TEMA: Drogodependencia
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una droga es toda aquella sustancia química que, al ser administrada en una persona, da lugar a alteraciones en el funcionamiento del sistema nervioso central del individuo (bien sea estimulándole, deprimiéndole u ocasionando la aparición de alucinaciones) y que, además, es susceptible de crear dependencia física y/o psíquica.
Las drogas pueden ser de origen natural, como el cannabis, u obtenerse por síntesis química en un laboratorio, tal y como ocurre con el éxtasis. Existen otras drogas que, si bien son de origen natural, van a sufrir modificaciones químicas antes de su utilización para alterar alguna de sus características, tales como la solubilidad, reacciones adversas o la potencia. Entre dichas drogas podemos destacar a la heroína.
Una droga de abuso se va a caracterizar por la capacidad innata que presenta para producir dependencia, tolerancia y síndrome de abstinencia, tras un período más o menos prolongado de utilización.
Dependencia
Se denomina dependencia a un conjunto de manifestaciones físicas del organismo, acompañadas por cambios del comportamiento de la persona, y que se resumen en que el consumo de la sustancia adquiere un papel prioritario para el individuo.
La dependencia se caracteriza por la presencia de alguno de estos síntomas:
El drogodependiente muestra un deseo muy fuerte de utilizar la sustancia.
La persona pierde el control sobre el consumo de la droga de abuso. El drogodependiente es incapaz de dejar de utilizar la droga y la consume en las mayores cantidades que puede conseguir. La droga de abuso controla a la persona y no al revés.
El consumo continúa a pesar de que se es consciente de los efectos nocivos que presenta para la salud.
La utilización de la droga adquiere un papel prioritario para la persona, de forma que centra todo su esfuerzo en conseguirla y utilizarla, por encima de relaciones personales, estudios, trabajo, etc.
Cuanto más rápidamente aparezcan estos efectos y más potentes sean, más adicción causa la droga.
La dependencia originada por una sustancia de abuso puede ser de dos tipos:
Dependencia física. La administración repetida de una droga ocasiona cambios en el organismo, de forma que si suprimimos la sustancia aparecen síntomas desagradables (el denominado síndrome de abstinencia) que hacen que la persona se vea obligada a volver a consumir, para eliminarlos.
Dependencia psíquica. La utilización de una droga se acompaña de un sentimiento satisfactorio, por lo que la persona siente el deseo compulsivo de repetir la experiencia con la droga, o bien desea evitar la ausencia de placer que produce el no tomarla.
Tolerancia
La tolerancia es el fenómeno por el cual la utilización repetida de una misma dosis de la sustancia va ocasionando cada vez menos efectos en la persona, de forma que se ve obligada a ir aumentando gradualmente la dosis administrada para obtener los efectos deseados.
Síndrome de abstinencia, también llamado “mono”
Consiste en la aparición de síntomas muy desagradables cuando se produce una reducción de la dosis habitual o una supresión total de la sustancia.
La administración de una droga de abuso supone la ruptura del equilibrio interno del organismo, que vuelve a recuperarse tras un tiempo de adaptación al cambio. Si la cantidad de droga administrada es inferior a la necesaria para mantener dicho equilibrio, éste se vuelve a romper y aparecen unos síntomas debidos a las modificaciones sufridas por los órganos. Estos síntomas son de naturaleza desagradable y aparecen de forma rápida aunque poco duradera, hasta que se vuelve a alcanzar el equilibrio.
El síndrome de abstinencia sólo aparece cuando la reducción de la dosis o la supresión total de la sustancia se producen de forma brusca. Una disminución paulatina de la dosis no ocasiona este síndrome, ya que se da tiempo al cuerpo a adaptarse a esta nueva situación sin que aparezcan síntomas intensos.
Otro término muy habitual cuando se habla de drogodependencias es el de politoxicómano, que es aquella persona drogodependiente, que consume habitualmente una o varias sustancias de forma prioritaria, pero que además suele administrarse otras drogas menos frecuentes cuando las tiene en su poder. De tal forma, que es normal que el heroinómano consuma heroína o cocaína, y además fume porros, tome pastillas y/o esnife pegamento.
Clasificación de las drogas de abuso
Existen muchas posibles clasificaciones de las drogas de abuso, pero la más aceptada por los profesionales que trabajan en este campo es aquella que las ordena en función de sus efectos sobre el sistema nervioso central. Según esta clasificación, las drogas pueden ser:
Drogas estimulantes del sistema nervioso central
Cocaína
Anfetaminas y sus derivados
Tabaco
Drogas depresoras del sistema nervioso central
Derivados del opio, como la heroína o la metadona
Alcoholismo
Derivados del cannabis, como la marihuana o el hachís
Benzodiazepinas
Barbitúricos
Drogas alucinógenas
Derivados del cannabis, como la marihuana o el hachís, cuando se administran a dosis muy elevadas
LSD y otros derivados del ácido lisérgico
Ciertos hongos