propósitos de investigación del docente de lenguas; el trabajo del salón de clase, una labor interactiva de construcción del conocimiento; Cultura de aprendizaje y cultura de enseñanza de lenguas extranjeras; La enseñanza de lenguas extranjeras en México, una tradición de 500 años. El papel de la observación de la clase; Tradiciones de estudio: investigación cuantitativa e investigación cualitativa; La investigación en el salón de clases: de lo prescriptivo a lo descriptivo; Las fases de un estudio y su articulación; La investigación-acción y la reflexión crítica; Instrumentos significativos para la colecta de datos; Las paradojas de la interpretación de datos: hacia la confiabilidad y validez del estudio; y Levantamiento de problemas de estudios, las preguntas de investigación y las hipótesis

El taller contó con la asistencia de 11 profesores de lenguas (inglés, francés, portugués), y público externo.

Entre los temas considerados por los asistentes como posibles problemas a investigar se señalaron: el Aprovechamiento de los insumos lingüísticos identificados como fallidos en la interacción tándem como recurso a integrar en sesiones subsecuentes y encaminarlas hacia la competencia lingüística y comunicativa del alumno; las Acciones de evaluación formativa en la clase de inglés: un abordaje más allá de los exámenes departamentales; el Empleo y uso de las emociones en el trabajo interactivo del salón de clases; la Promoción de la densidad de texto en actividades de comprensión de lectura en ILE.; la Utilización de objetos culturales en actividades de enseñanza de español como lengua extranjera, y La producción oral y su relación con tareas reales de la vida académica del alumno..

El expositor del taller insistió en la importancia de la formación crítica como una resultante de la puesta en práctica de las propias decisiones y conocimientos diarios del docente investigador y su consecuente discusión. El propósito final de la investigación áulica es llevar a dicho sujeto a instaurar cambios en su práctica profesional. Estos cambios son instrumentados siempre en función de sus necesidades y tienen el propósito de implementar una enseñanza más eficaz.

Mediante un intercambio de ideas sobre sus propias experiencias, el taller constituyó también una oportunidad para conocer problemas detectados por la mayoría de los presentes en torno a la labor desempeñada en esta institución, como pueden ser: la falta de instancias de formación continua dirigida a problemas específicos o que tomen en cuenta sus intereses reales; una falta de correlación entre las labores e investigación “en el Edificio B” y sus necesidades docentes; cierta falta de ética entre algunos colegas que han acudido a ellos como posibles colaboradores o informantes para sus estudios, sin retribuir formativamente con los resultados de los estudios, entre otros.