1993 - Acuerdos de Oslo

Resumen

Fuentes

Sobre este tema es recomendable leer:  The Missing Peace: The Inside Story of the Fight for Middle East Peace (Dennis Ross, 2004), del principal negociador/mediador useño en las conversaciones israelo-palestinas. The Jewish State : The Struggle for Israel's Soul (Yoram Hazony, 2000), que analiza las raíces de lo que Daniel Pipes llama la 'locura israelí de Oslo, y The Oslo Syndrome: Delusions of a People Under Siege (Kenneth Levin, 2005), que complementa el anterior analizando las claves de los errores israelíes.

Primeros pasos del camino a Oslo

En What Did (and Didn't) Happen in Room 16 of the American Colony Hotel (2019), Martin Kramer refuta con su finura habitual la afirmación de que en una reunión celebrada en 1992 en Jerusalé,n en la Habitación 16 del Hotel American Colony, se diera el primer paso del camino a Oslo. Es relevante lo que expone porque en esa reunión los palestinos están representados por el más prestigioso de ellos en el interior, el jerosolimitano Faisal Husseini, y no por hombres del exterior, de la OLP de Arafat, por entonces extrañado y "encerrado" en Túnez.

En esa reunión parecía abrirse la posibilidad de negociaciones entre Israel y los palestinos del interior, pero inmediatamente Arafat cierra la puerta a Husseini, obligando a las demás partes a mantenerlo apartado y desinformado, e impone a su gente, con quien finalmente se desarrollan las negociaciones que llevan a Oslo.

¿Habría sido la historia muy diferente de seguirse el otro camino?, se pregunta Kramer. Pues muy probablemente sí.

Gobierno Rabin

En las elecciones israelíes de 1992 se impuso el Partido Laborista liderado por Itzjak Rabín. El cambio de rumbo que impondría Rabin en la política internacional israelí se notó inmediatamente.

Asentamientos

En la primera reunión del gobierno, el 19 de julio de 1992,  se decidió congelar parcialmente la construcción de los asentamientos judíos en Judea, Samaria y Gaza.

El gobierno decidió modificar el orden de preferencias para los distintos poblados del país. Los “asentamientos” pasarían a un segundo plano, invirtiéndose más en las ciudades en desarrollo dentro de la línea verde.

Altos del Golán

Iztjak Rabin anunció en setiembre de 1992 que su gobierno estaría dispuesto a negociar con Siria el futuro de las alturas del Golán. Miles de manifestantes disgustados se reunieron en el aeropuerto Ben-Gurión, minutos antes de la partida de Rabin a los Estados Unidos, en lo que sería su primera visita oficial como Primer Ministro durante su segundo mandato (el primero fue entre 1974-1977). 

Otros vientos políticos soplaban desde Jerusalén.En reuniones secretas, se producían transformaciones históricas. 

OLP

La dirigencia de la OLP había salido de la Guerra del Golfo muy debilitada. Los países ricos del medio oriente, en especial Arabia Saudita, se mostraban molestos por el apoyo de Yasser Arafat a Saddam Hussein.

De esta forma, los castigos económicos no tardaron en llegar. Nuevamente se demostraba que Yasser Arafat no perdía oportunidad para perder oportunidades.

La OLP sufría un debilitamiento constante en momentos en que los grupos fundamentalistas (Hamás, Yihad Islámica), realizaban una tarea social y política atrayendo a su seno a la masa palestina, actuando en la zona. Sin dinero y además, alejado de Palestina desde su exilio en Túnez, la posición de Yasser Arafat era definida por los medios de comunicación como un "coma político".

Las tareas sociales de los islamistas convivían con sus acciones terroristas en suelo israelí. El secuestro y posterior asesinato del soldado Nissim Toledano provocó la deportación de más de 400 terroristas hacia el sur del Líbano. Los terroristas pertenecían a las fracciones fundamentalistas Hamás y Yihad Islámica.

En el Líbano, y aprovechándose del revuelo periodístico a su alrededor, los líderes islamistas se granjearon el cariño de las opiniones públicas de occidente mientras estudiaban de sus maestros del Jizboolá las técnicas para realizar atentados suicidas. La inmensa mayoría de los deportados islamistas regresaron a Cisjordania y Gaza tras la firma de los Acuerdos de Oslo.

Oslo

En la ciudad de Oslo (Noruega) se venían reuniendo secretamente una comitiva de la OLP y otra israelí liderada por el diputado laborista Iosi Beilin, mano derecha del canciller Shimón Peres, y otros diplomáticos del Ministerio de Relaciones Exteriores.

El 15 de agosto de 2013, en una entrevista para Israel Radio Reshet Bet (Hakol Diburim), que en mi opinión hay que tomarse con mucha cautela, Iosi Beilin afirma que llevó adelante las negociaciones con la OLP que condujeron a los Acuerdos de Oslo sin autorización ni conocimiento del Primer Ministro Yitzjak Rabin, a quien solo se le puso al tanto tras la segunda ronda de conversaciones en febrero de 1993 cuando los participantes lograron redactar un documento de trabajo.

Consecuencia de estos tratos secretos, el 9 de setiembre de 1993 Itzjak Rabin recibió una carta de Yaser Arafat en la que el líder palestino se comprometía a respetar los siguientes puntos: 

Estas declaraciones respondían a los principios adoptados por el Partido Laborista en el marco de la fórmula "Shem-Tov-Iariv". Según dicha fórmula, la OLP pasaba a ser considerada por el gobierno israelí como la única representante legítima del pueblo palestino.

La oposición dudaba de las intenciones de Arafat. La derecha israelí argumentaba que Arafat seguía fomentando su "Plan de Pasos" para destruir a Israel tras la consecución de un estado independiente por vía diplomática. La moderación de Arafat era producto de una crisis política interna del liderazgo palestino pero no se trataba de un cambio ideológico real, afirmaban.

Otros, afirmaban que las negociaciones con la OLP provocarían injustificadas renuncias en Judea y Samaria, que pertenecían únicamente al pueblo judío.

El gobierno oficializó su acercamiento a la OLP, anulando la ley que prohibía los encuentros con la Organización para la Liberación de Palestina.

En las reuniones de Oslo se llegaron a acuerdos más profundos en lo que respecta a la solución del conflicto entre las partes. 

Oslo en la Knéset

Tras su firma en Washington, los Acuerdos de Oslo fueron discutidos para su aprobación en la Knesset. 

En dichas votaciones la coalición de gobierno sumó 61 votos frente a 50 que se oponían al pacto. Ocho miembros de la Knesset se abstuvieron, entre ellos, tres diputados del Likud entre los que figuraba el alcalde de Tel-Aviv Roni Milo.

Los acuerdos de Oslo no contaban con el apoyo masivo de la opinión pública israelí. Por el contrario, los tratos de Paz con el Reino Hashemita de Jordania contaron con la aprobación de casi un 100% de la población y del Parlamento de Israel.

Status Final en los Acuerdos de Oslo

Fuente: ADL

La Declaración de Principios (DOP) firmada por el Primer Ministro Yitzhak Rabin y el Presidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) Yaser Arafat el 13 de septiembre de 1993, consistía en un calendario de dos fases cuidadosamente estudiado. Primero, un período "intermedio" o "de transición" de 5 años durante el que Israel se iría retirando incrementalmente de los centros palestinos en Cisjordania y la Franja de Gaza, transfiriendo los poderes administrativos a una Autoridad Palestina que se elegiría pronto. Segundo, las negociaciones para definir el "status final" o "permanente", que habrían de comenzar al inicio del tercer año del período intermedio. Así dice la DOP:

Permanent status negotiations will commence as soon as possible, but not later than the beginning of the third year of the interim period, between the Government of Israel and the Palestinian people representatives.

It is understood that these negotiations shall cover remaining issues, including: Jerusalem, refugees, settlements, security arrangements, borders, relations and cooperation with other neighbors, and other issues of common interest.

The two parties agree that the outcome of the permanent status negotiations should not be prejudiced or preempted by agreements reached for the interim period.(Article V [1-3])

Esta última cláusula se amplía en el Acuerdo Intermedio sobre Cisjordania y la Franja de Gaza Israelo-Palestino, conocido como "Oslo II", de 28 de septiembre de 1995, que dice:

Nothing in this Agreement shall prejudice or preempt the outcome of the negotiations on the permanent status to be conducted pursuant to the DOP. Neither Party shall be deemed, by virtue of having entered into this Agreement, to have renounced or waived any of its existing rights, claims or positions. (Article XXXI [6])

Conforme al calendario previsto, las negociaciones sobre el status final debían comenzar no después de mayo de 1996 (inicio del tercer año del período intermedio) y terminar con el fin de dicho período en mayo de 1999. En mayo de 1996, semanas antes de las elecciones israelíes, los negociadores israelíes y palestinos se reunieron para iniciar las negociaciones sobre el status final, aunque ambos entendieron que las auténticas negociaciones no podrían empezar hasta después de las elecciones israelíes. Tras la elección en éstas de un gobierno del Likud dirigido por Benyamin Netaniahu ha habido referencias regulares a las negociaciones sobre el status final pero las mismas no se han retomado públicamente.

Repercusión de Oslo en la percepción y trato de NNUU a Israel: una atmósfera más cálida

Una vez comenzó el proceso de paz del Oriente Medio con la firma por parte de israelíes y palestinos de la histórica Declaración de Principios en 1993 se hizo evidente una clara disminución en el número de condenas contra Israel en las Naciones Unidas. 

(En la imagen, mapa de la Autonomía Palestina tras la firma de Oslo A)Por primera vez la Comisión de Derechos Humanos condenó el antisemitismo como una forma de racismo. Luego, en 1994, cuando el Ministro de Relaciones Exteriores de Israel Shimon Peres se dirigió a la Asamblea General, los únicos que no asistieron fueron los representantes de Irán. Esto en claro contraste con la asistencia de años anteriores cuando era común que los miembros árabes abandonaran el recinto tan pronto un israelí subía al podio. 

La participación de Israel en las operaciones de la ONU, de las que había estado excluido hasta entonces, también aumentó. En junio de 1993, Israel fue nominado por primera vez para un comité en la ONU, el Comité de Información. En 1994, los israelíes participaron en la misión de paz de la ONU en Angola y viajaron a Sur África como parte de un equipo de la ONU para monitorear las primeras elecciones democráticas de dicho país. En la misma época, los israelíes comenzaron a ser elegidos en cargos importantes de la ONU, tales como el alto tribunal administrativo en La Haya, la vicepresidencia del Comité Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud y el Comité de Derechos Humanos. 

Asimismo, se realizaron esfuerzos para enmendar una serie de resoluciones anti israelíes adoptadas previamente. En 1992, la Asamblea General aprobó 29 resoluciones contra Israel pero, en los años siguientes, siete fueron eliminadas o consolidadas, y cuatro fueron modificadas a favor de Israel. En 1995, la Asamblea General adoptó 18 resoluciones sobre el Medio Oriente, ocho de las cuales fueron redactadas nuevamente para evitar condenar a Israel. 

En 1993, como parte del plan de revisión de resoluciones anti-Israel, la ONU enmendó el grupo de resoluciones adoptadas cada año por la Asamblea General conocidas como la Cuestión de Palestina:

Aun más, entre 1993 y 1995, el Consejo de Seguridad jamás condenó directamente a Israel. Durante dicho periodo, el Consejo de Seguridad denunció por primera vez el terrorismo contra Israel. 

La principal resolución adoptada durante esta tendencia favorable hacia Israel fue la del 14 de diciembre de 1993, cuando 155 estados aprobaron la Declaración de Principios firmada por israelíes y palestinos, el acuerdo de paz entre Israel y Jordania y concedieron total apoyo a los logros del proceso de paz. Esta resolución fue el primer llamado de la ONU a la paz del Medio Oriente en la que no se criticaba a Israel. De hecho, muchos consideraron esta mejoría entre Israel y la comunidad internacional como un apoyo real de la ONU a algunas políticas del gobierno israelí. En octubre de 1993, por primera vez desde 1981, los estados árabes de la ONU no cuestionaron la presencia de Israel en la Asamblea General.

En 1995 los prejuicios resurgen. Después de varios años de creciente participación israelí y aceptación en las Naciones Unidas, Israel volvió a convertirse en el blanco de condenas y severas críticas sobre una serie de temas incluyendo el estatus de Jerusalén, las operaciones israelíes en Líbano, su política con respecto a los palestinos, el proceso de paz y los proyectos israelíes de vivienda sobre la Línea Verde.

Documentos

Fuentes: Embajada de EEUU en Israel, Ministerio de AAEE de Israel y The Avalon Project Yale Law School