"Diferencia entre vivir unido con Jesús, y vivir en el Divino Querer"
Vol. 12-41
Vol. 12-41
De los escritos de la S. D. Luisa Piccarreta
Vol. 12-41 Abril 8, 1918
(1) Volviendo sobre el punto del vivir en el Divino Querer, se me había dicho que es como vivir en el estado de unión con Dios, y mi siempre amable Jesús al venir me ha dicho:
(2) “Hija mía, hay gran diferencia entre el vivir unido Conmigo, y vivir en mi Querer”.
(2) Y mientras esto decía, me ha extendido los brazos y me ha dicho:
(2) “Ven en mi Querer aunque sea por un solo instante y verás la gran diferencia”.
(2) Yo me he encontrado en Jesús, mi pequeño átomo nadaba en el Querer Eterno, y como este Querer Eterno
es un acto solo que contiene todos los actos juntos, pasados, presentes y futuros, yo, estando en el Querer Eterno tomaba parte en aquel acto único que contiene todos los actos, por cuanto a criatura es posible. Yo tomaba parte también en los actos que no existen aún y que deberán existir hasta el fin de los siglos, y hasta que Dios sea Dios, y también por éstos yo lo amaba, lo agradecía, lo bendecía, etc., no había ni un solo acto que se me escapara, y ahora tomaba el amor del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, lo hacía mío, como era mío su Querer, y lo daba a Ellos como mío. Cómo estaba contenta por poder darles el amor de Ellos como mío, y porque Ellos encontraban su pleno contento y su desahogo completo al recibir de mí su amor como mío; ¿pero quién puede decirlo todo? Me faltan las palabras. Entonces el bendito Jesús me ha dicho:
(2) “¿Has visto qué cosa es vivir en mi Querer?
Es desaparecer, es entrar en el ámbito de la Eternidad;
es penetrar en la omnividencia del Eterno, en la mente increada, y tomar parte en todo por cuanto a criatura es posible, y en cada acto divino;
es disfrutar aún estando en la tierra de todas las cualidades divinas;
es odiar el mal en modo divino;
es expandirse a todos sin agotarse, porque la Voluntad que anima a esta criatura es Divina;
es la santidad aún no conocida, que haré conocer, que pondrá el último adorno y el más bello y el más refulgente de todas las demás santidades, y será corona y cumplimiento de todas ellas.
(2) Ahora, vivir unido Conmigo no es desaparecer, se ven dos seres juntos, y quien no desaparece no puede entrar en el ámbito de la eternidad para tomar parte en todos los actos divinos.
Pondera bien y verás la gran diferencia”.
Fiat Divina Voluntad