Divina Misericordia

 De los escritos de la S. D. Luisa PiccarretaVol. 3-104 (2) Agosto 1, 1900Jn 20, 20"les enseñó las manos y el costado" 

"tú estate siempre de frente a mi Humanidad, teniéndola como espejo en el cual limpiarás todas tus manchas" 


AUDIO


 

"haciendo uso de mi misericordia asumí mi Humanidad"

La Humanidad de Jesús es el espejo de la Divinidad

 

“Ante mi Majestad y pureza no hay quien pueda estar de frente, más bien todos están obligados a estar por tierra y golpeados por el fulgor de mi Santidad. El hombre quisiera casi huir de Mí, porque es tal y tanta su miseria, que no tiene valor para sostenerse delante del Ser Divino. 

Entonces haciendo uso de mi misericordia asumí mi Humanidad, la que atenuando los rayos de la Divinidad, es medio para infundir confianza y ánimo al hombre para venir a Mí, el cual poniéndose de frente a mi Humanidad, que expande rayos atenuados de la Divinidad, tiene el bien de poderse purificar, santificar y hasta divinizar en mi misma Humanidad deificada. 

Por eso tú estate siempre de frente a mi Humanidad, teniéndola como espejo en el cual limpiarás todas tus manchas; y no sólo esto, sino como espejo en el cual reflejándote adquirirás la belleza, y poco a poco irás adornándote a semejanza de Mí mismo, porque es propiedad del espejo hacer aparecer dentro de sí la imagen similar a aquella de quien se mira en él; si así es el espejo material, mucho más es el divino, porque mi Humanidad sirve al hombre como espejo para mirar mi Divinidad. 

He aquí por esto que todos los bienes para el hombre derivan de mi Humanidad”.

Fiat Divina Voluntad