Luisa a Jesús en la tercera Hora de tu Pasión y en Virtud de la Divina Voluntad, oremos:


Jesús, en cada acto Tuyo me tienes presente

y me haces un Bien especial


"Oh Jesús, nada haces que no represente a lo vivo tu dolorosísima Pasión, que tienes siempre presente en la mente, en el corazón, en todo, y esto me enseña que si también yo tuviera siempre delante a mi mente y en el corazón el pensamiento de tu Pasión, jamás me negarías el alimento de tu amor. ¡Cuánto te agradezco por esto!

Oh mi Jesús, ningún acto se te escapa en que no me tengas presente y con el que no intentes hacerme un bien especial, por eso te ruego que tu Pasión esté siempre en mi mente, en mi corazón, en mis miradas, en mis obras, en mis pasos, a fin de que a donde quiera que me dirija, dentro y fuera de mí, te encuentre siempre presente a mí, y dame la gracia de que jamás olvide lo que has sufrido y padecido por mí. Esta sea para mí un imán, que atrayendo todo mi ser en Ti, no me deje alejarme de Ti".