- Si recibió alguna vez transfusión de sangre, o si por el contrario, el paciente está en contra de las transfusiones de sangre por razones religiosas o de otra índole, aunque su vida esté en peligro.
- Si sufre de tensión alta, de ictericia, de depresión o de otros problemas psiquiátricos.
- Debe informar si anteriormente tuvo alguna reacción adversa a la anestesia, o si alguien de su familia ha tenido problemas con la anestesia en el pasado. Algunas reacciones alérgicas a la anestesia pueden ser hereditarias.
- Si tiene problemas con los ronquidos, si tiene algún diente flojo o se ha hecho algún trabajo dental tales como puentes o coronas.
- Si está tomando medicamentos prescritos o de venta libre como aspirina o ibuprofeno (estos medicamentos podrían causar una reacción adversa con la anestesia o podrían provocar una hemorragia masiva durante la operación.
- Si es alérgico a cualquier medicamento o alimento (como los huevos).
- La paciente debe informar al médico si existe la posibilidad de que pueda estar embarazada, si este es el caso se tomarán todas la medidas de precaución necesarias durante la cirugía.
Existe un pequeño riesgo de que ocurra infección en los pulmones, derrame cerebral, ataques cardíacos y posiblemente la muerte durante o después del uso de la anestesia. Estos riesgos son muy pequeños y más probables en personas mayores y en pacientes que tienen problemas médicos o un historial previo de derrame cerebral o ataque cardíaco.
Nausea y vómitos podrían ocurrir después de la cirugía. Esto se suele tratar con el uso de medicamentos antieméticos.