Los Medinas del Flamenco

Eduardo Ternero - sábado, 20 de noviembre de 2021

Siempre habíamos creído que el alias de los cantaores apodados Medina les venía de ser oriundos del pueblo que así se denomina. En todas las épocas ha sido una cuestión usual poner como sobrenombre a un artista, del flamenco o cualquier otro arte, con el nombre  de su tierra de origen: Niño de Jerez, Niño de Marchena, Canario de Álora, Diego del Gastor, Niña de la Puebla, Pericón de Cádiz…, por ello no es de extrañar que todos creyéramos que Medina el “Viejo” y “Niño de Medina” fuesen oriundos de Medina Sidonia. En este caso no es así. Manuel Bohórquez, en sus investigaciones, ha podido descifrar la incógnita de los Medina del flamenco: Medina el “Viejo” no se llamaba José Rodríguez Concepción  como se creía sino José Medina Trujillo. Había nacido en 1856 en Jerez  y no en Arcos de la Frontera como se afirmaba. Era hijo del zapatero José Medina San Tomé, natural del Puerto de Santa María y de la jerezana Catalina Trujillo Peralta; además su estirpe de antepasados se repartía por toda la geografía andaluza. Siendo aún muy joven, José Medina, el “Viejo”, se iría a vivir a Sevilla donde actuó en varios cafés. Poco más tarde marcharía a Madrid, donde alternaría con Juan Breva, Antonio Revuelta,  el Canario de Álora, María Vargas la “Macarrona”... Se ha llegado a estas conclusiones por ser el mismo que aparece en las crónicas de la prensa madrileña de junio de 1885, por un altercado ocurrido en la capital española. Se trataba de   José Medina Trujillo (Medina el “Viejo”),  que era reclamado por la justicia para el pago de una multa,  al igual que su guitarrista Manuel Venegas y el bailaor Joaquín López. Los tres estaban implicados  en una reyerta con lesiones a otra persona. 

Siguiendo con las investigaciones realizadas por Bohórquez, hemos podido conocer por qué Medina el “Viejo” y Niño de Medina no compartían los mismos apellidos y sin embargo  se identificaban con los mismos estilos y dulzura en el cante. Era vox populi, que José Medina al que hemos puesto de sobrenombre el “Viejo” – para diferenciarlo del Niño de Medina –, tuvo un affaire  con Manuela de la Rosa Linares que sería la madre de José María Rodríguez de la Rosa “Niño de Medina”, cuyos apellidos, como podemos ver, no concuerdan con los de su supuesto padre Medina Trujillo el “Viejo”, ya que sería un hijo nacido de la relación extramatrimonial de su madre. Entendemos que con los medios científicos del XIX, sería difícil demostrar la veracidad y paternidad de los hechos. El caso es que,  a pesar de tener el apellido Rodríguez del marido de Manuela, todo Jerez  murmuraba y reconocía a aquel niño como  hijo de Medina el “Viejo” y por ello se le empezó a denominar  “Niño de Medina”. 

José Medina el “Viejo”, sería un gran cantaor y un gran bailaor en su época, sobre todo por peteneras, un palo que muchos de los cantaores de las generaciones posteriores fueron adoptando como Chacón, La Niña de los peines o Pepe el de la Matrona, entre muchos.  Se conoce que por Madrid estuvo durante muchos años, ya que en 1894 participó en un festival de la capital en el Café del Liceu Ríus, situado en la calle Atocha y que más tarde pasó a llamarse Salón Variedades. 

En Madrid estuvo hasta que las fuerzas le sostuvieron y los cafés no le contrataban. Después se sabe que aparecía por tabancos jerezanos y tascas sevillanas, al amparo de cantaores que compartieron gloria con él en tiempos pretéritos como Chacón o el Portugués. No se sabe con certeza el año de su fallecimiento, posiblemente fuese a inicios del XX.

El nombre del “Niño de Medina” era José María Rodríguez de la Rosa. El sobrenombre de Medina, como hemos apuntado, era el apelativo que el pueblo de Jerez le puso al conocer la relación que su madre tuvo con José Medina el “Viejo”. Se cree que Niño de Medina nació en Arcos de la Frontera en 1889. Desde un principio se le conocieron dotes de buen cantaor del estilo de su padre natural, algo que continuaría a lo largo de su vida, ya que siguió la escuela del “Viejo” en cuanto a la forma de los cantes por bulerías  y sobre todo  por peteneras,  palo que le haría famoso.

El Niño de Medina, estudió, según el mismo comentaría en una entrevista en 1913, hasta cuarto de bachiller, pero tuvo que dejar los estudios a la muerte de su padre de acogida y ponerse a trabajar en una sombrerería. Allí,  el dueño le escuchó cantar y lo llevó engañado para que cantase ante el público en el café Novedades, donde le aplaudieron con fervor los aficionados que asistían. El dueño del local le contrató y desde aquel momento empezó su carrera artística,  compartiendo escenario con todos los grandes del flamenco de la época. A partir de aquí recorrería toda la geografía española. Ese mismo año, 1913,  aparecía en la prensa cantando en el Salón Café España de Almería. 

Durante muchos años se mantuvo en el candelero, siendo maestro de muchos cantaores que siguieron cantando su estilo de cante sobre todo  por peteneras, aunque él diría que  sus cantes favoritos eran las malagueñas las seguiriyas y las guajiras. Durante la llamada Época de Oro del flamenco grabó varios discos a la par que cosechó numerosos triunfos en los escenarios donde actuaba, que fueron muchos a lo largo de las tres primeras décadas del XX. 

Cuentan, quienes le conocieron, que el Niño de Medina, cuando tuvo noticias de quien era su verdadero padre y decidió irse a vivir a Sevilla, donde al parecer había vuelto,  Medina el “Viejo”, al haber caído en el olvido del público madrileño. El Niño de Medina se hizo muy querido por la casa de los Pavones, sobre todo de Arturo, los cuales, siendo aún muy jóvenes, solían acudir  a ver al decrépito José Medina el “Viejo” para que les enseñase su forma de decir los cantes, algo que no solo aprovechó su hijo sino que también Arturo enseñaría a su hermana Pastora. 

El Niño Medina murió en el 1939, en Sevilla, en un estado lamentable de pobreza. También sería un año muy trágico en la historia de España: tras la sangrienta Guerra Civil Española, comenzaba la Dictadura del General Franco. 

Imágenes: (Medina “El Viejo”, “El Niño Medina”, “Los Medina” con unos amigos).