Kiwi: gran valor alimenticio

El kiwi es un fruto exótico, originario de China, de la que toma parte de su nombre científico, chinensis. En aquel país es muy abundante y se le conoce con el nombre de yang-tao que significa <<fruta del río Yang>>. En 1845, una misión científica descubre una hermosa liana trepadora de bellas flores, y a principios de siglo es introducida en Inglaterra primero y después en Nueva Zelanda, como planta ornamental.

Su nombre común, kiwi, lo recibe por causa de la semejanza que su fruto tiene con el cuerpo de una ave neozelandesa no voladora, que figura en el emblema nacional del país. Nueva Zelanda, junto con California, son las dos zonas productoras de kiwi más importantes del mundo. El kiwi se da en climas húmedos cuya temperatura oscila de los 25ºC hasta temperaturas bajo cero, sin llegar a heladas fuertes.El fruto tiene forma cilíndrica con los lados redondeados, piel color pardo muy oscuro y una fina pelusilla que le da un toque aterciopelado. El tamaño varía, alcanzando el del puño de una persona.

Su pulpa de color verdosa con estrías blanquecino rojizas y gran cantidad de diminutas semillas. Su sabor es agridulce, sabroso, agradable al paladar cuando se lo consume en su punto. Estando algo verde, resulta algo leñoso y ácido, si está pasado, es blando y excesivamente dulzón, hasta empalagoso. Se encuentra en su punto de sazón cuando pierde espontáneamente el pedúnculo y ofrece su piel una ligera elasticidad al tacto.

Colocados en lugares frescos, los kiwis se conservan mucho tiempo siempre que estén protegidos de la deshidratación mediante bolsas de polietileno. Para madurarlos, se colocan en una bolsa de polietileno a una temperatura entre 18º y 20º C con una manzana olorosa y en ocho o diez días están en sazón. La manzana no es necesario mantenerla más allá de un par de días, de este modo se evita la maduración muy rápida.

Su valor alimenticio es muy elevado pues contiene proteínas, glúcidos, vitaminas A, B1 y C. Es uno de los grandes frutos proveedores de vitamina C, superior a la mayoría de los cítricos. Su contenido en vitamina C es tres veces superior al limón, cuatro más que la naranja, diez más que el pomelo. Es muy diurético y bajo en valor calórico, 40 a 60 calorías según el tamaño del fruto. Comparándolo con la manzana, la reina de las frutas, es cuatro veces más rico en proteínas, cuatro más en fósforo, diez más en calcio, y cinco más en hierro.

Es muy recomendable para los niños, las personas que están convalecientes y los estudiantes, por su alto contenido en calcio, fósforo, magnesio y hierro. El consumo de un kiwi por día suple las necesidades diarias de una persona en vitamina C. Aún más, puesto que es un producto que viene en la época del frío, es aconsejable su consumo como medida preventiva contra catarros y trastornos propios del período invernal. El kiwi es algo laxante, por lo que resulta muy beneficioso a tantas personas que padecen de estreñimiento.