"El hombre tiene necesidad de purificaciones fuertes, de otra manera no se desengaña, y por eso arrollaré todo para renovar todo, haré cosas imprevistas, castigos nuevos de los cuales el hombre no podrá encontrar la causa, y esto para confundirlo,  pero tú no temas, por amor tuyo disminuiré alguna cosa.  

Libro de Cielo Vol. 14-30 (1-3) 

Divina Misericordia

 De los escritos de la S. D. Luisa PiccarretaVol. 14-30 (1-3) Mayo 19, 1922

 

Continuando mi habitual estado, mi siempre amable Jesús se hacía ver dentro de mi interior, en el cual abriéndose una como puertecita, apoyaba sus brazos y asomaba su cabeza para ver qué cosa hacían las otras criaturas.  

Yo miraba junto con Jesús, ¿pero quién puede decir los males que se veían, las ofensas que se hacían y los castigos que lloverán?  Era horrorizante esta vista tan dolorosa; y también veía a nuestro pobre país golpeado por el flagelo divino.  

Entonces yo, viendo que Jesús miraba con una ternura de amor y de dolor, mientras que días antes me había sido imposible hacerlo dirigir su rostro y su mirada hacia las criaturas, le he dicho:

“Amor mío y vida mía, mira cuánto sufren nuestros queridos hermanos, ¿no quieres tener piedad?  Con cuántas ganas sufriría todo con tal de hacer que ellos fueran perdonados.  Mira, esto es un deber que me impone el estado de víctima, tu imitación; ¿no sufriste todo por nosotros?  ¿Y cómo quieres que no sufra yo para librarlos de los castigos, y que no te imite, mientras que Tú sufriste tanto?”  Y Jesús interrumpiendo mi hablar me ha dicho:

“Ah, hija mía, ha llegado a tanto el hombre que no puedo mirarlo sino con horror, y si lo miro es sólo desde dentro de ti, porque encontrando en ti todas las ternuras de mi Humanidad, mis oraciones, me siento movido a mirarlo con compasión, y por amor tuyo preservaré sus vidas.  

El hombre tiene necesidad de purificaciones fuertes, de otra manera no se desengaña, y por eso arrollaré todo para renovar todo, haré cosas imprevistas, castigos nuevos de los cuales el hombre no podrá encontrar la causa, y esto para confundirlo, pero tú no temas, por amor tuyo disminuiré alguna cosa.  

Siento en ti como sentía en mi Humanidad la corriente de las comunicaciones con todas las criaturas, y por esto me es duro no darte y no contentarte en nada”.