De los escritos de la S. D. Luisa PiccarretaVol. 12, cap. 78 enero 25, 1919
La Divina Voluntad es luz, y quien de Ella vive se vuelve luz.
La Divina Voluntad es luz, y quien de Ella vive se vuelve luz.
Jesús habita en quien vive en la Divina Voluntad como lo hizo en su Humanidad
Jesús habita en quien vive en la Divina Voluntad como lo hizo en su Humanidad
... tal vez aquella noche en la que me quería hablar de las desgracias del mundo, y habiéndome comenzado a decir que el corazón del hombre aún está sediento de sangre y que las guerras aún no han terminado, porque la sed de sangre todavía no se apaga en el corazón humano, y yo le dije: “Jesús, siempre me quieres hablar de estas desgracias, hagámoslas a un lado, hablemos de otra cosa”.
... tal vez aquella noche en la que me quería hablar de las desgracias del mundo, y habiéndome comenzado a decir que el corazón del hombre aún está sediento de sangre y que las guerras aún no han terminado, porque la sed de sangre todavía no se apaga en el corazón humano, y yo le dije: “Jesús, siempre me quieres hablar de estas desgracias, hagámoslas a un lado, hablemos de otra cosa”.
Y Él, afligido, hizo silencio.
Y Él, afligido, hizo silencio.
¡Ah! tal vez se ofendió. Vida mía, perdóname, no lo volveré a hacer, pero ven”. Mientras esto y otros desatinos decía, he sentido perder los sentidos y veía dentro de mí a mi dulce Jesús, solo y taciturno que caminaba de un lugar a otro de mi interior, y como si ahora tropezara en un punto, ahora se golpeara en otro.
¡Ah! tal vez se ofendió. Vida mía, perdóname, no lo volveré a hacer, pero ven”. Mientras esto y otros desatinos decía, he sentido perder los sentidos y veía dentro de mí a mi dulce Jesús, solo y taciturno que caminaba de un lugar a otro de mi interior, y como si ahora tropezara en un punto, ahora se golpeara en otro.
"Es desde dentro de ti que divido la suerte del mundo, es tu humanidad que me da reparación"
"Es desde dentro de ti que divido la suerte del mundo, es tu humanidad que me da reparación"
Yo estaba toda confundida y no me atrevía a decirle nada, pero pensaba:
Yo estaba toda confundida y no me atrevía a decirle nada, pero pensaba:
“¿Quién sabe cuántos pecados hay en mí que hacen tropezar a Jesús?”
“¿Quién sabe cuántos pecados hay en mí que hacen tropezar a Jesús?”
Pero Él todo bondad me miraba, parecía cansado y goteaba sudor, y me ha dicho:
Pero Él todo bondad me miraba, parecía cansado y goteaba sudor, y me ha dicho:
“Hija mía, pobre mártir, no de fe sino de amor, mártir no humana sino divina, porque tu más cruel martirio es mi privación, la cual te pone el sello de mártir divina, ¿por qué temes y dudas de mi amor? Y además,
“Hija mía, pobre mártir, no de fe sino de amor, mártir no humana sino divina, porque tu más cruel martirio es mi privación, la cual te pone el sello de mártir divina, ¿por qué temes y dudas de mi amor? Y además,
¿cómo puedo dejarte? Yo habito en ti como en mi Humanidad, y como en Ella encerraba a todo el mundo entero, así lo encierro en ti;
¿cómo puedo dejarte? Yo habito en ti como en mi Humanidad, y como en Ella encerraba a todo el mundo entero, así lo encierro en ti;
¿no has visto que mientras caminaba, ahora tropezaba y ahora me golpeaba? Eran los pecados, las almas malas que encontraba, qué dolor a mi corazón,
¿no has visto que mientras caminaba, ahora tropezaba y ahora me golpeaba? Eran los pecados, las almas malas que encontraba, qué dolor a mi corazón,
es desde dentro de ti que divido la suerte del mundo, es tu humanidad que me da reparación, como hacía mi Humanidad a mi Divinidad.
es desde dentro de ti que divido la suerte del mundo, es tu humanidad que me da reparación, como hacía mi Humanidad a mi Divinidad.
Si mi Divinidad no tuviera a mi Humanidad que le hiciera
Si mi Divinidad no tuviera a mi Humanidad que le hiciera
todas las reparaciones,
todas las reparaciones,
las pobres criaturas no tendrían ninguna salvación, ni en el tiempo ni en la eternidad, y la divina justicia miraría a la criatura ya no como suya, que mereciera la conservación, sino como enemiga que merecería la destrucción.
las pobres criaturas no tendrían ninguna salvación, ni en el tiempo ni en la eternidad, y la divina justicia miraría a la criatura ya no como suya, que mereciera la conservación, sino como enemiga que merecería la destrucción.
Ahora mi Humanidad es gloriosa, y me es necesaria una humanidad
Ahora mi Humanidad es gloriosa, y me es necesaria una humanidad
que pueda dolerse,
que pueda dolerse,
sufrir,
sufrir,
dividir junto Conmigo las penas,
dividir junto Conmigo las penas,
amar junto Conmigo a las almas
amar junto Conmigo a las almas
y poner la vida para salvarlas,
y poner la vida para salvarlas,
y te he escogido a ti, ¿no estás contenta por ello? Por eso quiero decirte todo, mis penas, los castigos que merecen las criaturas,
y te he escogido a ti, ¿no estás contenta por ello? Por eso quiero decirte todo, mis penas, los castigos que merecen las criaturas,
a fin de que en todo tomes parte y hagas una sola cosa Conmigo.
a fin de que en todo tomes parte y hagas una sola cosa Conmigo.
Y es por esto también por lo que te quiero a la altura de mi Voluntad, porque adonde no puedes llegar con tu voluntad, con la mía llegarás a todo lo que conviene al oficio de mi Humanidad;
Y es por esto también por lo que te quiero a la altura de mi Voluntad, porque adonde no puedes llegar con tu voluntad, con la mía llegarás a todo lo que conviene al oficio de mi Humanidad;
por eso no temas más,
por eso no temas más,
no me aflijas con tus penas,
no me aflijas con tus penas,
con los temores de que pueda abandonarte, tengo ya bastante con las demás criaturas; ¿quieres acrecentar mis penas con las tuyas? No, no, está segura, tu Jesús no te deja”.
con los temores de que pueda abandonarte, tengo ya bastante con las demás criaturas; ¿quieres acrecentar mis penas con las tuyas? No, no, está segura, tu Jesús no te deja”.
Después ha regresado de nuevo, haciéndose ver crucificado, y transformándome en Él, y en sus penas ha agregado:
Después ha regresado de nuevo, haciéndose ver crucificado, y transformándome en Él, y en sus penas ha agregado:
“Hija mía, mi Voluntad es luz, y quien de Ella vive se convierte en luz, y como luz fácilmente entra en mi luz purísima y tiene la llave para abrir y tomar lo que quiera.
“Hija mía, mi Voluntad es luz, y quien de Ella vive se convierte en luz, y como luz fácilmente entra en mi luz purísima y tiene la llave para abrir y tomar lo que quiera.
Pero una llave para abrir debe estar sin herrumbre, no estar sucia, y la misma cerradura debe ser de fierro, de otra manera la llave no puede abrir.
Pero una llave para abrir debe estar sin herrumbre, no estar sucia, y la misma cerradura debe ser de fierro, de otra manera la llave no puede abrir.
Así el alma,
Así el alma,
para abrir con la llave de mi Querer,
para abrir con la llave de mi Querer,
no debe mezclar la herrumbre de su voluntad
no debe mezclar la herrumbre de su voluntad
ni la sombra del fango de las cosas terrenas,
ni la sombra del fango de las cosas terrenas,
sólo así podemos combinarnos juntos y ella hacer lo que quiere de Mí, y Yo lo que quiero de ella”.
sólo así podemos combinarnos juntos y ella hacer lo que quiere de Mí, y Yo lo que quiero de ella”.
Después de esto he visto a mi Mamá y a mi confesor difunto, y yo quería decirles mi estado, y Ellos han dicho:
Después de esto he visto a mi Mamá y a mi confesor difunto, y yo quería decirles mi estado, y Ellos han dicho:
“En estos días has estado en peligro de que el Señor te suspendiera del todo del estado de víctima, y Nosotros y todo el purgatorio y el Cielo hemos rogado mucho, y cuánto hemos hecho para que el Señor no lo hiciera.
“En estos días has estado en peligro de que el Señor te suspendiera del todo del estado de víctima, y Nosotros y todo el purgatorio y el Cielo hemos rogado mucho, y cuánto hemos hecho para que el Señor no lo hiciera.
De esto podrás comprender cómo la justicia está colmada aún de graves castigos, por eso ten paciencia y no te canses”.
De esto podrás comprender cómo la justicia está colmada aún de graves castigos, por eso ten paciencia y no te canses”.
Fiat Divina Voluntad