6. Última resistencia de los judíos en Masadá (73)

Matzadá o Masadá (מצדה)

Fuentes: Ministerio de AAEE de Israel - The Last Days and Hours at Masada (Ehud Netzer) - La Guerra Judía (libro VII, capítulos 8 y 9, Josefo)

Aunque el Segundo Templo fue destruido en el año 70 dC y Jerusalén quemada hasta los cimientos, los judíos y el judaísmo sobrevivieron. Reconstituyeron el Sanedrín, su ente judicial y legislativo supremo, sucesor de La Gran Knéset, en Yavne (70) y luego en Tiberíades.

La pequeña comunidad judía se recobró poco a poco, reforzada de vez en cuando por exiliados que regresaban. La vida institucional y comunitaria se renovó, los sacerdotes fueron reemplazados por rabinos y la sinagoga pasó a ser el centro de las comunidades judías, como lo evidencian las ruinas de sinagogas encontradas en Cafarnaún, Korazín, Baram, Gamla y otros lugares.

La Halajá (ley religiosa) pasó a ser el lazo común entre los judíos y se transmitió de generación en generación.

Unos mil hombres, mujeres y niños judíos supervivientes de la caída de Jerusalén, loa zelotes, liderados por Eleazar Ben Ya’ir, ocuparon y fortificaron el complejo del palacio de Herodes en Masada, en una montaña-meseta con forma casi de diamante cercana a la ribera occidental del Mar Muerto, en el desierto de Judea, y, bajo su mando, durante tres años resistieron a los romanos, que levantaron hasta 8 campamentos de sitio a su alrededor.

Cuando los romanos finalmente entraron dentro de sus muros bajo el mando del general Flavio Silva descubrieron que los resistentes habían preferido darse muerte con sus propias manos antes que ser sometidos a esclavitud; solo sobrevivieron dos mujeres y cinco niños.

En el enlace de Ehud Netzer de arriba te lo cuentan con bastante detalle según lo que hoy sabemos. El relato de Josefo es contemporáneo a los hechos, aunque él mismo no fuera testigo.