TEMA: Microorganismos
(Fotografía: Lactobacillus Acidophilus, usado en la fabricación de yogur). La mayoría de la gente piensa en las bacterias como gérmenes que transmiten enfermedades. Pero, de hecho, sólo unos pocos tipos de bacterias causan enfermedades. La mayoría de ellas son beneficiosas, e incluso esenciales, para el mantenimiento de la vida sobre la Tierra.
Las bacterias son organismos microscópicos unicelulares rodeados por una pared celular característica. La mayoría sobreviven y se reproducen libremente. Son capaces de llevar a cabo todas la funciones que realizan otros organismos más desarrollados, y se usan mucho en la investigación, dado que crecen y se reproducen con facilidad, y son muy manejables en el laboratorio. Los estudios con bacterias han aportado mucha información acerca del metabolismo celular, la estructura del ADN y la naturaleza de la herencia genética, y sirvieron de instrumento para la interpretación del código genético.
Las bacterias se pueden encontrar en todo tipo de hábitats. Sólo las rickettsias y las clamideas son parásitos de las células animales. Todas las demás viven libremente.
Algunas bacterias viven en condiciones extremas, por ejemplo en regiones heladas de la Antártida o en manantiales de aguas termales.
Como hecho curioso se utilizan algunas de ellas para limpiar las manchas de petróleo. En 1989, el Exxon Valdez vertió al mar más de 50 millones de litros de crudo cerca de las costas de Alaska. Se utilizaron bacterias para eliminar el crudo, y el área se ha ido recuperando poco a poco.
Hay pocas bacterias que causan enfermedades en la especie humana, pero cuando lo hacen son serias e incluso mortales. Entre las enfermedades más graves causadas por las bacterias están la tuberculosis, la tos ferina, la difteria, la gastroenteritis, la gonorrea, la sífilis y las infecciones de las heridas que producen los estreptococos y los estafilococos. Ciertas enfermedades, como el botulismo, el tétanos, la gangrena y el ántrax, las producen las bacterias que forman endosporas resistentes a las condiciones ambientales desfavorables. Las bacterias atacan al cuerpo debido a la producción de toxinas y enzimas que dañan los órganos. Antes del descubrimiento de los antibióticos, muchas de estas enfermedades eran fatales. Los antibióticos cambiaron radicalmente la situación, pero muchas bacterias están desarrollando resistencia a los antibióticos.
Las bacterias en el medio ambiente son beneficiosas ya que desempeñan un papel vital en la descomposición de la materia orgánica, pues liberan nutrientes en el suelo, que las plantas usan como alimento. Hay un grupo de bacterias que viven en las raíces de las plantas leguminosas y que absorben el nitrógeno del aire, convirtiéndolo en compuestos nitrogenados que enriquecen el suelo. Otro grupo, los actinomicetos, es una valiosa fuente de antibióticos.
Las bacterias son importantes también en la producción de alimentos. Los lactobacilos producen ácido láctico por fermentación de la lactosa, proceso por el que la leche se agria y da lugar al yogur. Estas bacterias se utilizan para fabricar yogur y queso.
Todas las personas somos portadoras de alrededor de 2 billones de microorganismos (bacterias, virus, mohos, levaduras, etc). La mayor parte de ellos se encuentran en el intestino, de manera que si las pesáramos obtendríamos más de 1 kilo de bacterias intestinales, el 80% del peso residuo seco de las heces son microorganismos. Entre la flora intestinal se encuentran bacterias que llevan a cabo una serie de funciones beneficiosas para nuestro organismo, ayudan a convertir los alimentos en energía a partir de la degradación de fibras de la dieta, a destruir toxinas, a producir determinadas vitaminas (C, B2, B5, H, B1, ácido fólico, etc) o aminoácidos y a proteger el organismo frente a muchos patógenos; a cambio, el sistema digestivo les da alimento y hábitat.