“Este es mi mandamiento: Ámense los unos a los otros, como yo los he amado” (Jn: 15, 12)


“Esta es la prerrogativa de nuestro Amor, todo lo que ha salido de Nosotros, amarlo siempre”

  De los escritos de la S. D. Luisa Piccarreta

Vol. 33, cap. 46 (2)  Septiembre 28, 1935


 “Hija mía bendita, hazme desahogar mi Amor, escúchame, tú debes saber que la criatura ha estado siempre con Nosotros en nuestra mente divina, ha tenido siempre su puesto en el seno de su Creador, y ‘ab eterno’ era adornado cada acto suyo, pensamiento, palabra, obra y paso, con un Amor nuestro especial. Así que en cada acto suyo está la cadena de tantos actos nuestros de amor, que envuelve el acto, el pensamiento, etc., de la criatura, y este nuestro Amor da vida, alimenta las repeticiones de todos los actos de ella.

Y ¡oh! cómo es bella en nuestra mente divina, porque ella viene formada por el soplo continuo de nuestro Amor, amor querido, no forzado, amor no de necesidad, sino más bien Virtud generativa de nuestro Ser Supremo, el cual genera siempre y pone su Amor continuo sobre sus obras, virtud de nuestro Fiat Omnipotente que si no generase nuevas obras y no tuviese el acto continuo de amar, se sentiría como sofocado en sus llamas y paralizado en su movimiento continuo. Ahora, queriendo sacar a la criatura de nuestro seno divino, le hacemos hacer su pequeño camino en el tiempo, y nuestro Amor no deja de asaltar, investir, cortejar todos sus actos con su Amor especial, 

si esto faltara, faltaría la fuerza generativa, vivificadora y motriz del ser humano.

¡Oh! si las criaturas supieran que en cada pensamiento suyo corre un Amor nuestro distinto, en cada palabra y obra, también en su respiro y latido, ¡oh! cómo nos amarían y no profanarían con actos indignos nuestro Amor tan grande. Mira entonces cómo te ama y te sabe amar tu Jesús, por eso aprende de Mí a amarme. 

Esta es la prerrogativa de nuestro Amor, todo lo que ha salido de Nosotros, amarlo siempre, 

hacer surgir de dentro de nuestro Amor todos los actos de la criatura”. 

Fiat