Por Ernesto Garcia Marin
11/9/2015 10:21 AM
EGMConsult
Visita a los astilleros de IHI en Osaka Japón 1973, foto EG Marin
En 1972 me embarque a Tokio a estudiar administración y tecnología de alimentos. El organismo mexicano que solventó esta educación fue el recién formado Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, CONACYT, y el organismo receptor en Japón fue el AOTS.
La educación fue integral, no solo de salón de clase y laboratorio, sino también de trabajo en situ en fábricas y centros de investigación, así como viajes de estudios a centros turísticos, y fábricas de automóviles, barcos, fundidoras, plástico inyectado, escuelas y universidades.
Por parte de AOTS la capacitación recibió una subvención del Grupo NISHIREI KK, con quien tuve oportunidad de estudiar y conocer los detalles de la industria alimentaria japonesa, incluyendo sus estándares y análisis de control de calidad, y el después llamado control de calidad total, justo a tiempo y mejora continua (KAIZEN).
Los programas de estudio permiten a los participantes ver ejemplos prácticos de know-how del cual aprenden por medio de lecciones y promover conciencia a través del propio descubrimiento y conocer no solo la cultura corporativa de Japón, sino además del país en general, incluyendo su sociedad y la forma de pensar de sus habitantes.
La principal apreciación de este proceso es el conocer el cambio de paradigma de la mentalidad la sociedad japonesa, que de ser imperialistas y extremadamente nacionalists, en el sentido de dominio territorial, se convierte en una sociedad ávida de imperialismo del comercio mundial. En los años que estuve me di cuenta del interés de los estudiantes japoneses locales por viajar y conocer culturas foráneas e involucrarse en las cuestiones del planeta. Y también del interés de los estudiantes mexicanos de ampliar su visión y salir del estricto nacionalismo muy mexicano y ser más internacionales.
Estoy agradecido por este esfuerzo de gobiernos e industrias que me dieron la oportunidad de asomarme a la cultura oriental, conocer las tecnologías de avanzada, visualizar la visión de un mundo más integrado y que al final del día dar cuenta de la cultura de Japón que al fin de de la humanidad toda.
AOTS fue establecida en 1959 con el apoyo del Departamento de la Industria y Comercio Internacional (actualmente el Ministerio de Economía, Comercio e Industria) como la primera organización de cooperación técnica privada en Japón.
No lo dicen pero su razón de ser que subyace es la influencia del comercio e industria japonés particularmente en el sudeste de Asia, desde Vietnam hasta India.
En México llego fuerte la moda de Japón porque como comentó el ex presidente Luis Echevarría Álvarez un corto tiempo después de haber tomado el poder "Japón es un país muy importante con el cual tenemos que estrechar vínculos". Antes de don Luis, el ex presidente Gustavo Díaz Ordaz, asimismo había dado visos de acercamiento a Japón. En su rancho en el estado de Puebla inició una agroindustria de producción de floricultura, para lo cual trajo al Sr. Yamamoto como técnico del negocio, y Yamamoto después se quedo en la ciudad de México fabricando invernaderos para este fin y sembrando flores Nochebuena y otras en el estado de Morelos, Yautepec. (Eventualmente yo contrate a la empresa de Yamamoto, en 1985, para que construyera los invernaderos de resistencia de vientos de más de 120 millas por hora, para los tanques de cría de langostino en el Centro de Vista Hermosa, Soto la Marina, Tamaulipas).
La Asociación para Becas Técnicas en el Extranjero ( The Association for Overseas Technical Scholarship), conocida como AOTS, es una organización de desarrollo de recursos humanos que promueve la cooperación a través del entrenamiento dentro y fuera de Japón.
En el 2013, AOTS se unió a JODC para formar HIDA. Por el tamaño de la organización y su historia, muchas de las instalaciones de HIDA se siguen llamando AOTS, por su gran identificación con sus miembros y la comunidad internacional. Anualmente recibe hasta 6,000 becarios en Japón, sumando aproximadamente 155,000 beneficiarios de los programas impartidos en territorio nipón.
Muchos de los participantes - que han sido ingenieros, administradores y dueños de negocios - participan en varios campos industriales.de estos programas han contribuido al desarrollo industrial de los países de origen de cada ex becario.
En cada país los ex becarios organizan sociedades que asegura aumentar la red de contactos y su expansión para lograr que los mejores candidatos posibles tengan acceso a los programas AOTS.
México es el segundo país -Brasil el primero - en América Latina que más participantes tiene con los programas de entrenamiento. Hay asociación AOTS en la ciudad de Mexico y en Monterrey fundadas en 1986. Estas organizaciones promueven becas e integran seminarios, talleres y pláticas de expertos japoneses en Calidad, Productividad y Administración.
Japón es un país con el cual México recientemente cumple 400 años de relaciones diplomáticas. Japón es la tercera potencia económica del mundo y México la décima.